(Narra Justin)

Sin duda lo que pasó sucedió muy rápido, primero Jason besando a esa hermosa muchacha y ahora había dado su último aliento, Jason aun con el rostro indiferente ocultando su sentimiento de tristeza solo salió por la puerta cargando en sus brazos a esa hermosa mujer. Leonard se encontraba agonizando por el cuchillo en su cuello, un cuchillo el cual le había causado un gran daño, pero sin duda sobreviviría. Aunque no sería lo mismo para esa muchacha, eso me puso triste pues jamás había conocido a nadie con tanto valor, sus ojos me mostraban a un ser único el cual valorar, proteger y amar. Pero ahora ella se encontraba en un sueño eterno.

      Por otro lado, William solo estaba a mi lado en shock y lleno de miedo, lágrimas también caían de sus ojos al ver a su pareja agonizando en el suelo, pero sabía que había más en su mirada llena de terror.

—¿Se puede saber por qué tu hijo hizo eso Dimitri?—preguntó el señor Evans con voz indiferente.

—Me gustaría también saberlo— habló mi padre.—Explicate Justin.

—No quería verla morir—expliqué con voz baja.— No estoy arrepentido.

—No fue tu culpa cariño—habló mi madre con una sonrisa arrogante, la cual no me agradaba.— El encargado era William, él tuvo la culpa de todo este desastre.

      William dió un respingo y abrió los ojos como platos, cayó al suelo y colocó su cabeza en el suelo y comenzó a llorar, y es que la vida de Will se resume en sólo obedecer a mi padre.

—Perdónenme, no volverá a suceder— hablo el rubio con arrepentimiento en sus palabras y lágrimas en sus ojos.

—Eso dependerá de nuestros invitados—habló mi madre mirando al señor Evans .

—Amelia...—habló el señor Evans dirigiéndose a ella para elegir el castigo de William.

—La verdad yo solo quería pasar tiempo con Justin, la sangre de esa muchacha no me importa para nada, si Justin acepta a caminar conmigo por los alrededores olvidaré lo sucedido—habló ella con todo dulce y sonrisa encantadora.

—Me parece razonable—dijo mi padre.—Pero eso no evita el que William tendrá un castigo por desobedecer la ordene de matar a esa niña. Justin porfavor acompaña a Amelia a los jardines, Leonard por favor levántate del suelo y llama a un cazador para que nos entretenga con William, sin duda lo castigaremos de una forma que nunca olvidará.

         Yo miré a Will el cual tenía miedo en su mirada, él vio de reojo a Leonard y comenzó a llorar. Leonard solo tomó un momento para que sus heridas se regeneran un poco y se levantó del suelo.

—Dimitri porfavor perdona a William— pidió Leonard haciendo una reverencia y quitándose el cuchillo de cuello dejando una cortada a lo largo de este.

—¿Por qué tendría que hacerlo?— preguntó mi padre indiferente.

—Te estoy pidiendo solo un favor, no me hables como si fuera otros de tus subordinados—contestó Leonard.

—Cállate...— susurró William.— Mi señor tiene razón, yo tengo la culpa de todo este desastre, soy el culpable de todo esto... solo soy escoria y merezco este castigo por manchar el nombre de mi señor.

—William no digas estupideces, ¿¡esperas que me quede con los brazos mientras tu eres sometido a una tortura por la aerogancia de estw hombre!?- gritó Leonard acercándose a William y tomándolo de los hombros de forma brusca.

—Sabes que no tiene opción Leonard, lo único que él sabe hacer es seguir órdenes y ser sometido, después de todo fue creado para eso— habló mi padre provicando al ojiazul. Leonard solo soltó un quejido intentabdo guardar sus gritos de odio hacia mi padre.

— Tu no eres eso Will— concluyó poniendose de pie mirando desafiante a mi padre. Era una discusión entre las cabezas de familia, Leonard pudo haber sedido su titulo como lider de los Sangre Puras, pero seguía siendo uno, en cualquier momebto pudo haber desencadenada una batalla entre mi padre y él.

—Leonard retírate y escolta a mi hijo y a Amelia — volvió a hablar mi padre. Yo solo caminé a la puerta alejándome de esa horrible habitación, los adultos siempre me han parecido seres crueles y oscuros.

—Solo tu y yo—dijo Amelia abrazando mi brazo mientras caminabamos rumbo a los jardines del castillo.

—Supongo...— musité

          Me olvidé por un momento de Amelia, no estaba interesado en ella, solo en esos ojos cafeses que Jason cargaba.

—¡¡MALDITA SEA!!— grité con desesperación  recordando que ella había muerto...

(Narra Jason)

               Había llegado a nuestra casa apurado y al borde de las lágrimas. Jade había dejado de respirar hace unos minutos y yo no tenía ni la minima idea de qué hacer, solo ese recuerdo de mi amada Violetta siendo asesinada por esos animales...

—No... esta vez no—dije para mí mismo entrando a mi habitación y recostado cuidadosamente a Jade en mi cama.—No dejaré que suceda de nuevo.

              Aparté su cabello despeinado de su frente y abrí un poco la parte del pecho del vestido blanco, el cual se encontraba lleno de sangre. Una vez que el vestido dejo de estorbar, pude ver mejor la herida que ese maldito le había hecho.

—Jade por favor abre los ojos— suplique tocando sus mejillas, las cuales estaban frías, su rostro estaba pálido y me asustaba no volver a ver su cara enojada y sonrisa sarcástica.— No puedes dejarme Jade, ¡¡ya estoy arto de que las personas que amo me abandonen!!

