En el capitulo anterior: Después de reencontrarse con Jiren, nuestro protagonista continuó con su viaje hacia el mundo real logrando abrir una puerta a través de la pared del multiverso saliendo de este y accediendo a un plano superior el megaverso o metaverso, el cual era un túnel en que se hallaban todos los multiversos con sus respectivos 12 universos, los cuales eran una linea temporal en si, cada uno con su propia versión de la historia (incluyendo los fanfics de dragon ball, si señor), entonces cuando nuestro protagonista se disponía a abrir un portal a través de la pared del megaverso para acceder a un plano superior a este, se topó con el demonio Demigra quien estaba bastante herido y debilitado tratando de absorber la energía de un multiverso para recargarse, esto de inmediato alertó a nuestro protagonista quien luego de sostener una breve, pero intensa batalla mandó a Demigra de vuelta a su multiverso para que los guerreros Z locales se encargaran de él. Después de este altercado Black volvió a casa para alertar a Kyabe, Kale y Caulifla de lo sucedido y tomar un plan contingencia para el futuro.

De regreso a la Zona 0 comencé a reflexionar respecto a lo sucedido durante varios minutos, hasta que de pronto Kale salió de la sala de entrenamiento bastante sudada y con su ropa rota, entonces al verme me dijo:

- Black ¡Esta habitación está genial! - lanzándose a abrazarme - no sabes lo mucho que disfruté entrenar ahí, es realmente increíble y lo mejor es que puedo emplearme a fondo sin temor a destruir algo, simplemente perfecta - dándome un beso en la boca.

- Oh, que bueno que te haya gustado, Kale.

- No espero para contarles a Kyabe y mi hermana sobre este lugar – hiperactiva - será fantástico entrenar los 4 ahí ¿No crees?

- Claro mi amor, claro... - pensando.

- Por cierto, mi amor ¿Qué hiciste en este rato? – preguntó la saiyajin.

De inmediato una expresión de seriedad se dibujó en mi rostro y le dije:

- Eh... Kale.

- ¿Qué ocurre amor?

- Tengo que decirte algo, respecto a lo que hice y sucedió mientras tu entrenabas.

- Claro dime – dijo Kale atenta.

- Mientras entrenabas me puse a meditar para viajar entre dimensiones y hallar la forma de llegar a la dimensión de la que yo vengo.

- ¿Y cómo te fue? – preguntó ansiosa.

- Pues tengo una buena y una mala noticia ¿Por cuál quieres que empiece? – le pregunté.

- La buena.

- Ok – dije – la buena noticia es que logré salir de este universo y del multiverso, por lo que en principio si puedo acceder a planos superiores por lo que en teoría podría llegar a mi realidad, pero no sé si mi poder sea suficiente ya que a medida que vas subiendo de plano cada vez necesitas más poder para romper las paredes y acceder al nivel superior y todavía no estoy seguro de cuantas paredes haya que atravesar para llegar a mi mundo.

- Interesante, y... - preocupada - ¿Cuáles son las malas noticias?

- La mala noticia es que cuando estaba a punto crear un portal para salir del metaverso o túnel de los multiversos, sentí una presencia maligna, entonces fui a investigar para saber de quién se trataba y descubrí que era Demigra.

- ¿Demigra? ¿Quién es Demigra? – se preguntó la morena.

Entonces de inmediato le expliqué:

- Si mal no recuerdo él es el rey de los demonios del Universo 7, pero al parecer este Demigra venia de otro multiverso parecido al nuestro y parecía ser un villano muy poderoso, aunque estaba debilitado cuando me lo encontré y así que sostuvimos un breve combate y lo mandé de vuelta a su multiverso, pero la verdad no estoy seguro si los guerreros de ese multiverso sean lo suficientemente fuertes como para vencerlo, entonces es probable que él vuelva para vengarse.

- Oh no, eso se oye terrible, entonces tendremos que avisarles a los demás y prepararnos – dijo Kale.

- Así es, vez que tenía razón cuando te dije que algún día aparecería un villano poderoso – le recordé.

