
Capítulo 8: Amiga
POV JULIE
Nuevo día de escuela, Jessica parecía ignorar a Mike, aunque que le era difícil hacerlo, me hace sentir orgullosa, por lo menos le había dado algo de amor propio.
(...)
Estaba en el aula de artes cuando de la nada Alice se sienta a mi lado haciéndome guardar por inercia mi teléfono, pues como había llegado antes me puse a escribir ideas para mi libro. Maldije por lo bajo.
Nota mental, el celular no se puede utilizar en la escuela.
— Hola — dijo con una expresión curiosa, pero sin dejar de ser alegre.
— Hola, Alice — dije siguiendo con la conversación, aunque me distraía un poco su apariencia de hadita.
—Julie… ¿qué piensas de nosotros? — dijo de la nada sorprendiéndome.
—¿De ustedes el pueblo o de ustedes los Cullen? — dije intentando pensar en qué decir, pero al final todo se reducía a ser sincera.
—De mi familia en general… — dijo con más interés, aunque podía sentir la presencia de otros vampiros no muy lejos de aquí.
—Bueno… son una gran familia, se complementan… creo que se llevan muy bien — ante eso frunció un poco el ceño en señal de confusión.
—¿qué? — expresó con total sorpresa.
—Bueno, Rosalie es hermosa, tiene un poco de mal carácter, pero me agrada que sea sincera con lo que siente, es orgullosa y creo que toda mujer tiene que ser así, fuerte. Emmet parece ser problemático, pero muy alegre y hasta cierto punto sencillo, ya sabes, además de que es divertido, tiene un gran humor — dije sincera y ella sonrió — Esme es justo la persona que creía que era, amable por naturaleza, un gran ejemplo de madre, amorosa y atenta, empática, algo me dice que mi madre hubiera sido así… — dije recordando los retratos de mamá, donde estaba siempre sonriendo con mucho amor — por otro lado… Edward no es una mala persona, pero siento que es una persona que se frustra y se autosabotea, vive en un mundo monótono de tristeza y es muy controlador… por ahora es lo que pienso, ya que no lo conozco muy bien… — dije y ella rio.
—Para ser una primera impresión, es un análisis muy acertado — dijo Alice y oí un gruñido leve de molestia. — bien, sigue, esto ya me está pareciendo divertido. — dijo animándome a continuar.
—Bueno, Jasper me parece muy educado, inteligente — “yo también lo soy” susurró un Edward molesto — parece que tiene un severo problema con las multitudes, ya sabes agorafobia, pero me alegra descubrir que tiene el valor para enfrentarlo, se controla muy bien a mi parecer, aunque creo que ustedes como familia lo han ayudado mucho y lo impulsan constantemente, son su fuerza. — ante eso ella me sonrió.
—Supongo, me alegra que pienses eso — dijo feliz.
—Por otro lado, estás tú, realmente pareces el alma de la familia, alegre, por tu forma de vestir me queda claro que te gusta estar a la moda, tienes un gran estilo, también pareces de otro mundo… creo que eres la más potencialmente apta para integrarte en la escuela, pero sigo sin entender por completo el por qué no lo haces, aunque creo que eso va enlazado por el hecho de que a veces pareces estar en tu propio mundo. — dije y ella rio — con respecto a su padre, el doctor Cullen, no lo conozco, así que no puedo dar mi opinión.
—Wow, pareces una gran observadora, hasta podría decir que eres psíquica — dijo ella.
—Sería interesante serlo, pero no lo soy, solo pongo atención, he aprendido del mejor en la materia para poder observar un poco más allá en las personas — dije y ella pareció tener un leve cambió en su expresión, pero se repuso casi al instante. Pero no miento, bendito el día que conocí la serie y a Patrick Jane.
—Interesante — dijo sonriendo de forma traviesa.
—A todo esto ¿por qué querer saber mi opinión? — pregunté directamente.
—Me da curiosidad saber como piensas, ya que eres un tanto… distinta — dijo y justo comenzaron a llegar los demás alumnos junto con la profesora.
Me centré en la clase, al final por ahora se trataría de pintar algo al azar, para medir nuestras capacidades, al final, inconscientemente terminé pintando a mi padre y Luke, pero era el padre que tuve en mi anterior vida… eso me hace pensar, lo destrozado que debió sentirse, ahora mismo, yo tengo a Charlie… pero él…
Nota: Por si no lo recuerdan, Luke es el novio que tuvo Julie en su vida pasada.
