summary: Niall ayuda.

Harry se encierra en la sala de música. Presionándose contra la pared del fondo, debajo del borde de la tapa del piano, respirando de a poco. Está seguro de que se está ahogando. No puede respirar. Coloca sus rodillas en su pecho, enterrando su cara en el material de sus pantalones cortos y trata de no llorar, pero las lágrimas caen y golpea el suelo por la frustración. Sus rodillos se rompen y una costra que ya tenía se abre, pica y comienza a sangrar. Harry observa todo con la mente vacía.

Probablemente debería encontrar mejores formas de manejar esto. Acurrucado en una bola en la esquina de la habitación, con sus hombros temblorosos, tocando las costras de sus manos hasta que sangran, realmente no es un buen mecanismo para afrontar las cosas de la manera ideal. Tal vez si llorara un poco; no puede decirlo. Su mente se siente lejana a su cuerpo y sigue reviviendo lo mismo una y otra y otra vez.

"Tú turno."

"¿Cuándo llegaste aquí, entonces?"

Harry se siente mal por preguntarle, cuando Z obviamente todavía estaba herido. Le estaba ayudando a presionar el hielo en la cara de Z —ambos estaban sentados el uno al lado del otro en la cama, sus rodillas tocándose.

"Hace un par de años," Z dio, haciendo una mueca. "He estado aquí más tiempo que cualquiera. ¿Cómo te atraparon?"

"Estaba con mi hermana y mi prima, quien es sólo un bebé." Harry tragó. "Encontraron nuestro refugio. Atraparon a un montón de chicos también. Básicamente, todos fuimos separados y llegaron a mí antes de que pudiera llegar a ella. ¿Cómo...?" Tomó una respiración profunda, sacándose el cabello de la cara. Hacía calor en la carpa y el hielo se estaba derritiendo rápidamente, goteando por su mano, hasta su brazo, dejando un camino de escalofrío a su paso. "¿Cómo supiste... eso?"

"Sólo... lo supe." Z dijo, lentamente, sus ojos hacia la luz. No se veía feliz ni triste y Harry lo tomó como una buena señal. "Tú sólo sabes ese tipo de cosas. Me tomó un tiempo, pero..." Bajó su voz, inclinándose un poco más cerca. "Fue mi primer beso. No se sentía bien. Y seguí intentándolo, pero en serio no se sentía bien, y... bueno. Me di cuenta."

"Mis padres no entendían ese tipo de cosas." Harry dijo. "Me apoyaban, eran buenas personas, pero... no creo que me entenderían."

Z se acercó un poco más.

"Yo te entiendo," susurró.

"Mierda," Harry maldice. Golpea su cabeza contra la pared, sus ojos están húmedos y se siente tan bien y es tan horroroso y doloroso, que quiere a su hermana, quiere ir a casa o estar afuera, quiere respirar aire de verdad y llenar sus pulmones con algo que se asemeje a la vida. Quiere salir. "Mierda."

¿Por qué tenía que terminar? ¿Por qué Z y él no se olvidaron de todo y se fugaron, como siempre lo habían planeado?

Harry parpadea fuertemente, y una sola lágrima cae por su cara. Trata de respirar. No puede.

"Yo te entiendo."

Más lágrimas. Ahora se siente como un idiota.

El mero pensamiento parece imposible. Cambridge no es el mismo campamento en el que había estado, pero también podría serlo; otra ciudad grande, otra ciudad que se rindió ante el gobierno. No puede volver. Y Ben y Louis podrían no entender, pero él lo hace. Conoce la sensación de ser desnudado, restringido a una mesa, tener personas colocándole ajugas tras agujas en su piel. Conoce la calidez de un rifle, conoce la desesperación de tomar una vida inocente, sabe lo aterrador que es luchar por el ejército, pelear contra su propia gente, pero no tiene voz en el asunto, porque lo matarían, y si lo matan ahora, ¿cómo va a poder encontrar a Gemma? ¿Cómo se supone que va a encontrar a su prima? ¿Cómo se supone que va a desobedecer y enfrentar la indescriptible tortura que sabe que Niall ya enfrentó?

