๑

13 de octubre de 2021, 13:25 pm.

El estudio de fotografía de Renata Messi era enorme.

Contaba con varias y espaciosas salas en donde se hacían diferentes sesiones al mismo tiempo, oficinas para que cada profesional pudiera trabajar la edición, y un salón de descanso en donde comían y pasaban el tiempo libre.

No fue para nada fácil llegar hasta donde estaba. 

Pero según un gran amigo; Rodrigo 1, "Persevera y triunfaras".

Aquel no era un día muy ajetreado, y como Santi había insistido tanto, lo llevó a su trabajo.

—¿Esta rica?
Preguntó sobre la pizza que habían pedido hace ratito.

El nene asintió entusiasmado con la boca llena, sin poder hablar.

Y ella ni siquiera pudo darle el primer mordisco a su porción porque le dio asco.

[...]

Fue al baño privado que tenía, y dejó la puerta entreabierta, así podía vigilar que hacia Santi.

Y marcó en la lista de contactos el numero de su mejor amiga.

Por suerte Marianella era una persona que estaba mucho tiempo con el teléfono y le contestaba enseguida.

—Rena, mi vida.

—Hola Maru, ¿Cómo estas amiga?

—Y acá estamos, con un poco de calor, ¿Y vos? ¿Qué andabas haciendo?

—Estoy en el estudio. Santi me acompaño hoy.— Se asomó por el espacio que había dejado abierto. Santi seguía comiendo su pizza, mientras miraba dibujitos en su Tablet.

—¿Cómo se porta ese chiquito?

—Super bien te juro, es un amor.—Pasó una mano por su frente y carraspeó.—Te llamaba porque hay algo que me preocupa, no se...

—¿Qué paso?

—Es raro, estoy con un poco de asco... Yo como, a mi me encanta la comida viste, pero empiezo y al toque me dan como nauseas.

—Mm.— Rena notó que se movió rápido de donde estaba sentada.—¿Y de menstruación como venimos?

—Tengo un atraso, pero el atraso no me preocupa porque yo soy irregular...

—¡Amiga! ¡¿Te duelen las tetas?!

Maru gritó al micrófono, y Rena tuvo que separar el celular de su oreja.—¿Eh?

—Hace una cosa, tócatelas porfavor.

Se quedó un poco confundida, pero le hizo caso. Puso el teléfono entre la oreja y su hombro.—Eh, si me duelen un poco, pero como si me estuviera por venir.

—¡Amiga! ¡Estas embarazada!

—Tu culo esta embarazado, que voy a estar embarazada yo...—Se empezó a reír, pero de los nervios.

—¡Estas embarazada Renata! ¡Dios mio! ¡No lo puedo creer! ¡Que fuerte! Eh... Escúchame, eh, ¿Qué... ? ¿Cómo coges?

—No se Maru, creo que bien.

—No boluda.

—Ah... Con preservativo, pero nos cuidamos...

Maru soltó una carcajada.—Y, evidentemente no. Seguro ustedes hacen el salto de la rana.

—¿Qué es el salto de la rana Marianella? 

—No importa. Ay, como me gustaría estar ahí... ¡¿Te duelen las tetas?!

—Si Maru, te dije que me duelen las tetas.

—Bueno, tenés que hacerte una prueba, porque mi hermana lo único que me decía cuando se entero de que estaba embarazada es que le dolían mucho las tetas...

—¿Por el roce? 

—Si, el roce, no es un dolor normal.

—La puta que me pario.

—Si, amiga.

[...]

Se había puesto a llorar del estrés. Otro síntoma que decía Google era el cambio del humor, y ella estuvo muy cambiante esos últimos días.

Santi estaba en la parte de atrás del auto durmiendo una siesta, y en el copiloto estaba Mandinha, que le acariciaba la mano.

El Evatest que Mandinha había comprado en la farmacia vestida de incognito dio positivo. Dos rayitas rosas marcaban el aparatito de plástico, que ahora reposaba arriba del GPS del auto.

—Siempre quise tener hijos.—Hablaba con la voz gangosa.—Desde chiquita. Pero conozco a Emi desde hace cinco meses. Tengo mucho miedo, de lo que pueda decir el, de lo que pueda decir la gente. Me van a criticar un montón. De que seguro me embarace apropósito para colgarme de el, por la plata, por la buena vida de botinera, y no fue así. Yo no lo planee.—Se sopló los mocos con un pañuelito.—¿Por que la gente es tan mala a veces?

