09
—Ten, toma un poco de esto. — Taehyung le pasó una taza llena de chocolate con malvaviscos al tope, JiMin sonrió agradecido y la tomó entre sus manos para darle un pequeño sorbo.
El caliente líquido bajó por toda su garganta, dejando un cómodo calor en su pecho. Miró la taza que tenía en sus manos y un puchero se formó en sus labios.
También había hecho muchas veces chocolate caliente para YoonGi, siempre trataba de cocinar varias cosas para que el mayor disfrutará, pero postres nunca faltaban, siempre debía de tener hecho un pastel, una tarta, batidos de fresa o chocolate caliente para que ambos pudieran disfrutar.
Un ligero brilló en sus ojos no pasó desapercibido por parte de Taehyung. Este quería preguntar la razón del por qué JiMin estaba ahí, no es que no le agradara ver a su amigo después de tanto tiempo, la verdad es que JiMin había sido un buen amigo en los primeros años de universidad, lamentablemente el chico se había dado de baja después del primer año, dejando así su tercer semestre incompleto. Taehyung sabía un poco sobre la razón detrás de eso, pero ahora, realmente tenía muchas preguntas.
El rubio había llegado a su nuevo departamento hace algunas horas, primero le había llamado, diciéndole si podía quedarse unos días con él, esperando no incomodarlo. Taehyung aceptó, pues no era problema para él que el amigo que no veía desde hace tiempo estuviera ahí por algunos días.
Ahora, tras ver su rostro un poco decaído y sus ojos brillando en lágrimas, le hizo sentir mucha curiosidad por lo que estaba pasando con JiMin.
—Umm... ¿quieres hablar acerca de lo que esta pasando?— preguntó el mayor, dándole una tranquila sonrisa —, ahora estamos solos... Jungkook no regresará hasta la noche.
JiMin suspiró y negó lentamente. Se sentía un poco apenado de haber llegado a invadir la privacidad de la pareja, por lo que sabía, ahora Taehyung vivía con su novio, el departamento era grande y lujoso, realmente caro, la sala era grande y los sillones se veían muy elegantes, además de que la zona en la que vivían era muy costosa.
—¿Puedo preguntarte algo?
Taehyung asintió, esperando que JiMin se decidiera por empezar su pequeño interrogatorio.
—¿Cómo le haces para... ya sabes... a-ah...
—¿Vivir con alguien como Jungkook?— terminó la pregunta de su amigo, quien algo tímido asintió, y soltó una ligera risita —, no es tan difícil como crees, es decir, Jungkook da miedo por naturaleza, pero la verdad es que es una buena persona, dejó atrás su vida como traficante de armas y bueno... a pesar de que los peligros no se desvanecen por completo, él está haciendo lo mejor que puede.
JiMin escuchó con mucha atención las palabras de su amigo, no sabía que clase de imán tenían ambos contra esa clase de personas, lo único que sabe es que no fue culpa de Taehyung, sino de su mala suerte al toparse con alguien como Jungkook, aunque claramente ninguno de los dos lo denominaba como mala suerte después de llevar un año de pareja.
—¿N-no tuviste miedo de él?— preguntó el rubio, dejando la taza de lado y abrazando sus propias piernas sobre el sillón.
—Al inicio fue espeluznante, y sí, me daba miedo pero no por lo que hacía — Taehyung suspiró con pesadez —, incluso quise olvidarme de él en una ocasión, y todo resultó mal.
El menor formó un leve puchero. Debía admitir que su pareja si daba miedo, era alto, de buen porte, brazos delgados pero hombros anchos, buena masa muscular y su semblante serio. No sabía si era requisito principal lucir así, pero Yoongi tampoco transmitía las mismas vibras.
—¿Por qué? ¿Vas a decirme que sucede?— está vez fue Taehyung quien empezó su leve interrogatorio.
JiMin permaneció callado durante varios segundos, pensando que tal vez era momento de contarle a su amigo sobre lo que había sucedido, hasta ahora, Taehyung era la única persona con quien aún seguía en contacto, era quien le había abierto las puertas de su casa para quedarse un par de días. Y además, quería un consejo.
