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Capítulo 17: Las llaves

Después de reunirse con JungKook, Jin llegó malhumorado a su casa. YeRim estuvo tratando de subirle el ánimo y generar un buen ambiente, pero no dio resultado alguno, después de darse una ducha refrescante en donde se la pasó pensando en lo que se había vuelto su vida, se puso su cómodo pijama y se acostó en su costosa cama. Debía dormir temprano, ya que mañana tenía que levantarse a las seis de la mañana para ir al hospital, ya que esta vez si debía trabajar. Podía ser irresponsable y dejado para ir con sus encuentros con JungKook, pero ahora que se habían acabado o por lo menos eso creía, debía tomar más responsabilidad y encargarse de ciertas cosas como dueño de la clínica.

Así que cuando llegó a su trabajo su rostro no se mantuvo feliz, odiaba ese lugar: tan frío, iluminado y limpio. Quizá era un poco irónico porque le recordaba a su hogar, o lo que se suponía que era su hogar. Habló con un par de doctores que le miraban de forma juzgadora por todas las veces que se ausentó y mandó a alguien más en su lugar. Jin apenas podía soportar aquellas miradas, y si no fuera por el hecho de que no quería discutir, hubiera mandado todo a la mierda, amenazándolos de despedirlos si no quitaban la cara de culo que traían.

Después a medio día una enfermera había pasado a verter café sobre su bata blanca, Jin tuvo que tragarse los insultos y contar hasta diez para soltar un: "No te preocupes, yo me encargo" e irse a cambiar mientras el estrés lo consumía. Una hora después tuvo que ir a conversar -o por lo menos lo intentó- con una familia de un paciente fallecido, la cual quería denunciar a la clínica por negligencia, y Jin junto con otros doctores intentó informales que no era negligencia, y que se les había advertido que el paciente corría un riesgo de no salir vivo de aquella operación, de todas formas, al terminar aquella platica, terminó con mínimo unas veinte maldiciones. Al rato después fue a almorzar en la cafetería del hospital, quizá no era la mejor comida, pero era lo más cercano. Se sintió feliz cuando alcanzó a comprar su postre favorito, ya que era el último que quedaba, lamentablemente se tropezó y toda la comida se desparramó por el piso. Pudo volver a comprar lo demás, pero el postre no.

Una de las cosas que más odió, fue tener que revisar unos papeles sobre asuntos internos del hospital, y volver a una junta con los doctores de la mañana que seguían trayendo la misma cara. Tuvo que tomar alguna decisión bajo presión.

Cuando salió del hospital, se sentía un poco más aliviado, lo cual rápidamente fue remplazado con un suspiro lleno de frustración, ya que tenía que volver a su casa. Manejó hasta llegar y se preparó mentalmente para poder ver a su esposa y sonreírle, sin soltar un: "Acaba con este sufrimiento llamado vida"

No obstante, cuando ingresó a su hogar no esperaba oír a lo lejos la voz de JiEun, la cual sonaba como si estuviera chillando o llorando, o quizás ambas. Una vez se acercó cautelosamente, tratando de no ser descubierto, logró escuchar la conversación de ambas.

—JiEun, no logro entender, respira, relájate y controla tu llanto —dijo amablemente YeRim, JiEun acató y dejando las lágrimas de aun lado—. Ahora dime, ¿qué pasó?

—Ayer, discutí con JungKook. Me siento muy estúpida.

—¿Por qué? ¿Te hizo algo? ¿Te dijo algo? —la voz de YeRim sonó preocupada.

—¿Te acuerdas de la canción que toqué el día que los invité a ese festival?

—Sí.

—Resulta que nunca fue para mí, el muy idiota... era para su ex.

—¿Ex? ¿Qué ex?

—¡No lo sé! No me quiso decir.

—¿Y? ¿Qué más?

—Pues él me dijo que se sentía mal ya que esa canción era especial, para él y para la otra chica y entonces no se sentía a gusto con que yo pensara que me pertenecía y esas cosas.

