Capítulo 75

El Momento que lo Cambió Todo

Me encontraba subiendo por las escaleras de la biblioteca todavía pensando si había sido buena idea aceptar la invitación de Dolan, nuestro encuentro hace un momento fue un desastre, no pude reaccionar como había planeado y al final terminé actuando como una simple adolescente enamorada

"de haber sabido que esto iba a ser así hubiera ido más directamente con Faririel..."

Al llegar a los pisos superiores los guardias me dejaron pasar como de costumbre, incluso me dejaban pasar cuando el consejero no estaba, como hoy por ejemplo, fue un alivio ya que aún no sabía si había hecho mal en decirle a la maestra Agath sobre lo de Endor y lo último que quería ahora es a Rakk insultándome. Al entrar al piso fui directamente a las escaleras y subí hacia la habitación de Endor, tras llamar a la puerta un par de veces escuché un gruñido adormilado y entonces entré, tan solo habían pasado un par de días desde la última vez que vine y el lugar ya parecía un basurero, había ropa, restos de comida y botellas de alcohol por todos lados aunque después de tanto tiempo ya no me sorprendía en lo absoluto, por otro lado Endor se encontraba durmiendo en el sofá con un libro de comedia en la cara

"¿alguna vez habrá utilizado su cama para dormir?"

-Endor... ¡Endor!

-¿mn?

-¡despierta!

-que ruidosa eres... ¿tienes idea de la hora que es?

-¡son las 5 de la tarde! ¡No es hora para dormir!

-tch...

Aun medio dormido y algo molesto Endor se levantó y caminó hacia el baño donde se lavó la cara y regresó un poco más despierto aunque igual de molesto

-¿y bien? –Dijo él -¿Qué quieres?

-hay un par de cosas que necesito discutir, la primera es, ¿te encontraste con la maestra Agath?

-así que fuiste tú la que le conto de mi verdad? Debí saberlo...

-¡oye nadie me dijo que debía mantener el secreto!

-¿esa es tu excusa?

-...no, la verdad es que la maestra me encontró luego de que mi mana oscuro se saliera de control en la universidad, ella me dejó ir a cambio de contarle sobre ti

-así que te descontrolaste...

Endor frunció el ceño mientras pensaba en lo que yo le había dicho, parecía que le preocupaba mas mi descontrol de mana que la maestra

-ah, pero no te preocupes, desde ese día no he tenido problemas en controlar mi mana. Más importante aún, ¿¡qué pasó con la maestra!?

-vino y trató de verme pero por suerte los guardias no la dejaron pasar, armó un escándalo en la entrada, ya daba por hecho que golpearía a los guardias y echaría la puerta abajo pero por suerte el viejo llegó y le dijo que se fuera

-vaya... ¿de verdad es tan importante mantenerte en secreto?

-no realmente, era necesario el día que fui poseído y perdí el control ya que había mucha gente molesta con el incidente, si se hubieran enterado de que me dejaron ir con vida seguramente habrían intentado hacer justicia ellos mismos

-pero entonces la maestra...

-el viejo la echó porque vino armando escándalo, es típico de ella

-ya veo...

"supongo que estaba ansiosa por ver si Endor de verdad estaba vivo..."

-¿y bien? ¿Es todo lo que tenías que decir?

-bueno... no, ¿recuerdas ese problema que tenía... con el mana oscuro y Dolan y demás?

-oh no aquí vamos de nuevo... ¡no soy tu consejero del amor!

-Pues intenté solucionarlo diciéndole a Dolan que se alejara de mí y que no me hablara más pero eso ocasionó que mi mana se saliera de control y entonces exploté destrozando una de las aulas de la universidad

-¿oye me estas escuchando? Espera, ¿explotaste?

-más o menos, fue como una onda expansiva de mana oscuro, fue poderosa pero me dejó sin energías, el caso es que ahí fue cuando apareció la maestra Agath y tuve que hablarle de ti para que no me expulsaran

-¿y dices que esto ocurrió solo por decirle a ese chico que se alejara de ti? Vaya, debe gustarte mucho

-¡no me...! Yo solo...

-¡oh! Así que no lo niegas

-si lo hago mi mana se sale de control...

