Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Secretos de família

Llevaban ya unas horas en el coche, a Lina empezaba a molestarle el brazo nuevamente, Karlos estaba dormido en su asiento, y ya no quedaba ninguna pasta para comer. Eran las 14:35, y todavía no había aparecido el sospechoso.
De pronto un coche llegó a la calle y aparcó en doble fila delante del edificio, salió del asiento del copiloto Bernardo Hinojosa, pero la persona que conducía no. Él dió la vuelta al coche y se despidió del conductor antes de subir a su casa.
-¡Karlos despierta! Apunta la matrícula del coche.
-Voy, me he dormido un poco...
-Un poco dice...
Llevas una hora durmiendo.
- Ayer te dejé mi cama y sólo he dormido 3 horas.
-¡Quieres apuntar la matrícula! Se va a ir el coche y no te dará tiempo.
-Puedo memorizar el número mejor que tú.
-¡Bufff! Ya lo hago yo.
Lina apuntó la matrícula y enseguida llamó a Diana.
-Diana quiero que investigues esta matrícula a ver a quién pertenece el coche.
-Enseguida me pongo Lina, ¿estás bien?
Pareces nerviosa.
-Estoy nerviosa Di, estoy que me subo por las paredes.
Diana se abstuvo de comentar nada y cortó la comunicación para dedicarse a la matrícula. Lina nerviosa era un poco inestable y pensó que mejor la aguantase Karlos.
En el coche Karlos comentó:
-Vamos a buscar algo para comer.
-Hay una pizzería un poco más abajo.
-Pues trae una pizza y la compartimos.
-¿Cómo dices?
Contestó Lina con la vista clavada en karlos.
-Eso, que traigas una pizza y la compartimos.
-No guapo, la pizza no la comparto, pero además no soy tu recadera para ir a buscar yo la pizza.
-A ver, tú sabes dónde está la pizzería...
-Yo te lo explico para que lo entiendas mejor.
NO VOY A BUSCAR NINGUNA PIZZA.
Vas tú a buscarlas, yo he ido esta mañana a buscar las pastas.
-Pero te las has comido todas tú.
-Te he ofrecido y no has querido..
-Está bien, voy yo, ¿de qué la quieres?.
-Carbonara mediana.
Mientras Karlos iba a buscar las pizzas ella aprovechó para tomarse un analgésico del bolso sin que la viera Karlos, jamás admitiría lo mucho que le dolía el brazo.
Cuando entró de nuevo en el coche la invadió el olor de pizza recién hecha. Las pizzas ya estaban cortadas en porciones y se las comieron casi sin hablar. Ambos tenían hambre, y dejaron las disputas para después de comer.
-¿Y ahora qué esperamos aquí?
Dijo Karlos.
-Esperaremos que salga y comprobaremos si entra alguien a su edificio mientras tanto. Cuando se vaya lo seguiremos a ver dónde va.

Mientras tanto Diana comprobaba la matrícula y se sorprendía de quién era el propietario. Habló con Rosa,
-Rosa, necesito un poco de tiempo para investigar a Bernardo Hinojosa, voy a hurgar en su pasado y dejaré un poco de lado de momento las cámaras de seguridad de la empresa, me pongo con esto y creo que podré conseguir la información enseguida.
-¿Qué ha pasado?
-Cuando lo averigüe os lo diré. Se me ocurre algo, ¿puedes seguir tú a la mujer de Mario Cabañas?.
-¿A Sandra Díaz?
-Sí, creo que nos vamos a llevar una sorpresa con ella, si lo que creo es correcto.
- Está bien, voy a ver si la localizo en su casa o en la empresa.
Le preguntaré a su hija por teléfono.
Rosa llamó a Kora a su móvil.
-Dígame.
-Hola Kora, soy Rosa, ¿Cómo estás cariño?
- Bien, voy a comer ahora, ¿Ha pasado algo? ¿Ya habéis descubierto quién quería matarme?
-No, lo siento, todavía estamos trabajando en ello.¿Sigues con los guardaespaldas que te recomendé?
- Si, gracias, son muy profesionales y apenas me doy cuenta de que están por aquí.
-Ya te dije que son muy discretos. Pero te llamaba porque necesito saber dónde está tu madre ahora mismo.
-¿Porqué no la llamas a ella?
- Lo siento, perdí su número y no consigo contactar con ella.
Mintió Rosa.
-Creo que estará en la peluquería a la que va habitualmente, te doy la dirección enseguida. Tenía hora a las tres, seguro que estará todavía alli.
Kora le dió la dirección y Rosa salió inmediatamente para allí.
Tendría que hacerse ver un momento para preguntarle sobre algún tema sin importancia y después desaparecer y convertirse en su sombra. Así cuando hablase con Kora no se sorprendería de que quisiera saber su paradero.
Se dirigió pues a la peluquería, que estaba en una calle bastante céntrica, era una de esos centros de belleza caros donde incluso te ponen botox si quieres.
Al entrar, Rosa localizó a Sandra enseguida, y se acercó a ella.
-Hola señora Díaz, perdone que la moleste, necesito hacerle una pregunta delicada y no quise decírselo por teléfono ¿me podría decir si su marido tenía alguna exmujer, exnovia o examante? Es un dato que nos podría ser de utilidad en la investigación.
Evidentemente ya tenían esa información pero le servía de excusa.
- Lo siento, sobre exmujeres, no tenía, exnovias puede que alguna y amantes... no sé, de estas cosas la mujer es la última en enterarse.
-Está bien, no la molesto más.
Rosa salió de la peluquería y se fué a un bar cercano, donde entró al baño y se cambió de aspecto con una peluca y ropa distinta.
El bar tenía una visión privilegiada del centro de belleza así que se pidió un café y se sentó a esperar junto al ventanal.