         Mire sus labios azules, hace unos momentos estaban rosado y cálidos... el besarla fue algo hermoso, y ver la cara de Justin fue divertido. Está loco si piensa que la dejaré en sus brazos.

—Jade...—volví a llamarla acariciando sus labios fríos y dirigiendo su vista a ese viejo anillo.—Pronuncia alguna estupidez mientras tocas ese tonto anillo—suplique mientras besaba sus manos frías.—Por favor, me parece ridículo que alguien como tu no regrese de algo tan normal como la muerte— hablé calmadamente intentando controlar mi miedo a no volver a verla, pero fue inevitable llorar— ¡¡NO ERES UNA PRINCESA EN APUROS Y NO SOY UN PRÍNCIPE QUE TE AYUDARÁ A SALIR DE ÉSTA!!— grité desesperado, era inútil gritar, pero habia perdido la cordura por unos segundo, la precion era demaciada. Tardé unos minutos en volver a tranquilozarme—. Te necesito conmigo, y no por tu sangre, te necesito, te necesito porque tengo miedo... yo... ya no quiero quedarme sólo— dije con dificultad, el verla tan quieta y que su pecho no subiera ni bajara me hizo perder la cordura—. ¡¡¡MIERDA HAZME CASO!!!— grité desesperado.

             Ella seguía sin responder y estaba entrando en la desesperación, no importaba las veces que la llamara, que le gritara, que besara sus manos, ella no contestaba.

                    Me quedé un tiempo a su lado viéndola e ignorando mis ganas de beber su sangre gracias a su vestido sangrado. No sé el porqué pero me metí las manos a un bolsillo de mi pantalón y encontré un pequeño sobre, pero estaba aliviado de haberlo hecho.

—Maldito Leonard, tu sabias que pasaría esto— dije maldiciendo con voz baja. Como si el mundo se fura a acabar corrí a la cocina y traje un vaso con agua, una vez en la habitación de nuevo, bebí el líquido sin pasarlo por mi garganta, coloqué la pastilla que estaba en el sobre en la lengua de Jade y junte nuestros labios para pasarle el agua, así  podría pasar esa pequeña esperanza de vida por su garganta.

           Cuando volví a tocar sus labios sentí un horrible dolor en el pecho, sentí miedo y un pesar cruel de soportar. Sentir sus labios ahora fríos hizo que una lágrima corriera por mi mejilla, sostuve un pocos sus manos intentando darles calor, pero era inútil...

—"No fue la intención de William hacer lo que hizo, te lo explicaré luego, por ahora esto la ayudará a sanar... perdona que no te lo hubiera dado en la otra ocasión. Ella estará bien"— leí lo que había escrito Leonard al reverso del sobre.

          Espere un milagro, una señal o algo estúpido que me dijera que ella estaría bien. Si William hizo esa pastilla significa que ella estaría bien, pero estamos hablando de literalmente volver de la muerte y hasta ahora solo he visto eso mediante las reencarnaciones y ellas toman años en volver.

—Jade... deja de hacerte la dormida por favor—suplique besando sus manos.— Despierta y te prometo que no volveré a ser frío e indiferente contigo, te protegeré como si fueras lo más valioso en este mundo, nunca te faltare el respeto y cumpliré cada uno de tus caprichos, pero por favor... por favor abre esos hermosos ojos y muestrame esa sonrisa coqueta que tanto amo— supliqué mojando mis mejillas con lágrimas, hacia mucho tiempo que no lloraba y ahora estaba frente a mi miedo más grande: perder a la persona que amo.— Yo te protegería de todo daño, te acariciaría por las noches y te prepararía de comer lo que quieras, pero necesito que despiertes. No puedo ser el príncipe que te despierte de tu eterno sueño como en los cuentos de Disney... pero me quedaré a tu lado hasta que despiertes.

—Eso es algo lindo Jason—pronunció una voz serena y profunda.Me di la vuelta para encontrarme a Armando recargado en la puerta, el estaba llorando el silencio y con el mismo silencio se acercó al cadáver de su hija.

—Yo te advertí que esto pasaría— susurré intentando no caer de nuevo en el llanto.

—No fue tu culpa—dijo Armando con una pequeña sonrisa acariciando el cabello de su hija.—Leonard tiene razón, ella estará bien, despertará pero no sabría decirte cuando.

—Lo que dije hace un momento es cierto, yo permaneceré a su lado hasta que despierte— dije sujetando más fuerte las pequeñad manos de Jade.

—No confundas amor con deuda Jason— pronunció riendose ligeramente—. No estás enamorado, no de mi hija.

—¿¡Cual es tu problema!?, creo saber cuando estoy enamorado de alguien— conteste enojado.

—No puedes amar a dos personas Jason, primero tienes que olvidarte de Violetta así como Jade tiene que olvidarse de Arturo...

—¿Y necesitaba morir Jade para darme cuenta? ¿¡¡TODO ESTO ERA PARTE DE TU BRILLANTE PLAN!!?—pregunte poniendome de pie, mirandolo de frente desenfundando mi pistola y apuntando a su cabeza. Él solo mostro una sonrisa sarcástica y ojos desafiantes, tenía ganas de matarlo de una buena vez.

—Es solo parte del plan Jason... a veces se necesitan sacrificios, y seamos honestos aun te masturbas pensando en Violetta— dijo con una sucia sonrisa en su asqueroso rostro.