Había enfrentado a la tortura cuando descubrieron su secreto. Cuando el estúpido de Alex lo reportó; debió haberlo escuchando hablar con Z y, por miedo, le confesó todo a los líderes, quienes pusieron a Harry en una celda y lo golpearon hasta que estaba tosiendo sangre y quería morir más que nada.

Harry nunca dijo una palabra después de eso. Nadie más se enteró.

Ahora, está con la Rebelión y todo el mundo sabe, Tom trató de matarlo e hizo que lo desterraran. Un círculo interminable. Dando vueltas y vueltas.

Harry empieza a respirar de nuevo después de haber hiperventilado. No tiene que quedarse ahí. Puede encontrar la salida. Puede escapar de alguna manera. ¿Cuándo algo así podría detenerlo? Puede hacerlo. Puede llenarse con suministros y correr cuando todo estén durmiendo.

Tal vez piense en eso una vez que haya dejado de llorar, cuando pueda respirar oxígeno de manera apropiada. Eso es lo que se dice a sí mismo cuando las lágrimas cesan y se limpia la cara. Pero, cuando la agonía de esos recuerdos se desvaneces y su ritmo cardíaco se iguala, todo lo que siente es cansancio.

Se acurruca más cerca de la esquina, acunando sus manos sangrantes. Quiere respirar aire fresco. Odia este lugar. De repente, siente un grito construirse en su garganta, pero lo deja salir en un suspiro. Relaja su cara, dándose cuenta de que ha estado con el ceño fruncido todo este tiempo. Se siente bien estar tranquilo. La pared es helada. Cierra sus ojos.

De alguna manera, Harry se duerme, y el hecho de que no ve nada en sus sueños es mucho más aterrador que los ojos de color avellana que ve todas las noches.

🔥🔥🔥

"H. Harry. Amigo."

Empieza a despertar.

"Hey," Niall dice suavemente, "¿estás bien?"

Harry pasa su lengua por sus dientes. Le toma un momento darse cuenta de lo que está pasando, saber por qué está sentado en el suelo. Tan pronto lo hace, desea no haberse dado cuenta porque sólo es consumido otra vez por la abrumante miseria.

"Sí," Harry casi gruñe. Le duele el coxis y sus ojos se sienten hinchados. trata de sacarse el sueño refregándose los ojos e ignora el hecho de que su cabello está aplastado a un lado de su cama, donde había estado apoyando contra la pared. Niall se ve terriblemente preocupado. Harry casi espera que empiece a acercarse a Harry para ver el estado de sus manos y ofrecerle un baño caliente.

"Lo siento tanto, maldita sea, debería haberte advertido, sólo—"

"Está bien," Harry dice, débilmente.

Niall se ve tan roto que hace que el corazón de Harry también lo esté.

"Hablé... con Ben y te dará un día, y tengo una idea. Uh, puedes decir que no, pero..." Niall sacude su cabeza rápidamente. "Mierda, ¿qué estoy haciendo? Todavía estás en el suelo. Ven. Vamos a la cama."

La caminata es muy dolorosa, todavía está incómodo por haberse quedado dormido en una posición incómoda y Niall está cojeando, por lo que no debería estar ayudándolo, no con la manera en la que ya está luchando con ese estúpido bastón. Harry se siente terrible, porque piensa que en realidad podría morir si va de regreso al campamento y, también, porque hizo que Niall se preocupara.

"Lo siento," murmura, y Niall se encoge de hombros.

"¿Por qué? Esto es una mierda. No te mereces esto, maldita sea. Yo lo siento. Debería haberles dicho que no lo hicieran. Mierda, es mi culpa."

"No lo es," Harry le dice con convicción. "No es tu culpa." Ambos cojean hasta que llegan a la puerta de su habitación, entrando lentamente; las luces titilan y Niall se queda ha su hasta que Harry colapsa en su cama.

"Probablemente me veo como un maldito idiota," Harry deja salir, sacudiendo su cabeza. "Usualmente, no soy un estúpido emocional."

