Había comenzado a llover.

Patryk abrió los ojos de golpe cuando escuchó como el temporal comenzaba a arraigarse. La lluvia, gruesa y pesada, golpeaba con fuerza las ventanas y el techo del fuerte. Parecería débil, pero aquel refugio era más sólido de lo que aparentaba.

"Que raro"-pensó el polaco, acercándose a la ventana más cercana-"No parecía que iria a llover"

Pero ahí estaban. Los truenos y relámpagos que resonaban con un estruendo, y los rayos que impactaban sobre la tierra en la lejanía

Para la astrafilia de Patryk, eso era un espectáculo impresionante. Pero si seguía deleitandose con ese fenómeno, se quedaría todo el día parado frente a la ventana. Y no quería eso.

Se obligó a darse la vuelta, a dejar de mirar.

Fijó la vista al sillón en el que descansaba Paul. Le dió risa como dormía: sus cejas se juntaban tanto que parecían una sola, y apretaba los labios en sueños.

Dudulewicz lanzó una risa silenciosa y siguió caminando por la espectral guarida.

Dudó unos segundos antes de abrir la puerta de la cocina, pero resolvió que era lo mejor. Apretó la manija con fuerza antes de abrirla, y suspiró.

No vio a Tord en la mesa.

La puerta estaba abierta.

Patryk abrió los ojos como platos

-¡PAUULL!-gritó

El mencionado no tardó en aparecer. Su cabeza con el cabello despeinado y desprolijo asomó por el marco de la puerta.

-¿Que te pasa?-murmuró, somnoliento y refregándose el ojo sano que le quedaba.

-¡Tord... Tord se fue, Paul!

El mencionado abrió su ojo enormememente. Enseguida se acercó al Polaco, el cual se encontraba inmóvil, presa de la estupefacción.

-¿Como que se fue? ¿No me dijiste que ibas a vigilar?

El otro bajó la mirada

Paul resopló

-Eres un idiota, Dudulewicz- empujó a Patryk al pasar y se asomó por la puerta entreabierta, la cual se mecía fuertemente por el viento. Volvió a entrar y corrió hacia el salón.

Patryk lo siguió. Lo encontró revolviendo un cajón de zapatos viejos, sacó todo y le quitó el forro de cuerina que poseía, dejando a la vista un doble fondo

-¡Atrapa!- Paul le lanzó una CETME Ameli (Jsjs, la única que me acuerdo del Call of Duty :'v) que Patryk atrapó con dificultad

-¿Que... Que vamos a hacer?

-Que voy a hacer-gruñó Paul, calzandose una pequeña pistola en el cinturón de pantalón. Se levantó y le quitó la ametralladora de las manos- Voy a buscar a Tord. Y tú te quedas aquí.

-¡Pero señor....!

-Silencio-lo cortó secamente el otro- Ya hiciste suficiente. Ahora déjame encargarme a mi

-Pero...

El otro lo miró secamente.

-Cuida este lugar. Trataré de traerlo...

Paul apretó los labios, se acomodó el pelo, calzó su arma bajo el brazo y salió a la lluvia, azotando la puerta a su paso.

Dejando a Patryk

Solo

El otro miró unos segundos a la puerta que se había acabado de cerrar. Tal vez Paul no pensara que El polaco tenía la capacidad de pensar, lo que le molestó. No era su culpa que el otro tuviera una crisis depresiva...

...Pero no podía ocultarlo. En serio le importaba Tord.

Sabía a que se referia Paul cuando no terminó la oración. Lo sabía perfectamente.

"Trataré de traerlo... Vivo o muerto"

No lo pensó dos veces. Abrió la puerta, sintió la lluvia que golpeaba su cara y siguió a Paul.