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CAPÍTULO 4:
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MACGYVER

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SOLO HABÍA PASADO UN DÍA Y AGRADECÍA EL POR FIN EL HABER LLEGADO, pues estar todas esas horas en un avión donde las miradas de tus compañeros siempre te acompañaban como si fueras a cometer un crimen no era de los más satisfactorio.

Hasta llegué a contestar mal a Bozer y me terminé sintiendo profundamente culpable por mi actitud. Pero él lo comprendió, sabía que me estaba dejando llevar por los emociones así que lo había dejado pasar.

Ahora mismo nos encontrábamos bajando todas nuestras maletas mientras Riley y Bozer discutían ya que el moreno se había ofrecido a llevar sus maletas pero ella no lo dejaba. Así que su intento de acercarse y ser caballeroso con Riley se estaba yendo por la borda, y con ello solo estaba causando que algunas personas nos miraran sin disimulo alguno.

Jack y yo también éramos espectadores de aquella escena, y pues Cage... Bueno ella solo se mantenía con un semblante serio acomodando sus cosas en silencio.

Después de unos quince minutos aproximadamente, la rubia se había hartado y fue hasta ellos a darles un sermón por todo el show que estaban montando. Yo solo me limité a negar con mi cabeza y Jack estaba riéndose de ellos entre dientes. Sin más, me di media vuelta con la finalidad de avanzar pensando que después podrían alcanzarme.

Grave error.

Mis planes de irme sin ser visto y pasar desapercibido de la pena ajena que estaba sintiendo por mis amigos se estropeó y tuve que maldecir en mi mente a mi descuidado cerebro por no prestar atención alrededor.

—¡Oh por dios!—había exclamado la persona que había chocado conmigo cuando sus cosas cayeron.

El bolso que cargaba para ese entonces y se utilizaba de lado me lo quité y lo monté sobre mi maleta para ayudarla a recoger sus cosas y evitar que me molestara.

—En verdad lo siento.—se disculpó la chica. Creo que de unos 18 o 19 años para ser exactos, y la verdad su voz era muy chillona y cargaba una ropa no muy adecuada que dejaba mucho a la imaginación.

—Descuida.—respondí con una sonrisa incómoda evitando mirarla demás. La gente ya empezaba a vernos con un poco de curiosidad, y podía sentir la mirada de algunos agentes del FBI y los chicos taladrarme la espalda.

Como dije, lo que estaba planeando se había ido al caño.

—Oye, puedo compensarlo.—Ella había hablado en un tono bajo como si de un secreto se tratara, pero lo suficientemente alto para yo poder escucharla y no pude evitar alzar una ceja ante su propuesta.—Oh vamos, eres muy guapo...—tramaba algo, y eso pude reconocerlo en el tono seductor que adquirió voz, como quien no quiere la cosa. Ella iba acercándose de una manera provocadora hacia mí y colocó un dedo en mi pecho acariciándolo un poco. — Mi nombre es Melissa... ¿Tú eres..?

Y antes de que pudiera seguir hablando, me alejé, sintiendo al calor apoderarse de mi rostro.

Era algo que no me esperaba, y para alejar el ambiente incómodo carraspeé como único método de salida para luego hablar.

—Es muy amable de tu parte que quieras pagarme de algún modo, pero tendré que declinar la oferta. —le sonreí falsamente, que hasta ella pareció darse cuenta.—Mi compañía viene en camino, así que gracias de todos modos.— y con ello terminé por dejar la charla hasta ahí.

La peli-roja frente a mí frunció el ceño y miró a los lados, sintiendose seguramente avergonzada que su plan no hubiese funcionado. Algunos la miraban, y he de admitir que es un poco llamativa para no hacerlo. Sin más que decir, se arregló el cabello pasando por mi lado chocando mi hombro con el suyo y meneando sus caderas provocativamente dando pasos fuertes que resonaban gracias a sus tacones de aguja al dar más pasos. Sinceramente, y gracias a las quejas de Riley cuando nos reunimos para cenar -ya fuera en las misiones o en casa- esas cosas parecían matar a cualquiera, y admiraba el valor de la pelirroja por utilizarlos.
A lo lejos se podían escuchar lo que parecían ser silbidos de algunas personas hacia su persona, así que me atreví a voltear hacia atrás por curiosidad y la quede mirando igual, no tenia mal cuerpo, pero estaba en el trabajo y debía concentrarme y no perder el tiempo.