- Es cierto – dijo Kale.

- Pero primero ve a asearte.

- Cómo tú digas Blacky – sonriendo.

Luego de esa pequeña charla Kale fue a bañarse, mientras yo me puse a meditar para concentrarme en el ki de Kyabe y Caulifla e intentar contactar con ellos telepáticamente, entonces les dije mentalmente:

- Muchachos.

A lo cual Kyabe y Caulifla contestaron:

- ¿Quién es? ¿Black eres tú, cierto?

- Sí, soy yo, necesito que vengan a mi ubicación enseguida, pasó algo grave.

- Ok, enseguida vamos – contestaron ambos.

Pasaron unos 5 minutos aproximadamente cuando sentí el ki de ambos cerca, entonces los contacté de nuevo y les dije:

- Están cerca, si se fijan bien en el suelo verán una escotilla, entren y yo los estaré esperando en la puerta.

- Ok – dijeron ambos.

Ambos Saiyajin se abrieron paso por la escotilla hasta llegar a la gran puerta blindada de la cual salí para recibirlos, entonces Caulifla me preguntó:

- ¿Y esto?

- Lo construí yo – dije con orgullo.

- ¿Cuándo? – preguntó Kyabe.

- Como hace 1 hora atrás más o menos.

- Increíble – dijo Caulifla.

- ¡Oh! Pero dónde están mis modales, pasen, pasen y siéntanse como en casa.

- Gracias – dijeron ambos invitados.

- Por cierto, Caulifla ¿Recuerdas que antes me pediste un lugar para entrenar?

- ¿Sí? – dijo ella.

- Pues ahí está - apuntando a la sala de entrenamiento.

- Parece pequeña – dijo la peli punta.

- Pues no lo es – dije entre risas.

- Oye Black, ¿Para qué nos llamaste? – preguntó Kyabe.

- Lo olvidaba – poniéndome serio - era para informarles de una amenaza inminente para la cual nos tenemos que preparar, pero antes esperemos a que Kale termine de bañarse, por mientras pueden sacar algo para comer en la despensa que está por allá - apuntando a la despensa.

Kyabe y Caulifla se levantaron a buscar algo para comer mientras que yo me quedé sentado en el sofá pensando, hasta que sin previo aviso salió Kale del baño con una toalla en la cabeza y otra cubriéndole el cuerpo, entonces me preguntó:

- Amor ¿Qué ropa me pongo?

- No te preocupes ponte esto, tu ropa de siempre me encanta - haciendo aparecer ropa nueva con magia en el suelo.

- Gracias, Blacky.

- Con todas estas cosas que he estado creando de la nada estoy evadiendo impuestos como loco ¿No crees? – dije entre risas.

- Pues tienes razón Black – rio la morena.

En eso Kale se agacha para tomar sus prendas, pero de pronto su mirada cambia a una más coqueta y en lugar de tomar su ropa se me queda viendo, entonces le pregunté a la joven saiyajin:

- ¿Qué sucede amor, acaso tengo algo en la cara?

Pero Kale no contestó así que yo insistí:

- Eh... Amor, col rizada, Kale loca, hola ¿Por qué me miras con esa cara me asustas?

- Porque te amo Blacky.

- Aww, gracias – contesté.

Luego Kale se quitó la toalla del cabello para transformarse en Super Saiyajin 2 dejando caer su toalla y quedando completamente desnuda frente a mí, de inmediato me sonrojé y Kale comenzó a acercarse lentamente a mí, mientras yo retrocedía lentamente en el sofá, hasta que Kale se hallaba a tan solo 1 metro de mí, entonces me dijo bien risueña:

- No te escaparas de mí.

- ¿Eso crees traviesa? – tramando algo.

Pero Kale se lanzó sobre mí a la velocidad de la luz sin darme tiempo a reaccionar y comenzó a abrazarme y besarme apasionadamente para después preguntarme:

- ¿Eres cosquilloso Black?

- Un poco – dije temeroso.

