—Eso es mucho brillo—dice Reggie terminando de bajar las escaleras, mientras yo terminaba mi cartel, tenía brillantina entre los dedos, Reggie se pasea por la mesa como si hubiera habido una explosión de brillantina, bajo la mirada al cartel y sonrío.

—Muchos niños quisieran tener algo tan genial como un cartel que los celebre.

—Oh Laurie se sentirá sumamente avergonzado.

—Uh eso es mejor, ¿sabes? A veces la vergüenza la pasas cuando tu familia te demuestra lo mucho que te ama—dije, Reggie niega divertido con cierto desacuerdo, suelta un bostezo echando su silla hacia atrás, al sentarse se acerca a mi cuerpo buscando calor mientras se acurrucaba en mi hombro, estire mi mano acariciando su cabello negro y creo haber dejado unos cuantos brillos fucsia en las hebras de su cabello.

Siento un beso en el hombro que Reggie me deja mientras mira el cartel.

—No te sentía a mi lado y me preocupe, ¿estas haciendo manualidades a la madrugada?

Hice una mueca, la verdad no podía dormir, no desde que sabía que John estaba demasiado violento y celoso a tal grado de haber golpeado a mi novio. Me sentía culpable, me sentía nerviosa, y estuve dándole a la vuelta en la cama toda la noche mientras que Reggie dormía como un bebe, porque para él, John no era un problema. Al menos no uno tan grande.

La idea de volver a denunciarlo se había cruzado en mi mente, pero si eso significaba que solo empeoraría el temperamento frágil que tiene prefería mantearme alejada.

—Es que me siento mal por Laurie—dije encogiéndome de hombros.—Ya sabes, el estúpido de su padre no molestara en aparecer y aun asi sabemos lo mucho que Laurie ama a Gary, aun me pregunto porque.

—Porque es un niño, muchos cuando somos pequeños tenemos este amor por nuestros padres.—dice él jugando con los marcadores.—¿Laurie no tiene abuelas?, ¿o primos?

—Si...pero Florence prefiere que no los vea, su hermana tuvo varios hijos según se, ahora viven en algún lugar de su pueblo natal con el padre de uno de sus últimos hijos, mientras que su madre se dedica al bello arte de la pintura al desnudo y beber—dije, reí levemente al ver la cara de horror de Reggie.—Laurie no se lleva bien con sus primos tampoco, y del lado de Gary...no conozco demasiado, solo se que su padre es policía y creo que golpeaba a su mujer por eso se divorciaron, Gary solo tiene dos hermanas y bueno una tiene una familia pero no es muy cercana a Gary, y lo único que se de la otra es que se fue cuando pudo...pero de todas formas Laurie ni ve lo suficiente a Gary.

Así que en pocas palabras, Laurie no era tan importante para los demás como para nosotros. Veo a Reggie quien destapa el marcador y comienza a dibujar en el cartel, sonreí levemente mirando su mano moverse, él alza los ojos.

—¿Qué?

—Solo me alegra que el mundo me haya vuelto a poner en tu camino.

—¿De que libro sacaste esa frase tan cursi?

Fruncí el ceño y golpeé su frente. Reggie se ríe a carcajadas y agarra de mi mano para acercarme a él aun cuando pongo resistencia para mantenerlo alejado, de alguna manera, Reggie consigue el cometido de levantarme y sentarme encima suyo, paso mi mano llena de brillantina por su cara mientras que él se queja cerrando los ojos.

—Nunca mas seré tierna contigo.

—Oh, la bebe se enojó—dice de manera burlona besando mi mejilla y luego mi cuello.—Pero si me gustas mucho.

—Hujum.

—Te quiero—dice besando mi cuello, busque sus labios besándolo mientras que él me sostenía de la cintura profundizando el beso.—¿Eso significa que me quieres?

—Eso significa que eres muy pesado y terminamos.—dije juntando las cosas mientras me levantaba, Reggie se ríe levantándose, agarra mi rostro suavemente y lo gira para besarme en la boca, no pongo demasiada resistencia porque a este paso ya tengo dicho que los labios de Reggie son una especie de nueva adicción para mi.

