Chanyeol estaba empezando a rendirse ante el aroma exquisito del omega quien lo estaba embriagando tan profundamente que sus sentidos se encontraban aturdidos al nivel que, en cualquier momento podría cometer una locura sin retorno.

Cuando sus labios estuvieron cerca de los de Baekhyun, cayendo bajo el efecto de las feromonas, un llanto fuerte se escuchó y lo saco de su trance.

—Chanhyun, —susurra el alfa para dejar al omega quien solo suspira y va detrás del alto.

Chanyeol camina rápidamente hasta la habitación de su bebé quien lloraba y movía sus manos esperando a que alguien lo cargue.

—Ya cariño, ¿Qué sucede? —Chanyeol toca el pañal de Chanhyun, —parece que alguien necesita un cambio de pañal, —dice divertido mientras lleva al bebé a la mesita acolchada dónde lo recostó para quitarle el pañal sucio. —Baek, por favor pásame un pañal y las toallitas.

Baekhyun se encoge de hombros y respira profundamente intentando controlar las olas de su celo. Se mueve para ir a dónde estaban las cosas que el alfa le pidió y levantó la manta que estaba encima, pero un sonido de algo golpeando el suelo hizo que ambos prestarán atención.

—Esas son… —Chanyeol se quedó con la palabra en el aire mientras miraba la caja sobre el suelo. —Son tus supresores, —arquea una ceja mirando a Baekhyun.

—Oh, creo que ayer cayeron ahí cuando estaba con Chanhyun en el sofá, —sonríe tontamente mientras se rasca la nuca.

—Aja, tomate la pastilla, —dice seriamente para luego tirar el pañal a la basura.

—Pero hace un rato tú y yo-

—Dije que te la tomes, —le corta bruscamente para luego caminar hacia Baekhyun y coger los paños húmedos junto al pañal nuevo, —quiero pensar que no los ocultaste a propósito.

—Claro que no, —su rostro decayó, —ya la voy a tomar. —Se dió la vuelta cabizbajo y se fue a la cocina casi arrastrando sus pies.

La mañana paso igual a las demás; con el alfa yéndose a trabajar con su lonchera en la mano y Baekhyun quedándose a cuidar a Chanhyun. Sinceramente el omega se aburría mucho, a él nunca le gustó esa vida de hacer labores domésticas, pero tampoco le gustaba trabajar… Era bastante flojo, lo confesaba.

Quería salir un rato, no aguantaba estar tanto tiempo encerrado; iría a dar un paseo con su bebé así que fue a darse un baño y luego vistió a su pequeño para finalmente salir de la casa.

Respiro aire fresco y sus pies se dirigieron al parque cerca de la casa, veía a los niños jugar, los árboles y a una que otra pareja estando acaremalada, se sintió un poco triste pensando que quizá nunca podría estar así con Chanyeol.

Mientras caminaba escucho un sonido extraño, era como el que se hacía cuando se presionaba el botón de una cámara, dió la vuelta y solo vio a una chica tomándose fotos por lo que no le dió importancia.

Mientras se sentaba para darle de lactar a su bebé, se sintió un poco incómodo, era como si alguien lo estuviera mirando, pero cuando veía a los lados solo habían personas pasando, nadie estaba observándolo.

Después de un rato su pequeño se durmió así que Baekhyun decidió comprarse un helado, hace tiempo no probaba una golosina por lo que gimió de placer ganándose una mirada rara por parte del heladero por lo que solo se alejó para caminar hacia la casa, las calles estaban algo solitarias debido a que eran horas laborales, pero no se preocupo ya que aún era de día.

Chanhyun se despertó cuando Baekhyun se terminó su helado y empezó a lloriquear un poco hasta que su mamá lo arrullo y volvió a dormirse.

Unos pasos se escucharon detrás de Baekhyun haciéndole sentir nervioso, por lo que se detuvo para darse la vuelta, pero no vio nada, solo había un gatito caminando por ahí, todo estaba en silencio.

Apresuró un poco el paso y pudo escuchar claramente pisadas detrás, pero ya no quería mirar así que solo siguió caminando hasta que llegó a una calle concurrida por lo que se atrevió a mirar atrás otra vez encontrando el lugar vacío. Pensaba que quizás estaba paranoico.

Antes de llegar a la casa, paso por un tienda de abarrotes dónde compró lo necesario para cocinar, luego fue directamente a su casa. Cuando llegó se encontró a Chanyeol en el sofá sentado viendo televisión.

—¿Cómo así tan temprano aquí? —pregunta Baekhyun mientras deja las fundas sobre el mesón.