—¡¡CÁLLATE!!- grité tirando del gatillo varias veces. Pude ver en cámara lenta cómo él desviaba mis balas con una espada que sacó de la nada, yo aún así seguí disparando intentando dar con su cabeza pero era imposible, le estaba disparando al mejor de los cazadores.

—Estas enojado porque tengo razón— habló en con voz neutra desviando las balas intentando no dañar a su hija.— Necesitas superarla, ¡¡Jade no es ella y nunca lo será!!, ni siquiera las reencarnaciones son iguales a sus vidas pasadas,¡estas perdiendo el tiempo buscando a una persona que ya murió!

—¿¡¡Y DE QUIÉN FUE LA CULPA!!?— pregunté soltando mi pistola y tomando una espada que se encontraba debajo de mi cama.— Yo fui quien la mató, y eso no puedo olvidar, amar a alguien y luego mátalo no es exactamente algo positivo que quiera recordar.

—Tu no la mataste Jason, ella hizo lo correcto.

—¿¡¡PARA QUIÉN!!? ¡¡DUDO QUE ME ODIARA TANTO COMO PARA ABANDONARME!!—grité intentando atacar pero este solo se molesto en evitar los ataques como si estuviera peleando con un niño, agitaba mi espada intentando dar con sus puntos vitales pero parecía dar solo ataque torpes. El odio me cegaba.

—Alguien no puede usar un arma maldita si está llenado por el odio Jason, y es aún más peligroso cuando es odio hacia ti mismo—dijo dando un paso al frente de mi espada y deteniendola con sus manos desnudas, pero no importó porque no logre cortarlo—. ¿Lo ves?, solo logras perder tu tiempo al igual que lo haces con Jade, necesitas olvidar todo ese pasado y así poder seguir con el sentimiento que tienes por mi hija.

—Empiezo a pensar que haces todo esto solo para olvidarla— dije con odio.

—No, es todo lo contrario, necesito que los dos descubran el porqué deben estar juntos y que son más cercanos de lo que aparentan.

—Ya te dije que la amo y que voy a estar con ella—le recordé a regañadientes frunciendo el ceño.—¿¡¡ESO NO ES SUFICIENTE!!?

—Un beso no significa que la ames Jason, el amor va más allá de tener celos y rencor hacia Justin y William— dijo dejandome sin aliento, no me gustaba que los mencionaran.

—William pudo haberla salvado ¡¡VIOLETTA PUDO HABERSE SALVADO SI WILLIAM HUBIERA QUERIDO!!— grité lleno de odio.

—¡¡VIOLETTA MURIÓ PARA PROTEGERTE!!— gritó de igual modo arrebatandome la espada y embestirme la pierna derecha.

—¡¡POR UNA MIERDA, ACABO DE CURAR ESA PIERNA!!— volví a gritar, pero esta vez me encontraba en el suelo mientras ponía en mi boca con torpeza una pastilla de las que me había dado Leonard para hacer que la herida sanará un poco más rápido.

—Te lo mereces, ya me estaba hartando de escuchar tus estupideces— contestó envainando la espada y dándome la mano.

—Yo ya sé que Jade no es Violetta, ya sé que ella murió protegiéndome, ya sé que la culpa no es de nadie y que tal vez dije todo lo de "amar a Jade" solo porque no quiero ver más muertes... "tal vez". Tal vez realmente ame a Jade y tu solo te comportas como el padre celoso— agregué con lagrimas en mis ojos aún tendido en el suelo. La herida sanaba lentamente y era doloroso que los tejidos se reconstruyeran.

—Yo solo te doy un consejo, no confundas amor con deuda—dijo con voz calmada dirigiéndose al cadáver de su hija y depositando un beso el la frente de Jade.—Cuida a mi bebé y dile que me llame y que la extraño.

—Como tu lo digas.

(3 días después)

(narra Leonard)

—Déjame verlo—exigí entrando a la habitación de Justin. Él estaba leyendo los libros que Will le había traído, él solo se molestó en levantar la mirada de su libro.

—Me gustaría cumplir tu deseo Leonard, pero eso depende mi padre- explicó con voz suave y triste.— Perdoname Leonard, pero no puedes verlo aún.

—¿¡¡CUÁNTO MÁS DEBO ESPERAR!!?— pregunté desesperado y con respiración irregular, tenía ganas de matar a esos horribles monstruos.

—No estás en circunstancias para verlo—contestó intentando tranquilizarme.—Yo ya lo ví y creeme cuando te digo que no podrás soportarlo.

—Quiero verlo— insistí.—Y no porque solo soy su pareja, si no porque tengo todo el derecho a verlo por ser un Sangre Pura y no solo el guardaespaldas que finjo ser todo el maldito día.

—¿Piensas que lograrás ayudarlo?— preguntó algo decaido —. William no sufre por lo lastimado de su cuerpo, sufre por lo que dijo mi padre, él tocó una parte muy sensible de William.

—Entonces déjame hablar con él y hacerlo entrar en razón, yo lo conozco mejor que nadie y sé que William no es solo una herramienta y que su creación no se resume en vivir sumiso ante las órdenes de Dimitri.

—Yo le dije lo mismo pero no hizo caso...

—Entonces déjame solo darle un beso, asi como tu quieres besar a la niña que murió en los brazos de Jason— le dije calmadamente, parecía un chantaje, pero estaba dispuesto a todo por ver a mi rubio. Todo mi cuerpo había estado adolorido en los ultimos 3 días, no era una buena señal de que William estuviera bien.

