Al parecer el príncipe lo noto, paro de caminar y me hizo una petición

"¿podrías aceptar este collar?"

Saco de su bolsillo un collar con una gema azul que convinaba perfectro con el color de mis ojos con patrones que solo Riel Mawnear podía realizar, no entendía lo que pretendía pero lo acepte algo confundida

"Si"

El príncipe por fin me bajo de sus brazos, tenía los pies entumecidos por no moverlos anteriromente, pensé que se había cansado así que le diría que regresarnos para evitar las flores que atravesariamos, para mí sorpresa tomo el collar y se puso detrás mío preguntándome

"¿puedo ponerlo, señorita Luna?"

Voltee mi rostro, nuestras miradas se encontraron, desvíe la miraba y accedí

Coloco el collar desde atrás en mi cuello y después tome mi cabello mandándolo hacia enfrente de mi para despejar mi cuello, pude sentir el pequeño roce de sus cálidas manos, provocando que mi piel se erizara

"Listo, ahora sí podemos seguir"

estaba apunto de pedirle que nos detengamos por las plantas pero antes de que lo hiciera agrego

"Confía en mí, podemos caminar por aquí. No te preocupes por las flores con mana"

Era como si hubiera leído mi mente, pero cada vez que el hablaba no podía evitar mirarlo a sus ojos que eran como dos rubis, sentía como me hinoptizaban cada vez más

"Esta bien"

Pensé que seguiramos caminando así que avance un paso pero antes de dar el segundo ya estaba de vuelta de los brazos de Apelle

"¿seguro de que quiere seguir cargándome?"

"por supuesto, esto es realmente un placer"

dijo con una media sonrisa algo atrevida característica de el

Seguimos caminando y por alguna extraña razón no me afectaron para nada el mana en las flores, empecé a pensar en el por qué cuando recordé el collar, así que tome valentía y le pregunte al príncipe el cual me llevaba aún en brazos

"El mana en las flores no me afecta, ¿el collar tiene algo que ver?"

pregunté mirándolo a la cara, el me devolvió la miraba y me contestó

"Por el momento mantendramoslo en secreto, pero siempre use solo el collar al salir de su cuarto y no en el, hasta que se lo diga, luna"

Bueno, esas palabras trajeron muchas dudas, la primera ¿esto es valioso? si es así ¿por qué me lo da a mi? ¿por qué solo desde de salirse mi cuarto? ¿que hace el collar? y ¿desde cuándo me habla sin honoríficos?, mi cara expresaba completamente mis dudas, provocando una pequeña risa en Apelle

"Por el momento solo te diré que el collar neutraliza el mana que esté a un metro alrededor de ti, es solo algo que encontró una sirvienta así que no es valioso, no te preocupes, no me debes nada"

Pero el local de Riel acaba de abrir, esto es algo que acaba de ser realizado, ¿cómo lo puso encontrar una sirvienta?

"Esta bien"

decidí ignorar esto por el momento.

No sé cómo o cuando terminamos hablando alegremente sobre plantas con mana y venenos como si se tratase de lo más común del mundo, literalmente no note que ya habíamos caminado por toda la mansión hasta que el duque apareció repentinamente en la entrada.

El duque tenia cara de quererme matar, se encontraba  furioso obviamente tratando de ocultarlo, Al verlo mi sonrisa termino y la del príncipe igual, realmente me sentía tan cómoda que olvide que me estaba cargando, al parecer a Apelle tampoco le importaba ya que no se miraba con intensión de bajarme.

Rápidamente volví a mis sentidos

"Segundo príncipe, ¿podría bajarme? ya estamos de nuevo en la entrada"

Apelle me contestó que si dándome una sonrisa para rápidamente volver a su actitud seca con los demás, lo noté en cuanto me bajo

" y bien... ¿Cómo se la paso con mis hijas?"

Pregunto algo nervioso el Duque, Moon la cual estaba esperando al parecer en la puerta salió poniéndose al lado de su padre con una gran sonrisa esperando la respuesta agregando antes de que Apelle contestara

"Debió disfrutar mucho estar con mi hermana, Luna es como una mucama, siempre que la necesitas allí está ayudándote"

Dios, ¿cómo note hasta hace apenas poco tiempo que Moon era una víbora? No me molestaba que me llamara como quisiera si no sus intenciones, si intentaba molestarme para que hiciera algo estúpido no le daría el gusto

No comenté nada al respecto, de cierta forma me daba igual lo que creyera el príncipe, al final de cuentas no teníamos nada que ver el uno del otro solo habíamos charlado un poco.

"Me la he pasado en excelente compañía gracias a su hija mayor. Será una excelente Duquesa"

Dijo Apelle ignorando el comentario irrelevante de Moon, y rápidamente agregando

"Oh, también con su otra hija, por supuesto"

Aún así podía segur burlándome por dentro de la expresión de Moon y el duque

Moon intento cambiar el tema invitando al príncipe a comer de unos pastelillos muy famosos en la capital, los cuales le acaban de llegar

"hermana, ¿también te quieres unir?"

Pregunto Moon con una sonrisa

"No me gustan mucho las cosas dulces, prefiero pasar, si a su alteza no le molesta"

Contesté esperando que el príncipe accediera para ir a mi habitación

"Lo siento pero tenía pensado charlar un poco también con el joven Sol Soleil, ¿se encuentra en la mansión?"

No podía aguantar mucho la risa de ver a Moon rechazada, nisiquiera había había movido un dedo para ello eso lo convertía en algo más satisfactorio

"Entiendo, en otra ocasión puede ser"

Contesto Moon de nuevo enojada y avergonzada, lo más divertido era verla tratando de ocultarlo

"Sol está en su habitación, lo mandaré a llamar"

Agrego algo enojado padre indicándole a Ciel que fuera a traerlo

"No sé preocupe duque, si no le molesta y no hay inconveniente quisiera hablar con su hijo en su habitación"

"Por su puesto, su alteza, le diré a una sirvienta que lo acompañe"

Agrego el Duque tratando de quedar bien con Apelle

"Esta bien"

Contesto el príncipe. Moon decidió entrar junto al príncipe, el duque siguió detrás, el príncipe dio unos pasos al frente cuando se detuvo volteando hacia atrás y estirarme su mano

"Vamos"

me dijo con una sonrisa mientras me extendía su mano para que la tomara y lo acompañará, provocando un leve sonrojo en mi, no podía negarme así que tome su mano y entramos a la casa.

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Ya me encontraba en mi habitación, Apelle insistió en acompañarme hasta la puerta de mi habitación para después retirase al cuarto de mi hermano ignorando al duque y a Moon, era algo explendido de ver.

Freya la cual había regresado a la habitación desde antes para "arreglar unas cosas" tenía una expresión de orgullo, estaba segura de que había regresado solo para dejarme sola con el príncipe pero decidí no molestarme por eso y lo deje pasar.

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Un mes después

Habían sucedido varias cosas, o más bien dicho desarrollado, alrededor de todo el imperio se hablaba sobre "L" el cual se decía que era una hombre, y un genio. Andra no había obtenido información importante para utilizarlo contra Moon, Riel Mawnear abrió su local de joyas al nombre de "Joyería  L" provocando más incertidumbre por saber quién se ocultaba detrás del seudónimo, las ventas también eran demasiadas volviéndose moda las joyas de Riel entre otras cosas que habían sucedido y allí estaba yo, por fin fuera de la mansión, en el local de Riel el cual era muy grande y atractivo mucho más del que se mencionó en la novela.

Estaba esperándolo sin que lo supiera mientras observaba maravillada sus obras