Eso fue lo ocurrido, desde ayer esto provocó más rumores así, afectandola no solo superficialmente si no emocionalmente.

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"Duque, no hemos encontrado más pruebas, sin embargo todas las que tenemos apuntan a su hija menor, y no hay duda de ello"

"¿que insinúan?"

pregunto el Duque enojado a Kiel y Kemp

"Ya que de quien hablamos es su hija dejaremos que usted decida cómo manejará la situación, sin embargo nosotros ya hemos dado como culpable a Moon, así que por lo menos esperamos que reciba algún castigo, puede que haya sido una broma entre hermanas, así que puede tomarse el lujo de no excederse."

Dijo Kemp

"Sin embargo... queremos que sea castigada, no divulgaremos la información, será totalmente confidencial y tampoco llevaremos esto a un tribunal, pero esperamos sea castigada para asegurar que su segunda hija no viva de injusticias, o de tal modo tendríamos que llevar el caso al emperador..."

"Tsk, déjenme pensarlo"

al irse el Duque golpeó con el puño el escritorio a manera de desquitar algo de su estrés.
Los chicos lo estaban presionando para castigar a Moon, en el fondo el sabía que era la culpable pero lo negaba para el mismo y los demás.

Asi que el Duque decidió realizar un último interrogatorio

"Llamen a la doncella de mis ambas hijas, se llama Andra"

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"¿Sabes algo sobre lo que pasó con las plantas?"

"no, mi señor"

"... ¿piensa que Moon es la culpable?"

"No, mi señor. No tengo conocimiento sobre este tema"

"Ya veo, puedes irte".

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"¿Cómo está la señorita Luna?"

pregunto Eva después de terminar sus quehaceres

"Dentro de lo que cabe, bien. Se mira pálida, casi muerta pero está viva."

Contesto Sol

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Había pasado un día desde que Kiel y Kemp le habían dado un ultimátum al Duque, y este ya se hacía presenté para "castigar a Moon" y evitar llevarla a un tribunal con el emperador

"He venido a informarles mi decisión, he decidido castigar a Moon ya que las pocas pruebas lo indican y no quiero hacer de esto algo más grande, talvez fue una broma que salió mal o lo que sea y no soportaría perder a mis dos hijas. Esto será privado, por lo que pido que no se difunda, para mantener la reputación familiar, la culpa será dirijida a una doncella cualquiera, así que los invito a hacerce presentes como testigo de la reprimenda"

Dijo el Duque inmediatamente al entrar a la habitación donde se encontraban Sol, Kemp, Kiel, Freya, Eva y el doctor del segundo príncipe

Todos asintieron y agradecieron al Duque por hacer justicia para la señorita mayor de la casa.

Una hora después todos se encontraban en la oficina del Duque, incluyendo a la señorita Moon

"Hija mia, como padre es mi deber castigarte al hacer algo mal, está vez te has pasado un poco de la raya, por lo que te asignare un castigo, ya que las pruebas apuntan a ti"

"¡Padre yo n-

"Suficiente, apartir de ahora se te limitará el dinero que se te brinda mensualmente y se cancelara la suscripción que tienes de productos de higiene personal de la emperatriz, ya que es demasiado dinero, tendrás que usar productos para alguien de tu estatus."

Moon lloraba realmente, los productos que compraba eran muy caros, eras los mismos que usa la emperatriz, eran un perfume, pasta dental, shampoo, aguas con esencias y propiedades para la piel, y todo por la maldita de su hermana ¡¿cómo podría conquistar al príncipe heredero sin el cuidado especial que tiene su piel?! ¡era indignante! ¡nunca le habían prohibido ni quitado nada! ¡se supone que la que le arrebata sus cosas es Moon a Luna!

"¿alguna objeción u opinión?"

pregunto el Duque

"Si, padre. Creo que hablo en nombre de todos cuando digo que debería aumentar algo más al castigo, mi hermana está casi que se muere ¿cómo puede castigarla solo con eso?"