Sabía que Luke estaría al lado de papá un tiempo, por su personalidad, pero no sabía qué haría mi padre a estas alturas, si algo malo paso, la ansiedad y coraje me invadieron, por lo que salí de ahí rápidamente, llevándome mi dibujo, la profesora parecía sorprendida, pero eso era lo de menos…
Volví al salón de música, que estaba nuevamente vacío, me puse en cuclillas y coloqué el cuadro a un lado de mí, estaba tan sumida en mis recuerdos y sentimientos, que no me percataba de lo que pasaba a mi alrededor…
—Julie… ¡Julie! — dijo alguien colocando su mano sobre mi hombro, su voz preocupada me regresó de golpe a mi realidad. Fue entonces que me percaté que me encontraba hiperventilando, entonces alcé la mirada y me encontraba con Jasper, parecía muy afectado.
—¿J-Jasper? ¿qué haces aquí? — dije una vez pude pronunciar algo coherente.
—Solo… no importa, tu no estás bien — dijo sin quitarme la mirada de encima. — te llevaré a casa.
—Estoy bien — dije desviando la mirada, volviendo a mi pintura — además, tenemos que terminar el trabajo después de clases — dije y me volví hacia él.
—Eso lo podemos hacer mañana, queda tiempo, pero tienes que descansar. — dijo insistente en persuadirme.
—No sirve de nada, estaré bien — dije levantándome y tomando mi cuadro — ahora tengo que ir a mi última clase.
—Julie, las clases ya terminaron — dijo una voz a mis espaldas, Edward se encontraba parado en el marco de la escuela. — no te sientes bien… vamos, podemos llevarte.
—Tengo mi motocicleta, no es necesario — dije caminado a la puerta para salir.
—Julie, piénsalo bien, no tenemos problemas con llevarte… — dijo Jasper mientras me seguía.
—Chicos, necesito estar sola — dije viendolos mientras apretaba mi puño, necesitaba calmarme y alejarme de Jasper, él antes no percibía mis sentimientos y ahora que bajé un poco la guardia está abrumado — y ustedes necesitan alejarse de mí. — ante mis palabras pusieron una clara expresión de sorpresa. — no quiero lastimarlos, soy algo violenta cuando estoy en este estado. — mis palabras parecieron calmarlos.
—No nos has hecho daño — dijo Edward.
—Jasper parece ser muy empático… — ellos se tensaron — no quiero abrumarlo.
Después de eso salí de ahí lo más rápidamente posible, cuidando que pareciera humana. Caminé al estacionamiento, me tendría que calmar primero y después tendría que pasar a comprar algo para pedirles disculpas por mi actitud grosera… Subí a mi motocicleta aferrándome a mi pintura sin esfuerzo, tendría que ocultarla en mi maleta antes de que tío Charlie la viera.
Aceleré y salí como si estuviese siendo perseguida, tenía ganas de correr, pero me tenía que abstener a la velocidad que me permitía usar mi motocicleta, fue entonces que me percaté que realmente estaba siendo perseguida por dos vampiros persistentes ¿no se supone que Jasper tenía que estar con Alice? Podía entender la curiosidad de Edward, ya que es insistente en averiguar lo que pasa en la cabeza de los demás, pero ¿Jasper?
Me desvié un poco entrando a un costado del bosque, manejando directamente a una pequeña montaña a gran velocidad, cuando ellos se dieron cuenta ya era tarde, había saltado dando giros a la perfección, eso me ayudó a descargar un poco la adrenalina de mi cuerpo; aterricé justo al otro extremo del camino, no había nadie más, lo que fue una suerte.
Me relajé más cuando estaba por llegar a casa y los vampiros dieron la vuelta en dirección a contraria. Subí las escaleras, dejé mis cosas y admiré por ultima vez el cuadro, antes de guardarlo en la versión moderna de mi habitación.
Corrí al bosque liberando mi naturaleza fanalis, me sentía libre.
Nuevamente corrí, se me hacía una necesidad para aliviar la frustración.