— ¿Qué rayos fue eso? —Cage se había acercado a mí con una ceja alzada y una sonrisa, a lo que yo la volteé un poco avergonzado.

—¿Es que acaso no se dieron cuenta que la chica lo ha acorralado?— Riley había aparecido por arte de magia a mi lado y eso hizo que hiciera una mueca. Tanto porque me asustó como por sus palabras.

—No es cierto.

—Si, es cierto— se dirigió Bozer a mi para luego ver a la morena—, lo vimos perfectamente Riley, solo que nuestro Mac se quedo mudo mirando sus atributos.—soltó sin escrúpulos y tuve que morder mi lengua para no soltar una grosería.

Aun así, lo demás vieron la espectativa graciosa mientras yo moría de vergüenza, y sabía que mi cara estaba roja cual manzana.

—¿Le comió la lengua el gato o ella estaba a punto de hacerlo? —bromeó Jack después.

—¿Pueden parar ya? Solo fue un accidente.—rodeé los ojos un poco irritado.

—Un accidente que por poco hacía que te llevara con ella a la cama. ¿Estás seguro que no te propuso eso? Porque habría de ser ciego para no verlo. —rió Riley ante su propio comentario y los demás la siguieron. Menos yo.

—Creo que hasta un ciego sería capaz de saberlo—escuché a Cage decir con una sonrisa burlona, yo bufé.—Vamos Mac, solo es un juego.

Vimis mic, sili is in jiigi

—Pues no me gustan los juegos.—respondí con molestia.

—Ah, pero si te gusta hacerlos, ¿No?─── Bozer contraatacó. A lo cuál yo sonreí sin poder evitarlo—¿Se dan cuenta que si es verdad?— me señaló con su dedo acusadoramente y los demás rieron por el intento de yo ocultar lo obvio, pero igualmente termine riendo con ellos.

La felicidad pareció acabarse cuando un carraspeó falso de alguien hizo que voltearamos nuestras miradas hacia dicha persona. Todos nos pusimos serios cuando vimos al agente al frente de nosotros como si nos hubieran dado en un botón de apagado y toda clase de chistes se hubo detenido al instante.

—Vamos a los autos chicos, que no tenemos tiempo.—habló.—La chica puede escapar...Otra vez.—su voz era un poco seria y también grave, tal vez estaba de mal humor o era una persona que siempre lograba estarlo.

—Espere, ¿A qué se refiere con escapar otra vez?— pregunté, con suerte yo pude escuchar lo último susurrado por él, ya que estaba al frente de todos.

—Si.—respondió alguien a nuestras espaldas de forma inmediata. Parecíamos un ventilador rodando nuestras cabezas de un lado a otro.

La persona que habló era una chica con lentes, alta y delgada, con un cabello negro al igual que sus ojos y cargaba una carpeta en sus brazos. Típico en las secretarias personales de los empresarios, pero se supone que es una agente por su ropa.

—La perra es muy astuta.—soltó con desagrado, cosa que no me agradó en lo absoluto.

Todos la miramos incrédulos ante su actitud. ¿Enserio permitían que una agente se de el derecho a dirigirse a los demás con un vocabulario tan... Desagradable?

Entiendo que a algunos parecía afectarles y subirle el ego el saber que están en un puesto de trabajo difícil de conseguir y seguramente el mejor, pero supongo que también debe influir respeto y no una primera mala impresión.

Por ejemplo; tratar como quisiera a los demás.

No soy acto para dar ejemplos, pero supongo que su tono no es el más adecuado para dirigirse a nosotros.

—Por dios Carissa, Lenguaje.—La chica rodó los ojos y bufó al escuchar la voz del hombre reprenderla—Vean, allí hay una camioneta personal para ustedes que los llevara a la comisaria.—ahora habló dirigiendo su mirada a nosotros y señalándo dicha camioneta con una voz aburrida y arrastrada.

—Dentro de él hay un chofer esperándolos. Digan que están departe de Carlos Collins ¿Entendido?—Nosotros asentimos con una pequeña sonrisa ahora al hombre de aspecto serio.

Los chicos volvieron a recoger sus pertenencias que habían dejado en el suelo, y yo me quedé viendo a la chica. Carissa.

—¿Se te perdió algo en mi cara o qué?—me preguntó de manera brusca al ver que no apartaba mi mirada de ella. Carlos se había ido dejándola con unos papeles, así que no estaba para detener su vocabulario.