Reggie y yo terminamos en su cuarto donde nuestras prendas terminaron quedando desperdiciadas en el suelo, y nuestros labios buscándose en la oscuridad mientras acariciábamos nuestros cuerpos. Ahogábamos suspiros mientras que nuestras manos se aferraban al otro y nos murmurábamos palabras.

A la mañana siguiente, me desperté con el cuerpo de Reggie acurrucado a mi lado, lo observé un rato en silencio y acaricie su mejilla antes de levantarme mientras me comenzaba a vestir. Lo tape mejor con las colchas, Reggie se remueve adormilado, pero solo gira sobre su propio eje para seguir durmiendo, deje un beso en su mejilla y salí de su habitación. Cerré la puerta con cuidado y me quede estática en el pasillo al ver a Tucker salir del cuarto de Florence, ambos nos miramos en silencio como si nos hubieran descubierto con amantes.

—¿Una cerveza?

—Son las ocho de la mañana.

—¿Y?—Pregunta él mientras se dirige escaleras abajo, suspire mientras comenzaba a seguirlo, llegue a la cocina segundos después. Al parecer Tucker desistió de la cerveza y decidió servir café echándole algo de leche al mio, lo observe fijamente, y cuando él se voltea para darme la taza pega un brinco.

—¿Qué?, ¿Qué pasa?—pregunta viéndome.

—Tienes...algo rojo ahí—señale su cuello antes de sonreír levemente, Tucker agarra una de las cucharas mientras se observa en el metal frunciendo el ceño tocándose el cuello—Así que, Florence ¿tienen una relación?

—No, solo fue un momento.

—Tienen muchos de esos momentos—murmure tomando de la taza de café ganándome una mala mirada de Tucker a lo que reí.—Si se gustan no me gustaría que mis dos grandes amigos se estén evitando cuando claramente se gustan.

Tucker suspira golpeando sus uñas en la taza de café.

—Florence no quiere que nos apuremos a algo serio, aparte estoy en ese concurso para irme a Estados Unidos...y odio las relaciones a distancia, ¿tu no la odiarías si Reggie se fuera?

—Eso es diferente, yo no planeo irme a ningún lado y él tampoco—dije acomodando mi cabello—Pero tienes razón, puedo entenderlo, solo...veo que se gustan y es frustrante tener muchos obstáculos para estar con quien quieres.

—Tal vez de eso se trata—dice Tucker bebiendo su café—De obstáculos.

Le sonreí bebiendo mi café, ambos nos volteamos al escuchar unos pies arrastrando un par de pantuflas, donde segundos después aparece Paul, mi amigo me abraza haciendo todo un show dramático del sueño que estaba cargando mientras se abrazaba a mi, Tucker rueda los ojos compadeciéndose de nuestro amigo mientras le da una taza de café.

—Oh gracias, necesitaba algo de energía en este día, me siento agotado—dice Paul recibiendo la taza de café dándole un trago. 

—Se que el gimnasio agota, pero esta dando sus frutos, ¿eh Paul?—pregunte apretando su bicep que él se encarga de flexionar para que los músculos se le marquen.

—El gimnasio o el profesor.—dice Tucker con una sonrisita divertida bebiendo su café.

—Uy quizás ambos.

—¿Acaso el café vino con un payaso que no me entere?—pregunta Paul viéndonos mientras que nos reíamos.

—Ya, perdona, pero me alegro por ti, hacen linda pareja—dije sacudiendo su cabello mientras nos íbamos a la isla para tomar nuestros lugares correspondientes. Paul bosteza frogándose los ojos para mantenerse mas despierto. 

—Entonces, ¿hablábamos del sorteo de Tucker?

Minutos después baja Florence junto a Reggie.

—¿De que hablaban?—pregunta Florence echándole leche a su café.