—¿En serio?

—Ajá, me dijo literalmente: "Esa canción es muy importante para mí y para otra persona" Después me dijo un montón de cosas más y yo me largué y me fui a la casa de mi prima. Me sentí patética creyendo que él había compuesto algo para mí, pero resulta que era para su ex.

—Mhmm... pero no es tan grave, o sea te mintió y estuvo mal, pero al final es una canción.

—Es más que eso, la letra... la vez que lo pillé cantando, se sentía como si estuviera completamente enamorado ¿entiendes? Y prácticamente en la hoja decía que era para el amor de su vida, la cual JÁ, no soy yo.

—Pero era su ex, quizá en ese tiempo sentía que era así, pero quizá ahora solo te ama ti y solo quiera estar contigo y solo tu seas el verdadero amor de su vida.

—No lo sé... te juro que cuando lo escuchaba cantar... ¡Agh! —gruñó molesta—, ¿Tú cree que se siguieran viendo? Quizá encontró a esa chica y quiere estar de nuevo con ella.

—No seas paranoica JiEun, por lo que he visto Kook te ama mucho.

Jin rodó sus ojos molestos "la ama mucho" repitió las palabras de su esposa en la cabeza, y se respondió con un: "tanto que le fascina clavar su polla en mi" Se mordió la lengua y siguió escuchando.

—No, seguro que se ve con ella.

"Él" quiso gritarle Jin, pero logró mantener su voz.

—No te alimentes con ideas negativas y dañinas, ustedes son una pareja muy linda.

—De todas formas, no le dejaré ir. Kook es mi novio y se quedará siempre a mi lado. Sólo me amará a mí.

YeRim le sonrió algo incomoda, mientras JiEun volvía a llorar y hacer un escándalo a la vez que su amiga intentaba calmarla.

Jin por lo contrario al escuchar las últimas palabras de la pelinegra, se dijo a sí mismo un "ya veremos". Y al igual de silencioso que entró a la casa, volvió a salir de ahí, dirigiéndose a un lugar en específico.

[...]

JungKook estaba viendo una película, mientras pensaba si llamar a Jin o no para contarle que ya le había dejado en claro las cosas a JiEun.

La puerta sonó y sin muchos ánimos le levantó sabiendo que seguramente era JiEun que había vuelto después de irse ayer por la noche en medio de su discusión, sin embargo, cuando abrió la puerta no esperaba ver a SeokJin sonriéndole y a los segundos después siendo atacado por los esponjosas labios de él.

Claramente no dudó en responderle con la misma intensidad que el rubio, no obstante, a mitad del fogoso beso se obligó a frenarlo para preguntarle qué hacía ahí.

—¿Q-qué pasó? Creí que estabas enojado conmigo.

—Bueno, te dije que no te iba a perdonar hasta que le dijeras a JiEun que esa canción no tenía nada que ver con ella... y la encontré en mi casa llorando porque claramente esa hermosa canción no era para ella. Admito que me alegró el día escuchar su espantoso llanto.

JungKook seguía sin analizar bien las cosas, así que solo pudo seguir el nuevo beso que SeokJin le había dado. A los segundos después volvió a sepáralo para preguntarle:

—Entonces ¿ya no estás enfadado conmigo.?

—Mhm no del todo, debería darte alguna que otro castigo por hacerme pasar un mal rato.

Y era cierto, Jin lo había pasado muy mal durante esos días. Dolido al saber que algo tan personal y significativo como lo era esa canción, se lo haya adueñado otra persona, que para variar, su ser había empezado a odiar. Sin embargo, ella ya sabía la verdad, y después de su agotador y horrendo día, oír su llanto fue como ganarse la lotería. Le había alegrado tanto.

—¿Castigarme? —preguntó JungKook, mientras cerraba la puerta y se adentraba adentro de su departamento con Jin.

—Mhmm, algo por el estilo.

—B-bueno, con el fin de poder tenerte de nuevo en mis brazos haría lo que fuera.