—Sí, digo no...—Ella alzó una ceja con escepticismo, y yo rasqué mi cuello— ¿Porque decías que Em-.. Digo, la chica escapó?

Ella endureció sus facciones al ser consciente de mi pregunta, y bufó.

—Porque ya ha escapado siete veces y la muy perra siempre lastima a alguien de los nuestros, y no me hace gracia que mis compañeros salgan lastimados. —respondió con enojo.

—No la llames así si no la conoces.—solté sin pensar avanzando un paso hacia ella. Pero ya no había tiempo para retractarse, estaba ofendiendo a Emma y eso no me agradaba para nada.

—¿Acaso tú si la conoces? —inquirió incrédula.

—Quizás más de lo que tú te imaginas.—respondí con una sonrisa, dejándola con la boca semi-abierta.

Sin esperar respuesta, gire sobre mis talones y caminé directamente hacia la camioneta donde Bozer gritaba mi nombre para que me apresurara.

—¿Que esperas Mac? ¿Una invitación? Mueve el trasero.—Le eché una mirada a Jack, de cierta forma me recordó a Matty con su peculiar frase para hacernos apurar.

—Okey, okey. Ya voy.—entre al auto, y todos me miraban detenidamente, cosa que ya empezaba a incomodarme—¿Que?

Cage río entre dientes y Jack fue el primero en hablar.

—Vaya mac, tú si que no pierdes el tiempo. Cada una es diferente, ¿Pero cual es la real? —era una indirecta y sabía a que se refería. Los chicos rieron a coro por su comentario y yo solo rodé los ojos para luego mirar por la ventana.

Este viaje sería un poco largo, así que cerré los ojos para descansar un poco más.

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Primero que nada, cuando uno está cansado pareciera que pierde la noción del tiempo y no para a nada a su alrededor. Sientes paz y esa tranquilidad que parece ser increbrantable y no quieres que se rompa nunca, porque seguramente serás aquel que diga "cinco minutos más" para luego descansar.

Segundo, lamentablemente no era una persona de por sí con una vida normal y lo obvio es que no pudiera decir aquella palabra y me tendría que levantar sí o sí sin poner objeciones.

—Mac.. Mac..—escuché una voz a los lejos susurrándome en un tono sumamente bajo, o quizás alto y mi cabeza solo se debate entre ignorarla o por fin dejar de hacerlo.

Después de ello, hubo un disparo que me obligó a reaccionar de golpe por el susto repentino ordenando a mi cuerpo a sentarse y por si fuera poco, a golpear mi cabeza con quién sea que me haya estado llamando.

—¿Cage?—logré distinguir a la cabellera rubio que estaba a mi lado, y lleve una mano a la cabeza sobándome al igual que ella.

Deseé escuchar una broma proveniente de su parte o un comentario sarcástico, pero en cambio a ello solo se oyeron disparos y ambos tuvimos que voltear con pánico hacia la ventana más cercana y echar un vistazo afuera.

Solo pudimos ver perfectamente a chica con un un traje anaranjado, iba corriendo como si su vida dependiera de ello. Y es que literalmente, su vida dependía de ello.

Corría demasiado rápido.

—¡VAMOS, VAMOS! ¡QUE SE ESCAPA!—gritó un hombre, y observamos como éste pasaba por el mismo camino que la chica anterior, cargaba una metralleta en su mano y otra en su espalda con dirección hacia abajo.

Cage y yo nos miramos al mismo tiempo y parecimos reacción del estado de shock en el que nos encontramos por primera vez, para después salirnos rápidamente de la camioneta y empezar a correr al igual que los demás policías y algunos agentes del FBI que se reconocían por sus chalecos con el típico nombre que los representaba "FBI".

Cage iba delante mío con algunos agentes a la par, pronto se nos unieron Jack y Bozer que no sé de dónde carrizos habían salido pero lograron ponerme más alerta para despertarme bien de la siesta en la que había estado.

—Dios, corre demasiado rápido. ¿Acaso veo a un rival de Flash?—la broma de Brozer entre jadeos por ir corriendo logró que rodara los ojos.

—Ni que lo digas. Con nueve minutos corriendo... y solo parece... comprar más rapidez...— respondió Jack de vuelta. A lo que yo sonreí sintiendo como mis pómulos se movían por lo rápido que trataba de ir y como el viento chocaba con mi rostro.

Ella siempre fue rápida.

—¡Mac! ¡cuidado!—escuché que gritaron, pero ya era demasiado tarde, ya había caído por un charco de lodo, el cual me llevo colina abajo rodando.