—Lo haré, pero a cambio quiero conocer su nombre...

—Jade Persson— contesté con algo de miedo pronunciando ese apellido.

—¿Como Armando Persson?... El que asesinó a un Sangre Pura.

—Ese Sangre Pura se lo merecía—agregué a su comentario—. Cumple tu parte del trato—exigí antes de que se arrepintiera.

—¿Sigue viva?— preguntó preocupado.

—Aun no, pero despertará pronto— contesté sabiendo que estaba haciendo algo que no debía.

—Gracias— sonrió entregándome la llave, la tomé rápido y corrí  hacia las catacumbas donde tenían a mi novio.Corrí como nunca y maldije por no tener teletransportación para poder llegar más rápido a mi lugar favorito en este mundo lleno de oscuridad, el único lugar donde puedes sentir calor en un mundo frío, el único lugar donde me drogo y no de sustancias tóxicas si no de sus hermosos ojos verdes. Mi lugar favorito es justo en sus brazos y mi droga es mirar esos hermosos ojos y besas esos labios rosados.

—¡¡WILL!!—grité desesperado al encontrarlo de la forma más inhumana que puede haber.

—Leonard...— susurró con la cabeza baja. Yo aún estaba en shock, no tenía aliento y mis piernas no se movían a pesar de anhelar tanto un abrazo suyo.—No me mires por favor— dijo con voz lúgubre y cabeza baja.Yo camine lentamente hacia su cuerpo desnudo lleno de heridas y con varillas de metal enterradas inmovilizados.

—Will... volvamos a casa, no importa que tenga que secuestrarte, te llevaré lejos de toda esta mierda— le susurré sosteniendo su barbilla para que pudiera verme a los ojos.—Déjame y te quito todo esto de encima— dije tomando uno de esas varillas e intentar sacarlas, pero un llanto hizo que me detuviera.— ¿Duele?

—Leonard...—me nombró llorando.— No las quites, yo me gane esto por ser débil y no saber obedecer algo tan común como una orden, mi existencia perdió su sentido al no matar a Jade— sollozo—pero... ¡¡YO NO QUERÍA MATARLA!!

—William el perdonarle la vida a Jade no es debilidad y tu no eres un juguete, nadie te obligó a amarme ¿o sí?—pregunté limpiando sus lágrimas.— Tu tomaste esa decisión, sí fueras una herramienta y no tuvieras voz, tu y yo no nos hubiéramos conocidos y no llevarías esa marca en tu mano... ¿Alguien te obligó a llevar esa marca?—pregunte algo frustrado al verlo llorar, no era yo en esos momento, el verlo destrozado me daban ganas de matar a todos los de esta maldita mansion.

           Los orígenes de William no son necesariamente los bonitos. Para empezar su nombre no es William si no 24-9-12-12-9-1-13 y se que suena estúpido y algo extraño, pero así es, de hecho puedes buscar en su "acta de nacimiento" (que en realidad es solo un registro de un estúpido experimento para complacer a los Sangres Pura) verás que es su nombre verdadero. Su vida comienza con un capricho en realidad, un dia un Sangre Pura ordenó tener al mayordomo perfecto, que cumpliera todas las órdenes, no se equivocara, lo complaciera en todos los aspectos y no cuestionara nada, sin importar lo horrible o imposible que fuera la orden el mayordomo la llevaría a cabo. El cumplir el capricho del Sangre Pura llevo años y miles de experimentos fallidos, la fabricación del mayordomo perfecto llevo millones de "prototipos" (que en realidad son como cuerpos sin alma) hasta que nació William siendo el experimento número 2915.

         Cuando él llego a la casa del Sangre Pura, no podías ver su sonrisa, sus ojos verdes no tenían brillo, sus labios estaban quebrados y solo mostraba un rostro semejante a la muerte. Fue difícil mostrarle que él es propietario de su propia vida y lo hermoso que puede ser gritar, reír, llorar, amar, el andar descalzo por la casa, dar una voltereta, y muchas cosas de las cuales él no conocía.Pero todo se fue a la mierda con el comentario de John al llamarlo "herramienta que solo es buena para ser sometida".

—Realmente te amo Leonard... pero realmente quiero estar sólo, no merezco que prestes tu atención a alguien que no sabe cumplir una simple orden— dijo entre llantos, sus ojos desbordan riachuelos de lágrimas y su respiración estaba agitada.Me dolía el no poder ayudarlo, porque él había tomado la decisión de aislarse de mi por un tiempo (y lo comprendo, todos en algún momento queremos desconectarnos del mundo y tranquilizar a nuestros demonios internos) y yo solo quería que él hiciera lo que quisiera y no ponerle límites aunque me doliera.

—La persona que amo no sería capaz de matar a una amiga—sonreí tomando sus rostro sangrante entre mis manos con delicadeza.— ¿Me matarias si fuera una orden de tu amo?

—No, eso significaría que la marca se borraría y yo dejaría de pertenecerte —dijo intentando hacer una sonrisa aunque las lágrimas no ayudaban mucho. Tal vez fue una estupidez pero lo besé de una forma dulce y consoladora.—Leonard...—me nombró con sus mejillas rojas.

—Odio que me llamen así — susurre para mí.— Hablaré con Dimitri para que te libere o por lo menos curar tus heridas, debo de cuidar a Justin por la estupidez que va a cometer, ¿podrías esperar un poco?