—¿Lo que fuera? —preguntó Jin con una sonrisa ladina.

—Sí.

—Bájate los pantalones.

—¿Eh?

—Bájate los pantalones, te haré una mamada.

—Guao, espera-

—¡Kook! —le gritó Jin, en un tono de advertencia que si seguía, se iría.

JungKook rápidamente se bajó el cierre, y con algo de torpeza hizo lo que Jin le ordenó.

—¿Ese es tu castigo? —le preguntó algo confundido a Jin.

—Sí —respondió, mientras tanteaba la polla por encima del bóxer, poco a poco empezó a despertar—. Te chuparé, hasta que no puedas más y desees correrte —siguió explicando mientras sacaba al ahora duro pedazo de carne, para empezar a masturbarlo de manera lenta—, pero... no te correrás hasta que yo te deje.

—Pero- 

—Nada de peros, si te corres me iré y seguiré con mi antigua rutina, yendo a clubs y follar con desconocidos. Esas cosas.

—Mierda, eres malvado.

—¿Tú crees? —preguntó para pasear su lengua por el hinchado glande.

JungKook se afirmó de la puerta, ni siquiera habían llegado a la sala. Jin se había adelantado tragando gran parte de su pene, en medio pasillo, y en plena entrada. Si JiEun llegara, lo primero que vería, sería al esposo de su mejor amiga, chupando la polla de su novio, pero ambos estaban lejos de pensar en ello.

Jin queriendo torturar un poco a JungKook, empezó un movimiento demasiado lento que volvería loco a cualquiera.

—Jin... —jadeó Kook, tomando el pelo de SeokJin, para poder controlarlo, aunque este no pareció muy contento ya que se sacó la erección de la boca, dejándola húmeda, dura y mucho más sensible.

—Puedes tomarme del pelo, pero nada de controlarme, lo haremos a mi modo —terminando de decir eso, volvió a meter la polla de kook en su boca.

Jin siguió chupando, esta vez si empezó a hacerlo rápido. Su mandíbula empezaba a doler y su garganta a arder, no obstante, no paró. Unos cuentos minutos chupando y Kook parecía en el borde, su respiración estaba agitada y Jin percibía como sus piernas temblaban.

—Jin... no... me voy... n-no.

Jin ya despertado agarró su bulto y empezó a masajearlo, lo que provocaba gemidos amortiguados por el pedazo de carne que parecía que iba a explotar. Decidido empezó a ir lo más rápido que su boca le permitiera.

Kook en cambió sentía la presión en su vientre, pronto se correría a pesar de que no quería, y justo cuando casi se da por vencido y estaba a punto de llegar a su orgasmo, Jin se apartó.

—Listo... joder, me duele la mandíbula y tiraste fuerte de mi cabello.

JungKook pudo ahora sentirse más tranquilo, a pesar de que su erección seguía doliendo

—¿Termino mi castigo?

—No, ahora quiero montarte. Y nada de correrte hasta que te deje.

JungKook sabía que vendría algo difícil.

[...]

Ambos estaban desnudos en la cama de JungKook, la misma que compartía con JiEun.

—Kook, mhm.

—¿Quieres que te preparé?

Jin asintió y Kook se levantó de la cama para ir a buscar en un cajón una pequeña cajita de lubricante. Cuando volvió a estar con Jin, se encargó de prepararlo, con dos de sus dedos, por un largo tiempo, estimulando la próstata del rubio en el proceso.

SeokJin ya demasiado excitado y caliente, sentía que necesitaba sí o sí a Kook dentro de él. Así que intercambió de posiciones, él quedado encima. Los dedos del castaño seguían moviéndose dentro de él, logrando que Jin sollozara del placer por eso. Se acomodó, e hizo que Kook sacara sus dedos, para sentarse en el regazo, moviendo su lubricado trasero en plena erección.