El duque se llevó la mano a la cara, se sentía algo mariado y confundido

"¿Eso creen Glacés?"

Ambos hermanos asintieron, así que el duque no tenía de otra más que aumentar algo más al castigo

"Bien, no más fiestas de té, no puedes ir ni hacer alguna hasta en 2 meses"

"¿Esta bien así?"

Sol y los chicos asintieron, el Duque se sentó en su asiento con un gran dolor de cabeza y le pidió a todos que se retiraran, incluyendo a Moon la cual lloraba inconsolablemente

Rápidamente se fueron a la habitación del menor para hacérselo saber a Luna. Al llegar estaban contentos ya que todo había resultado bien, incluso mejor de lo pensado. Al castigar a la hija menor de la casa Soleil con no asisitir a eventos las personas creerán que no sale por qué los rumores son ciertos y tiene miedo, entre otros rumores que podrían surgir, sumándole que la reputación de Moon ya había caído en tan solo dos días un tercio de esta. Este era solo el inicio de la venganza, Luna tenia muchas cosas planeadas que se le ocurrieron en su encierro y estaba decidida a realizarlas todas.

Al entrar a la habitación Sol fue rápidamente con su hermana y el misterioso médico encapuchado detras de el.

"Hermana, lo hicimos"

Dijo mientras sostenía la mano de su hermana

"joven maestro, ella aun no despierta..."

Agrego con algo de pena Freya

"Tsk, ¿que diablos? ¿que espera?"

"Joven maestro Sol, no es algo que ella controle"

Dijo Eva tratando de apasiguar al desesperado menor

"Tsk, dale la medicina"

Ordenó a el misterioso médico del cual no había mostrado aún su rostro

"Sol, acabamos de darle el té que necesita, si le damos la pastilla ahora mismo podría tener consecuencias en su cuerpo"

Afirmó el médico

Sol chasquio su lengua y se fue a recostar en el sillón boca arriba y preguntó:

"¿Tardará mucho en despertar?"

"Primero necesita haber pasado tiempo de tomar el té, y después implementar la pastilla si no lo hace por si misma"

Contesto el médico antes de sentarse en la cama tomando la mano de Luna

"Se que eres el médico pero no deberías tomarle la mano... ¿no es algo muy íntimo?"

Pregunto molesto Kiel el cual estaba recargado contra pared

"Si, es inapropiado. Nisiquiera sabemos exactamente quién es usted, ¿acaso es una hada mágica que la puede curar con solo tocarla?"

Agrego Kemp

El médico no pudo evitar sonreír dentro de su capucha

"Tsk, nisiquiera tu puedes tocar a mi hermana. ¿quien te crees que eres? nadie es digno de ella así que mantengase alejados"

"solo le tomo el pulso a la señorita"

Ambos chicos se sonrojaron ante esto, estaban algo avergonzados pero seguían con la guardia alta, todos menos Sol el cual le dio igual y cerro los ojos tratando de conciliar el sueño en del sofá

"Bueno, yo opino que no deberían de adelantarse y dejen al médico hacer su trabajo"

Dijo Eva, la cual estaba juntando unas cosas en la habitación

"Eva... dejé allí, mis doncellas pueden hacerlo"

dijo Sol algo molesto de verla limpiar

"Oh, recordé una historia que trata sobre una chica que se enamora de su doctor así que finge estar enferma para irlo a visitar, al final ambos se enamoran tienen hijos y viven felices para siempre"

Dijo Freya mientas se imaginaba la novela en su mente hasta que noto la mirada asesina de todos los chicos allí presentes, a excepción del medico al cuál no se le miraba la cara

"uy pues perdón, yo solo quería recordar la novela que leí"

"disculpe, muchacho a todo esto, ¿por qué no podemos ver su rostro? aún que intentemos es como si no hubiera nada"

pregunto Eva mientras se sentaba en el sofa

"Disculpe si la incómoda madam, pero es gracias a la magia, es por cuestiones de seguridad"