-¿y se supone que ignorar a ese chico te ayuda a controlarlo? Te dije que si querías optar por esa opción lo mejor es que hicieras las maletas y salieras de la ciudad

-¡como si pudiera irme así nada más!

-¿y qué pasó con lo de tu amiga? ¿No dijiste que ibas a viajar a Valadhiel a buscarla y regresar en menos de un mes?

-eso... tomará un poco más de tiempo llevarlo a cabo...

-que fastidio... solo ve con ese chico y declárate de una vez, así me dejas de molestar a cada rato

-¡a eso quería llegar! ¡Lo haces sonar como si fuera tan sencillo pero no lo es!

-espera, ¿de verdad lo has intentado? Jajaja ¿Cómo se siente decirle a un hombre que lo amas? Jajajaja

-¿¡porque te ríes si fuiste tú quien me dio esa opción!? Además, en el mundo del que vengo las relaciones amorosas entre hombres no eran tan raras sabes?

-¿de verdad? ¿Y entonces porque te resulta tan difícil involucrarte en una?

-¡pues...! Porque... este cuerpo es un cuerpo de mujer

-¿y qué? No es lo norm... ah, ya entiendo... tienes miedo verdad?

-...

- Claro claro... desde luego te comprendo ahora, sentimientos y besos son cosas de niños, lo que te aterra son las relaciones íntimas y el hecho de que si sigues por ese camino algún día quedarás embarazada y tendrás que dar a luz un bebe

Solo de pensar en lo que decía Endor me ponía la piel de gallina, desde que me di cuenta de que había renacido como una niña me preocupé de lo que eso significa, cosas como la pubertad fueron mis primeras preocupaciones y en algunos casos una verdadera tortura, sin embargo nada de eso se compara al terror que siento cuando pienso en cosas como el sexo o el parto, dicen que el primero duele y el segundo duele aún más, ¿Por qué alguien quería pasar por eso voluntariamente? Yo estudiaba medicina así que puedo entender muchas cosas al respecto pero no por eso significa que quiera experimentarlo

-si yo estuviera en tu lugar también estaría asustado... y asqueado... sobretodo asqueado...

-¡eso no me ayuda!

-como sea, ya sea por orgullo o miedo la cosa no cambia, si no quieres explotar de verdad ve y dile a ese chico lo que sientes o vete de la ciudad

-uh...

-también podrías considerar el asesinato, hace varios años conocí a una mujer que disfrutaba asesinando a sus esposos

-¿¡qué clase de locas conoces!? ¡No voy a matar a Dolan!

-pues bien asunto resuelto, ve a buscar a tu amado y yo regresaré a dormir, no te molestes en contarme como te fue

Como si ya hubiera terminado la conversación Endor regresó a dormir esta vez usando su cama y cubriéndose con una sábana de pies a cabeza

-¡espera, aún no he terminado! necesito que me ayudes a encontrar una manera de poder hablar con Dolan sin que mi cuerpo reaccione como una adolescente enamorada

-¿has pensado en el alcohol?

-¡no estoy bromeando!

-yo tampoco

-¡no voy a emborracharme! ¡Eso seguramente terminaría muy mal!

Endor suspiró de cansancio y se sentó en la cama, se frotó la cara en un gesto de fatiga y luego volteó a verme seriamente

-escucha, no me interesan tus problemas amorosos, ni siquiera un poco, me da exactamente igual que te cases con ese chico o que te quedes soltera el resto de tu vida, la única razón por la que escuché tus problemas es porque esto afectaba a tu control de mana oscuro y porque era entretenido en un principio

-...

-sin embargo todo esto ya dejó de ser divertido para mí, te he dado múltiples opciones pero no quieres ninguna, incluso te he dicho lo que tienes que hacer y aun así sigues buscando la manera más fácil de hacerlo, ya deberías saber que la vida no es tan sencilla, nadie va a llevarte de la mano y a resolver todos tus problemas

Sinceramente no me esperaba una reacción así de Endor, desde el principio actuó borde y decía estar disgustado con mis problemas pero al final siempre me escuchaba y me ofrecía soluciones, ahora sin embargo parece estar realmente cansado de mí, su reacción me hizo sentir mal y al principio sus palabras me molestaron un poco pero solo porque eran todas verdades. Pensé que lo mejor que podía hacer era disculparme mientras reía, sacar una broma para restarle importancia o actuar ofendida mientras cambiaba de tema, aun así... lo único que salió de mi boca fue un leve "lo siento" y salí de la habitación si decir nada más, una vez fuera de la biblioteca me detuve en la entrada y pensé que quizá debía regresar y disculparme más apropiadamente pero supuse que hacer eso solo lo molestaría aún más así que dejé a un lado esa idea y comencé a caminar hacia mi casa pensando que quizá mañana podía volver y hablar más tranquilamente, aunque al final pasó el resto de la semana sin que me acercara de nuevo a la biblioteca...