—Kook, vamos... —jadeó, levantándose un poco mientras buscaba con su mano la polla de JungKook, cuando la encontró agarró el falo y alineó la punta en su entrada—. ¡Ahg! —gimió cuando la cabeza entró, poco a poco fue bajando y a su paso tragando más carne del punzante pedazo. Una vez bajó por completo soltó un suspiro de satisfacción al ser llenado.

—Jin, dio... creí que... oh —los jadeos y gemidos que soltaba Jungkook apenas eran entendibles, su mente se hallaba nublada y solo podía pensar en el cálido y estrecho canal que lo apretaba.

Jin empezó a mover sus caderas, simulando la figura de un círculo, moviéndose de forma lenta que le hacía gemir a ambos. Pronto empezó a elevar su trasero y a dejarlo caer. Con el paso de los minutos se encontró asimismo empalándose con el pene de JungKook. Le gustaba mucho esta posición. A JungKook estaba apenas conteniéndose para no llegar, mientras Jin lo apretaba fuerte, tenía la hermosa escena de Jin gimiendo mientras saltaba cada vez más desesperado por alcanzar su orgasmo.

—Justo ahí, ahí se siente más bien —farfullaba.

JungKook sonrió y sujetó las caderas a Jin para que este tuviera en un mayor equilibrio. También cuando Jin bajaba él embestía para darle más placer a ambos. El rubio no podía para de gemir y jadear cada vez que caía y escuchaba el sonido de sus pieles colisionar.

—Kook, me queda poco. Más fuerte.

JungKook acató la orden y empezó a embestir con dureza a Jin. Soltó las caderas de su amante para llevar sus manos a las nalgas de él, las masajeaba y abría, manejándolo a su antojo, logrando que los saltos de Jin fueran más altos y controlados. Jin estaba en el borde, su cuerpo temblaba y sus piernas apenas seguían funcionando, el pene de JungKook había empezado a rosar fuertemente en su próstata.

—Córrete, Kook. Dentro, lléname, estoy a punto -logró decir en medio de sus gemidos y gritos. Cuando llegó a su orgasmo gritó el nombre de su amante, se corrió en sus estómagos y su interior apresó el pene de JungKook el cual embistió un par de veces más corriéndose dentro y llenado a su acompañante. SeokJin se salió de encima soltando un jadeo cuando se sintió vació.

—Necesitaba tanto esto —dijo Jin mientras su pecho subía y baja por la acción física—. Hoy fue un día estresante en el trabajo, y siento que ahora se fue todo ese estrés y solo puedo relajarme y estar aturdido por el orgasmo.

—Si es así, creo deberías dormir un poco.

—¿Crees? Siento que apenas me puedo mover, solo sonreír y respirar —murmuró cerrando sus ojos.

Kook sonrió ante Jin a medio dormir, y lo acercó a su cuerpo para abrazarlo.

—Descansa.

—Mhmm —fue lo último que dijo Jin para dejarse ir.

Kook se quedó uno minutos observando el angelical rostro de Jin dormir. Se sentía feliz, había temido tanto perderlo por lo de la canción. Pero aquí estaba, entre sus brazos, y la tranquilidad y felicidad lo abundó, y pronto también cerró sus ojos.

[...]

Cuando ambos despertaron se preocuparon por la hora, por su suerte solo habían dormido dos horas. No había pasado tanto tiempo.

Seguían recostados, en medio de en un silencio. No era incómodo, de hecho, era bastante relajante. Solo seguían ahí, acostados, con sus pieles desnudas y pegajosas pegadas a la otra, fundiéndose como si fueran uno solo.

—¿Quieres algo para comer? —le preguntó kook, Jin negó y se acurrucó más al fornido pecho de kook, este sonrió y envolvió a SeokJin con sus brazos, estrujándolo escuchando como Jin hacía pequeños jadeos ante la presión.

—Eres un bruto —se quejó con una risita.

—Creí que te gustaría, amabas que te abrazara con fuerza.

—Sí lo hacía... lo hago —lo último lo dijo más bajo.