"Oye. Si alguien me hubiera dicho que volvería a ese maldito lugar, estaría mucho peor que tú. No le digas a nadie que te dije, pero cuando dijeron que te estaban buscando, casi quemé la base. Empecé a gritar y toda la mierda, me tuvieron que contener. Pensaron que iba a matar a alguien. Tú estás... lo estás haciendo bastante bien."

Harry casi se burla de eso, porque sabe que es una exageración.

"Pero, um..." Niall se sienta en el borde de la cama, pasando la mano por su cabello. "Escucha, puedes decir que no, pero pensé que sería una buena idea tomar aire freso. Hay una patrulla que saldrá mañana y yo soy el que maneja. Así que. Depende de ti."

Por un segundo, el viento corre a través de él, la nieve cayendo sobre sus pestañas, sus dedos entumecidos por el frío.

"Yo, uh, no lo sé."

Harry sabe qué es lo que quiere, qué es lo que necesita, pero está asustado de esa parte de él que se hará cargo de su cuerpo una vez que vea que tiene la oportunidad de correr.

Niall suspira. "Bien. Lo siento."

"No, sólo..." Harry coloca su brazo sobre su cabeza para ocultar una mueca. "Desearía no tener que ocupar estos malditos zapatos."

Hay un momento de silencio, Niall se ríe.

Empiece a reír y no se detiene, y una parte de Harry quiere unirse también, pero la otra parte sólo quiere empezar a llorar de nuevo.

"Dios," dice, limpiándose las lágrimas una vez que se da cuenta de que Harry ha girado su cabeza. "No sé por qué aún los usas. Escucha, si vienes mañana Lou te dará un par de botas apropiadas. ¿Tienes hambre?"

Harry no tiene que hacer nada. Todo está decidido por él y casi está agradecido de eso.

🔥🔥🔥

La mañana siguiente es casi difusa.

Niall lo despierta a las seis de la mañana, sus ojos están hinchados por el sueño y tiene una marca de baba a un costado de la boca. A pesar de nunca haber dicho que sí a salir, se le instruye que se vista y se lave con agua, que está demasiado fría, para prepararse e ir a la superficie. La ropa que le dan está demasiado rígida, pantalones de jeans negros y un chaleco de lana. Niall le da una chaqueta café desgastada antes de entregarles las botas con una sonrisa en su rostro.

Al mirarse a sí mismo en el espejo del baño, Harry podría creer que se ve casi como un humano decente.

Excepto por el cabello, por supuesto. Lo hace ver un poco salvaje.

"La patrulla de hoy," Niall empieza mientras caminan a desayunar. "Es genial. Personas encantadoras." La chaqueta nueva de Harry cae sobre su hombro, tiene las mangas arremangadas hasta los codos, las botas le aprietan los dedos como una especie extraña de consuelo. Harry casi se siente como él mismo por primera vez en mucho tiempo. "Uno de ellos— ¿Leigh? Probablemente, ya la conozcas. Si no es así, lo harás. Es muy ruda. Estoy tratando de ganarme su cariño. En ese sentido. Aunque no está muy interesada. Liam y Nick van a venir también."

"¿Para qué es la patrulla?" Harry agarra un poco de frutas y las coloca en su plato, junto con una cucharada de avena a un lado.

"Buscar sobrevivientes, en su mayoría enfermos. A veces podemos buscar municiones. Hay una ruta y todo. Esperamos que las carreteras estén demasiado obstruidas después de la tormenta de nieve."

"¿Sabían sobre la tormenta?" Caminan hasta la mesa en la que se normalmente se sientan, el murmuro en la cafetería es más bajo de lo usual. La parte paranoica de Harry se siente incómodo con ello porque significaría que todo el mundo sabe de su crisis de pánico y la reunión con Ben.

"¿Quién no? Todas nuestras balizas colapsaron. Nuestra gente pasó horas reconstruyéndolas." Se sienten uno frente al otro.

"No sabía que tenían balizas," se siente repentinamente nervioso, pero todas maneras, mastica su insípida comida.

Niall parpadea. "Sí. Tenemos tres alrededor de la ciudad."

Harry nunca las había visto en su caminata a través de Londres. Se pregunta cuán cuidadoso había sido todo este tiempo.