En otro lugar seguían Lina y Karlos esperando a que saliese Hinojosa. Se habían acabado las pizzas y cómo no, cada vez que hablaban era para discutir.
- Creo que voy a ir a buscar un café.
Dijo Lina.
- Ahora debe de estar a punto de salir de casa, entrará en la oficina a las 5 y són las 3 y media.
-Me da tiempo de ir y volver con el café.
- Haz lo que quieras pero Lina, si sale Hinojosa, le seguiré estés tú o no.
-Eres un capullo.
- Simplemente sincero, puedes esperar un poco más sin café.
-Lo sé, pero me da tiempo de sobras de ir y volver, así que hasta ahora mismo.
Lina salió del coche y Karlos aprovechó para ponerse en el asiento del conductor.
Lina regresó con un sólo café en las manos, vió que Karlos estaba en el asiento del conductor y se sentó en el del copiloto.
-¿Sólo traes un café?
Dijo Karlos cuando la vió entrar al coche.
-No, también he comprado pastitas.
- ¿Y no me has traído café a mi?
- No me has dicho que querías, así que he supuesto que aguantarías un rato más sin café.
Le contestó Lina mirándole con una sonrisa inocente.
Lina se tomó su café bajo la mirada de Karlos,  que en aquel momento la hubiese estrangulado sin el menor remordimiento. 

Le dio tiempo a tomarse su capuchino y sus pastitas dulces antes de que viesen cómo Hinojosa salía de su edificio y se introducía en el párquing. Era una situación un poco estresante porque lo perdían de vista momentáneamente y debían estar atentos a cualquier coche que saliese del párquing,  mirar bien en su interior y seguir el coche correcto, y tenía sus riesgos ya que no sabían si tenía alguna otra salida por otra calle.

Tuvieron suerte y Hinojosa salió por el mismo sitio por dónde había entrado antes.

Lina se apuntó el número de su matrícula para tenerlo registrado y por si era necesario investigarlo más a fondo. 

Karlos puso en marcha el coche y se mantuvo a una distancia prudencial del de Hinojosa. Lina admitió para sí misma que por lo menos sabía seguir al sospechoso sin ser demasiado evidente. Había mucho tráfico a esa hora, y él se dirigía al centro, así que se mantenían en silencio, concentrados en no perder de vista el coche de Hinojosa, hablando en monosílabos.

-Por la derecha.- Decía Lina.

-Lo he visto. - contestaba Karlos. 

- Adelanta al audi.

- Ahora no puedo.

Era una discusión encubierta, pero como estaban concentrados en el trabajo, se mantenía a un nivel muy bajo.

Llegaron a una calle amplia, en la que Hinojosa se detuvo en doble fila, ellos pararon unos metros más atrás. y se disponían a esperar cuando una llamada les sobresaltó.

- ¿Rosa? ¿qué ocurre?.

-Lina , ¿Qué hacéis vosotros aquí?