—Cuando salga de esta prisión... necesito hablar con Jade y su "relación" con Jason.

—¿Hablas de por qué Jason salvó a Jade sin que ella se lo ordenará?— pregunté un poco asustado, esta conversación tendría un futuro terrible.

—Es chistoso que el viniera sin que ella usara el anillo y tu sabes que la única forma de que él pudo saber que ella estuviera en peligro es si ella es su pareja—hablo con voz seca y ojos hinchados.

—¿Jason marco a Jade?— pregunté asustado, sin duda se vendrían terribles cosas.

—Podría ser una posibilidad...— susurró volviendo a llorar. Supuse que las varillas estaban malditas y que por eso sus heridas no habían sanado como es su velocidad normal.

—No hablemos de eso Will— dije con voz dulce sosteniendo su rostro y dándole un beso pequeño en sus labios agrietados y fríos—Hablaré con Dimitri para que te pueda sacarte de aqui, vendre en la noche y te traere dulces, y no te deprimas por Jade, ella sobrevivirá y despertará pronto ¿de acuerdo?, ¿podrías ser fuerte un poco más?—supliqué limpiando sus lágrimas.

—"Aquí adentro siempre llueve"— pronunció sollozando una frase de mi escritor favorito.

—Tranquilo Chris Pueyo—dije soltando una pequeña risita y volviendo a besar sus labios.—Te amo...

—Yo tambien te amo Leo—pronunció regalandome una sonrisa. Me quedé un rato admirando esa sonrisa para después salir por esa puerta metálica y guardar la llave para mi y solo para mi. Suena cruel pero no quiero que salga de ahí y quiero ser el único que pueda verlo, yo sé que él necesita reflexionar sobre todo esto a pesar de que el sabe que no es solo una herramienta... pero no me gusta verlo atado como un animal.

(Narra Jason)

          Ya pasaron 3 dias y ella aún no despertaba, tuve que bajar su temperatura para evitar que su cuerpo se pudriera, pero, eso no cambiaba nada. Ella seguía dormida y me preocupaba que al despertar experimente secuelas con lo sucedido, muriera de hambre o se olvidara de nuestro beso.

—¿Cómo está gato?—pregunté entrando a mi habitación después de haber comido un poco.

—Dormida— contestó Aslan a un costado de ella. A oidos ajenos sonaría solo como un "Miau".

—Ese idiota de Leonard probablemente me dio las pastillas equivocadas...

—Yo creo que solo hay que tener paciencia Jason.

—Ya perdí al amor de mi vida una vez, ¿esperas que la pierda a ella tambien?— dije con un sarcasmo muy seco.

—Ella no está muerta Jason.

—¡Olvídalo, no tengo el porque hablar con un gato callejero, bajate de mi cama la llenaras de pulgas maldito cuadrupedo!

—No te estreses Jason ¿por qué no duermes un poco? Estas muy estresado.

—No tengo la necesidad biológica para dormir.

—Eso ya lo se, pero estoy cansado de escucharte quejarte de que tu hembra no despierta, yo iré a pasear un rato a la ciudad—dijo el maldito gato saliendo por la puerta.

—¡¡OYE ELLA NO ES MI "HEMBRA"!!— grite enojado. En los últimos 3 días me he vuelto loco esperando a que Jade despierte, es difícil el tenerla acostada en una cama como si fuera un cadáver, me hace creer que en realidad está muerta y yo solo estoy perdiendo el tiempo y haciéndome ilusiones estúpidas.

—"Somos equipo ¿no?, debemos protegernos pase lo que pase, yo te cuidaré incluso después de mi muerte"...eras una mentirosa—dije mencionando las palabras que Violetta me había dicho hace muchos años.—Tu eres igual a ella Jade—susurré tomando la mano de ella y besándola en la mano.—Dijiste que me cuidarías pero yo soy el que tiene que cuidarse... siempre juegas a hacerte más fuerte pero no te das cuenta de lo débil e insignificante que eres en este mundo, ¡tu existencia es solo mierda, y me alegra que estés muerta!, ¡así puedo volver a mi hermosa soledad y no volverme a preocupar por cuidar a mocosas idiotas!—grite llorando la última parte.Puse su mano en mi frente para volver a llorar solo y deprimirme solo,esperando que ella despertara y dijera algo como "deja de llorar niño malcriado" y yo la abrazaba y secaba mis lagrimas para poder besarla sin mojar esas hermosas mejillas suyas. Pero solo logré quedarme dormido...

(En un pequeño sueño...)

—Deja de seguirme Jason— habló ella tomando su espada y poniéndose en guardia.—Recuerda que esta niña te venció en el entrenamiento de esgrima hoy.

—Tuviste suerte Violetta, no dormí anoche y todo el mundo sabe que mi especialidad son las armas de fuego, como esta pistola— dije jactándose de mi nueva pistola y apuntando a ella.— ¿Qué tal una revancha?

—Una pistola es un arma para atacar a distancia, en un lugar seguro, lejos del peligro, sin ver al miedo de frente y a los ojos, ignorando el sacrificio que tus compañeros hacen en el campo de batalla, a diferencia de la espada que es un arma de cuerpo a cuerpo y eso es mas divertido, tu podrías matarme con una sola de esa balas y yo te mataria de una forma lenta y excitante: primero cortaría tu cuello, después abriria tu pecho dejando a la mira tu hermoso corazón en el cual supongo que no puedo entrar, después de rebanar tu corazón, cortaría tus piernas, brazos, sacaría tus ojos y defiguraria tu hermoso rostro a diferencia de tu estúpida pistola que solo me hará un hoyo en el pecho si es que no fallas.

