(Flashback)

Narra Andrea:

Me levanté de mi cama después de haber caído dormida, y después estuve pensando en Abraham, mi mejor amigo, lo extraño tanto. Luego hice mi típica rutina diaria y después desayuné y me fui a la escuela. No tenía muchos amigos, a excepción de Abraham, por qué me llaman "rara".

Llegó mi primera clase: Geografía, amo esa materia, es una de mis favoritas, entré a clases y después siento qué todos me miran, pero yo los ignoro, y me siento en mi lugar.

Pasaron las horas y ya había terminado la clase, luego venía la siguiente: Francés. Después de que se terminó la clase de 1 hora, venía la siguiente: Inglés y después de 2 horas se terminaron las clases y ya podía irme contenta a mi casa. Pero en mi cabeza siempre pensaba en Abraham, me sentía triste y sola, pero recordé algo qué Abraham me dijo antes de marcharse a Madrid:

"Jamás digas eso, siempre estaré en una parte importante de tu corazón".

Luego de haber recordado la frase qué Abraham me dijo, suena el teléfono y corro para atenderlo y:

Conversación por teléfono

AS: Hola?

AM: Hola, Andrea, ¿Cómo estás?

AS:Mal, por qué te extraño tanto y siempre pienso en ti...

AM: Sabes, yo también te extraño, y siempre pienso en ti, y encontré tu teléfono y quise llamarte.... ¿Cómo va todo por allá?

AS: Bien.

AM: Andrea, tengo qué colgar...

AS: Tan pronto, bueno, hasta luego, Abraham.

AM: Ok, hasta luego, Andrea. No te olvides de mi.

AS: Nunca te voy a olvidar, hasta luego.

AM: Hasta luego, nunca te olvidaré.

Luego de Abraham colgará, subí hacía mi habitación y dejé mi mochila y bajé de nuevo y encontré a mi madre y me dijo:

Conversación

M: Mi amor, hace tiempo qué no estás feliz, ¿qué te pasa?

AS: Mami, Abraham, se fue a Madrid, y lo extraño tanto...

M: Awww, lo sé cariño, la vida es así, todo comienza bien pero siempre habrán circunstancias qué van a hacer qué las cosas cambien de rumbo.

Me quedó pensando en las palabras de mi madre, y después subo a mi habitación y caigo en los brazos de Morfeo.

Narra Abraham:

La vida no es fácil, dejar a tu mejor amiga para después marcharte hacia otro lugar, no es fácil y fue duro dejarla, y me acordé de la frase: "Si quieres a alguien, déjalo ir". Luego de que hable con ella, me dispuse a cenar con mi familia. Después de qué acabamos de comer, me senté en el sofá a reflexionar y después siento qué mi madre está al lado y me dice:

Conversación

M: Abraham, cariño, no has estado feliz últimamente, ¿qué te pasa?

AM: Bueno mamá, es Andrea, la extraño mucho, mamá, no sabes cuánto.

M: Oh, cariño, así es la vida, ocurre un giro de 180 grados y puede cambiar el rumbo de las cosas, no lo olvides, recuerda, aunque ustedes están separados por miles de kilómetros, esa hermosa amistad no se va a perder. Te dejo sólo para qué pienses.

Luego pienso en lo qué me dijo mamá, y luego siento qué Simba, mi hermoso perro se sube a mis piernas, y después lo acarició por su suave pelo, este perro sabe lo qué yo quiero. Después de unos minutos, Simba se fue, y después subí las escaleras de regreso a mi habitación, y me acuesto en mi suave y reconfortante cama, y caigo rendido en los brazos de Morfeo.