Habían pasado unos días, Travis por fin se dirigía a visitar a su amigo Hawk, se le había olvidado por completo que tenía que ir a visitarlo; digamos que andaba algo ocupado.

-¡Ah!- Exclamó Travis bajando de la carruaje y estirándose, el viaje fue algo largo- Ya era hora de llegar, ya no sentía mis pies. Bien hora de entrar al castillo de Hawk, espero no me mate por no venirlo a visitar- Travis se acercó a la entrada del castillo. Fué recibido por el mayordomo del lugar, ya lo conocían; no había problema en dejarlo pasar, le dieron indicaciones que Hawk se encontraba en la biblioteca del castillo y así caminó rumbo a la biblioteca y encontró a Hawk leyendo un libro.

-Hola amigo ¿Cómo estás? Perdón por la tardanza-

-¿Tardanza? Más bien casi como 3 semanas te desapareciste y ni una carta a tu gran amigo, sabes me había preocupado, estaba pensando en irte a visitar pero luego recordé que de seguro te encontraría mañana en el baile de Astoria- Dijo Hawk, mientras su vista seguía en el libro.

-¿Baile? Rayos se me había olvidado, mi abuelo me va a matar no he comprado el regalo para mañana ¿Que hago? mmm Ya sé vamos Hawk acompáñame vamos al pueblo a comprar un regalo- Respondió Travis.

-¿Qué? Ni loco me paro ahí, hace días que fui para comprar la espada que me hacía falta y practicar contigo, ¿sabes que me pasó?, muchas princesas y doncellas locas corrían detrás de mí, no me dejan ni respirar, olvídalo soy malo para hacerte compañía en el pueblo, tendrías que correr un maratón junto conmigo-

-Lo sé amigo te debo un duelo de espadas aunque sea muy malo en eso, pero en estos días ten por seguro que lo haremos-

-Y a todo esto Travis, ¿porque andabas tan ocupado?-

-Eh... Bueno, yo... - Hablaba Travis muy nervioso.

-Travis, habla bien que no te entiendo nada-

-Bien, digamos que cierto día conocí a alguien que me cautivó-

-Vaya esto es impresionante- Dijo Hawk

-Sí, tan linda- Travis soltó un suspiro mientras recordaba- Bien te contaré-

Flashback:

Travis se encontraba en el bosque, uno cerca de su castillo, la razón por la que salía, era para hacer sus pinturas, es un gran don que tiene, aunque para su abuelo eso sea malo
Al ser un bestia tiene que ser más enérgico y fuerte, y su abuelo veía las artes como una debilidad.

Así que salía lejos de todos y en el bosque se dejaba llevar por su imaginación a crear las mejores y exquisitas pinturas que se le pudieran ocurrir, hasta ese día. Él se encontraba pintando cerca de un arroyo y unos ruidos extraños le llamaron la atención, se paró del lugar donde se encontraba y caminó hasta llegar a un lugar donde veía a lo lejos a una chica haciendo movimientos extraños, como si de artes marciales se tratara.
Travis se fue acercando poco a poco para verla más de cerca pero piso una rama, y esto a su vez atrajo la atención de la chica, la joven caminó en dirección donde estaba escondido Travis. Aquella chica se armó de valor y enfrentó a eso que le llamaba la atención.

-Quien eres y que haces aquí- Respondió de manera amenazante-

-Yo- Travis salió poco a poco del arbusto donde estaba escondido y algo nervioso respondió-  Escuché ruidos y vine a ver que pasaba-

-No sé porque mi instinto dice que quieres que baje la guardia-

-Yo no haré algo malo en serio lo juro-

-Bien no pareces malo, te juzgue mal ahora si me disculpas tengo que seguir entrenando-

-Espera- En ese momento Travis tomó del brazo a la chica, y esto hizo que ambos se quedaran mirándose fijamente el uno al otro.

-Ohh disculpa perdón por eso, déjame presentarme mi nombre es Travis la Bestia- respondió haciendo una leve reverencia y depositándole un beso en el dorso de la mano a la joven.

-Mucho gusto mi nombre es Ling Ling Abanico de Hierro-

-Vaya, nunca te había visto-

-Casi no salgo, mi abuela me tiene en mi reino practicando par ser mejor guerrera,  tengo maestros personales que me ayudan en eso, sin embargo fué un gran día para salir-

Travis por primera vez, comenzó a sentir un ligero hormigueo en su estómago, quedó encantado con esa dama que tenía enfrente, su corazón latía con fuerza, ese momento lo hacía sentir tranquilo y pensar cosas bellas.