Pronto llegó el momento de volver, ya que iría a terminar de una vez por todas el trabajo con Jasper. Me tensé cuando estaba a punto de llegar a casa, pues los chicos se encontraban cerca, mi cabello volvió rápidamente a negro y oculté mi aroma ¿es que acaso nunca se cansan? Bueno, son vampiros, al final era evidente la respuesta.
Antes de que notaran mi presencia abrí un portal y debajo de mí, cayendo en el pasillo, fue un golpe estruendoso, que seguramente escucharon, por lo que tuve que fingir que me había caído y quejarme un poco por el dolor, esto era realmente vergonzoso. Bien, era hora de marcharme a casa de los Cullen, bajé las escaleras, tomé un poco de dinero y me encaminé a mi motocicleta.
Me dirigí a una velocidad moderada a una cafetería, para comprarle algo a tío Charlie. De camino a la casa de los Cullen pasé a dejarle comida, él me sonrió y pronto me presentó a sus compañeros, era momento de avisarle lo del trabajo, para que estuviera tranquilo.
—Tío Charlie, creo que ya tengo que irme, iré a casa de un amigo a hacer un trabajo — vi que me miraba con escrutinio, por lo que sonreí con gracia y le di el informe completo — es en la casa de la familia Cullen, tan pronto termine regresaré, no creo que tardemos — dije y me sonrió.
—Me alegra que hagas amigos Julie, pero recuerda que siempre te voy a cuidar, no quiero atosigarte por ser tan protector — dijo un poco nervioso.
—Tranquilo, realmente me agrada esa sensación, ya sabes, saber que alguien se preocupa por ti, por tu bienestar es, bueno, agradable. — dije abrazándolo, fue entonces que se percató de mi motocicleta.
—Sé que eres una maravillosa conductora, pero me mantendría más tranquilo el hecho de que utilices un auto en vez de eso — dijo y me reí.
—Tranquilo tío, después de todo, tomo precauciones — dije y casi podía sentir a Edward rodando los ojos. Si tanto le fastidiaba podía irse en vez de acosarme.
—Ve con cuidado — dijo dándome un último abrazo — suerte… y háblame cuando salgas camino a casa. — dijo y yo reí mientras asentía.
Nuevamente me subía a mi motocicleta, yendo directo a la casa de los Cullen, donde Jasper y Edward ya se encontraban fuera de la casa, aunque solo se miraban mutuamente sin decir nada. Jasper estaba a punto de decir algo, pero Alice salió y corrió hacia mi para recibirme con un abrazo.
—¡Hola, Julie! — dijo y sentí que realmente estaba siendo aceptada por ella.
—Hola, Alice — dije confusa al decir su nombre, se sentía distinto.
Realmente estaba lista para ser rechazada por esta agradable duendecita, y es que me sentía un poco fuera de lugar tras la actitud anormal de Jasper, pero ella parecía feliz, pero confundida a la vez, no estaba segura de sí había visto algo, si lo que vio decía demasiado y casi nada, no pude evitarlo y entré en su cabeza, me sorprendió un poco, solo me mostró a mí con mi sutil cabello rojizo magenta, salí antes de ver algo más, era suficiente, vio mi forma real.
—Bien — dijo Alice mirando en dirección a los chicos — sé que han de tener tarea, pero puede esperar — dijo segura y los chicos me miraron impactados cuando fui arrastrada por Alice a su auto.
—Alice — intentó decir Jasper.
—Tranquilos, estaremos bien. — dijo y me miró — ella no está en condiciones de hacer tarea.
—No creo que sea correcto… — intentó convencerla Edward.
—No nos sigan, porque lo sabre — dijo y arrancó el auto, dejándolos atrás.
Comenzó a conducir y nos alejamos de los chicos y la casa Cullen rápidamente.
(…)
—¿Alice? — dije volviendo a la “realidad” por así decirlo.
—¿sí? — respondió tranquila.
—¿por qué me secuestraste? — dije con curiosidad.
—No es secuestro, estabas consciente y no te opusiste, estoy segura — dijo como si lo hubiese razonado de más.
—Bueno, entonces ¿por qué me alejaste de mi libertad? — dije cambiando la pregunta.
—No ibas a estar libre con ellos ¿o sí? — no quitó los ojos del camino, aunque en mi opinión, era por que no quería verme a la cara ya que no sabía cómo tratar conmigo.