—Mhm entonces ven —agarró el cuerpo de Jin y lo apretó lo más fuerte posible, este se quejó, pero cuando JungKook lo soltó, ambos sonrieron y acercaron sus rostros se besaron lento, disfrutando de los labios del otro.

Los minutos pasaron, y ambos cuerpos volvieron a reaccionar al tacto del otro, JungKook posicionó a Jin encima suyo, este se empezó a mecer tratando de despertar el pene de JungKook, mientras este con sus manos sujetaba los glúteos de Jin apretándolo. Ambos perdidos en fogosos besos, el calor de sus cuerpos empezaba a aumentar.

—Creo que he sido muy bueno, dejando que te corrieras.

—Yo creo que fue una tortura.

—Patrañas, fui muy blando.

—¿Qué quieres ahora? —preguntó con una sonrisa, tratando de adivinar qué le pediría Jin.

—Que me complazcas, sin atenderte. Esta vez no dejaré que te corras.

—¿Entonces?

—Quiero un beso negro, sabe que los amo.

—Claro que lo sé... recuerdas la primera vez, estabas muy nervioso y no querías intentarlo, pero te convencí de que te gustaría.

—Y gracias a Dios que lo hiciste.

Kook no espero a que Jin dijera otra cosa para darle vuelta.

—En codos y rodillas.

Jin obedeció, dejando su culo expuesto. Kook lo acarició, notando como la pequeña abertura se encontraba teñida de un color rosa pálido, por el acto de hace unas horas. Acercó su rostro y dio un pequeño mordisco en la nalga derecha, pronto fue besando hasta llegar a la grieta, acercando peligrosamente sus labios a el pequeño agujero. Dio una lamida y pudo sentir el cuerpo de Jin temblar ante el acto.

—Me encanta —dijo kook, antes de azotar con su mano el pequeño y duro culo, volvió a lamer, esta vez haciendo presión en agujero, hundiendo su musculo húmedo para satisfacer a su hermoso amante. Después de unos largos minutos, donde le dio placer a Jin, sabía que este necesitaba un poco más, retiró su húmedo musculo y adentró uno de sus dedos, para después acompañarlo con otro. No fue mucho tiempo, pero Jin disfruto durante todo rato que kook masajeó su próstata con sus largos dedos. Cuando los sacó rápidamente fueron remplazados por su lengua, debido que era el pedido principal de Jin, y mientras seguía hundiéndola, escuchando los preciosos gemidos y jadeos del rubio, agarró el pene de él, para empezar a masturbar sabiendo que pronto llegaría. Y así mismo fue.

—¡Dios! —gritó Jin, una vez su esencia fue derramada en las sabanas. Sus pierdas débiles por el clímax no soportaron y cayó rendido.

—¿Te gustó?

—Mucho... oh... de verdad que necesitaba todo esto. Mi cuerpo parece que está flotando.

—¿De verdad que fue un mal día? —preguntó Kook, mientras empezaba a dar sus típicas caricias sobre la piel de Jin.

—Sí, aunque casi siempre es así —explicó como si le doliera recordarlo—. supongo que en estos pequeños momentos es cuando puedo desestresarme y sentirme de alguna forma libre.

—Me alegra que te sientas de esa forma en este momento, aunque me alegría más que te sintieras libre siempre —opinó kook, quedando en un silencio, en el fondo sabía que Jin no quería hablar mucho de lo que suponía que era, su infeliz vida, así qué trató de cambiar el tema—. ¿De verdad me perdonas?

—Mhm, sí, pero no la vuelvas a cagar, la próxima vez dudo que te de otra oportunidad. Pero me hace feliz que esa canción volviera a ser solo nuestra ¿sabes? Por estos días creí que lo había perdido para siempre eso.

—A mí también me hace feliz, realmente no me sentía bien que JiEun pensara que era para ella. Si todavía conservo aquel pedazo de papel es porque es muy importante para mí... también temí haberte perdido, sé que no somos nada más que amantes, pero... ya sabes —acunó una de las mejillas de Jin en su mano, y la acarició.