—¿Por qué la pregunta? ¿Te frustre algún plan? —pregunta burlonamente mientras apaga el televisor y se levanta para sentarse en un taburete frente al mesón.

—No digas tonterías, solo me sorprendí, es todo. —Frunce el ceño mientras se va para dejar a su bebé en su cuna.

—Hoy salimos más temprano debido a que comenzó a llover demasiado fuerte en ese lugar, ya mismo debería empezar a llover aquí también, —dice mientras dobla su cuello a un lado tronando sus huesos.

Baekhyun asiente con su cabeza y empieza a cocinar bajo la mirada de Chanyeol; algo llamo la atención del omega, el aroma del alfa tenía otro encima, uno de omega.

—¿Ahora también aceptan a omegas en trabajos de albañilería? —dice sarcástico mientras corta el pollo.

—¿A qué te refieres? —pregunta sin entender el alfa mientras frunce el ceño confundido.

—Apestas a omega, —da un fuerte golpe con el cuchillo que incluso rompió el hueso del ave.

Chanyeol arquea una ceja cuando ve la hoja del cuchillo y luego desvía la mirada en cuanto el aroma a enojo de Baekhyun llegó a su nariz, jamás lo había visto celoso antes.

—¿Qué tendría de malo? Tú y yo no somos nada, —lo mira directamente a los ojos. —Si yo apesto o no a omega, no es asunto tuyo.

—¿Entonces si yo apestará a alfa tampoco sería asunto tuyo? —deja el cuchillo a un lado y pone una mano en su cadera mientras mira de mala manera a Chanyeol.

—Lo es, porque tú tienes que cuidar a Chanhyun y esa fue la única condición para que te quedarás. Si quieres irte con un alfa tienes la puerta abierta, pero no podrás volver. —Dictamino mientras se levanta para ir a su habitación.

Baekhyun dió un fuerte golpe con el cuchillo sobre el pollo sintiéndose molesto. Sabía por el aroma que el alfa no se había acostado con aquel omega, pero solo saber que había estado demasiado cerca de alguno hasta que su olor quedó impregnado sobre él, le hacia doler el estómago.

Después de almorzar, las gotas de lluvia empezaron a caer con fuerza provocando un ruido molesto sobre el techo, afortunadamente Chanhyun no se despertó por el sonido. Baekhyun supuso que el bebé había heredado el sueño de su papá ya que ambos dormían como rocas a pesar del ruido.

Baekhyun fue al sofá y por unos segundos se quedó pensando, recordaba un poco lo que había sucedido cuando huyó de aquel lugar, lo que hizo para poder salir de ahí. Ese lugar donde aquel alfa lo había llevado estaba bastante lejos de su hogar, pero igualmente tenía miedo en ocasiones.

Chanyeol por su parte estaba empezando a despertar, aquel omega lo había agotado, no la madre de su hijo, sino aquel omega mimado de la construcción. Solo escucharle parlotear con aquel fingido coqueteo le fastidiaba; no tenía nada en contra del chico, era agradable, pero sinceramente hace tiempo que había sacado de su sistema el querer estar con un omega, además ya no le causaba atracción el aroma de los omegas, a menos que estén en celo y sabía a qué se debía, era por aquella droga que tomaba para suprimir su deseo sexual.

Con Baekhyun ahí se sentía confundido, sabía que seguía enamorado del omega, pero no quería volver a pasar por todo lo que había sucedido, no quería volver a entregarse a alguien. Ahora su única preocupación era solo su hijo.

Pasaron los días y cada vez que Baekhyun salía de paseo con su pequeño volvía a tener esa sensación como si alguien estuviera detrás de él, ¿Podría ser algún efecto secundario de su celo? Quería pensar que sí, ese era su último día por lo que supuso que ya no tendría esa sensación molesta.

💔

—Quiero a esa puta aquí de nuevo, —dijo con enojo un alfa que a duras penas podía hablar.

—Señor, aún no se encuentra el lugar a donde fue el omega, —se escucha la voz de otro hombre.

Un alfa que estaba en silla de ruedas y con la cara casi deformada, estaba hirviendo de ira por aquella respuesta, su cuerpo estaba demasiado débil para moverse pero aún así pudo empuñar su mano de rabia.

—Entonces hazlo mejor, quiero a la perra que me hizo esto, —finalizo mientras movía la palanca de su silla de ruedas para poder moverla.

—Apenas tengamos noticias de él, se lo haré saber, —dio una reverencia y salió de la habitación.