—Hace algún tiempo, mientras volvía de Daegu para la granja, encontré a un tipo tirado por el camino hacia mi hogar. No quise dejarlo solo principalmente porque estaba herido, quise ayudarlo así que lo llevé conmigo. Le di mi casa, mi ropa, cociné para él y viví con él durante bastante tiempo — JiMin se aferró con fuerza a sus piernas y podía sentir sus ganas de querer llorar acercándose —, en realidad... le agarré mucho cariño, porque durante todo el tiempo que estuvo conmigo fue muy lindo, no era la persona más cariñosa y habladora del mundo, pero sus acciones eran la forma más linda en la que podía transmitirme sus sentimientos.
Llevó una de sus manos hasta sus ojos, tallando de estos para quitar sus lágrimas rápidamente.
—Resultó ser que, me enamoré de él... incluso tuvimos sexo en más de una ocasión — el menor podía sentir sus mejillas calientes al recordar ese detalle —, pero me equivoqué de nuevo, Taehyung. Él es igual que Eunwoo.
—¿De qué hablas?— el mayor se levantó de su lugar, acercándose rápidamente a JiMin con notable preocupación — ¿él te hizo algo? ¿te golpeó? JiMin si es así...
—No, no, mierda no, él es la persona más linda que haya conocido, siempre me trataba bien y me cuidaba mucho, a pesar de que yo fui quien le salvó la vida, supongo que por eso se sentía en deuda — JiMin suspiró, sus lágrimas una vez más cubrían todo su rostro —, él es igual a Eunwoo por su trabajo.
Taehyung frunció el ceño, estaba confundido. Él conocía muy bien a Eunwoo, ese tipo despreciable que llegó a arruinarle la vida a JiMin, fue él el causante de que JiMin dejara la universidad y se fuera de la ciudad.
—¿A qué te refieres?— volvió a preguntar.
—M-me dijo que su nombre, o más bien, el nombre por el que es conocido es "Agust D"— contestó el rubio, observando como Taehyung abría los ojos algo sorprendido — ¿lo conoces?
—Ahh... bueno... algo así, no realmente, anteriormente Jungkook había tenido algunos problemas con él y su familia, solamente lo conozco de nombre, pero no de frente. Él nunca me involucra en las cosas de su trabajo — hizo un leve puchero — pero vamos, ¿por qué debe ser igual a Eunwoo? Eunwoo es un idiota que merece estar muerto por todo lo que te hizo, si tú me estas diciendo que este tal Agust D era cariñoso contigo... entonces...
—Yoongi — murmuró JiMin, recordando que él no conocía a Agust D, él sólo conocía al tierno y dedicado Min YoonGi, aquel que llenaba de besos su mejilla, lo abrazaba y le daba caricias por todo el cuerpo en la cama —. Su nombre es YoonGi.
Taehyung guardó silencio durante un buen rato, supuso que su amigo estaba recordando a ese tipo, así que no quiso alejarlo de su imaginación por un rato. Él no sabía nada de Agust D, o YoonGi, pero para que JiMin haya caído bajo los encantos de ese hombre, realmente el tipo debía ser todo lo contrario a su familia.
—A veces, las personas como ellos tratan de tomar un rumbo distinto cuando de amor se trata — Taehyung le dijo, llamando su atención una vez más —, pero yo sólo hablo desde mi propia experiencia — se alzó de hombros, para después rodear los de JiMin con cuidado —. Pero también puede pasarte a ti.
JiMin le regaló un sutil sonrisa, agradecido con su amigo por tratar de subirle los ánimos. Debía admitir que desde que Yoongi se fue, había estado imaginando diferentes escenarios en los cuales Yoongi dejaba esa vida y se quedaba con él, en la granja, con sus animalitos y sin nadie más.
———— 🌙 ————
—Necesito que me hagan un favor.
La voz de Yoongi interrumpió la tranquila platica de los tres hermanos en aquélla habitación, Seokjin y Namjoon voltearon sobre el sofá para observarlo.
—¿Qué clase de favor?— preguntó Seokjin, mirando a su hermano con mucha atención, podía ver un ligero cambio en él desde que había regresado a casa.
—Si tiene algo que ver con el lindo vaquerito, olvídalo. — esta vez fue Namjoon quien habló, ganándose la atención de los otros tres en la habitación.
—Sí, tiene que ver con él, pero aún así harán el favor quieran o no — avisó el pelinegro, acercándose por completo a ellos y dejando caer un manojo de papeles en los cuales se encontraba la última información de Jimin antes de dejar de estudiar —. Necesito que me ayuden investigando todo acerca de él.