Ambos se miraron con sus ojos brillantes, queriendo decir aquel par de palabras que hace semanas se hallaban atrapadas en sus gargantas y corazones, sin embargo, antes de que pudieran escapar de sus bocas, el golpeteó de la puerta los interrumpió.

Saltaron de la cama, y rápidamente empezaron a buscar con desesperación las prendas de la que hace horas se habían desasido, hasta que recordaron que la mayoría estaba repartida por el pasillo y sala del departamento. Por suerte, Jin alcanzó a divisar su ropa interior en la entrada de la puerta del dormitorio y corrió a ella, mientras que JungKook, se vestía con lo primero que pilló del closet.

Los golpeteos no cesaban, y Jin recorrió el departamento buscando su ropa repartida por el, logrando vestirse a medias. Los golpes sonaron más fuertes, su corazón se paralizó cuando escuchó la femenina y molesta voz de JiEun.

—¡JungKook! Dejé las llaves, ábreme la estúpida puerta —la chica se oía bastante molesta.

Kook recogió su ropa, y la llevó al cuarto de lavado, mientras que Jin trataba de ponerse correctamente sus zapatos, sin saber qué más hacer.

—Sé que estamos enojados, pero ábreme la puerta... —se volvió a escuchar su voz—. No puedes dejarme aquí... lo vecinos van hablar —JiEun no quería elevar la voz para crear rumores, pero su paciencia se estaba agotando y juró escuchar a kook pasearse por todo el departamento.

—¡¿Qué vamos hacer?! —susurró Jin, alertado y nervioso.

JungKook se rascó la nuca, buscando todos los lados para encontrar alguna salida que obviamente no había porque vivía en el nivel 10 y solo había una salida, la cual era la puerta en donde se encontraba JiEun. De pronto se le ocurrió una idea, que muchos dirían que podría ser estúpida y fatal.

—¡Escóndete debajo de la cama!

—¡¿Estás demente?! —gritó en un tono bajo y horrorizado.

—Sólo hazlo.

Jin quería debatir, pero no encontraba alguna otra idea, y regañadientes volvió al dormitorio y metió debajo de la cama sintiéndose incómodo, por el pequeño y sofocante espacio.

JungKook intentó arreglar las sabanas, se echó perfume y trató de arreglar su pelo un poco, mientras que respiraba con dificultad, como si fuera su hora de morir. Fue a abrirle la puerta a su novia, la cual entró farfullando con enojo, dirigiéndose inmediatamente a la pieza sin siquiera mirar a Kook. Los tacones la tenían muerta y solo quería entrar y tumbarse en la cama. Y eso hizo, hasta que noto que había algo raro en ella.

—Mhm por qué huele... —se paró alarmada y miró una mancha extraña que quedó en su vestido— ¡Qué mierda es esto! —la tocó, viendo la extraña textura viscosa que tenía—. ¿Es... es semen?

—B-bueno.

—No jodas, JungKook, dime que no lo es —pidió mientras cerraba sus ojos.

JungKook se quedó en silencio y JiEun obtuvo su respuesta.

—¡¿Pero cómo?! —chilló, sollozando por su vestido favorito.

—Es que... me estaba masturbando.

—Bien —dijo, y contó en su mente para no perder la cordura—. Me pondré otra cosa y echaré el vestido a lavar, ¡Y más te vale salga o eres hombre muerto!

—Sí, sí. Vamos —Kook tomó el antebrazo de la pelinegra y la sacó de la pieza, la cual se sorprendió por la extraña actitud de su novio. Cuando llegaron al pequeño cuarto de lavado, se quitó el vestido y se puso una camiseta larga limpia que había en canasto, tratando de ignorar la presencia de JungKook. Se sentía humillada y enojada con él.

Jin rápidamente salió de la cama, y tratando de hacer el menor ruido posible, caminó por los pasillos. Escuchando la conversación de la pareja.

—Nunca antes te había vito tan emocionado por lavar, ¿qué pasa? Puedes irte.

