[ Unas horas más tarde ]

[ En la casa de Jisung ]

▪

▪▪

─Es re flashero, ¿no? Tipo, estuvimos tanto tiempo juntos y ninguno se dio cuenta de lo que sentia el otro. Aunque Felix me decía que se re notaba que me gustaba ─dice Minho después de leer el último Tweet del menor.

─Para mí no se notaba.

─Ciego es el que no quiere ver, dicen.

─Tonto.

─Vos sos un pelotudo tremendo.

Jisung le dio un golpe en el brazo y Minho ríe.

Lo había extrañado tanto.

Y a diferencia de lo que esperaba, no había incómoda, todo era bastante fluido y se sentían bien, estaban contentos con este reencuentro.

─Jisung, quiero comerte la boca.

─Dejame de joder ─dice Jisung en tono de broma.

─Re arruinaste el momento.

Sin aviso previo, el menor se sube a su regazo y pasa sus manos por los hombros del mayor.

─¿Te parece que lo arruiné?

─¿Qué intentas hacer?

─Bésame ─pide Jisung y Minho lo chapa ahí nomás sin importarle nada, haciendo lo que hace tanto tiempo quería hacer.

Los dos sienten a las famosas mariposas en el estómago y aquellos emociones que tanto estuvieron reprimiendo explotaban, fluían sin miedos.

─Te quiero, tanto ─dice entre el beso el mayor, tomando el atrevimiento de comenzar a acariciar la espalda baja de Han.

─Yo también...

─¿Me extrañaste? ─Minho rompe con el beso y lo mira fijamente.

─Vamos a la pieza.

─¿Estas horny, babygirl?

Jisung lo mira con el ceño fruncido y Minho se caga de risa.

─Sos un pelotdo.

─Vamos a la pieza, amor. ─Minho le da una suave nalgada y Jisung se levanta comenzando a caminar hacia la pieza.

▪▪▪