"De todas maneras," Niall continúa despreocupadamente. "Estaremos afuera hasta la tarde. Lleva almuerzo. Come con los chicos. Y la chica. Luego, volveremos. ¿Tienes tu horario?"

Harry lleva la mano a su bolsillo y saca un pedazo de papel doblado. Niall se lo quita y lo rompe a la mitad, rompiéndolo.

"¿Porqué—?"

"No lo necesitarás. Escucha, ¿aceptas esta misión? Eres uno de nosotros, sin dudas." Bien. Ahora de verdad es en serio. "Mira, no estoy diciendo que tienes que decir que sí. Pero, si lo haces, te puedo garantizar que nosotros no te haremos hacer nada hasta que sepamos que estarás bien con ello."

Nosotros.

"Hablemos de algo más," Harry sugiere, de manera débil.

"Bien," la expresión de Niall se suaviza. "¿Estás listo para ir?"

No está seguro de que lo esté.

Pero asiente de todas maneras. 

🔥🔥🔥

Hace frío.

Hace mucho frío. Y Harry está usando un abrigo, guantes, un gorro y usando tres capas de ropa debajo del abrigo y, en realidad, hace mucho, mucho frío.

También, es el mejor sentimiento del mundo.

Los otros pasajeros están en silencio, probablemente porque desconfían de él y por la manera en la que Niall lo había puesto inmediatamente en el asiento de copiloto. Fue presentado rápidamente, sólo reconociendo a Liam, Nick y a la joven mujer de la que Niall le había hablado— Leigh. Ella le sonrió y lo saludó. Él había mantenido sus ojos pegados al rifle que había a su lado.

El camión en el que están es industrial y azul marino, con una X pintada a cada lado. Supone que es el símbolo por el cual la Rebelión se caracteriza. La parte de atrás está llena de bolsas con armas y otros suministros. Niall parece saber exactamente hacia dónde irán, una ruta que sigue mecánicamente. La ventana al lado de Harry está abierta, sólo un poco, así que puede sentir el viento en su frente.

De vez en cuando, Liam habla. Haciendo un comentario de un edificio en la izquierda o de una casa a la derecha. Harry lo bloquea, deseando estar armado; se siente terriblemente expuesto y vulnerable y está empezando a sentirse menos y menos como él mismo de nuevo. Con sus manos vacías, abrigos suaves y limpios, con botas perfectas que le quedan bien.

"Esto acá," Liam dice desde atrás. "¿Ves ese edificio de ladrillos? Ahí es donde el primero grupo Rebelde tenía una base. En el 2012."

Hay un agujero enrome en el costado, en donde una obvia explosión destrozó la pared. Le dice que el primer grupo de Rebeldes podría no haber sido un éxito.

"Déjanos aquí," dice alguien desde atrás. Harry no sabe su nombre ni reconoce su voz, simplemente se empuja más hacia el rincón del camión. "Caminaremos el resto."

"Bien," el aliento de Niall sale brumoso. "Recuerden tener sus radios prendidas. Esteremos estacionados justo fuera de Trafalgar; hablen por la radio si pasa algo. Manténganse abrigados." El vehículo se detiene y las puertas se abren, el escuadrón se retira. "No toques mis malditas llantas, Grimshaw. Grimmy. Dios mío." Espera hasta que los pies de la última persona hayan tocado el suelo, luego golpea sus nudillos contra la ventana, levanta el dedo del medio y acelera.

"Así que," Niall empieza después de unos minutos, el camión moviéndose por el camino. "¿Qué piensas del grupo?"

"Um, creo que están bien." Harry toca sus pantalones con sus dedos enguantados. "No parecen odiarme, creo."

Niall se ríe. Por la ventana, una ráfaga de viento sopla la nieve que cae del techo. "Nah, por supuesto que no te odian. Me odiaban al principio, pero les enseñé a no hacerlo. Saben que no deben molestarte, eso es bueno," se detiene para mirar a Harry. "Puedes relajarme, amigo. Estamos a salvo."

Harry respira suavemente, soltando una risa adolorida. Por supuesto.