—Estoy normal... solo es que ¿no es maravilloso lavar? Que la suciedad se vaya y que quede todo limpio como antes.

—Sí, como sea, tengo hambre comeré algo.

—¡Espera! —escuchó que kook la detuvo—. Hay que echarle suavizante.

—Pues échale tú.

—No es lo mismo, seguro echaré mucho o muy poco.

Mientras la pareja seguía discutiendo SeokJin, tuvo tiempo para colocarse los zapatos esta vez de forma correcta. Caminó un poco más hasta dar con la puerta y salió del lugar, cerrando despacio, aunque de todas forma se escuchó. Después de ello, pudo volver a respirar con tranquilidad, se había salvado y por poco.

—¿escuchaste eso? —le preguntó JiEun a Kook.

—No ¿qué cosa?

—Alguien cerró la puerta.

—No, estas mal, seguro te afecto el suavizante, parece ser fuerte.

—Eres un imbécil, no se puede hablar nada contigo —dijo molesta—. Prepararé algo de comer, y si tú quieres, prepárate algo para ti o pídeselo a tu ex novia a la cual le andas tocando cancioncitas —dicho eso, salió del lugar, dejando a kook, solo quien solo rodó los ojos por la molesta actitud de JiEun, no obstante pudo respirar, Jin había salido y no habían sido descubiertos.

Mientras tanto, Jin, estaba en el ascensor, se vio por el espejo, lucía gratamente follado. Sus mejillas se sonrojaron, imaginando qué llegarían a pensar las personas cuando le vieran por la calle. Así que trató de llagar lo antes posible a su auto. Pasó a su clínica y aprovechó las duchas ella. Después de unas horas llegó a su casa y su esposa lo recibió con una encantadora sonrisa.

—Mhmm ¿estás seguro?

—Dios, sí... solo, hagámoslo —mandó Jin.

JungKook había venido a estudiar a su casa, ambos se cerraron en su habitación y después de un par de horas de estudio, se recostaron en la cama mimándose, demostrando su amor, cosa que para el par de adolescentes hormonales fue más que suficiente para empezar a despertarse.

—Estamos en tu pieza, en tu casa —recordó Kook, enfatizando en la ultima palabra.

—Papá no está, mamá debe estar junto a su grupo de amigas, con quienes se junta todos los miercoles y JiSoo seguramente salió por la cuidad. Los del servicio solo se encargan de atendernos y ¡ahg!, vamos kookie, me duele.

JungKook vio lo excitado que se sentía Jin, así que con algo de dudas accedió. Empezaron a descartar sus uniformes, hasta fundirse desnudos. No sabían cuánto tiempo había pasado, solo podían pensar en el caliente acto que sus cuerpos vivían. Kook jadeaba, y Jin solo podía rentener sus gemidos con la almohada, aunque muchas veces no era lo suficiente para amortiguarlos. Ambos sentían su orgasmo cerca, y cuando estaban al borde de colapsar la puerta del cuarto sonó.

—¿Jin? ¿Estás?

Ambos se miraron con los ojos abiertos, pensando en qué podrían hacer.

—¿Qué hacemos? —susurró Jin.

—No lo sé...

—¡Jin!, te tengo que contar algo super emocionante que me acaba de pasar. Por fis, eres mi hermanito, al que más le tengo confianza, y Lisa salió con sus padres así que no puedo desahogarme con ella.

—E-está bien.

—¿Uh? ¿Te encuentras bien?

—S-sí, perfecto, yo solo ¡Ah!

Jin miró a Kook, reprochándolo con la mirada, ya que este había dado una embestida que había ido directo a su punto dulce.

—¿Jin sucedió algo?

—¡N-no!

—Bien, iré a buscar golosinas para contarte. Será como una pijamada, pero de día y con mi hermano, Prepárate porque te estaré hablando por horas.

—¡Okey! T-te esperaré mhm —jadeó, ya que Jungkook se seguía moviendo dentro de él.