A lo cual Kale contestó con malicia:

- Pues en ese caso...

Sin dudarlo ni un segundo Kale comenzó a jugar conmigo haciéndome cosquillas en todo el cuerpo, mientras que yo me encontraba impotente clamando piedad:

- Jajaja... No... Jaja... Por favor... Jajajaja... Detente... Ah... Jajaja...

- Con que quieres más ¿Eh? Pues que así sea – insistió.

Kale siguió haciéndome cosquillas hasta que con las pocas fuerzas que tenía en ese momento logré hacerle cosquillas en vientre haciéndola reír, entonces le dije:

- Parece que también eres cosquillosa, mmm... Este juego lo pueden jugar 2, entonces ¡Prepárate!

- Oh no – dijo Kale.

Fue así como empezamos una breve, pero intensa guerra de cosquillas entre los 2 hasta que finalmente Kale intentó inmovilizarme con sus brazos y piernas quedando frente a mí, de inmediato me sonrojé al verla sobre mí con su cuerpo completamente desnudo y tonificado, entonces cuando estábamos a punto de besarnos, Caulifla nos interrumpió:

- Cof, cof ¿Qué están haciendo los 2?

- ¡Hermana! – dijo Kale sonrojada - No sabía que estabas aquí.

- Ups – dije avergonzado - se me había olvidado decirte que mientras te estabas bañando había contactado telepáticamente a Kyabe y Caulifla.

- Y yo que pensaba que estábamos solos – dijo Kale avergonzada y tapándose con la toalla.

- Perdón amor fue mi error – le dije juntando ambas manos en señal de perdón - por cierto, Caulifla ¿Encontraron la comida?

- Uf hace rato – contestó soplándose un mechón de pelo - lo que pasa es que los escuché haciendo cosas raras y me quedé viéndolos por un rato - riendo.

- Y ¿Cuánto viste? – pregunté sonrojado.

- No mucho – dijo la peli punta - solo se estaban haciendo cosquillas jaja... Por cierto, ahí viene Kyabe con la comida ¡Apúrate!

- ¿Siquiera podrías ayudarme? – se quejó el pequeño saiyajin.

- Tsk, te quejas por todo – dijo Caulifla tomando los tazones con snacks.

Kale y yo reímos por eso y luego la saiyajin dijo:

- Bueno, mejor me visto rápido para que nos cuentes todo... Oh que vergüenza – sonrojada.

- Tranquila Kale, yo me encargo de eso – le dije.

Usé mi magia para secar a Kale y hacer aparecer la ropa nueva de esta en su cuerpo quedando completamente vestida:

- Oh, gracias, Black – dijo con sorpresa.

- Por nada - nos damos un pequeño beso en la boca.

Entonces nos sentamos alrededor de la mesa y Caulifla me preguntó:

- Muy bien Black ¿De qué nos querías hablar?

- Sobre lo que vi en mi viaje interdimensional.

- Ok – asintieron todos.

- Les cuento, hace casi una hora atrás comencé a experimentar con mis portales para tratar de llegar a la dimensión de que yo provengo.

Todos asintieron y yo continué:

- Por fortuna todo fue un éxito, logré salir de este universo y visitar a Jiren, el cual por cierto les manda saludos a todos ustedes.

- ¿QUEEEÉ? – preguntaron todos.

- Tal como lo oyen – reafirmé - visité a Jiren, después de eso seguí investigando tratando de abrir un portal para salir del multiverso lo cual conseguí sin mayores complicaciones, pero es ahí donde empiezan los problemas, cuando estaba a punto de romper la barrera del túnel de los multiversos, metaverso o como le llamen, sentí un ki maligno debilitado, pero aun así poderoso, entonces fui a investigar de qué se trataba y era nada más ni nada menos que Demigra el "Rey de los Demonios" del Makai del Universo 7, el cual estaba aparentemente absorbiendo la energía de un multiverso para recuperarse, pero luego de un breve e intenso combate logré frustrar su cometido y mandarlo de vuelta a su multiverso de origen, pero tengo el presentimiento de que algún día volverá y con su fuerza completa lo cual supondrá una amenaza no solo para nosotros, sino para todos los multiversos.