-Seguimos a Hinojosa, ¿ Dónde estás?

-En la cafetería de la esquina, yo estoy esperando que salga Sandra Díaz del centro de belleza, ¿El coche aparcado delante es de Hinojosa? Pues parece que ha venido a buscar a Sandra..

-Ven al coche, los seguiremos a los dos.

-Está bien Lina, te llevo pastitas.

-Eres un sol Rosa.

Rosa salió del bar y se dirigió al coche donde estaban Lina y Karlos, se sentó y les contó la conversación que había tenido con Diana antes, y cómo se las había ingeniado para localizar a Sandra.

-Genial, parece que Sandra e Hinojosa se conocen, esto se pone interesante.

Dijo Karlos.

-Sólo hay que averiguar qué tipo de relación tienen. 

habló Rosa.

Lina estaba callada, pensando mientras se comía la bolsa de pastas que le había dado Rosa.

A los diez minutos salió Sandra del centro de belleza y se dirigió al coche de Hinojosa directamente, se subió a su coche y salieron.

Los tres se pusieron en marcha y Karlos condujo entre el tráfico intentando no perder a la pareja.

Vagaron por la ciudad hasta que llegaron a un hotel pequeño, entraron en el aparcamiento y se bajaron ambos.

Lina y Karlos hicieron lo mismo, como ambos iban con peluca y ropa holgada y tenían aspecto de pareja joven, se acercaron al hotel a una distancia prudencial de la pareja, pero intentaron averiguar en qué habitación se habían registrado. Cuando ellos se fueron a su habitación, Karlos y Lina se acercaron al mostrador de recepción y solicitaron una habitación.

Mientras que Karlos hacía la reserva, Lina atisbaba por encima del mostrador disimuladamente para averiguar la habitación de la pareja.

Tuvieron suerte y les dieron la habitación contigua a la de Hinojosa y Sandra. Subieron enseguida, y ya en la habitación Lina llamó a Rosa.

- Hola Rosa, estamos en la habitación contigua a ellos, intentaremos averiguar qué tipo de relación tienen estos dos, aunque creo que es evidente, si salen avísanos por si no nos damos cuenta.

-Está bien Lina, cuidadito con lo que hacéis los dos solos en la habitación.

- Muy graciosa Rosa, muy graciosa. Atenta por si ves a alguien conocido por los alrededores o que entre en el hotel para reunirse con ellos. Esto puede tardar un par de horas o toda la noche...Veremos.

Karlos se asomó al pequeño balcón de la habitación y observó que en la habitación contigua habían abierto las ventanas y la puerta del balcón así que se oía todo lo que hablaban al lado.

Le indicó a Lina silencio y la arrastró al balcón, y allí podían oir la conversación en la otra habitación.

- Bernardo, tengo miedo de que mi hija se entere de lo nuestro, no deberíamos seguir viéndonos.

-No se va a enterar Sandra, tenemos mucho cuidado, sabes que no puedo estar sin ti.

- Lo sé, pero se nos va a ir de las manos, están investigando la muerte de mi marido, y han intentado atentar contra mi hija, tengo miedo Bernardo.

-No hacemos nada malo, tranquila, déjame demostrarte cuánto te quiero.

La conversación tomó senderos eróticos y a Karlos y Lina les quedó claro que los dos estaban teniendo un romance. 

Esperaron un rato más, y cuando los sonidos al otro lado eran más claros, Lina se introdujo en la habitación pensativa. ¿Qué significaba eso? ¿Hinojosa habría matado al marido de su amante?, pero ¿porqué atacaría a Kora también? No tenía sentido. 

- ¿Crees que fue él quien mató a Mario cabañas? -Dijo de repente Karlos sobresaltándola.

-Me parece poco probable aunque no lo descartaría en un principio, pero me preocupa el ataque que sufrió Kora, creo que debió ser la misma persona que mató a su padre. 

- Es de suponer, pero tenemos que encontrar el nexo entre ambos para identificar un sospechoso. 

-No será fácil encontrar el motivo, puede ser celos, dinero o poder, hay que averiguar quién se beneficia de la muerte de ambos. Es fácil llegar a la conclusión de  que quien herede la empresa sea culpable, pero no siempre es así.

-Bueno Lina, creo que ya podemos irnos...

Lina lo miró y le habló como quien habla a un niño al que le tiene que explicar las cosas dos veces porque no se entera.