—Menos charla y mas accion Violetta- dije con una pequeña sonrisa.— Veamos cuán confiable es esa espada tuya.

—Suenas confiado Jason, ¿hacemos una apuesta?.

—Si yo gano usaras el arete y yo el anillo del destino y serás mi esclava hasta que mueras.

—Suena justo, si yo gano entonces yo usare el anillo y tu seras mi esclavo Jason... más aparte me invitaras a cenar a ese restaurante elegante al que siempre he querido ir—habló ella desenvainando su espada.

—Yes my lady—dije haciendo una reverencia.

        Después de eso yo me convertí en el esclavo de Violetta y la satisfacía en todo lo que deseara. Mi relación con ella era "amor odio amor" y solo nosotros la entendíamos. Aunque nos gustaba desafiarnos en las misiones y entrenamientos. En nuestros ratos libres hacíamos cosas como pareja y eso era lo que más me gustaba del día, nuestros ratos libres, nuestras sonrisas, nuestros besos tímidos, nuestros abrazos, nuestras promesas.

Solo ella y yo.

—Es cruel pensar que los Sangres Pura nos usen como herramientas para no mancharse las manos, si nosotros morimos a ellos les da igual, pero si un Sangre Pura muere hasta los cielos lloran—hablo ella recostada en el pasto mirando las estrellas. Yo estaba acostado a su lado sosteniendo su mano con firmeza, mirando esos ojos color jade que tanto me gustaban.

—Violetta... Te amo.

       Ella río hermosamente—. Eso ya lo sé Jason, por algo estás sosteniendo mi mano, por algo llevas ese arete...

—Hablé hoy con una adivina—confesé.

—Te dijo tu futuro?, no me digas, ganaras la lotería—dijo entusiasmada sin quitar la mira a las estrellas.— o tal vez estés embarazado — río desquisiadamente.

—No seas tonta—mufe con ironía mientras removía su cabello para despeinarla.

—Tu eres el tonto Jason— rió como loca.

—Dejame habla niña, fui con ella y me dijo lo especiales que es nuestro sello, ya sabes el anillo y el arete.

—¿Especiales?

—Ella dijo que cuando te pones uno y sellas el conjuro la persona con la que compartes la otra parte será tu pareja de por vida.

—Pues lo lamento por ti, tendrás que soportar a esta niña tonta por toda tu vida, y yo tendré que soportar a mi idiota favorito—dijo con una sonrisa acercando sus labios con los míos regalándome un beso.

—Violetta...—la nombré.

—¿Qué sucede Jason?—preguntó acariciando mi cabello y mirándome con dulzura.

—Quiero marcarte...

—Jason...

               Desperté de la nada después de ese hermoso recuerdo con mi amada Violetta. Mis ojos aún seguían húmedos y veía borroso a causa de las lágrimas. Cuando las limpie sentí un apretón en mi mano y una dulce voz inundo mis oídos.

—Jason...

Levanté la vista para encontrarme a Jade con los ojos abiertos, su pecho subía y bajaba mostrándome que estaba respirando...

—Jade...—susurré estupefacto—. Estas viva...— dije con el poco aire que quedaba en mis pulmones, había perdido la mayoria al ver sus hermosos ojos color cafe oscuro.

—Jason...—susurró de nuevo mi nombre lo cual me hizo feliz, me acerque un poco a ella soportando las ganas de querer abrazarla y besarla, era muy pronto para eso, ella necesitaba descansar un poco más y solo me limite a besar su mano—.Jason... tengo hambre.

        Eso mató el encanto del reencuentro ...

—Te hare lo que quieras de comer preciosa—sonreí para después besar su frente.— Cómo te sientes?.

—Cansada... hambrienta... siento dormidos los pies, pero no importa,¿qué sucedió Jason?— preguntó confundida para de la después ponerse extremadamente roja de la nada y lanzarme a la cabeza una lámpara, la cual no tubo efecto de dolor en mi.—¡¡ERES UN IDIOTA!!

—¡¡LO DICE LA NIÑA QUE FUE USADA EN "EL BANQUETE"!!—grite usando el mismo tono que ella, me parecía ridiculo que esperé tanto para volverla a ver y ahora estábamos discutiendo. Sin duda soy un idiota.

—¡¡WILLIAM ME PUSO UNA TRAMPA, PERO ESO NO ES LO QUE IMPORTA, DIME PORQUE ME BESASTE!!— habló sin dejar de elevar la voz.

—Porque el maldito de Justin iba a beber tu sangre, en vez de gritar deberías agradecerme por traerte de la muerte—hablé intentando finalizar los gritos, aunque me gustaba ver de nuevo su ceño fruncido y escuchar esa voz irritante.

—¿¡¡Mori!!?—preguntó alarmada, fue tanto la sorpresa que se calló de mi cama. Intenté no reir así que solo ma cargué con delicadeza y la volví a recostar en la cama. Me alegraba volver a esa niña torpe.

"Maldición, olvidé que ella murió después de desmayarse, ella no recuerda nada"

—Eso... no importa ahora- susurre sosteniendo su rostro y jugando con su cara de preocupación.—Lo que importa ahora es que estas conmigo.