—Falta poco, solo un poco más —le susurró kook, dando otra embestida.

Y Jin no opuso resistencia, y solo dejó que JungKook siguiera, y cuando ambos llegaron a su orgasmo se besaron para callar cualquier ruido que podría delatarlos. JiSoo todavía no regresaba, y ambos trataron de vestirse lo antes posible, por si volvía a interrumpir.

—¡Vamos Jin!, traje helado y se me va a derretir, abre la puerta —la voz de su hermana se volvió a escuchar.

—E-está bien, espérame que... estaba ocupado —le gritó y después se dirigió a su novio—. Métete al baño y no salgas.

JungKook le hizo caso y Jin acomodo su cama y ropa. Dejó entrar a JiSoo la cual, le miró raro, después observó el dormitorio y abrió sus ojos cuando llegó a la cama. Volvió a posar su vista en Jin, y se veía impactada.

—¡Te estabas masturbando!, qué asco, yo me voy. Iré a contarle a alguien más, por llamada o algo, pero no me quedo en esta pieza. Pobre señora Choi, debe andar lavando tus cochinadas.

Jin se quedó observando como su hermana se iba de la pieza, algo rojo por lo que ella creyó, aunque era mucho mejor que pensara eso que la verdad.

—Ya puedes salir —le gritó a kook y este salió del baño.

—¿Cómo me voy sin que ella se de cuenta que estaba en la casa?

—No lo sé, quédate un rato más, si llega a volver le mentiré y diré que llegaste hace poco.

—¿Seguro?

—Sí, ven aquí y dame un abrazo que casi me muero del un ataque cardíaco. Voy a cerrar la puerta con llave primero.

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Holii:3 volví y tengo muchas cositas que decirles, así que por favor no me ignoren y leeanlas 👁💧👄💧👁

1. ¿Les molesta que haya tantas escenas con contenido para mayores? Es que me di cuenta que hay mucho, pero tampoco es que pueda hacer algo todavía, debido que la relación de Jin y Kook, hasta ahora es meramente sexual, y a pesar de que esos dos se aman, Jin no se atreve a más y Kook tampoco puede hacer nada más, ante la negación de Jin. Tampoco sé si es muy explicita o si no tiene nada de detalles y vale kaka, pero no sé, quería pedirle su opinión T u T.

2. Perdón si me he demorado con las actualizaciones, hace tiempo vengo diciendo que últimamente no me siento muy inspirada, y a estos días sumemos que empecé a ver una serie (ya la terminé, así que tendré algo más de tiempo uwuwuwuGilberteamo) y hace poco me llegó mi tableta gráfica, así que he estado ocupado practicando, y es fácil de usar, lo malo es que dibujo como el poto y nada me sale bonito y pintar mucho peorjaja. También me la pasa jugando lol con amigos, saquen a yasuo del lol que me cae como el pico. Zoe t amo.

3. El capitulo se llama "las llaves", ya que gracias a a ellas Jin y Kook se salvaron uwu.

4. Creo que es un momento para hablar de un sueño que tuve. Una vez me dormí leyendo wattpad, así que empecé a soñar cn mis padres osiosi el KookJin, y la cosa es que Jin le pedía a kook que le diera un beso negro owo, la cosa es que Kook acepta, se sacaron la ropita y se besaron, Kook le dice a Jin q se ponga en 4 en la cama (omaigad 😳), yyy la sorpresa es que Jin no tenía ano. Y Jin estaba como: "dale meteme la lengua pronto" y kook como: "no tienes ano". Entonces me llaman para que revise, y ahí estábamos con kook super serios tratando de encontrar el ano de Jin y al final no lo encontramos y Jin no obtuvo su beso negro 😞👊

5. Gracias por leer, y perdón por cualquier falta de ortografía :3 <3

6. Esto es como un posdata, pero aquí vamos. Siento que las cosas que hablé no tienen nada que ver una con la otra, pero weno los tkm mucho, no se droguen <3 

7.Pd2 el cap esta como algo largo, me disculpo.


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