El beta camino hasta salir del edificio y se subió a su auto donde estaba esperándolo su hermano mayor que estaba conduciendo, el auto se fue de ahí.

—¿Para que te llamo? —pregunta el mayor.

—Lo mismo, sigue obsesionado con Baekhyun, —rueda los ojos y saca su celular.

—¿Baekhyun? —frunce el ceño confundido.

—La gatita dorada, —sonríe burlón.

—Oh ya, el omega que tenía un gran culo, me encantaba cogermelo, —se lame los labios ante el recuerdo en su mente.

—Ni que lo digas, todos amaban hacerlo, —se encoge de hombros.

—¿Y qué le dijiste al jefe?

—Que no sé dónde está. —Empieza a revisar sus mensajes.

—Pero si sabes, ¿No? —se detiene en un semáforo y mira a su hermano menor.

—Lo sé y también se que ha tenido un hijo, pero bueno, por algo tenía leche.

—Ese fetiche tuyo es tan raro, —empieza la marcha nuevamente.

—Uhm, lo que digas.

—¿No le dirás al jefe?

—No, ¿Para qué? Lo más seguro es que lo mate después de lo que le hizo, —se ríe, —un poco más y Baekhyun nos habría librado de ese viejo loco.

—Nunca pensé que un omega pudiera hacer algo así, se veía tan delicado y frágil… Pero ¿Entonces por qué lo mandaste a seguir?

—Ay hermano tonto, ¿Por qué darle un pastel a alguien más cuando puedes comertelo tú solo? —sonríe de lado y arquea una ceja mirando a su hermano.

—¿Lo vas a secuestrar? ¿Crees que su familia va a dejar que te lo lleves sin que se llame la atención con una búsqueda?

—Tiene un alfa, —hace una mueca, —y no parece ser del tipo con el que uno se quiera meter. —Suspira, —aunque el tipo siempre se va temprano y regresa tarde.

—¿Por algo sabes usar armas no? Solo matalo y llévate al omega. —Dice quitándole importancia.

—¿No que no querías llamar la atención? Si fuera una orden del jefe no me importaría hacerlo, pero si lo hago yo solo, no tendría un respaldo en la policía, —chasquea la lengua y mira una foto de Baekhyun dando de lactar a su hijo y sintió un repentino tirón en su entrepierna.

—¿Y qué harás? —lo mira de reojo.

—Ya pensaré en algo, siempre lo hago, —se encoge de hombros, —pero esa perra será solo para mí. —Una sonrisa cruel se dibujo en su cara.

💔

Chanyeol estaba enluciendo una pared y cuando terminó se dió la vuelta para tomar su botella de agua, pero se sorprendió cuando vio al omega acosador dándole la botella.

—Te ves muy cansado, deberías sentarte un rato, —dice con una sonrisa tierna.

—Kyungsoo ¿Tú padre no se molestará porque siempre estás aquí? —pregunta intentando no sonar grosero.

—Él está muy ocupado como para preocuparse por eso, además ya soy mayor de edad.

—Entiendo, —fue lo único que dijo para luego abrir la botella y tomar agua.

Kyungsoo pensaba que valía la pena saltarse las clases de la universidad para ver imágenes como la de ahora, al alfa sin camisa con manchas de cemento en la piel, aquellos fuertes y marcados músculos que eran sus abdominales, sus pectorales y aquellos brazos en los que quería acurrucarse o ser sujetado mientras el alto se empujaba dentro suyo…

—¿Estás bien? Tu mirada estaba algo perdida, —pregunta Chanyeol mientras mueve su mano frente al rostro del omega.

—Oh sí, estoy bien, solo estaba recordando algo, —sacude su cabeza intentando despejar su mente de aquellas escenas dónde el alfa lo hacía suyo.

—Creo que deberías ir a casa, parece que el sol te está afectando porque tus mejillas están rojas, —menciona preocupado.

—Oh no te preocupes, —agita su mano quitándole importancia. —¿Ya comiste? —Cambia de tema.

—Aún no, lo iba a hacer ahora que termine con esta pared. —Menciona mientras recoge sus lonchera para buscar un lugar donde sentarse.

—¿Cocinas? Que lindo, nunca he conocido a un alfa que sepa cocinar, —sonríe encantado.

Chanyeol rasca su nuca mientras desvía la mirada, no porque no supiera cocinar, sino porque él no lo había hecho. Se sienta en una banca cerca con el omega siguiéndolo.

—Sé cocinar, sí. Aunque no fui yo quien lo hizo, fue la mamá de mi hijo, —explica mientras abre la lonchera para empezar a comer.