—Me das miedo cuando tu rostro está tan cerca del mío—susurró sonrojada, desviando la mirada ignorando mi presencia y yo solo deposité un beso en su mejilla.

—El próximo será en tu boca...— prometí soltando su rostro y caminando con dirección a la cocina para prepararle un gran festín a la muerta de hambre (literalmente)

(Momentos después)

—Ok, habla, dime todo lo que sucedió esa noche—dijo ella dejando en la mesa su plato número 17.

—Bueno... tu fuiste a la casa de William, yo me quedé atado a la cama, cuando se hizo de noche me preocupé un poco el que estuvieras en la casa de William y me di cuenta de que esa noche sería "El banquete" y eso me dio una mala espina. Después intente safarme del conjuro pero fue imposible, hasta que el arete comenzó a brillar...

—¿Color dorado?—pregunto comiendo palomitas como si el relato fuera de suspenso. Se veía adorable con sus mejillas llenas de palomitas de maiz como si se tratara de un ardillita.

—Rojo—contesté en un tono de voz misteriosa siguiéndole la corriente. Ella dio un salto de sorpresa fingiendo estar sorprendida y eso solo me sacó una pequeña sonrisa.—Entonces supuse que algo malo te pasaba y el conjuro se rompió cuando me decidí ir a buscar, fui a la casa de William pero no estabas así que corrí a la casa de los Sangres Puras y después de infiltrarme a la mansión Leonard se metió en mi camino y me dijo que no lo hiciera que era la única manera en la que William no sufriría pero yo le clavé un cuchillo envenenado en el cuello dejándolo inmóvil por unos momentos, cuando te encontré William ya te había lastimado y estabas en los brazos de Justin.

—Y me besaste por qué...

—Porque no quería que alguien como Justin te tocara, no quería que Justin saboreara tu sangre y no quería que alguien más mirara tu parte débil. Yo soy el único que puede protegerte Jade... debes tener eso claro, y no permitiré que a la persona que amo me la arrebaten de nuevo esos malditos animales.

—Ok... pero ¿por qué me besaste?—preguntó inocentemente.

—Ya te lo dije niña ignorante— dije indiferente, no era fácil para mi compartir mis sentimientos desde que Violetta murió.

—No me refiero a eso, yo quiero saber si me amas o solo fue el anillo que te manipuló.

—¿Por qué el anillo me manipularía?- pregunté golpeando la mesa.Me molestaba que ella dudara de mis sentimientos, y que no me agradeció por haberla salvado.

—Esque... antes de revivir tuve un sueño... no recuerdo mucho pero si recuerdo que una pareja también usaba los anillos y aretes, ellos estaban en el pasto mirando las estrellas y él dijo : "cuando te pones uno y sellas el conjuro la persona con la que compartes la otra parte será tu pareja de por vida." así que supongo que tu y yo somos iguales ¿no?...

—No lo se...

                       Me quedé sin palabras al escucharla decir eso. Ella había dicho lo mismo que yo le dije a Violetta antes de marcarla. No estaba seguro de si lo que había dicho ella tenía que ver con el sueño que yo también tuve... pero no quería averiguarlo.

—La verdad es que mis sueños han sido algo raros últimamente, y mi hombro duele mucho cuando toco el anillo, también sentí un dolor cuando me besaste...—habló con la cabeza baja como si fuera algo horrible lo que sentía.

—¿Encontraste a Arturo?— pregunté cambiando el tema, intentaba que ella levantara la vista y así pudiera ver esos hermosos ojos cafés, pero solo logre hacerla llorar.

—No—contesto a mi pregunta llorando en silencio. Solo podía ver lágrimas viajar por sus mejillas y sus ojos cristalizados. Otra persona hubiera sentido empatía por ver a la persona que ama llorar, pero yo solo me quede observandola. No todos los días podía verla llorar, quería guardar en mi mente su llanto y sus ojos rojos, quería conocer su parte débil, queria saber como ella lloraba demostrando humanidad, quería ser el único que estuviera con ella en momentos como estos.

—Tenías razón— habló aguantando el llanto y soltando más lágrimas.—Esa estupides como el cielo y el infierno no existe- guardó silencio y soltó un mar de anto en silencio.—Morir no me ayudará a encontrarme con el...

              Después de llorar en silencio un rato la levante de la silla y camine con ella al patio trasero, no me importaron los rayos solares, quería tener un momento con ella y no volverla a ver llorar.

        Llegamos a un abundante árbol con una gran sombra donde me senté un momento para que mis heridas sanaran. Ella se sentó a mi lado y limpio las lagrimas que quedaban en sus ojos.

—Perdona las llagas en la piel, olvidé que era de día—dije recostandome a los pies del árbol.— Mi antigua novia también murió—confesé sin rodeos cerrando los ojos y sintiendo la brisa en mi rostro.

—Jason...—susurró.

—Fue en una misión para matar a un Sangre Pura, yo me estaba recuperando de mi mordida y ella fue asignada a la misión, intenté detenerla pero ella era muy terca, así que... fui con ella a la misión— tomé aire y medite un momento mis palabras—Una flecha bino a mi y ella se ofreció como escudo... y murió

—Lo lamento.....

—Esa noche maté a muchos, tanto a amigos como a enemigos, pero por más que asesinara, por más que amenazara al maldito para que le devolviera la vida, nunca volví a verla- volví a guardar silencio nuevamente, y después de un rato pensando en mis palabras volví a tomar aire.— El anillo que te pusiste la otra vez era de ella, por eso estaba tan enojado cuando lo tomaste, es el único recuerdo que tengo de ella.