—No te ofendas, pero quería terminar con la tarea lo más pronto posible para librarme de todos los problemas — dije sin más y ella sonrió.
—Lo dices por Rosalie — dijo con gracia.
—Es correcto — dije sopesando el evitar la respuesta, ya que Eduardo no resulta muy silencioso.
—No entiendo mucho tu situación, pero sé que eres una gran persona, me agradas — dijo mientras llegábamos a las afueras de Forks.
—¿mi situación? — indagué, no sabía qué tanto sabía ella, pero en realidad no sabía exactamente si ella podía saber que era una reencarnada.
—No sé cómo explicarlo… — dijo pensativa — creo que sabes lo que somos, no sé con exactitud cuanto sabes, pero si estás al tanto de que no somos humanos… — dijo mirándome de reojo para ver mi reacción, que no cambió mucho.
—No te entiendo — dije haciéndome la desentendida.
—Por supuesto que lo haces, incluso podría asegurar que tu tampoco eres humana — dijo frenando y mirándome con un puchero y algo de reproche.
—Bien, me rindo — no tenía caso, si me pudo ver en una de sus visiones con mi cabello rojo, era imposible de negar. — sí, sé que son vampiros y que no soy tan humana como presumo e intento aparentar.
—¡lo sabía! — dijo feliz mientras avanzaba.
—Creo que hay que buscar donde estacionarnos — dije y ella sintió.
Instantes después, logramos encontrar un lugar donde pudiésemos estar a solas, ella se estacionó y suspiré, necesitaba bajar del auto, sentía que me asfixiaba estando dentro. Pero antes de poder bajar, ella me tomó del brazo con algo de fuerza.
—Tranquila, no pienso escapar, solo quiero tomar aire — dije y ella relajó su expresión y también salió del auto.
—Lo siento, es que me inquieta no poder ver lo que va a pasar con respecto a ti — dijo sincera y sonreí.
—No hay problema, por otro lado — comencé a quemar un poco de salvia, si bien servía para muchas otras cosas, es primordial para la privacidad cuando seres sobrenaturales están al acecho.
—¿qué es eso? — preguntó con interés.
—Es salvia — dije y me miró raro, me encogí de hombros — después te explicaré, bien, yo no soy humana, soy un ser sobrenatural hibrido hasta cierto punto — dije y me vio con interés — soy una Magi — me miró raro — una bruja por así decirlo, y tengo cierto poder que es difícil de explicar, por eso lo englobo en la definición de bruja.
—Las brujas… entonces ¿por qué tu cabello-?… — dijo sin lograr entender por completo y dejando la pregunta a medias.
—Mi cabello de color anormal es porque soy una fanalis — dije y me miró extrañó, me reí y proseguí a explicarle — una fanalis es… bueno somos conquistadores del continente oscuro, somos de los guerreros más poderosos… — ante eso me volvió a mirar con extrañeza, era más difícil explicarlo de lo que pensé.
—Creo que estoy más confundida — dijo sacándome de mi disputa mental.
—Es que, era tan simple para mí que es difícil de explicar — dije cayendo en cuenta mientras pensaba — un fanalis es un ser excepcional y no lo digo porque sea uno — dije y ella rio — somos seres con fuerza extrema, podemos hacernos mucho más fuertes con entrenamiento, somos veloces y nuestras patadas son mortales, al ser hibrida gozo de estar rebosante de magoi, que es una energía vital en el cuerpo… ¿Qué más? Se caracterizan por su pelo rojizo, el mío parece más magenta, también podemos pelear de forma extraordinaria, aprendemos rápido en ese sentido. Claro que no somos inmortales. — dije y me miró como si estuviese procesando la información.
—Entonces… tu padre… — dijo en su intento de deducción.
—No, todos en mi familia son normales, humanos comunes y corrientes — dije segura.
—¿entonces como sabes que eres eso? — dijo más confundida.
—Pues deberás tener la mente muy abierta si quieres entenderlo — dije y ella asintió — soy una reencarnada. — dije y ella quedó en shock.
—Pero… se supone que después de morir no hay nada… eso es todo… el fin del camino o bien el paraíso prometido — dijo intentado procesar lo que le decía.
—Bueno, para la gran mayoría si resulta ser el final del camino, pero para mi, resultó ser solo el inicio de muchos otros — dije y me miró extrañada.
