Shoto no estaba acostumbrado a la tecnología, no era aún ignorante sobre el tema pero tampoco era un experto o alguien que pasará mucho tiempo usándola. Dicho eso, aunque sus expresiones no decían nada, estaba bastante sorprendido de la forma en como su compañera podía escribir tan rápido en la computadora.

–¿Qué te parece?

La albina interrumpió sus pequeños pensamientos mientras le mostraba la pantalla de la computadora.

–Creo que los colores son perfectos, no me parece buena idea editar tanto la fotografía, las otras no están tan editadas…aunque la iluminación de esta zona no me termina de convencer.

Agarró el tenedor y comió un poco del pastel que tenía en el plato, mientras miraba con curiosidad a Shoto en espera de alguna respuesta.

Ambos jóvenes se encontraban en una cafetería, era un pequeño descanso que habían decidido tomar después de llevar varias horas estudiando para los exámenes que vendrían pronto. Pero sobre todo, para que Aki pudiera continuar con el proyecto que en un principio los había unido.

Después de pensarlo un poco, Todoroki simplemente subió ambos hombros. Ahora el problema no era la tecnología, eran las redes sociales y que muchas veces simplemente no entendía lo que su amiga estaba diciendo.

–Creo que está bien.

Una red social. Cuando la chica se acercó para hablarle sobre el tema no supo qué decirle, ¿para que él quería utilizar una? No tenía idea de cómo sacar fotos lo suficientemente llamativas como para ponerlas, mucho menos sabría a qué tomarlas, ¿A un gato? ¿A él mismo? No sabía posar y se verían extrañas, además, aunque tenía algunos amigos no veía la razón para tener una cuenta.

Pero cuando la chica le comentó que era para un trabajo de su su clase de marketing, que la iba a administrar completamente, y que solo necesitaría su opinión de cómo iban quedando las cosas, no le pareció que sería un trabajo complicado.

–¿Y qué te gustaría poner en la descripción?

Shoto simplemente subió ambos hombros, pero de igual forma tomó la computadora y miró fijamente la pantalla, como si eso le llegará a dar mágicamente la inspiración. Para su suerte Aki le había dado varios consejos para hacerlos, también le había mostrado varios ejemplos para que tuviera algunas ideas, y también podía seguir algunos ejemplos de sus demás compañeros de clase.

Estuvo pensando un poco, ¿y si hacía caso a las ideas que Uraraka y Mina les había dado? No sabía si llegaría a animarse lo suficientemente como para seguir sus consejos, después de todo los temas románticos nunca habían sido su fuerte.

Cerró sus ojos por unos segundos y empezó a tocar las teclas para poder escribir la pequeña descripción. No estaba acostumbrado a ser una persona cariñosa ni mucho menos a demostrar su afecto, por esa razón una pequeña muestra, incluso por más pequeña que fuera, se sentía grande para él y en ese momento se sentía nervioso, aunque claro que nunca lo diría y menos en frente de Aki.

–¿Así está bien?

Preguntó mientras le devolvía la computadora y tomaba un poco de su té para calmar sus nervios. Aunque ya había estado varias veces con la chica, sabía que si estaba mal no lo haría sentir mal.

–Me parece perfecto.

Flashback.

Aki se encontraba con la mirada perdida en el pizarrón mientras movía de un lado a otro su lápiz, su mente estaba muy ocupada mientras organizaba sus ideas, pensar en todas las posibilidades para después poder ir descartando.

–Himejima–la llamó su compañera del banco de adelante–¿aún no sabes cómo empezar verdad?

La pregunta era simple, pero a decir verdad todos estaban tan perdidos en esa clase que era difícil pedir ayuda a alguien. 

Aki simplemente asintió mientras dejaba de mover el lápiz y la veía a los ojos.

–Tengo algunas ideas–dijo de forma vaga y pensativa, como si intentará convencerse de sus propias palabras–pero, aún no tengo nada muy claro.

Su compañera asintió con la cabeza, y  volvió a su cuaderno. 

Antes de las vacaciones, los profesores le habían avisado que usarían lo que aprendieron en la primera parte del año para hacer un trabajo en conjunto con varias materias. Era más que nada marketing, pero también estaban usando mucho de lo que habían aprendido en otras materias, como lo era la edición de imágenes y videos, diferentes tipografías o teoría del color. Lo único que dijeron aparte de eso, fue que tendrían que trabajar con otra persona, el resto era sorpresa.

Ahora que habían regresado de las vacaciones, tenían que hacer el trabajo. Y eso era crear y administrar una cuenta de algún estudiante que fuera de la clase de héroes, podía ser la 1A o 1B, no se recomendaba que fueran de segundo año, ya que ellos estaban más ocupados con sus pasantías como héroes y sería más difícil organizar, pero no había nada que lo impidiera.

Los cursos del departamento de gerencia abarcan más temas de los que normalmente las personas de afuera de la Ua creen. Entre esos temas, se encuentran aquellos que hacen de intermediario entre los héroes y la sociedad, después de todo no importa que si tienes una licencia, si en una batalla los ciudadanos no saben distinguir entre el héroe y el villano, ¿en quien debería confiar? 

Aunque se suele hacer una gran división entre el héroe y su vida personal, es importante que los ciudadanos se sientan seguros con las personas que prometen protegerlos y darles seguridad. Por eso es que este departamento es tan importante, después de todo los héroes son humanos y a veces puede ser difícil mantener una buena imagen, y nunca viene mal una mano que los ayude.

Además, este trabajo también servía para hacer más visible la Ua y a los futuros héroes de Japón. 

Aunque Aki tenía varias ideas, primero y lo más importante era pensar en la persona que le pediría ayuda, todo dependía de ello. Por ejemplo, si le pedía ayuda a Uraraka Ochako la paleta de colores y la tipografía que usaría serían completamente diferentes a los que usaría si le pidiera ayuda a Monoma Nieto.

Por el momento pensaría en varias ideas sueltas para diferentes personas, y después tendría que ir a preguntar quién aceptaba. Aunque por el momento serían solo ideas simples.

Agarró su lápiz y empezó a escribir varios nombres en su cuaderno.

Bakugo katsuki. Era actualmente uno de los estudiantes de la 1A más conocidos. También tenía una mala fama, no lo conocía en persona pero los rumores que había sobre él eran exagerados, y aunque una parte de ellos fuera real, no dejaba de ser un rumor y siempre las personas terminan exagerando. El problema es que lo había visto varias veces, y no estaba lista para trabajar con una personalidad tan…impredecible.

Mina Ashido era una de las chicas con las que más había hablado hasta el momento. Era agradable pasar tiempo con ella y seguramente trabajar con ella sería sencillo, ya que seguramente tendría varias ideas elocuentes, especialmente porque ya tenía un estilo bien marcado y se ahorrarían el buscar uno. Pero, justamente, era una persona muy extrovertida y no dudaba de que tendría más de una propuesta al igual que Sero Hanta o Hagakure Toru.

Todoroki Shoto, había escuchado que era una persona seria y sin sentimientos, o eso había escuchado, para Aki era simplemente un introvertido mostrando su naturaleza y listo. Había rechazado a varias chicas y chicos, pero le encontraba sentido porque ninguna de esas personas se había tomado la molestia de acercarse primero.

Al final decidió marcar a varias personas en la lista de posibilidades, ya después en el almuerzo aprovecharía para hablar con alguno de ellos y si la suerte estaba de su lado, ya poder dar ese primer paso.