—Lo lamento Jason, si yo hubiera sabido eso creeme que no lo hubiera tocado—dijo algo alterada mientras sujetaba mis hombros.

—No te preocupes, eso no importa ahora Jade—dije intentando sonreír mientras peinaba su cabello con mis dedos y sostenía su hermoso rostro con mi otra mano acercandola mas a mis labios.—No volveré a dejar que me quiten a lo que más amo—confesé dejando un pequeño beso en sus labios, no era el beso más largo, ni el más profundo, ni el más excitante,pero fue lo suficientemente perfecto para hacerla sonrojar.

—Besas bien Jason— susurró ocultando su rostro entre sus manos.

—Gracias, me alagas mucho niña- sonrei apartando sus manos de su rostro para poder verla mejor.—Yo... cuando te conocí me recordaste mucho a ella- confesé.

—¿Por qué?.

—Cuando la conocí a ella también intentó matarme, la diferencia es que antes yo era humano.

—¿La marcaste?— preguntó sin rodeos con un tono demasiado inocente para la pregunta.

—Lo hice—conteste con una sonrisa recordando el momento cuando lo hice.—Pero no duró mucho, ella murió poco después de que la marqué.

—¿Y puedes marcar a otra persona?

—Si, porque su marca desapareció en el momento que ella murio, asi que supongo que esta bien. Sí ella siguiera viva yo le pertenecería a ella y ella me pertenecería a mi, eso es lo mas hermoso de tener una marca... al igual que tu, la extraño mucho, y daría lo que fuera por volverla a ver, aunque sea un momento, aunque solo fuera un beso, o el simple hecho de acariciar su cabello o volver a ver sus ojos color verdes.—hable con nostalgia en mis palabras sintiendo un dolor en lo más profundo de mi ser.

         Jade y yo somos iguales, ambos perdimos a personas especiales y ambos anhelamos verlos más que nada a pesar de que sea imposible.

"¿Podre estar con Jade a pesar de que aún espero despertar al lado de Violetta?"

—No me gusta ver tu rostro triste Jason—habló ella acercándose a mis labios, quedando justo frente a mí, chocando su frente con la mía a tal punto de que el espacio personal fuera lo menos importante en el momento.

—No dejaré que nadie te haga daño Jade.

—No seas idiota Jason, se cuidarme sola—dijo jactándose de sí misma mostrando esa confianza excesiva.—Pero si estoy en peligro no dudare en llamarte.

                De nuevo mostró esa hermosa sonrisa de la cual podría perderme todo el dia. Acaricie su cabello de una forma que se quedara grabado cada uno de sus cabellos en mis dedos. Después de intercambiar miradas tiernas y algo tímidas de su parte finalmente rompí con él poco espacio entre nosotros.

(Narra Justin)

—Ya es de noche, deberías irte Amelia—hablé sin despegar la mirada de mi libro. Amelia estaba sentada en uno de los sillones de la biblioteca fingiendo estar interesada por la lectura.

—Pero pensé que podríamos...

—Pensaste mal—la interrumpí antes de que pudiera terminar su oración, no tenía el mínimo interés en pasar más tiempo con ella. Desde el banquete no se quiere alejar de mi, ya pasaron 3 dias y aun no se si Jade Persson está viva

—Tu mamá me dijo que te gustan los pasteles, y una de mis criadas me dijo que hay una pastelería muy buena en la ciudad... ¿quieres ir?—preguntó sonrojada.

"Es la persona más molesta que he conocido en todo mi maldito existir"

—Amelia, tus padres estarán preocupados, puedes hacerme un pastel si quieres. No me gustan los pasteles de las tiendas, pero puedes hacerme uno—hablé indiferente fingiendo mostrar interés en sus palabras.

—¡Entonces te haré uno!—dijo emocionada corriendo rumbo a la cocina.

            Ya estaba fastidiado de soportar esa actitud tan falsa. No tenía razón para estar con Amelia pues yo sólo mostraba interés en Jade Persson y odiaba la idea de que alguien tan peligroso como Jason estuviera con alguien tan delicada como ella.Necesitaba verla al menos un poco, a pesar de que su cuerpo estuviera frío, a pesar de que sus labios estuvieran azules, yo quería estar estar al lado de ella, sostener su mano hasta que su hermoso cuerpo de volviera polvo.

—Gracias—dijo Leonard entrando a la biblioteca con una sonrisa, al menos había alguien felíz.

—Te vez feliz— dije levantando lanñ mirada de mi libro.

—También tu lo estarás cuando te diga lo que está a punto de pasar.

—¿De qué hablas?— pregunté interesado.

—El maldito Sangre Pura que está causando todos los problemas está en las montañas del norte y los mejores cazadores incluyendome iremos a matarlo de una buena vez.

—¿Jason irá contigo a esa misión?.

—Y Jade estará sola...

******

Muchas gracias @LauraParraCruz por los dibujos😍

Si alguien se siente confundido o necesita la explicacion de alguna escena (porque no soy muy buen escribiendo :v) porfavor haganmelo saber.

Talvez haiga Hiatus por 3 semanas o más (no estoy romanticamente bien TnT)
Proximamete hare un cap explicando como funciona todo el universo de Jade.

Amantes del Yaoi esperen 7w7r

Bye~❤

Perdonen errores de ortografia...