—¿Estás enlazado? —los ojos del omega se amplían bastante y sus labios se abren ligeramente.

—No, —dice intentando no sonar estúpido ya que no quería decir algo como "solo estamos juntos por nuestro hijo, pero dormimos aparte" porque eso más parecía escusa de infiel aunque técnicamente si era cierto. —No tenemos una relación, solo un hijo en común. 

—¿Y que hacen cuando ella tiene su celo? —dice frunciendo su ceño, no estaba enojado. Solo se sentía algo afligido por saber que no sería tan fácil conquistar a aquel alfa.

—Es "él" y cuando sucede toma supresores, —fue lo que dijo antes de seguir comiendo.

—Entonces ¿No tengo competencia? —se sienta junto al alfa y baja sus pestañas mientras su brazo se junta con el del alto.

Chanyeol solo suelta una risa nerviosa ya que no quería apartar al omega porque se vería grosero y el padre del chico era quien estaba pagandole, pero sinceramente no estaba cómodo con tanta cercanía y más oyendo lo que acababa de oír. Sabía que él estaba coqueteandole, pero que se lo diga así tan de frente, le hacía sentir como comprometido a algo.

—¿Tú estás intentando tener algún tipo de relación conmigo? —Chanyeol se gira a verlo una vez acabo de comer.

—Uhm quizás, —se encoge de hombros y sonríe mientras delinea el músculo del brazo de Chanyeol con su dedo. —Puede ser, quien sabe, —susurra.

—¿Por qué? Soy solo un albañil… ocasional, y tú eres hijo de una familia rica, —frunce su ceño.

—Me gustaste desde que te ví, —se acerca más al alfa. —Que importa el dinero, soy solo un omega al que le gusta un alfa.

—El mundo es más complicado que eso, —guarda los recipientes vacíos en la lonchera. —¿Que dirá tu padre? —pregunta intentando encontrar alguna buena escusa para sacarse al omega de encima.

—No se tiene que enterar, —pone su palma sobre el pecho duro del alto mientras acerca sus labios a los suyos.

—¿Entonces yo sería solo tu secreto? —arquea su ceja pensando que el omega no sería tan osado de besarlo por lo que no se apartó.

—Bueno, solo hasta que termine la universidad, luego podríamos vivir juntos. —Susurra.

Chanyeol no podía creer lo que estaba escuchando. Al parecer Kyungsoo nunca había salido de su burbuja de dinero, no sabía lo que estaba diciendo al proponerle algo así. Una pequeña risa salió de sus labios.

—¿Viviremos en los suburbios con una cerca blanca, muchos niños y un perro mientras llegó de trabajar y me esperas con un pay de moras? —Se burla.

Kyungsoo hace una mueca y luego une sus labios a los del alfa que agranda graciosamente sus ojos. Chanyeol realmente no creyó que el omega sería capaz de hacerlo, ahora no sabía que hacer, se había quedado pasmado. Desde hace años no había probado otros labios que no fueran los de Baekhyun.

Kyungsoo colocó ambas manos sobre el pecho de Chanyeol quien se apartó y puso sus manos sobre los delgados del omega quien aún estaba con los ojos cerrados.

—¿Qué pasó? ¿No te gusto? Lo siento, ese fue mi primer beso, no sé hacerlo bien, —susurro algo avergonzado.

Chanyeol ahora se sentía peor, sabía que el primer beso debías dárselo a alguien a quien quisieras y te quisiera también, el resto de besos no importaban, pero aquel primer recuerdo debía ser especial.

—No es eso, —rasca su cabeza sin saber cómo decirlo.

—¿Entonces? ¿Aún sientes algo por la mamá de tu hijo? —pregunta algo triste.

—Tampoco es eso, es solo que lo tuyo conmigo no funcionaría. —Acaricia la mejilla del pequeño, —somos de mundos diferentes.

—¿Déjame intentarlo? Por favor, te demostraré que soy bueno para tí, —hace un puchero.

—Creo que es al revés, más bien yo no soy bueno para tí. ¿Qué podría darte? No tengo un título de universidad, si acabe el colegio fue un milagro, no tengo un trabajo fijo o una casa lujosa. Yo no podría darte los lujos que tú seguramente tienes todos los días.

—Pero no pensemos en eso ahora, además yo puedo trabajar también, —sonríe.

—Kyungsoo, tu eres un chico muy hermoso, y lindo, tienes tu vida por delante. Seguramente hay hombres mucho mejores que yo para tí, —deja un beso en su frente.

—Aunque trates de apartarme seguiré viniendo, —se cruza de brazos enfadado, —tú me gustas de verdad.

