Resumen: Draco y Astoria están peleados, entras en la mente de Draco y esto es lo que escuchas... sin embargo, decides hacer algo.

Inspirado en idfc de blackbear.

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Dime lindas mentiras, mírame a la cara, dime que me amas, aunque sea mentira, porque me importa una mierda, la verdad.

Estuviste fuera toda la noche, no sé dónde estuviste, la verdad... sé lo que hiciste.

Estabas confundiendo en tus palabras, no tiene sentido lo que dices... nunca lo tuvo. Pero me importa una mierda, la verdad.

Porque tengo muchos sentimientos por ti y actúo como si me importara una mierda, como si no existieran. Aunque mi corazón grite que anhelo tu calor, tus besos, tus abrazos, tus sonrisas... todo de ti.

¿Sabes por qué actúo así? Porque estoy jodidamente asustado, amor.

Solo soy un tonto por ti y quizás eres muy buena para mí. 

Porque me tienes jodidamente mal, amor. Muy mal.

Por favor, dime lindas mentiras, mírame a la cara, dime que me amas aunque sea mentira. Necesito creer que aún lo haces. Necesito estar sedado bajo tus efectos, porque solo así me mantengo cuerdo.

Sé lo que hiciste anoche. Sé donde estuviste. Sé con quien lo hiciste... mi pregunta es, ¿por qué?

Mi pecho duele, las lágrimas caen. La noche es más larga sin ti, me duelen los huesos del frío de tu ausencia. 

Los pies me duelen de correr, de buscarte en lugares... fingiendo que no sabía que estabas en la habitación de Theodore.

Me duele y no sabes cuanto.

Pero estoy jodidamente asustado, porque no sé como vivir sin ti.

Estoy enamorado ti... o tal vez solo dependo de ti, la verdad me importa una mierda.

Solo quiero regresar al pasado, donde no sabía absolutamente nada. Donde todo era mejor, donde podía reír.

Deseo regresar al pasado. Donde te podía ver reír, donde te podía ver sin sentirme mal, donde te podía ver sin que mi estomago se revolviera... por favor.

Solo deseo volver al pasado.

Al pasado donde todo era mejor.

Donde no sabía nada.

Mi corazón estaba bien, latiendo con fuerza cada vez que te veía.

Por favor, bésame en los labios y hazme creer que soy el único hombre de tu vida, Astoria.

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—¿Estas bien, Malfoy? — preguntaste, mirando expectante.

Draco giró su cabeza, apenas habían tocado dos palabras entre ustedes, a pesar de siempre estar en el mismo asiento en esa clase. 

Recordó como Astoria le gritó, diciendo que le miró el trasero, pero Draco ni siquiera había cruzado dos palabras contigo.

El chico rubio asintió. —¿Por qué lo dices?

Te encogiste de hombros. —Tienes la cara... te vez triste.

—¿Eso que te importa?

Frunciste las cejas ante la respuesta brusca de Draco, por lo que decides mirar al frente, sin prestarle más atención. 

Sin embargo, Draco necesitaba un rebote. 

Quería sacar de su sistema a Astoria.

Bajo aquellos efectos del despecho, los que te hacen cometer imprudencias, Draco bajó su mano y comenzó a tocar. Tu piel se erizó al sentir el frío toque y tus ojos se fueron a los de él, mientras te preguntabas que carajo hacía Draco.

El rubio metió la mano debajo de la tela de la falda y diste un brinquito. Tus ojos se fueron a su mano y la sacaste de la falda.

—¿Por qué?

Fue lo único que se escuchó de la boca de Draco.

Lo observaste unos segundos. —Estamos en medio de una clase. — susurraste nerviosa.

Draco se encogió de hombros, como si eso no fuera un impedimento.

Su mano bajó lentamente, pero esta vez a la tuya, tomando tu mano, para subirla y dejar un pequeño beso en su torso. Lo miraste a los ojos, sabías lo que estaba haciendo, él solo quería un poco, para sacar de su cabeza a Astoria... quería que fueras ese clavo que la sacaría de golpe, sin embargo, accediste y lo dejaste continuar, porque tu corazón de alguna forma... siempre le había pertenecido a ese rubio de ojos grises que ahora te miraba como si fueras la cosa más hermosa que jamás hubiera visto.