Mandi la miraba con las cejas fruncidas, entendiendo la preocupación.—Rena, Emi te ama muchísimo, y no lo digo porque me de pena verte llorar, o porque seamos amigas, es la realidad, y te lo demuestra día a día. No va a reaccionar mal. Se va a sorprender. Vos misma estas diciendo que no estaba planeado. El es un gran padre y una gran persona, y va a apoyarte en lo que vos decidas... En lo que decidan.—Apretó su mano en forma de apoyó.—Y la gente se puede ir bien a cagar, como dicen los argentinos.—Mandinha consiguió que sonriera un poco.—Lo que mas importa ahora son ustedes dos, y ese bebe que esta creciendo. Las opiniones de los demás no tienen que pesar en tu conciencia, al fin y al cabo ellos no van a vivir tu vida.

๑

Emiliano aun no llegaba de la reunion que había tenido con el cuerpo técnico del Aston Villa. Santi y Rena ya habían cenado, y miraban una película, solo que el chiquito estaba cansado y se había dormido en su regazo.

Cuando terminó de acostar en la cama de dinosaurios al Martínez menor, escuchó la puerta principal abrirse.

A Renata le palpitaba la panza. Pensó que era el pollo que crecía en su interior, pero se dio cuenta que era muy chiquito, así que tenían que ser los nervios.

Se saludaron como siempre esos últimos meses. Un abrazo junto a un besito en la boca.

Esperó a que Emi se bañara, se cambiara la ropa, y comiera lo que preparó para todos.

—¿Santi se durmió hace mucho?—Preguntó tirado entre los almohadones, cansadísimo.

—Un rato antes de que llegaras.—Rena se sentó en el brazo del sillón, mirándolo con preocupación.—¿Emi... ?

—¿Si... ? ¿Qué pasa amor? ¿Estas bien?—Se reincorporó al ver la cara de su novia.

—Hoy pasó algo.

—¿Algo malo?

—No se...—Se levantó y fue hasta su cartera. Sacó una pequeña cajita con sus manos temblorosas. La había decorado después de dejar a Mandi en su casa. 

Se la extendió. 

Emi sonrió confundido, pero cuando lo abrió, la sonrisa fue cayendo poco a poco.

Rena vio eso, sabía que iba a reaccionar mal.—Ay Emi.—Se dejó caer ella también, y se tapo la cara.

Fueron unos minutos de silencio.

Hasta que sintió unas manos en sus brazos, apartándolas de su rostro.—Rena... Esto... Esto no es malo.—Limpió las poquitas lagrimas rebeldes que se animaron a salir.—Perdón si pareció que reaccione mal, solo que me sorprendió.

—¿No lo querés, no?

—No es que no lo quiera Rena. Simplemente me agarró de sorpresa. Todo lo que venga de vos me encanta.—Se sentó al lado de ella, y pasó un brazo por sus hombros.—Fue un error nuestro, ¿si? No quiero que pienses ni por un segundo que fue solo tu culpa. Tendríamos que haber sido mas cuidadosos.—Ella asintió, mientras bajaba la mirada.—Rena yo te amo, y voy a estar para vos siempre. Lo que vos sientas ahora es importante para mi... Lo que decidas... No voy a dejar de amarte si no...

—Yo lo quiero.—Conectó sus ojos lagrimosos.—Lo quiero de verdad.

Sonrió.—Que bueno, porque yo también.

Ella lo abrazó por la cintura, y el la apretujo contra su pecho.

Fue pura emoción cuando se alejaron, y Emi puso una mano en su vientre, aún plano.
—¿Nos escuchara?

—No creo, es muy chiquito.

El arquero acercó su oído a la panza de la fotógrafa, esperando oír algo.
—Hola... ¿Hay alguien ahí?

Claramente nadie respondió, pero fue suficiente para el saber que si.

Dio un besito sobre la tela de algodón.

—Te amo.—Le dijo cuando volvió a su lugar.—Vas a ser la mami más hermosa.—Acarició su cachete, para después darle un beso largo y lleno de sentimiento.

—¿Mami?

Y así fue, como Santi empezó a llamar mami a Rena.

๑

n/a

le dan re potente a la cama estos dos

pura matraca

rena esta en crisis!!!!!!!!! porque no estaba planeado, y es muy pronto
HACE CINCO MESES QUE SE CONOCEN
pero bueno, ellos decieron darle para delante

En la escena de la llamada entre maru y rena me insipire en una video de luzu en el que me rei mucho, les recomiendo que vean sus copilados en tiktok son muy divertidos!!!

avisos de lo que se aproxima

creo que en el capitulo 27 van a pasar varias cosas y creo que voy a poner diferentes fechas porque va a pasar el tiempo un toquesin rapido

yyyyy a partir del capitulo 28 empieza el drama chiquilinas, se viene lo fuerte amikas

preparense para la guerra.

las quiereee, caro