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La semana se pasó rápido, quizá más de lo que hubiera deseado, sobretodo porque no tenía ningún plan para la excursión a la aldea Eun, además después de pensarlo un poco creo que Yhisel no era la mejor opción para llevar conmigo, en cuanto le mencioné que iríamos a una excursión a la aldea Eun ella se emocionó, luego le dije que también iría Dolan y su expresión se derrumbó alegando que no quería ser el mal tercio... de inmediato la corregí recordándole una vez más que Dolan y yo no tenemos ninguna relación romántica y traté de convencerla nuevamente, no es que confiara mucho en ella, la mencioné porque fue la primera que se me vino a la mente pero desearía traer a alguien más confiable para este tipo de casos, alguien como Libni por ejemplo, aunque ella parece estar muy ocupada y casi no le he visto últimamente, al final ella aceptó venir pero noté una sonrisa maliciosa que no me da mucha confianza...

Sábado por la mañana, el supuesto día de la excursión... me desperté incluso antes de que saliera el sol, o mejor dicho no pude dormir en toda la noche, supongo que es una reacción normal en alguien que esté muy ansioso por el amanecer, en mi caso sin embargo era todo lo contrario, me sentía como ese día en mi vida pasada cuando debía presentarme a hacer el examen de admisión en la universidad de medicina con la duda de si había estudiado lo suficiente como para aprobar... solo que en este caso tenía la sensación de no haber estudiado nada

Lo primero que hice fue darme un baño y luego comer algo, curiosamente Batler ya estaba levantado para cuando yo bajé al comedor y amablemente se ofreció a preparar el desayuno para mí aun cuando el resto de la familia aun no aparecía, luego simplemente me tocó esperar sin más ya que no habíamos acordado una hora en específico...

Poco después el resto de la familia bajó a desayunar y dado que a Yhisel se le había ido la lengua con lo de la excursión tuve que soportar a mi tía y a Korand haciendo suposiciones y hablando de las numerosas citas que tuvieron en el pasado...

Al final después de un par de horas que me parecieron eternas escuché el sonido de un carruaje y poco después apareció Dolan en la puerta, cabe destacar que mi tía y Korand no tardaron ni un segundo en atender la puerta e invitar a pasar a Dolan al salón principal, mientras tanto yo estaba frente a la habitación de Yhisel esperando a que terminara de arreglarse, ni siquiera quería saber que era lo que estaban hablando ahí abajo pero conociendo a ese par seguramente Dolan ya debe estar abrumado...

-Airen... prima en serio no me digas que así es como iras vestida...

En cuanto Yhisel salió me miró de pies a cabeza y pude ver el horror en su rostro, no creo que fuera para tanto pero entiendo lo que dice, ahora mismo me puse uno de mis trajes de practica de invierno, se trata de un pantalón y camisa manga larga de color azul claro bastante acolchados para proporcionar calor pero no tanto como para reducir el movimiento, además llevo mis dos espadas...

-no puedo creer que vayas a ir así a tu primera cita...

-ya te dije que no es una cita, vamos a ir de excursión a una aldea de las afueras, esto es lo más indicado

-¿y qué hay de las espadas?

-podría haber bandidos

-¡eso es absurdo!

-¿ah sí? ¿Y qué hay de ti? ¿Que se supone que llevas puesto?

Normalmente hubiera esperado que Yhisel saliera vistiendo algo muy revelador pero para mi sorpresa no fue así, simplemente se vistió con una falda inusualmente larga y una camisa manga larga de tela gruesa y de un color gris soso... parecía que le había pedido la ropa a una señora mayor humana y lo único que parecía ser suyo era el abrigo largo que llevaba

-¿de dónde sacaste esa ropa?