Chanyeol no sabía que más decir para alejar al omega. Al menos hasta que termine esa casa, tendría que seguir soportando al pequeño acosador, luego podría irse y olvidarlo. Probablemente Kyungsoo se olvide de él pronto, en realidad pensaba que solo era algún fetiche para el omega. El albañil que se folla al dueño.

💔

Baekhyun estaba feliz armando la carriola que Chanyeol había acabado de comprar, su brazo podría descansar ahora cada vez que tenía que salir. Era una muy bonita y grande para que su pequeño pudiera viajar tranquilamente.

Puso a Chanhyun dentro y parecía que le gustaba por los sonidos que hacía, al menos por un rato se le quitó el mal humor a Baekhyun ya que Chanyeol seguía viniendo con aquel aroma a omega.

Cuando Chanhyun se durmió, Baekhyun lo dejo en su cuna y acomodó la carriola en la habitación del bebé. Le encantaba estar en ese cuarto ya que olía a su hijo y los aromas de él mismo mezclado con el de Chanyeol, esa habitación era como su relajante personal.

—Alfa… ¿Puedo hablar contigo? —pregunta tímido.

—¿Sobre? —pregunta Chanyeol mientras bosteza, ya era muy tarde y quería dormir.

—Es sobre algo… No quiero que te enojes ¿Sí? —Se sienta en la cama quedando de frente al alfa quien ya cerraba los ojos. —No te duermas.

—Lo siento, estoy muy cansado, —se frota un ojo e intenta enfocarlo. —¿Qué ocurre?

—Lo que pasa es que… No tengo ropa, —dice tímido. —No sé si quizás puedas comprarme un poco. —Juega con el filo de la manta.

—¿Ropa? —vuelve a bostezar. —Sí, seguro. ¿No importa que no sea de diseñador? —aun con todo aquel cansancio, se burló.

—No me importa, solo quiero ropa, —se cruza de brazos.

—No tengo tiempo para comprarte ropa, así que mañana te daré dinero para que vayas tu mismo a hacerlo, —dice con la voz casi arrastrada por el sueño.

—Gracias alfa, —repentinamente saltó para abrazarlo y sin dudarlo, lo beso.

El sueño de Chanyeol se esfumó y se quedó quieto por unos segundos para luego apartar al omega quien estaba sonrojado.

—No tienes que hacer eso, —mira hacia otro lado. —Ve a dormir, —susurra sintiéndose algo avergonzado.

—¿Por qué? Tenemos un hijo y ya nos hemos besado antes, no hay nada de malo. —Se cruza de brazos molesto. —¿Acaso es por aquel omega con el que te ves? Dices que no tienes tiempo para acompañarme a comprar ropa, pero si tienes tiempo para estar con aquella puta. —Estaba hirviendo del enojo.

—En primer lugar, si hay algo de malo, tú y yo ya no somos pareja, no te debo ninguna explicación de con quién me veo o quien no, en segundo lugar, si digo que no tengo tiempo es porque no tengo tiempo y por último no lo insultes porque no lo conoces.

Baekhyun lo miro de una manera que incluso intimido un poco a Chanyeol, pero no lo demostró. Sus ojos estaban enrojecidos y apretaba sus labios tan fuertemente que pensaba que iban a sangrar.

—¿Cómo puedes? Yo te dí un hijo y me haces esto, —estaba empezando a llorar de enojo. —¿Por qué no podemos empezar de nuevo? —susurra dolido.

—Baekhyun, no quiero discutir, por favor ve a dormir. —Suspira sintiéndose más cansado. Kyungsoo y Baekhyun le cansaban más que todos sus empleos.

—No renunciaré a tí tan fácilmente ¿Entendiste? —Se levanta y lo mira directamente a los ojos, —yo soy la madre de tu hijo y quién se quedará contigo.

Chanyeol solo se quedó boquiabierto al ver esa faceta de Baekhyun, luego vio como el omega se iba dando pasos fuertes. Ahora se sentía como un premio que ambos omegas estaban intentando ganar y sinceramente no le gustaba sentirse como un objeto. Además ellos ni siquiera se conocían y ya estaban compitiendo. Chanyeol pensaba que nunca les dió alas a ninguno de los dos, pero mientras más los alejaba, ellos más se le pegaban.

Pensaba que tenía que dormir un año para poderse recuperar de todo el trabajo físico y el estrés que ambos omegas le provocaban. Antes cuando quería un omega, el suyo lo alejaba y ahora que no quería nada, estaban dos que jalaban de él para ver quién se lo quedaba.