Al día siguiente, ambos jóvenes y los cachorros se despiertan para seguir con su gran viaje a la ciudad de Nueva York.

Antes de seguir con su gran viaje, los cachorros y ambos jóvenes disfrutan de un delicioso desayuno en el hotel.

Afortunadamente pueden comer en las habitaciones del hotel así que podrán llevar su desayuno a su habitación.

El joven rescatista se va a la cocina del hotel para poder llevar el desayuno a la habitación en donde está su familia.

Mientras tanto, la joven veterinaria va a despertar a los cachorros en lo que Ryder regresa con el desayuno.

Katie: Buenos días, mis bebitos, ya es hora de levantarse, jeje *sonríe muy feliz mientras los acaricia suavemente*

Cachorros: Jeje *sonriendo muy felices mientras se despiertan y se estiran un poco mientras bostezan tiernamente*

Katie: Hay que levantarnos mientras esperamos a que papi llegue con el desayuno, mis hermosos bebitos, jeje

Cachorros: Está bien, papi, jeje *sonríen muy felices mientras se levantan y se estiran tranquilamente y muy felices*

Katie: Vengan, mis hermosos bebitos, a cepillar su pelaje para que quede muy suave, jeje *sonriendo muy feliz* Jeje

Cachorros: Está bien, mami, jeje *muy felices mientras se acercan a la joven veterinaria para que cepille su pelaje*

Minutos después, el joven rescatista ya llega a la habitación con una bandeja con el desayuno servido en la bandeja.

Ryder: Jeje *sonríe muy feliz, entra a la habitación y ve a la joven veterinaria cepillando el pelaje de los cachorros*

Katie: Jeje *sonríe muy feliz mientras se encuentra cepillando el pelaje de los cachorros tranquilamente y muy feliz*

Ryder: Hola, mis amores, ya llegué con el desayuno, jeje *sonriendo muy feliz mientras deja el desayuno en la mesa*

Katie: Que bueno, amorcito, ya vamos, jeje *sonríe muy feliz mientras termina de cepillar el pelaje de los cachorros*

Ryder: Jeje *sonríe muy feliz mientras sirve el desayuno en su familia en la mesa tranquilamente y muy feliz* Jeje

Cachorros: Jeje *sonriendo muy felices y se van a la mesa y se sientan en sus sillas tranquilamente y muy felices*

Katie: Jeje *sonríe muy feliz mientras se acerca al joven rescatista y le besa su mejilla mientras lo abraza muy fuerte*

Ryder: Jeje *muy feliz, se sienta en una sillas junto a la joven veterinaria tranquilamente y muy feliz* Jeje

Ambos jóvenes y los cachorros comen de un delicioso desayuno para poder seguir con su gran viaje a Nueva York.