Algunos agentes me miraron de solsayo y siguieron corriendo, otros se pararon a para preguntarme si seguía bien, luego siguieron de largo al ver que aún reaccionaba. Los chicos iban a venir a ayudarme pero les dije un "Sigan estoy bien" y asintieron con duda para desaparecer corriendo. Motos también pasaron, pero ninguno se detuvo en mi rescate. Obviamente, nadie iba a hacerlo y perder obviamente en el proceso a la presa que bien podría ser el cazador.

Intenté levantarme y por suerte lo logré con éxito, así que seguí corriendo como los demás o hice el intento, porque en vez de correr me encontraba trotando. Solo fué cuestión de minutos para que un dolor punzante apareciera en mi tobillo, lo había doblado y por eso había caído. Empecé a moverlo de forma circular para que se disminuyera, ya que sabía que si seguía haciendo mucho enfuerzo tal vez se podría inflamar.

O ya lo estaba.

Escuché un ruido, como algo moverse entre las hojas. Así que me puse en alerta de todo, ya que prácticamente me encontraba en un bosque que ni siquiera conocía y no sabía si podrían haber animales por aquí. Avancé hasta él lugar y dí con algo.
Allí, escondida en un tronco echa un ovillo, se escontraba eso, el causante del ruido, o bien debería decir; Ella.

Eché un vistazo hacia los lados e iba avanzando lentamente y con sigilo para no ser descubierto, pero desgraciadamente mi plan falló al pisar una pequeña rama.

Maldije en mi mente al ser tan descuidado.

Ella por inercia había levantado su mirada como si fuera el propio exorcista, y cuando lo hizo retrocedió asustada.

—Alejate.—siseó con disgusto.

—No, tengo que...—No me dió tiempo siquiera de responderle porque había caído dormida al suelo de tierra.

Un agente del FBI le había disparado.

Abrí mis ojos como platos y sin pensarlo corrí a su rescate con pánico de que algo le hubiera sucedido. Pude escuchar un grito cercano diciendo un "La encontramos" como si se tratase de una victoria, y luego el responsable vino hacia mi, donde cargaba el cuerpo de ella que parecía sin vida.

—Bien hecho muchacho, ya es la octava vez que se nos escapa. —habló, como si estuviera satisfecho de su trabajo.

—¿Qué le disparó?—Pregunté viendo el lugar donde había recibido el "disparo" y notando que no era nada grave, solo era una pequeña inyección, pero que aún así lograba preocuparme y no dejar de sentir un nudo en garganta.

—Dormirá por unas horas, solo eso.—contestó el viejo planeando mi hombro— ¿Y usted? ¿Está bien? —yo solo asentí.

Los agentes y policías no tardaron en llegar al encuentro y me la arrancaron de los brazos, –literalmente–, para llevarsela cargando. Los chicos vinieron a verme con una agitada respiración y nervios seguramente a flor de piel.

—¿Mac, te encuentras bien? —preguntó Bozer con cara de preocupación al verme. Estaba ido, no la había visto desde hace años, y ahora estaba verdaderamente cambiada.

—Si, solo es por tanto correr.—respondí, restándole importancia, aunque aún seguían viéndome con duda por mi respuesta.

Ellos sabían que había sido por verla a ella. Eso no podía ser un secreto.

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Los agentes nos llevaron a una granja cerca de la comisaría y allí nos curaron algunos raspones. Otros tomaron la idea de bañarse y algunos por descansar. Al parecer no éramos los únicos que íbamos a trabajar para la misión.

Minutos después ya me encontraba como nuevo, sólo que con una cortada pequeña en la mejilla.

—Oye, ¿Seguro que estas bien? —la voz de Jack entrando hizo eco en la habitación y eso logró que saliera de mis pensamientos.

—Sí. —mentí, y volteé a ver a Jack, quien esperaba una mejor respuesta. El sabía que no lo estaba.—Es solo que me sorprendí al verla...  No... No la recordaba así hace mucho tiempo—froté mis manos en un vago intentó de relajarme.

—Bien,—él se acercó a mí, y quedó frente a frente conmigo, luego  procedió a colocar ambas manos en mi hombros.—Sabes que puedes confiar en mi Macgyver. —Dió un apretón a ellos y luego me soltó para señalarme con una sonrisa juguetona —Y nada de guardar secretos, he. —eso había sido una advertencia divertida.

—Sí, papá.— respondí siguiendo su juego, a lo que él frunció el ceño.