-es prestada, ya que es tu cita no quería llamar mucho la atención

"haa... sabía que esto pasaría..."

-como sea... vamos

Cuando bajamos al salón mi tía y Korand arrugaron el rostro al vernos, sobre todo al ver a Yhisel, Dolan sin embargo parecía feliz de que por fin llegáramos, el vestía un poco más formal con una camisa blanca de tela sencilla y un pantalón de color azul oscuro, también traía una chaqueta del mismo color que el pantalón pero con los botones y detalles bordados de color dorado, además de unas botas negras hasta las rodillas. Tal parece que tenía ganas de irse ya que nada más vernos se levantó y sin perder la educación se despidió rápidamente de mi tía y de Korand, luego caminó hacia la puerta abriéndola para que saliéramos, se le veía la ansiedad en la cara

Una vez fuera noté que el cielo estaba bastante opaco y puesto que últimamente ha estado nevando mucho el suelo está cubierto de varios centímetros de nieve, frente a la casa nos estaba esperando un carruaje que parecía ser de alquiler lo cual me hizo pensar que si la familia de Dolan era tan rica debían tener varios carruajes, ¿entonces porque Dolan tendría que alquilar uno? Quizá no quería llamar la atención de su padre y tener que explicarle a donde iba. Me subí al carruaje y luego Yhisel, por último se subió Dolan sentándose en enfrente de mi lo cual me hizo desviar la mirada hacia la ventana y adoptar una pose desinteresada

-¿Cuánto tardaremos en llegar? –pregunté

-alrededor de dos horas –dijo Dolan

-ya veo...

-...

El carruaje empezó a moverse y yo mantuve la vista hacia afuera todo el tiempo, y no es que me interesara ver las calles nevadas de la ciudad, simplemente me era más fácil no interactuar con Dolan si solo miraba la ventana, el recorrido dentro de la ciudad no fue tan mal ya que Yhisel se encargó de mantener una conversación con Dolan, lo único malo es que poco después de salir de la ciudad los temas de conversación se le estaban acabando y empezaba a sacar temas de cualquier lado

-¡ah! ¡Cierto prima! Mañana cumples 16 no es así?

-¿ah sí? Lo había olvidado

-¿Cómo puedes olvidar una fecha así? ¿No se supone que en Valadhiel ya podrías casarte si quisieras?

Al decir esto Dolan mostró claramente su interés aunque rápidamente disimuló cuando yo giré para enviar una mirada de advertencia a Yhisel, lo último que quería era que Yhisel empezara a conspirar contra mi tan pronto. A raíz de esto las conversaciones se detuvieron y el resto del recorrido fue tedioso y aburrido, tampoco había mucho que ver en el exterior ya que todo el paisaje estaba nevado

Poco más de una hora después por fin nos detuvimos pero aun no veía la aldea, simplemente paramos en una posada al lado del camino, asumí que era para descansar pero tampoco me pareció un viaje tan largo o agotador como para detenernos, dicha posada era bastante grande, una cabaña de dos pisos y varios carruajes y carretas alrededor, algunas de ellas repletas de cadáveres de animales y trozos de carne congelados seguramente producto de la caza

-¿Por qué paramos? –preguntó Yhisel

-en invierno el carruaje no puede seguir hasta la aldea debido a la nieve, hay que caminar

-¿en serio? De haberlo sabido me habría puesto otros zapatos...

"te lo advertí..."

Bajamos del carruaje y lo primero que noté fue el viento frio que recorrió mi cuello, hacía mucho más frío que en la ciudad y la ropa que había elegido para venir no era suficiente para mantenerme caliente así que empecé a usar magia para rodearme del aura de calor aunque manteniéndola solo en la parte superior de mi cuerpo o de lo contrario derretiría la nieve y mi ropa se mojaría, por suerte había traído botas ya que mis pies se enterraban en la nieve, quien no lo estaba pasando bien era Yhisel, su abrigo era bueno pero el resto de su ropa era delgada, podría solucionar eso con magia pero sin botas no iba a tardar en congelarse los pies, al final tuvo que pedir prestadas un par de botas en la posada aunque no dejaba de comentar lo feas que eran...