- ¡Oh! – dijeron todos con sorpresa.

- Por ello creo que es necesario que nos preparemos bien para contrarrestar esta amenaza en el futuro – continué.

Por su parte Caulifla dijo en tono desafiante:

- No me importa que tan poderoso sea ese tal Demigra, jamás dejaré que destruya nuestro universo, comenzaré a entrenar de inmediato ¿Qué dicen ustedes?

- Estoy de acuerdo – dijo Kyabe.

- También yo – contestó Kale.

- También estoy de acuerdo contigo Caulifla – dije yo - y por esa razón fue que creé ese cuarto de entrenamiento - apuntando hacia la sala de entrenamiento - que Kale tuvo el honor de estrenar, para que puedan entrenar de forma intensiva y personalizada sin limitaciones ni daños colaterales, de esa forma podrán sacar a relucir todo potencial.

Cosa que Kale confirmó:

- Habla enserio, ese cuarto es fantástico.

- Entonces ¿Qué esperamos? – dijo Caulifla con entusiasmo - ¡Comencemos con el entrenamiento!

Y yo intentando entrar en razón dije:

- Paciencia Caulifla, todavía no conocemos a ciencia cierta el hipotético máximo poder de Demigra y como ustedes sabrán en un combate la fuerza bruta no lo es todo, el trabajo en equipo, la estrategia y las habilidades especiales también juegan un rol importante, por lo que aumentar nuestra fuerza no es suficiente garantía como para asegurarnos la victoria.

- Entonces ¿Qué piensas hacer? – preguntó Caulifla.

- Muchas cosas – contesté - estoy pensando en experimentar en la Zona 0 para descubrir y dominar nuevas técnicas que podrían ayudarnos contra Demigra, también estuve pensando en crear un ejército con los guerreros más fuertes de los 12 universos y también pedirles a las razas más débiles que construyan armas poderosas para que también puedan ayudarnos frente a un eventual ataque de Demigra, la idea es abrumarlo por todos los frentes y no darle la oportunidad de atacar.

- Mmm... Me parece un buen plan – dijo Caulifla - pero lo encuentro rebuscado ¿No crees que es más fácil entrenar y seguir aumentando la fuerza?

Y yo contesté:

- Mira, en el corto plazo eso es lo mejor, pero no importa, por ahora entrenen tranquilos... Del resto me encargo yo.

- Ok, vamos Kale y tú Kyabe ¿Vienes con nosotras?

- Claro señorita Caulifla.

- Oye Black ¿De verdad no quieres entrenar con nosotras? – insistió Caulifla.

- No se preocupen por mí, todo a su tiempo, ahora quiero experimentar con nuevas técnicas, pero necesito un conejillo de indias para probarlas así que uno de ustedes tendrá que quedarse ¿Quién se ofrece?

De inmediato Kale dijo:

- Bueno yo podría, pero...

- No Kale – la interrumpí - no quiero experimentar contigo.

- Entonces Kyabe será tu conejillo de indias – dijo Caulifla.

- Sí, Kyabe – apoyó Kale.

- ¡¿Qué?! – cuestionó Kyabe.

- Está decidido – sentencié - Kyabe tendrás que quedarte conmigo.

- O... Ok Black – dijo el pequeño saiyajin nervioso.

- Bien, entrenen todo lo que quieran, después nos veremos – le dije a las chicas.

- Ok, suerte – dijeron ambas saiyajin.

Kale y Caulifla entraron a la sala de entrenamiento mientras que Kyabe se quedó conmigo, entonces el pequeño saiyajin me preguntó:

- ¿Y qué clase de experimentos realizarás conmigo?

- Nada doloroso, ni sádico – dije.

- Eso espero – dijo Kyabe temblando.

- Ven, sígueme – le dije.

Kyabe y yo entramos a la Zona 0 para iniciar con mis experimentos.

Continuará...