—¿Me estas llamando viejo?—preguntó en un tono indignado.

—Literalmente eso es lo que eres, ¿No? —comenté de manera casual, pero cuando se disponía a contestar justo en ese momento nos interrumpen.

—Chicos deben bajar, ya nos vamos a ver a la chica.—esa fue Cage.— ¿Estas bien? Estas raro desde que salimos a buscar a la chica.— mi cara seguramente parecía todo un poema por lo que ella había preguntado.

Traté de decir algo, pero de mi boca no salía nada y solo lograba apretar mis labios. El pareció notar el momento incomodo así que se apresuró a contestar.

—Sí, el está completamente bien Cage, debe ser alucinación tuya.

—¿Ok? —dijo una Cage no muy convencida, pasando la mirada de Jack hacia mi, así sucesivamente.

Luego de eso ella se dió la vuelta y salió de allí, pude sentir la mirada de Jack clavada en mi y luego como me dió una palmada.

—Vamos. —murmuró, para luego emprender camino conmigo siguiéndole los pasos.

Bajamos y nos dirigimos hacia la salida donde nos separaba la misma camioneta de hace unos minutos atrás, nos montamos y tuvimos que esperar un buen rato para llegar al lugar que habíamos acordado.

—Al fin llegaron.—la morena apareció frente a nosotros con una sonrisa—, los estábamos esperando.

—¿Quienes son ustedes? — Preguntó uno del FBI, que también acababa de llegar y se posicionaba a un lado nuestro.

—Somos agentes de la CIA.—contestó Bozer por todos, de inmediato hizo una mueca, y paso su mirada por todos nosotros.

—Bien.—dijo el hombre con un semblante serio—, siganme —obedecimos a su orden sin rechistar y al entrar al lugar habían más personas que estaban de allí para acá, algunos entrando a ver a sus seres queridos y otros poniendo una denuncia. Todo era un desastre completamente.

—Entonces... ¿Cómo decías que era ella? —Pregunta mi amigo Jack de casualidad. Ya sabia de quien hablaba, y aunque los chicos no dijeran nada estaban al tanto de todo.

—Es una persona que le gusta meterse en problemas —sonreí un poco al recordarla—, es muy chistosa, es arriesgada a todo, demasiado inteligente, diría que aún más que yo y además, no le importaría partirle la cara alguien, no le importaría ni aunque fueras de la realeza.— aunque fue una respuesta un tanto
───¿Entonces nos estás dando a entender que la razón por la que nos envió Matty fue para buscar a una "Chica Problemas"?───preguntó Cage entrando en nuestra conversación.

───Literalmente, sí.─── Contesté.

───Vaya, ¿te juntas con una chica problemas? ¿Qué más no sabemos sobre ti Mac?─── ahora fue el turno de Riley.

Absolutamente no todo.

Él hombre que nos guiaba paró de caminar y nosotros imitamos su acción.

Estábamos frente a una puerta de metal

───Entren. ───practicamenté nos ordenó con su típico tono autoritario que ya me empezaba a molestar.

En ese momento todos nos vimos como si estuviéramos hablando telepáticamente entre nosotros, al intuir que nadie pensaba entrar, el primer paso lo hice yo, para entrar seguido de los chicos pisándome los talones, y por último el agente cerrando la puerta tras nuestro. Al estar ya dentro, nos percatamos que habían unos señores y señoras conversando, y otros viendo a través del cristal. Cuando volteé la mía hacia dicho cristal, allí está ella.

Se encontraba sentada con unas esposas que cubrían sus muñecas con algunos moretones y rasguños que se podían observar a simple vista.. Estaba totalmente acabada. Mis ojos de un momento a otro me picaban poniéndose instantáneamente acuosos. Y baje un poco la cabeza para posarla en el suelo.

Todo lo que le ocurría a ella tenía que dolerme, tenía que lastimarme, me hacía sentir de una u otra forma culpable.

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esta parte ha sido la más larga espero que les guste y que lo disfruten, aquí vemos un punto de vista de mac más profundo donde da a demostrar sus actitudes en lo sentimental (si estoy mal con ello corrijanme, me gusta adaptar al personaje por lo menos un poco a su verdadera personalidad). ¡y por fin! surge el encuentro del amor trágico del pasado (okño xd)
sinceramente me parece que el encuentro fue muy pronto pero se le requería ¿ustedes que opinan?

¡nos leeremos pronto! ¡bye, bye!<3