Comenzamos a caminar por la ladera de la montaña, el lugar era bastante montañoso y frondoso, al estar cubierto de nieve no había mucho que ver pero de alguna manera me recordaba a la selva negra de Alemania, quizá por la cantidad de abetos aunque no es un bosque tan denso... por lo menos este último trayecto fue más entretenido ya que Dolan se dedicó a guiarnos mientras Yhisel y yo conversábamos, de vez en cuando pasaba gente ya sea del lado contrario o en la misma dirección nuestra, la mayoría de los que venían la aldea cargaban grandes piezas de carne y cuando le comenté eso a Yhisel Dolan se apresuró a responder, parece que los Eun son uno de los proveedores de carne de la ciudad ya que son muy buenos cazadores por naturaleza, también parece que debido a las últimas nevadas los transportistas han tenido que cargar la carne todo el camino desde la aldea...

Al final nos llevó alrededor de media hora comenzar a ver casas, en cuanto vi la primera me emocioné y corrí para ver si encontraba a un Eun, al acercarme a la pequeña cabaña escuché un sonido de alguien cortando leña y al asomarme por el otro lado vi a un chico con un hacha, aparentaba unos 14 años pero teniendo en cuenta lo rápido que crecen seguramente tenía menos que eso

-¡un Eun! –Yhisel apareció detrás de mí y emocionada corrió a abrazar al chico como si de un animal doméstico se tratara, él escuchó los pasos de Yhisel, se dio la vuelta rápidamente e instintivamente saltó hacia atrás, luego al ver que no se trataba de algún peligro bajó la guardia y Yhisel lo atrapó para comenzar a acariciarlo

-e...espera, ¿¡quién eres!?

El pobre chico estaba confundido y forcejeaba para liberarse de Yhisel aunque por lo que me pareció a mí no estaba poniendo mucho esfuerzo en ello

-Yhisel déjalo ir ya

-perdón perdón, es que es taaan lindo~

Yhisel soltó al chico y aunque él ponía una cara de molestia estaba rojo como un tomate, yo al ver ese característico pelo color plata y esos ojos azul Zafiro no pude evitar pensar en Nimie y debido a la nostalgia también terminé abrazándolo, por lo menos hasta que salió su madre molesta preguntando por la leña, nos disculpamos por las molestias y seguimos adelante

A medida que avanzábamos había cada vez más casas y también más gente, para cuando llegamos a la aldea mi emoción estaba por los cielos, soñaba con la oportunidad de traer a Nimie aquí y verla relacionarse con los de su especie. La aldea no era excesivamente grande pero seguramente pasaba de los 100 habitantes, Dolan nos llevó a hacer un recorrido alrededor en el que vimos un poco como era la vida de la genta aquí, la mayoría de las personas presentes eran mujeres, niños y ancianos, según Dolan esto es porque la casi todos los hombres jóvenes se van de caza. Luego de dar una vuelta por la aldea pensamos en relacionarnos con sus habitantes y pese a que los adultos eran un poco distantes no tenían problemas en mantener una conversación con nosotros, algunos incluso llegaron a reconocer a Dolan y hablaron maravillas del padre de Lévan, por otro lado los niños eran curiosos y no tardaban en acercarse, se les veía alegres y amigables además de juguetones, la vida en esta aldea parecía ser bastante agradable y tranquila,

-hay una posada en la que podemos descansar, luego hay algo que quiero mostrarles y que seguro las va a sorprender

La posada a la que entramos tampoco era muy grande y la mayoría de las personas dentro eran elfos, al parecer son los que trabajan con la carne y están esperando a que los Eun traigan la segunda carga de alimento. El lugar era bastante cálido y acogedor aunque sin ninguna duda lo que más me gustó fue la comida, comí lo que podría ser el guiso de carne más delicioso que haya probado en mi vida

Un par de horas después salimos de nuevo, esta vez fuimos a un lugar cerca de la aldea que parecía ser una escuela en la que enseñaban a los niños como cazar y demás, aunque actualmente no había nadie ahí

-¿esto era lo que querías mostrarnos? -Preguntó Yhisel –es interesante pero desde luego no me sorprende

-por supuesto que no –respondió Dolan –solo nos detuvimos aquí porque estaba de camino, lo que quiero mostrarles está más adelante

Seguimos caminando y pronto vi un lugar que parecía una granja, por la valla y las sillas de montar pensé que sería de caballos pero en cuanto nos acercamos un poco al establo unos rugidos ya nos advertían que no se trataba de caballos, no fue sino hasta entrar que pudimos ver de lo que realmente se trataba

-¿¡estas bromeando!? ¿¡Esos son sables!?

Mi sorpresa era inimaginable al ver frente a mí un grupo de enormes felinos color plata con esos característicos colmillos gigantes, me tomó un segundo recordar lo que había leído en el libro que tenía Reilam sobre lo extremadamente agresivos y peligrosos que eran los sables y de inmediato retrocedí hasta ponerme detrás de la pared, Yhisel incluso se había escondido detrás de un árbol a unos cuantos metros de distancia

-Airen tranquila –dijo Dolan –están domesticados

-¿domesticados? nunca había escuchado que alguien domesticara sables...

-no son precisamente sables, son una raza similar, más pequeña y menos agresiva... digamos que son primos de los sables, los Eun los han estado domesticando desde hace casi 100 años, escuché que los trajeron desde Rácir

-...

-y esto es lo mejor, ¡puedes montarlos!

-¿¡en serio!?

-¡ni sueñes en que voy a subirme a esa cosa! –gritó Yhisel desde la distancia

-hola, ¿en qué puedo ayudarles? -De pronto un hombre Eun salió del establo, no parecía feliz de que estuviéramos haciendo ruido frente al establo

-hola, no sé si me recuerdes pero hace algunos años solía venir aquí con mi amigo

-ah... si ya me acuerdo, no suelen venir muchos elfos por aquí, y que, ¿has venido a montar un sable de nuevo? Me gustaría verte llorar otra vez jajaja

-¡solo era un niño! Y no estaba llorando... solo estaba nervioso porque Lévan hizo que el sable fuera demasiado rápido

"este hombre dejó que un par de niños se subieran a una bestia tan peligrosa?"

-como sea, ¿puedes alquilarnos tres sables verdad?

-por supuesto, mientras pagues lo justo

-yo no pienso ir –dijo Yhisel, en algún momento había dejado su escondite y ahora estaba a mi lado admirando los brazos del chico Eun...

-pues que sean solo dos –dijo Dolan

-espera yo no...

-¿en serio vas a dejar pasar esta oportunidad? –dijo Dolan señalando a los sables, su apariencia era sin duda intimidante y a la ves increíble, si tuviera que comparar el tamaño uno de ellos con el de algún animal de mi antiguo mundo diría que es similar al de un rinoceronte, quizá un poco más grandes debido al largo de las patas, en la frente de estos estaban los tres cuernos que si mal no recuerdo eran algún tipo de cristal mágico curativo, las garras de las patas sin embargo no eran como la de los sables ya que ni siquiera eran del mismo color morado, supongo que tampoco son venenosas...

-está bien

Al escuchar mi respuesta Dolan le entregó un pequeño saco de monedas al hombre y este alegremente las guardó sin siquiera revisar la cantidad, poco después llevó dos sables fuera del establo y nos dijo que ya estaban listos, ambos tenían puesto una silla de montar que era distinta a la de un caballo, estas parecían diseñadas para que la persona fuera recostada en el lomo del animal y traía una serie de correas para asegurar la estabilidad del jinete y unas riendas para dirigir al sable en la dirección deseada, cuando me paré en frente del sable que habían preparado para mi sentí la fuerza que este tenía, también noté como su pelaje repelía levemente mi aura de calor como si de un imán se tratara, llegué a preguntarme si sería capaz de defenderme contra una bestia así, y eso teniendo en cuenta que ni siquiera es el sable que aparece en los libros de bestias demoniacas, con razón se necesita un grupo entero para darle pelea

-vamos Airen, no debes tenerle miedo –dijo Dolan quien ya se había subido al suyo

-¿de verdad es seguro que una novata monte un sable? –preguntó Yhisel

-¿sabes montar a caballo? –me preguntó Dolan

-si

-entonces estarás bien

Teníamis dudas pero al final terminé subiéndome al animal, una vez que aseguré todaslas correas y me puse en posición Dolan hizo avanzar a su sable y el míocomenzó a seguirlo, más adelante Dolan me dijo que algunos estaban entrenadospara seguir a otros sables si el jinete no hacía nada lo cual me tranquilizaba,al principio el recorrido fue lento y me dediqué a observar los alrededoresaunque con tal cantidad de nieve era difícil ver algo llamativo, aun así erarealmente divertido pasear a lomos de un gran tige dientes de sable

-¿de niño venias muy seguido? -pregunté

-sí, de tres a cuatro veces por mes, el padre de Lévan es una especie de embajador, mantiene el contacto con las distintas aldeas y pueblos alrededor de Authon para escuchar las demandas y peticiones de estos y comunicarlas al rey, también se encarga de que dichas aldeas aporten algo al reino

-vaya, y por lo que he escuchado de los Eun parece que es muy bueno en su trabajo

-es de los pocos nobles que de verdad se preocupan por los demás

-ya veo...

-...

-...

-...

-...

-ahora que lo pienso, felicidades por ganar en la búsqueda de objetos

-ah... gracias

-y gracias de nuevo por salvarme la vida

"sabía que sacaría el tema..."

-ya deja eso, cualquier otro sanador hubiera hecho lo mismo

-supongo que sí, pero dudo que cualquier otro sanador se hubiera quedado toda la noche cuidándome

-... ¿y porque crees que yo si lo hice?

-me lo dijo una de las sanadoras luego de que te fuiste

"en serio, ¡son unas boca floja!"

-como sea, solo quería que supieras que me hizo muy feliz despertar y tenerte a mi lado

-¿si? ¿y sabes a quien no le hizo mucha gracia? A tu prometida

-lo de Lilith no tiene nada que ver conmigo

-jajaja ¿Qué no?

-me refiero a que todo eso del matrimonio fue idea de mi padre y de Lilith, mi padre me ha estado presionando para que la acepte pero yo no he dicho que si

-tu padre parece muy ansioso por verte casado no es así?

-tiene sus motivos, veras... la verdad es que yo tengo una hermana mayor, mucho mayor en realidad, creo que ahora mismo debe tener alrededor de 110 años

-un poco mayor si...

-el caso es que desde hace mucho antes de que yo naciera ella discutió con mi padre y se fue de casa, eso me lo contó mi madre ya que ocurrió hace más de 50 años, desde entonces mi padre ha estado creyendo que no fue lo suficientemente estricto con ella y que por eso se fue

-y por eso es tan estricto contigo hasta el punto de querer casarte a tan temprana edad...

-la verdad es que no quiero discutir con mi padre, aun siendo como es le tengo mucho aprecio... sin embargo, no pienso casarme con la persona equivocada solo para complacerlo

-...

Realmente odié lo que dijo Dolan en ese momento, odié que mi corazón empezar latir más rápido por el mero hecho de decir unas cuantas palabras... y sobretodo odié el no haber podido suprimir la sonrisa que le mostré al escuchar eso...

-hay un lugar que me gustaría mostrarte, sígueme

Tras decir esto Dolan agitó las riendas y de inmediato su sable comenzó a correr, pese a que había dicho "sígueme" mi sable empezó a correr por si solo y yo solo me limité a sujetarme de las riendas, al principio me molestaba el viento frio en mi cara pero lo solucioné usando magia, me impresionó la increíble agilidad y fuerza que tenían estas bestias al correr, el ser capaces de moverse por zonas empinadas o saltar de roca en roca sin ninguna dificultad era algo que para un caballo sería difícil o hasta imposible. Dolan siguió avanzando por el bosque y yendo cada vez más hacia arriba por la ladera de la montaña, al cabo de 10 o 15 minutos llegamos a un claro en lo alto con una maravillosa vista de la ciudad de Authon a lo lejos, el rio que lo rodeaba y el horizonte, todo cubierto por una manta blanca de nieve

-¿una gran vista verdad?

-sin duda, es precioso

-¿Qué tal si descansamos aquí un momento?