"¿Qué, uh, piensas de Leigh?"

"Ella es... amable," no está seguro de qué más decir; estar alrededor de personas es bastante extraño.

"Sí, obviamente. Sabes, a veces pienso que coquetea conmigo, pero, es difícil estar seguro. Un momento estamos riendo, y al otro está amenazándome con cortarme el pene. Tiene un temperamento ardiente."

Niall sigue hablando, y Harry no se molesta en escucharlo. Deja que las palabras lo bañen, deja que sus músculos se relajen un poco y mira por la ventana, la ciudad pasando rápidamente en una mancha blanquecina. Se imagina al escuadrón moviéndose más profundamente al centro de la ciudad. Harry se da cuenta de que, si todavía estuviera vagando, habría deseado evitar ese tipo de grupos, y nunca habría soñado acercarse a ellos.

Soy exactamente lo que había tratado de evitar, piensa.

"... así que Louis no tiene muchos consejos qué dar. Es igual que tú. Pero siento que, si te digo, de todas maneras, deberías—"

"¿Qué fue eso?"

Niall lo mira de nuevo. "Dije, er, creo que deberías saber, siento que si te digo—"

"Antes de eso."

La cara de Niall se vuelve un poco pálida, como si recién se hubiera dado cuenta de las palabras que salieron de su boca.

"Escucha, olvida lo que te dije."

"Niall," Harry presiona. "Querías que confiara en ti, ¿verdad? ¿Qué dijiste de Louis?"

Suspira profundo, "Bien. Jesús. Si le dices a alguien que te dije, especialmente Louis, voy a cortarte el pene. O él lo hará antes de que yo pueda. No estoy bromeando. Hablo en serio."

Harry asiente expectante. "Bien. Dime."

"Mierda. Bien. Él es... bueno. Como... tú."

"¿A qué te refieres?" Harry ya lo sabe. Todo tiene sentido, todas las piezas encajan perfectamente.

"Él, juega para tu lado. No lo sé. Le gustan los chicos."

Su corazón queda atascado en su garganta. "Oh."

"Sí. Es un secreto, así que no se lo digas a nadie. Por favor, sé que no lo harás, porque eres sensible a ese tipo de cosas, pero si Louis se entera de que te dije, estará devastado. No es nada de lo que se tenga que estar avergonzado. Pero ha trabajado muy duro para llegar donde está y Ben ni siquiera lo sabe—"

"¿Ben no lo sabe?"

Lo mira de reojo. El camión se mueve. "Lou dice que no es importante. Y respeto eso. Jack y yo somos los únicos que saben y eso no cambia nada, ¿cierto? Ben podría ver una desventaja en ello."

"¿Por qué?" Harry no está seguro por qué pregunta, porque sabe que eso siempre ha sido una desventaja en cada lugar que ha estado. El campamento fue un infierno.

"Ben... actúa como si supiera todo. Pero no lo hace. Y está asustado, como el resto de nosotros."

No es realmente una pregunta. Harry no presiona más.

🔥🔥🔥

"Lo haré," dice una vez que el camión está estacionado y el calor está aplastado sus dedos congelados.

"¿Cómo?"

"Haré... haré lo del campamento. Les ayudaré."

"¿Lo harás?"

Niall le ha dado varias oportunidades para negarse a hacerlo. Quiere decir que no. Pero una parte de él quiere decir que sí.

Traga. "Sí. es lo que se tiene que hacer, creo." El edificio que está frente a ellos se ha convertido en ruinas; una estatua rota, un pilar colapsado. La ciudad está bastante destruida. "Eso no significa que quiera hacerlo, pero, es mejor que no hacer nada."

Niall coloca una mano en su brazo. "Los rescataremos a todos. Esos chicos ahí... nos necesitan. Te necesitan. No hay manera de que me conforme con que esos idiotas ganen. Esa es nuestra gente." Aprieta su mano. "Estoy orgulloso de ti, H."

Por supuesto, si la única razón por la que Harry accede a esto es por su infantil necesidad de demostrar su valentía a Louis, nadie tiene que saberlo más que él.