- Debemos esperar para ver si se quedan juntos toda la noche o se van en un rato. Así que ponte cómodo.

--¿porqué?

- Karlos, si se quedan toda la noche la relación es más estable y es probable que lleven tiempo juntos, si se van enseguida, la relación es relativamente reciente.

- Pero  para nuestra investigación esto es superfluo, no nos aporta nada.

- Te lo tengo que explicar todo... Mira, si es una pareja de hace poco, el nexo entre ambos es todavía muy reciente y la relación puede ser esporádica, de corta duración, si se quedan toda la noche es porque llevan más tiempo juntos, eso significa más sentimientos en juego, posibilidad de celos, amenazas de abandonar la relación etc..

-No lo había pensado, entonces pongámonos cómodos y disfrutemos de la cama que al fin y al cabo ya la hemos pagado...¿ Quieres acostarte conmigo Lina?

-Ni que fueras el último hombre sobre la tierra...

- Vamos, si ni siquiera me conoces...

-Por eso mismo, lo poco que te conozco no me gustas así que... Voy a vigilar a esos dos vaya a ser que se nos escapen.

-¡Qué aburrida eres!.

Karlos se estiró en la cama, y como seguía cansado por la noche anterior se quedó dormido. Lina no pudo evitar mirarle mientras dormía, era bastante atractivo dormido. Pero despierto la sacaba de quicio.

Se imaginó cómo sería estar con él íntimamente, pero enseguida se regañó a sí misma por imaginarse cosas tan absurdas. Estaban trabajando y debía montar guardia en el balcón ara asegurarse de que no se iban sin saberlo ellos.

Habían entrado al hotel a las cuatro de la tarde, y eran las ocho de la noche y aún estaban allí. Lina llamó al servicio de habitaciones y pidió la cena para los dos. Al cabo de media hora picaron a la puerta de la habitación y les dejaron la cena, y también oyó que picaban en la habitación contigua. Dedujo que se quedarían toda la noche probablemente.

Despertó a Karlos para cenar.

-Vamos bello durmiente, a cenar.

-¡Eh!. ¿Qué pasa?

-Que he pedido la cena y se va a enfriar, los tortolitos siguen en la habitación.

-Me he dormido.

-Sí, pero no pasa nada, después de cenar esperaremos un poco y si a las doce siguen aquí, podemos decir que pasarán la noche juntos y nosotros nos iremos a casa a dormir.

-¿Podríamos quedarnos esta noche?

-Ni hablar, es muy peligroso.

-No te voy a hacer nada...

-Eso lo sé idiota, pero es peligroso porque mañana nos pueden descubrir y eso entorpecería la investigación.

-Bueno, tú mandas. ¿Sigue Rosa en el aparcamiento?

-Claro, nos esperará hasta las doce y después nos iremos los tres juntos.

Cenaron y el tiempo pasó volando, cuando fueron las doce, Karlos y Lina se fueron del hotel, entraron en el coche y Rosa condujo hasta la oficina.

-Creí que iríamos a casa.

-Antes tenemos que hablar, Di tiene novedades importantes.- dijo Rosa

-¿ No pueden esperar a mañana?

-No, dijo Diana desde la puerta de la habitación.

Se sentaron en el despacho principal, donde había una mesa larga y seis sillas alrededor.

-Está bien, Sandra y Bernardo tienen una aventura más o menos estable, deben de llevar un tiempo juntos.- Dijo Lina.

-Sí, yo lo sospechaba, pero he investigado a Hinojosa, hace algunos años, su hermana Susana murió por un shock anafiláctico después de usar un producto de Estetic Cabañas. Él denunció a la empresa pero perdió el juicio. Sin embargo luego solicitó empleo  y Mario Cabañas lo contrató. 

-Podría tratarse de una venganza, mata a Mario y su hija y se queda con la mujer y la empresa...

Aventuró Karlos.

-Es una posibilidad- aceptó Diana.

- Bien, hay que seguir investigando a Hinojosa y ver con quién se relaciona y tratar de averiguar dónde estuvo el día de la muerte de Mario y del ataque a Kora. -Dijo Lina.

Después de eso, todos se fueron a casa, Karlos llevó a Lina a su casa antes de ir a la suya, y Rosa y Diana fueron cada una por su lado a sus respectivas casas.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro