Moon ya había intentado asesinarme con el mana, sin duda debía pensar mejor en mis pasos...

Kiel no vendría de nuevo a darme clases hasta en una semana, junto con la profesora de etiqueta, por suerte podía usar el tiempo de las clases con la maestra para otras cosas, y ya tenía en mente que cosa.

"Eva, ¿puedes llamar a Andra? la tomaré apartir de hoy"

"Ya veo, pensé que la dejaría quedarse otro día más"

"Eso haría pero la necesito por la ausencia de Freya"

"ya vuelvo hija"

Unos minutos después ya estaban en mi habitación, la cual ya había sido limpiada de todo rastro de mana y me habian suspendido la terapia de exposición.

"Mi señorita, ¿que se le ofrece?"

Pregunto Andra con la misma personalidad inexpresiva que de costumbre

"Has cartas de invitación para una fiesta de té, para en tres días en esta casa, invita cada noble de está lista y envialas."

"así será..."

Estaba sumamente agradecida de tenerla, me estaba informado cada cosa que hacía Moon, pero extrañamente mi hermana estaba calmada.

Una hora más tarde Andra ya había hecho lo pedido, ya que las cartas fueron enviadas el Duque no podría detenerme a último momento aún que no tuviera su permiso.

"Quiero que escojas a las doncellas más confiables posibles y les pidas que te ayuden a preparar mi jardín"

"Claro"

Ya que no había plantas de mana había mucho espacio para plantar nuevas plantas por ello ayer le pedí a Sol que me plantara muchas rosas con espinas en el, para así no fueran arrancadas, sin importar eso quedó hermoso, aprovecharía esto para hacer la fiesta de té donde arruinaría "Accidentalmente" más la reputación de Moon, se que es una de las cosas que más le afecta, pero sobre todo quitarle lo suyo o mejor dicho lo que me pertenece.

Ya era de noche, el médico había vuelto de su hogar como de costumbre y estaba en mi habitación tomándome el pulso y haciéndome una revisión como de costumbre para garantizar que lo que anteriormente tome no traiga consigo efectos secundarios o consecuencias

"¿Feliz de volver a su casa, doctor?"

"¿me creería si le digo que no? realmente es más divertido pasar tiempo en esta casa"

"¿se está burlando de mí?"

"no, claro que no. me refiero a que me gusta cuando las malas personas obtienen su merecido, por ejemplo su hermana"

"Con que es así... ¿Por qué usted nos está ayudando?"

"¿por qué? digamos que es un secreto entre su hermano y yo"

"Sol... mi pobre demonio... espere... ¿no sé supone que era un acuerdo con el príncipe?"

"oh, si, también, digamos que los tres nos conocemos"

"Cada día me confunden más... pero confío en Sol..."

"Oh, antes de irme señorita tengo un obsequio para usted"

"¿obsequio? ¿de quedé trata?"

Al parecer si le agradaba al médico, apesar de llevarnos bien y tener buena comunicación eso no quita que tenga algún motivo, no puedo bajar completamente la guardia aunque sin darme cuenta aveces lo hago..

"Cómo doctor del príncipe Apelle tengo mi propia asistente, la cual está entrenando a otra, me gustaría que aceptará a esta última, le puedo asegurar que es de confianza, es algo tosca y violenta pero no es mala, creo que quedaría perfecta con usted"

Esto era algo difícil de decidir, ¿que podía contestar? podría ser que este hombre o chico intentaba ponerme un chivo expiatorio, ¿cómo podría estar segura de que no era una trama? debía ser totalmente minuciosa, ¿cuál sería el motivo por el cual este hom-.

"Juro que es de total confianza y le será completamente leal, no la lastimara y la apoyara si es necesario, si algo de lo que digo aquí es una mentira Dios lanzará un rayo a mi cuerpo y lanzará mi alma al infierno"

Dijo interrumpiendo mis pensamientos como si tuviera la habilidad de leer mentes, sin embargo aquel juramento habia sido demasiado, en este mundo un juramento ya sea de lealtad o que involucre a Dios es completamente verdadero, ya que se cree en este ciegamente, ¿cómo podías poner tu vida en juego solo por un juramento a una falsa villana?

"no era necesario tal juramento..."

contesté después de un suspiro

"Solo quiero que acepte mi regalo"

"Esta bien..., acepto su regalo"

"¡perfecto! mañana en la mañana estará aquí"

por alguna razón al cerrar mis ojos y escuchar la voz de el médico la confundía bastante con la de Lle y el príncipe Apelle, era como cuando estás enamorada y lo recuerdas en cada cosa sin embargo no estaba enamorada y no era un chico sino dos

"Bien, la estaré esperando, deseo que tenga un futuro muy próspero, descanse"

Dije despidiéndolo, sabiendo que talvez no lo vuelva a ver, me levanté de sofa de dónde estaba y le di la espalda para irme a acostar, pero este se lenvanto abrazándome por la espalda de la cintura y colocando su cabeza en mi hombro

"Nos veremos pronto, no necesitas despedirte"

Dijo susurrando en mi oído

¡Diooooos! ¡¿por qué me tomo de esa forma?! mi cara se había enrojecido hasta más no poder, pareciera un amante diciéndole que volverá a su amada, ¡¿por qué mierda apesar de no conocer su rostro estaba tan sonrojada, ¡su maldita sexy voz! ¡¿Qué mierda estoy pensando?! sin embargo no puedo moverme, estoy estática

No creo haber respondió pronto si no fuera por mi hermano el cual estaba en la entrada del cuarto con una cara de querer matar a todos

"Dios, llévatelo o te lo mando, mejor te lo mando"

Murmuró refiriéndose a el médico

"Tsk, ¡¿que mierda le haces a mi hermana?!"

"solo me despido"

Dijo aún abrazándome, por alguna extraña razón era como si no pudiera moverme o alguna parte de mi no lo quisiera.

"¡pues ya dejala! ¡Tsk"

Al ver qué estaba tan sorprendia que no me movía Sol se acercó furioso a mí y nos separó

"¡Que te alejes!"

El médico el cual había sido separado, de mi volvió a abrazarme y susurrando al oído

"¿Sabes que eres muy calida?"

No tuve tiempo nisiquiera de procesar la pregunta cuando mi hermano lo volvió a alejar de mi

"¡ya! te estoy vigilando"

A pesar de que Sol estuviese molesto no pareciera que tuvieran mala relación ya que este aún estando enojado y celoso no había intentado asesinar a el doctor, por más descabellado que parecería estoy seguro que de pérdida lo intentaria si no se llevarán bien o no le hubiera confianza

"b-bueno, ya."

comenté mientras abrazaba a mi hermano

"Tsk, no dejes que te vuelva a abrazar"

"perdón, no supe cómo reaccionar"

Siendo sincera me saco de órbita la actitud que había tenido el médico, era como la de un cachorrito buscando amor, con lo poco de haber hablado con el asumí que era atrevido sin embargo no conté con ese atrevimiento, ese tierno y algo sexy lado suyo, ¡Eso de susurrar en la oreja mientras abrazas a alguien por la espalda no debe ser! le quita la ternura a la situación y puede confundir la situación

"Bueno, creo que dormiré aqui, para cuidarte de este"

"Cómo quieras, pero... ¿por qué estás aquí?"

"Moon ya tiene una semana sin usar los productos de limpieza de la emperatriz, entonces se me ocurrió una idea después de escuchar sobre tu fiesta de té"

"¿que cosa?"

"es mi turno ¿no?"

pregunto el misteriosos médico del cual no conocíamos su rostro

"así es"

¿a qué se refieren? ¿desde cuándo me excluyeron de la plática?

"¿A qué se refieren?"

"Es mi turno de ayudarlos"

Dijo aquel hombre contestando mi pregunta mientras se retiraba la capucha y con esta la magia que lo cubría