-Ya veo, quisieras acompañarme un rato, sabes amo las pinturas, es mi pasión pintar, yo quisiera ver si tu quisieras... ¿Ser mi modelo para una de ellas?- Dijo Travis un poco nervioso.

-Nunca he hecho algo así, pero acepto, sabes ahora que te conozco tu presencia me hace sentir bien-

-Entonces bella dama, acompáñeme yo estaba realizando mi pintura cerca del arroyo, vamos- Ambos se fueron, Ling Ling y Travis la pasaron muy bien ese día entre pláticas y mientras Travis terminaba de realizar su pintura, había encontrado la inspiración que le faltaba, ese día ese cuadro quedó mejor que nunca, ya que había plasmado el paisaje de ese momento junto a una linda dama sentada en ella. Ese día fue el mejor para ambos, la tardé cayó y Travis acompaño a Ling Ling hasta su castillo.

-Muchas gracias por traerme, sin duda nunca me la había pasado tan bien como hoy-

-Gracias a ti, mira hasta te pude plasmar en mi cuadro, pero... ¿Sabes? Quisiera que te lo quedaras, como un regalo por favor, acéptalo- Travis en ese momento le entregó el cuadro a Ling Ling.

-De verdad... Muchas gracias no sé qué decir, como podré pagártelo-

-No tienes que agradecer, sin embargo si hay algo que me gustaría hacer ¿Quisieras salir conmigo el día de mañana? Me la pasé bien contigo, fue una casualidad y un buen momento el conocerte-

-Yo... No sé qué decir pero acepto, nos vemos mañana entonces en el mismo lugar de hoy-

-De acuerdo te veo mañana al medio día, hasta mañana entonces-

-Hasta mañana y gracias de nuevo Travis-

Y así la pasaron estos días, conociéndose más, comiendo juntos, cada quien llevaba algo para pasarla en ese momento, se vieron varios días, hasta que Travis se armó de valor y le pidió a Ling Ling que fuera su acompañante para el baile de Astoria.

-Ling Ling, ¿Puedo pedirte algo?-

-¿Si?-

-¿Me harías el honor de acompañarme al baile de Astoria?-

-Travis, no pensaba ir, pero ya que me lo pides tú acepto ir contigo-

Siguieron platicando ese día, y ya solo Travis contaba los días para ir por ella e ir al baile juntos.

Fin Flashback

-Y eso fue lo que pasó Hawk, por eso no venía, digamos que andaba algo ocupado-

-Vaya mi amigo por fin se enamoró, jajajaja-

-Ni lo digas que de seguro tú algún día llegará la chica por la cual des todo por ella-

Hawk en ese momento se le vino el recuerdo de la chica que había visto en el pueblo ese día, al recordarla no pudo evitar sonrojarse un poco, ya que aunque la haya visto por primera vez, ella no corrió como loca desquiciada tras él como lo hacen las demás.

-Eh... Este, cambiando de tema entonces ¿Si vas a ir al baile?-

-Claro, solo que me falta el regalo-

-Llévale un libro, para que te complicas, se la pasa leyendo-

-Tienes razón, incluso mi primo llega hoy, lo llevaré al baile también, es algo rarito-

-¿Quién primo? No te conozco un primo-

-Si tengo uno solo que estudia lejos de aquí, se fue cuando teníamos 8 años. Hoy regresa nuevamente, te lo presento mañana-

-Me parece bien Travis-

-Silencio, acaba de llegar tu abuela hawk-

-Hay no-

-Deja me asomo- Travis se asoma discretamente en la puerta de la biblioteca- ¡Oh no! Hawk sal de aquí, ya te traen otra cita-

-Mi abuela me va a volver loco ¿Sabes que? La ventana de aquí da a los huertos de manzanas, salgamos por aquí acepto ir contigo a buscar el regalo de Astoria-

-Bien vamos, lo que tengo que hacer por ti para salvarte el pellejo Hawk-

-Con esto compensas el que no me hayas venido a visitar- Así se salieron los dos amigos por la ventana, sin hacer tanto ruido agarraron, se subieron al carruaje de Travis y partieron al pueblo.

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Muchas gracias  a todas esa personitas que han leído mi historia, un saludo y un abrazo, espero la sigan disfrutando gracias. Los llevo en mi corazón.