—¿Para qué? Soy curioso — habló Seokjin, tomando entre sus manos los papeles y escudriñándolos con cuidado.
—Sólo... necesito saber cosas sobre su pasado, su familia, amigos, si se involucró con alguien más — habló el mayor, la preocupación era notable en su rostro, pero trató de disfrazarlo —. Cualquier cosa que haya sucedido en su vida después de que abandonó la universidad.
—¿Para qué?— preguntó Namjoon —. Creí que te habías olvidado completamente de él.
Seokjin seguía observando la fotografía del chico, era lindo, rostro delgado, ojitos bonitos, labios gruesos y cabello rubio. Ahora sabe porque su hermano había caído bajo los encantos de aquel chico. Era demasiado precioso.
Yoongi no les había contado nada sobre lo que había pasado entre ellos dos, pues evitaba a toda costa hablar sobre el menor.
—¿Ocurre algo malo con él para qué quieras investigarlo? — preguntó esta vez Seokjin, llamando la atención de Yoongi e interrumpiendo su pelea con Namjoon.
El pelinegro tragó con dificultad, llevando sus manos detrás de su espalda para jugar con ellas un poco nervioso.
—El día en que me fui... él mencionó que no quería vivir de nuevo esa situación, lo cual me lleva a pensar que él ya se había involucrado con alguien de nuestra clase — YoonGi dibujó una mueca de enojo en su rostro al recordar de lo que JiMin le había hablado —. Lo único que me dijo fue que había tenido una relación con alguien, y que no había terminado muy bien, necesito saber quien es y qué fue lo que pasó.
—Pfff, sólo quieres una excusa para volver a verlo ― Namjoon se cruzó de brazos, muy a la defensiva —, parece que nuestro hermano se ha enamorado.
—Namjoon, cállate — Seokjin interrumpió su platica, odiaba cuando Namjoon actuaba de esa manera. Miró a YoonGi, quien sin expresión alguna los observaba, esperando por una respuesta positiva —. Lo haremos.
El pelinegro asintió, sintiendo el alivio que le provocó aquellas palabras.
—Vamos.
Seokjin y Namjoon abandonaron aquélla habitación después de algunos minutos, dejando a Hoseok y YoonGi solos. El pelinegro estaba algo abrumado, se dejó caer en uno de los sofás y recostó su cuerpo sobre el respaldo, soltando un fuerte suspiro.
Hoseok observó al mayor, se veía algo decaído desde hace bastante tiempo. No quería hacer muchas preguntas sobre lo que había pasado, se sentía feliz de tenerlo de vuelta, pero no le agradaba ver su notable cambio de humor.
—Hyung... — murmuró el menor, haciendo que Yoongi desviara su vista hasta él —, ¿alguna vez... te has enamorado?— preguntó.
—No.
Hoseok formó una leve puchero con sus labios.
—Mentiroso — gruñó bajito —, ¿por qué niegas que estas enamorado cuando realmente lo estás? Eso es estúpido.
—Personas como nosotros no podemos darnos el lujo de enamorarnos — YoonGi respondió, desviando su mirada hasta perderse en cualquier punto de la habitación —, sobre todo porque tu padre no lo quiere.
—Sin importar lo que papá diga, ustedes deberían tener derecho a enamorarse, encontrar una persona con quien estar, y tener una familia — Hoseok sonrió algo triste —. Mi sueño es tener eso, una familia que siempre esté ahí para mí. A veces quisiera tanto poder enamorarme de alguien, pero nunca conozco a nadie por estar encerrado aquí.
—Esa es exactamente la razón por la que no podemos. Vivimos aquí, trabajamos aquí, nos dedicamos a arruinarle la vida a otras personas — Yoongi soltó una risita algo cínica — ¿Quién se enamoraría de alguien así?
Hoseok hizo un puchero. Él realmente aún tenía el sueño de encontrar un romance, una persona que lo quisiera como lo más valioso del mundo, pues su padre no deseaba tenerlo ahí.
—Si yo fuera tú, hubiera ido contra todo lo que mi padre haya dicho y buscaría a ese lindo granjero que me cuidó. — dijo el menor, dándole una suave sonrisa.
Yoongi sonrió de lado, recordando que ese era su plan inicial, pero ya había pasado un mes desde que se había alejado de JiMin. Nadie esperaría tanto por él, no una persona como JiMin.
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