Llevó tu mano a su pecho, para deslizarse lentamente por la ropa, llegando a esa protuberancia que sorprendentemente estaba dura. Tus labios se separaron al sentir el duro bulto, realmente sorprendida.

—¿Me ayudas con eso? — preguntó Draco en voz baja y sin pensártelo dos veces asentiste.

Como si esto estuviera destinado a suceder, el profesor Snape dejó que todos salieran y Draco se puso de pie, tomando tu mano con fuerza, mientras te arrastraba por los pasillos, lejos de los otros estudiantes.

En el primer armario de escobas que encontró, empujó tu cuerpo con fuerza dentro, cerrando la puerta detrás de él, atacando tus labios con fuerza, saboreando como si fuera su comida favorita.

Tu virginidad estaba a punto de ser entregada a Draco Malfoy, es lo que pensaste, hasta que notaste como él comenzaba a desabrochar su pantalón y los dejaba caer en el piso, sacando su duro miembro.

—De rodillas. 

Tus ojos se abrieron de par en par, nunca lo habías hecho. Ni siquiera sabías que hacer.

Simplemente hiciste lo que ordeno, Draco no dudó un segundo en tomar tu cabello en un moño desordenado. —Tómalo todo.

Su tono demandante, eso fue lo único que necesitaste, para acercar tu cara y dejar que Draco empujara su cadera contra tu boca.

Separó sus labios al sentir el hueco cálido que lo apretaba mientras follaba. 

—Mierda, lo haces tan bien. — gimió, empujando más sus caderas. 

Nada pasaba por tu cabeza, mientras lo sentía empujar tu cabeza y su cadera al mismo tiempo, tus ojos se iban a su cara, llena de placer.

Y por más incoherente que fuera, mientras estabas de rodillas, dejando que follara tu boca como le viniera en gana, sentiste una oleada de dominio y placer al mismo tiempo, pensando inocentemente que tenías a Draco Malfoy alrededor de tu dedo, porque disfrutaba de como tu boca se sentía alrededor de su gran polla.

Más fuertes, más bruscas, más profundas las embestidas que daba.

Provocando que las arcadas hicieran ruido en la habitación, provocando que Draco se excitara más.

Y en ese momento, Draco se corrió dentro de tu boca. Llenando con fuerza tu boca, el líquido salado manchando tus papilas. 

Draco salió de ti, mientras seguían de rodillas y él comenzaba a acomodar su pantalón.

¿Debías escupir?

Entonces Draco se dio cuenta y te ayudó a ponerte de pie, notó como la pequeña lágrima de su semen corría lentamente por la comisura de tu labio y acercó su pulgar, limpiando el líquido y metiendo con fuerza ese mismo dedo dentro de su boca, sintiendo como su líquido caliente, se mezclaba con tu saliva.

—Traga. — ordenó.

Y eso mismo hiciste, lo dejaste pasar por tu garganta mientras Draco te miraba con una sonrisa, como si estuviera orgulloso de que tragaste su semen.

Se miraron unos segundos, mientras te avergonzabas de ti misma, sintiendo tus piernas húmedas, pensando que Draco se iba a encargar de ti.

En el momento que ibas a comenzar a sentirte usada, Draco abrió la puerta y tomó tu mano de nuevo, jalándote en su dirección.

—También te voy a follar. — admitió, mientras te tomaba con fuerza y te hacía caminar a su lado.

Tu corazón se aceleró al sentir su brazo serpentear hasta tu cintura. 

Draco se detenía cada cinco segundos para empujar tu cuerpo y besar tus labios con fuerza.

Y así fue, como ambos comenzaron a ser amigos con beneficios. 

Haciendo de sus cuerpos, la adicción del otro. Hasta caer en la mera perdición... la locura.

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¿Se imaginan un fic así? no sé porque me acorde de el old dracotok. 

Extraño esa época, aunque yo no escribía en ese tiempo.

Espero les haya gustado este one shot <3

Att:—F💖