—Del sorteo de Tucker a Estados Unidos, ¡ay!, ¿Por qué me pateas?, ¿no debía decirlo?—pregunta Paul confundido, Tucker rueda los ojos.

—Aun no se si ganare.

—Seguro que si, eres perfecto—dice la rubia besando su mejilla—Estaba pensando que el día que debas entregar tu proyecto podríamos hacer una cena, como para echar buenas energías y ver tu trabajo nosotros.

—Eso suena a una gran idea—dije asintiendo.

—¿Podria invitar a Mike?—habla Reggie—Prometí invitarlo a cenar y nunca lo hice.

—Claro.

Los chicos se debatieron a hablar sobre la noche de la entrega de proyecto de Tucker y los preparativos para esa noche. Me giro hacia Reggie y lo veo pellizcar un trozo de pan sacando pequeñas migajas.

—¿No vas a comer?—pregunte viéndolo, no me di cuenta que dije las palabras en un volumen alto que todos se detuvieron a vernos.

—Tengo el estómago cerrado hoy.

—Reggie...

—Tampoco es bueno forzarme a comer, solo no quiero ahora—dice besando mis labios y sube escaleras arriba.

*

Veía a mi amiga discutir por celular con quien supuse que es Gary, no gritaba en un volumen bajo, lo hacía a gritos mientras se movía por todo el lugar. A veces daba miedo acercarme a ella, pensaba que podría pegarme una buena en cuanto intentara calmarla, estábamos fuera de la escuela, habíamos dejado a Laurie con sus amigos y profesora, a lo que varias madres se nos voltearon a ver seguramente cuestionando la edad de mi amiga.

Los chicos ya nos habían apartado asiento en el salón donde se haría el acto escolar. Observo mi cartel con brillantina antes de ver a mi amiga quien ya había cortado el celular y se lo guarda en el bolsillo agarrándose el rostro con las manos mientras su respiración era agitada e irregular mientras se contenía para no llorar. Me acerque a ella poniendo mi mano en su hombro, la agarro por los mismos y la acerco a mi cuerpo dejando que me abrace donde suelta un pequeño sollozo.

—Es un idiota, se lo pase recordándolo todo el mes, todo el mes me dijo que si, que si que dejara de ser densa, y ahora lo llamo y esta a kilómetros de aquí supuestamente "ocupado con el trabajo", ¡Por favor!, tu padre es el jefe de la policía puedes pedirle salir antes, es tu hijo—dice limpiándose el rostro.

—Flor...

—Solo no quiero mas decepciones para Laurie.

—Lo se, pero sabes que a veces es imposible y tal vez una parte de Laurie lo sabe, pero también sabe que nos tiene a nosotros y a su mamá—dije abrazándola acariciando su espalda.—Ven, vamos, va a empezar, hice un cartel para que también lo sostengas.

—¿Y avergonzar a mi hijo frente a todos?

—Alejas a futuras novias.

—Okey me apunto—dice mi amiga bromeando, reí limpiando sus lagrimas mientras entrabamos al salón, los chicos habían apartado unas sillas de la tercera fila, puedo ver a Paul discutir con una señora mayor antes que llegáramos por lo que nuestro amigo bufo tranquilo diciendo que la señora mayor no quería entender que los lugares fueron habilitados.

El acto escolar estuvo como cualquier otro acto que se esperaba de un niño pequeño, no eran los mejores actores sin duda, pero para nuestros ojos Laurence se lucio en su papel. Levantamos los carteles y gritamos consiguiendo el cometido que se sonrojara en el escenario. Tras terminar, Florence abraza a su hijo y lo llena de besos en la mejilla.

—Mierda me estoy quedando sin memoria—dice Tucker viendo la cámara donde grabo a Laurie.

—Busco más, ¿en el auto?

—Si, lo guarde en la guantera.

Asentí yendo hacia afuera dejando que los chicos siguieran felicitando a Laurie y hablando con él. El frio de la noche me recibió como una bofetada mientras me abrazaba a mi misma hasta llegar al auto de Reggie, abro la puerta buscando en la guantera hasta dar con la memoria para la cámara, visualizo un abrigo en el asiento del conductor y se que es una de las camperas de Reggie, la agarro acercándola a mi nariz oliendo la colonia que usa, sonreí poniéndome su campera antes de salir del auto.

Un grito ahogado sale de mi garganta cuando alguien me empuja contra el auto, un ardor aparece en mi espalda mientras veo los ojos furiosos de John.

—Dijiste que sacarías esa estúpida denuncia.

—Nunca dije que haría tal cosa—dije viendolo —Déjame ir.

—¿Dónde quieres irte?—pregunta John—No, ahora estas aquí conmigo, asi que no iras a ningún lado.

—No quiero estar contigo, John, déjame ir—aunque mi voz sonara tan tranquila, por dentro estaba muriéndome de miedo, el corazón en mi pecho comenzaba a palpitar con una violencia demasiado frenética mientras que mis manos estaban teniendo un cosquilleo.

—Ya te pedí perdón, y tu eres tan zorrita que ya te estabas yendo con ese otro, ¿Cuánto te tardaste en abrirte las piernas para estar con tu amigo Reggie? ¿eh?

—Basta, no hagas esto aquí, es el acto de Laurie y...

—Oh, ese mocoso, bueno, ¿debería entrar a saludar, no?

El pensamiento de que John pudiera hacerle daño a alguno de ellos provoco que mi cuerpo entero comenzara a temblar, jale de su brazo para prohibirle que fuera, lo que tal vez no fue lo mas certero hacer. Me empujo haciendo que termine en el suelo, las manos comenzaron a dolerme mientras que él me mira.

—¿Volverás conmigo?

—Ni en un millón de años.—dije viéndolo a los ojos, eso fue un error solo termine provocándolo, John me da una bofetada tras apretar su mandíbula.

—Si que sabes hacerme enojar, Ronnie, enserio no sabes cuánto.

—Tu no me amas John, solo estas malditamente obsesionado con tener a alguien que te haga caso como una estúpida y yo fui la perfecta para el papel, ¿no?

John endureció su gesto y yo estaba preparándome para recibir el otro golpe cuando escucho un quejido de John. Abro mis ojos sorprendida al ver a Reggie darle un golpe, pero John lo mira enfurecido y arremata con pegarle, Tucker se interpone golpeándolo antes de que estrellara toda la furia contra Reggie.

Paul se acerca corriendo hacia mi mientras me ayuda a levantarme.

—Algún día, no estarán tus amiguitos Ronnie—dice John alejándose furioso, trague saliva, porque esas palabras fueron claramente una amenaza. Reggie parece querer ir tras él para terminar la tarea, pero Tucker lo detiene agarrándolo.

—¿Por qué lo golpearon?—pregunte haciendo que los dos me miren, Paul aun me sostiene.—¿Por qué?, eso hará que se enfurezca mas.

—Creo que es mas que obvio que me importa una mierda que John se enfurezca conmigo—dice Reggie.

—Bueno, a mi si me importa.

—¿Qué hará, Ronnie?, ¿seguir acosándonos?, ¿dar amenazas estúpidas?—pregunta acercándose a mi mientras me mira—¿Qué no entiendes que no quiero que te haga daño?

—Lo entiendo, pero provocándolo así no conseguiremos nunca nada—dije.

—¿Y que propones?, ¿quedarnos aquí?

—Lo que propongo, es ir tranquilos a cenar con Laurence por su noche—dije cubriéndome el golpe—Luego me encargo de John, ¿si?, ¿podemos dejarlo estar por esta noche?

Reggie mira a nuestros amigos buscando ayuda, pero ninguno supo que decir, agarre la mano de Reggie entrelazando los dedos y me apoye en él mientras comenzábamos a caminar. Tenía suerte de que Laurie no se haya dado cuenta que algo había ido mal, él estaba mas que emocionado sacándose fotografías con todos, al verme corre a abrazarme, y aunque cada extremidad de mi cuerpo me estaba matando, le devolví el abrazo besando su mejilla.

La decana de la facultad me mira fijamente mientras yo seguía desenvolviendo mi explicación, mostrando toda evidencia entre ellas la denuncia y los golpes que nadie parecía querer tomarse enserio. Pero ella, al parecer, era la única dispuesta a hacerlo. Para cuando termine de hablar, la mujer me observa, con el ceño fruncido y el rostro serio se levanta, en una voz autoritaria me comenta que tomara cartas en el asunto y me deja ir. Me aferre a mi mochila mientras miro a Florence quien me esperaba de brazos cruzados, a unos metros de nosotras, Laurie jugaba corriendo en los pasillos.

—¿Denunciarlo?, pueden echarlo Ronnie.

—Lo se, pero ¿Qué mas hago?—comente viéndola—Mira, John no es como Gary, eventualmente Gary te dejo tranquila, pero John sigue presionándome. Tu no lo viste en la noche, parecía dispuesto a...

—Ni se te ocurra decirlo.

—Pero parecía—dije viéndola—Y si soy una de las víctimas no puedo permitir que otra chica con la que John se obsesione también lo sea, la policía no me toma enserio, piensa que es solo un ex celoso y ya esta...espero que aquí me tome mas enserio.

Florence suena un suspiro sonoro mientras comenzamos a caminar, Laurence camina delante de nosotras dando saltos y jugando a que lanza poderes en medio de los pasillos, entrelazo mi brazo con el de mi amiga.

—Pero, ¿eso no terminara por provocarlo mas?

—Espero que no, con suerte será una advertencia—dije viendo a mi amiga y le sonreí levemente—No tengas esa cara.

—Es que...¡estoy preocupada!

—Mejor hablemos de otra cosa—dije caminando mientras entrelazamos nuestros brazos—Hablemos de la cena, se que Tucker esta trabajando duramente en los últimos detalles de su película para presentarla, entonces estaba pensando que nos reencontraríamos en el campus con Reggie para hacer las compras, y esperaremos a Paul y Mike cerca de ahí para irnos todos juntos.

—Me gusta la idea de estar en casa.

—Tu debes hacer la decoración—dije riendo.

—Tienes razón, buenas energías...estados unidos esta lejos.

—Lo se, pero ey...¿Qué es un año?—pregunte abrazando a mi amiga por los hombros mientras que ella apoyaba su cabeza en mi hombro.

Al llegar a casa, le di de comer a Simba y Nala, observe a esos pececitos nadar en círculos, deberia comprar una pecera mas grande, seguramente se aburrían ahí dentro. Contesté unos mails del trabajo y llame a mamá para hablar con ella un rato, nuestras conversaciones no eran las mismas desde hace años, aun así notaba un esfuerzo de su parte. Aunque no podía decir lo mismo de la mía que contestaba con monosílabos.

Cuando termine de hablar con ella masajeo mi rostro y hago una mueca de dolor en mi brazo, me saco la remera quedándome en sostén observando los pequeños moretones que estaban saliendo de mi cuerpo por el golpe que me había dado John, acaricie la piel con las manchas violetas quejándome levemente, me volví a colocar la remera y cuando iba a salir de mi habitación me encontré con Reggie.

—Hola, ¿Qué tal tus clases?—pregunte.

—Agotadora—dice viéndome—¿Tu como estas?

—Oh ya sabes, normales...

—Florence me dijo lo que hicieron hoy.

—¿Es que esa chica no se calla?

—Ro...

—Reg, estoy bien—bese sus labios—Ven, vamos a buscar una película que ver, iria a molestar a Tucker pero la ultima vez que lo moleste estando estresado no hablamos por dos semanas.

Reggie suspira dejándose arrastrar por mi, nos sentamos en el sillón donde me apoye en su pecho viendo la televisión y él me abraza. En los brazos de Reggie me podía sentir en calma y tranquila, pero por dentro estaba teniendo na intranquilidad sumamente extraña que amenazaba con no irse.