-me parece bien

Dolan se bajó del sable y usó magia par derretir la nieve en una zona cercana, luego evaporó el agua para dejar una zona seca en la cual poder sentarnos, el único problema es que los sables se adelantaron y se acurrucaron en dicha zona dejándonos nada más que un pequeño espacio en el cual inevitablemente tendríamos que estar muy cerca, Dolan echó de ver mi incomodidad y preparó otro espacio un poco más alejado para él, yo me senté al lado de los sables y aproveché para apoyar la espalda en ellos lo cual fue increíblemente cómodo, Dolan en cambio se había quedado en frente sentado en una piedra lisa... verlo ahí solo con el horizonte cubierto de nieve me hacía sentir más frio del que tenía realmente así que terminé diciéndole que se sentara a mi lado, no hubo conversación en un largo rato, simplemente nos quedamos viendo el horizonte, por lo menos hasta que Dolan habló nuevamente

-Airen sabes... acabo de recordar algo y... realmente lo lamento...

-¿de qué hablas?

-aquel día... el ultimo día que nos vimos en Valadhiel...

-ah...

-no sé porque hice lo que hice, no quería irme y estaba molesto por no poder negarme, yo solo...

-tranquilo, eso ya no me importa

-prometo que te compraré un abrigo nuevo

-te digo que está bien, ya no pienso en eso

-...si tú lo dices...

-aunque realmente me gustaba ese abrigo...

-¡iré a comprarte uno ahora mismo!

-jajaja es broma, no necesitas comprar nada

-...

-...

-Airen... tú de verdad me gustas...

-ah... Vaya cambio de tema más brusco...

-lo digo en serio, lo que siento por ti, no podría sentirlo por nadie mas

-y... ya para con eso

-¿Por qué? ¿Acaso no sientes tú lo mismo?

Dolan agarró mi mano y mientras entrelazaba sus dedos con los míos yo trataba de decidir cómo responder a su pregunta, quizá era el momento para decir lo que sentía y afrontar mis temores, así por lo menos tendría el valor de regresar donde Endor y disculparme, pero si respondía que si...

"no, no debo pensar en lo que podría o no pasar en el futuro, afrontaré este momento ahora y luego trataré con lo que pase después"

-Dolan... la verdad es que yo...

La frase que iba a decir fue interrumpida sin previo aviso por los labios de Dolan, fue un momento que no duró mucho y sin embargo me hizo sentir tantas cosas que no supe cómo reaccionar, incluso después de que Dolan retirara su rostro yo seguía sintiéndome igual y sin ninguna palabra u otra señal él volvió a acercarse esta vez más lentamente, para ese momento ya ni siquiera estaba pensando en nada y simplemente cerré los ojos lentamente solo para poder sentir nuevamente ese cumulo de emociones, de la nada sentí mi cuerpo más ligero y mi mente más clara, ya ni siquiera pensaba en porque me molestaba en rechazar a Dolan aun cuando ya sabía lo que sentía por él, en ningún momento sentí que estaba haciendo algo incorrecto. Tan solo fueron unos segundos pero fue suficiente para tomar una decisión, en cuanto nos separamos un poco miré a Dolan directamente y me preparé para responder

-yo tam...

*Boom*

-¿eh?

-¿Qué fue...?

*Boom* *Boom*

Unos potentes estruendos resonaron a lo lejos haciendo incluso que los sables se pusieran alertas mirando en dirección a la ciudad de Authon, al ver esto de inmediato me puse de pie solo para ver como en el extremo este salía una gran cantidad de humo

*Boom*

-¡la ciudad!

Otra explosión más ocurrió, esta vez más cerca del centro, parecía como si algo estuviera avanzando en esa dirección aunque teniendo en cuenta el tamaño de esas explosiones me costaba imaginar que podría estar causándolas, incluso usando magia sería difícil provocar una explosión de ese tamaño, el fuego resultante de dichas explosiones no tardó en hacer presencia y en un momento la mitad del distrito este este estaba en llamas, me horroricé al pensar en la cantidad de muertos y heridos que debía haber y casi entro en pánico al ver que nuestra casa estaba justo al lado de donde ocurrió la tercera explosión, tanto mi tía como Korand debían estar en casa en este momento así que sin pensármelo dos veces me di la vuelta y me subí en uno de los sables

-¡espera Airen que haces!?

-¡mis tíos siguen en casa! ¡Podrían estar en peligro!

-¡pero...!

*Boom*

-¡no hay tiempo!

Sin esperarmás agité las riendas y el sable empezó a correr ladera abajo con granagilidad, luego me percaté de que Dolan me estaba siguiendo pero no me detuve aesperarlo, en lugar de eso apresuré el paso y solo deseaba que mis tíos estuvieranbien