—Espera ¿me estás diciendo que esta no es la primera vez que reencarnas? — exclamó.
—Si… creo que es… si, esta es mi octava vida — dije segura.
—Entonces debes tener unos 700 años — dijo impactada.
—¡¿qué?! ¡claro que no! — dije sorprendida de su afirmación. — en todas mis vidas, por muy extraño que suene, nunca llegué a pasar de los 25 años, apenas tengo 160 contando esta vida — dije y ella se sorprendió.
—Esta bien… creo que puedo entender el por qué tu forma de ser es distinta — dijo pensativa — ¿puedo ver el color de tu cabello una vez más? — dijo con interés.
—Supongo — dije encogiéndome de hombros y revelando mi llamativo cabello, su expresión era todo un poema, estaba impactada y emocionada a la vez. — solo una cosa… — dije y ella me miró sin entender — tienes que evitar que Eduardo vea los recuerdos de esta conversación — ella me miró sorprendida.
—¿Cómo sabes cuál es su don? — exclamó con interés.
—Intentó hurgar en mi cabeza, lo noté y antes de que lo lograra lo paré en seco. — dije con autosuficiencia.
—Pero no tengo tu poder Julie — comentó con gracia.
—Estas en lo cierto — dije dándome cuenta de lo obvio. — ¡ya sé! — exclamé contenta.
—¿Qué cosa?
—Bueno… — dije sacando un collar (dejo la imagen al final) — no puedo proteger todo lo que pasa en tu cabeza, pero si puedo hacer algo respecto a estos últimos sucesos. — dije mientras me concentraba y comenzaba a brillar el collar.
—No me vas a borrar la memoria ¿o sí? — dijo a la defensiva.
—Eso sería muy fácil, pero realmente me agradas, no quiero borrar estos momentos de confianza contigo — dije y sonrió — Toma y póntelo — dije y lo hizo al instante. Me concentré y comencé a transmitirle los recuerdos a proteger al collar. — eso será suficiente — dije mientras mi cabello volvía a ser como antes.
—¿Qué sucedió?
—Este collar, protegerá tu memoria de cualquiera que intente hurgar en tus recuerdos conmigo, pondrá otros recuerdos, no importa que tan expuesta estes pensando en lo que te dije o mostré, todo será opacado por momentos de compras y platicas sin sentido acerca de la escuela Charlie o mi familia — dije y me miró con sorpresa.
—Eso es muy inusual — dijo y asentí.
—Si… no me gusta que sepan mucho, pero supongo que es lo que muchos han oído, y es mejor que la maldición que lleva mi alma — dije y me miró con sorpresa.
—Supongo que entiendo — dijo y yo sonreí, tal vez podía comprender un poco, pero no todo, no en su totalidad. — ¿qué es lo que no entiendo? — la miré con sorpresa — tu expresión dice que no es cierto del todo.
—Supongo que es así… tus amigos mueren y tu no puedes morir con ellos y es triste… pero… yo no solo vi morir a seres que amaba… ellos podían morir y sabía muy en el fondo, que ya estaban descansando, que estarían al lado de sus seres amados, que se reencontrarían con alguien allá, donde quiera que fuesen… pero yo no… definitivamente yo no los volvería a ver, por más que muriera, estaría lejos de encontrarlos… y después… cuando yo moría antes que ellos, el ver su sufrimiento instantes antes de mi partida… no importaba cuanto deseaba aferrarme… siempre me iba… yo fui su única ancla… y lo dejé, tengo miedo de saber cómo vivió… si sigue vivo... o si murió a causa de la tristeza… si me olvidó… — dije y pronto sentí como me envolvían sus brazos, eran fríos sin duda, pero de una forma muy extraña de explicar, me transmitían cierta calidez.
—No estás sola… me tienes ahora a mi ¿no? — dijo y agradecí el haber confiado en ella…
Tal vez me quedaba poco tiempo en este mundo también, unos cuantos años más y todo acabaría para mí, podría ascender libremente… me alegraba de haberla conocido. Sabía que esta era una razón más para no lamentar esta vida, ayudaré un poco a algunas personas, para que cuando llegue el momento, deje este mundo con tranquilidad.
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Gracias por leer, les traeré el siguiente muy pronto 💜🥰 ya tengo internet 💕
Este vendría siendo el collar que le dio a Alice.
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