Narra Leila:

-Ayúdame a olvidar-le pedí, mientras me acercaba a él-Jasper necesito que me ayudes a olvidar, no puedo estar más tiempo lejos de ti.

-Leila quiero que estés segura de esto, no quiero que lo hagas por un momento de debilidad.

No lo deje continuar hablando, lo tome de las manos y lo jale junto a mi hacia el baño. Abrí la regadera mientras que lo empezaba a besar, sabía lo que hacia, no era por débil. Lo extrañaba, necesitaba algo para distraerme, sabia que si no era con Jasper cometería una locura de la cual me arrepentiría más tarde.

Sabía que Jasper no quería hacer nada por miedo a que no lo personara después, pero yo quería olvidar todo lo ocurrido en estos meses y sabia que la única persona que lo lograría seria él.

-Jasper, escuche las hermosas palabras que me dijiste cuando estaba luchando contra Lucifer, escuche todo lo que me decías y quiero que sepas que ya me has vuelto a enamorar, solo espero que ese amor que dices tenerme nunca termine-el no me contesto simplemente me tomo en brazos y volvió a besarme mientras que nos metía a la tina con todo y nuestra ropa.

Después de ese momento los dos terminamos de vestirnos el me tomo en brazos, para acostarnos juntos, me sentía completa, feliz extrañaba estos momentos. Jasper mantenía nuestras manos unidas y jugaba con nuestros dedos, mientras me hacia carias en la espalda con las cuales yo me estaba durmiendo, pero esto paro cuando Lilith apareciendo en mi habitación nos sorprendió a los dos.

-Pequeña odio tener que despertarte pero necesito que me acompañes al infierno-dijo sin importarle la presencia de Jasper.

-Creí que Sabrina se estaba haciendo cargo-mencione mientras me sentaba con Jasper en la cama.

-Así era, pero ahora los reyes saben que estas libre, que ya no eres el Aqueronte de carne del señor oscuro y precisan tu presencia.

-¿Como para que me quieren esos tres? Ni siquiera me soportan, además Belcebú me quiere muerta desde que tengo diez años y lo queme por accidente.

-Porque eres la sucesora del señor oscuro y tu prima es la reina, como Calibán intenta destronar a los estrella de la mañana, te recomiendo que te apresures.

-Pero no me quiero separar esta noche de Jasper, estuvimos mas de dos meses sin vernos ni estar juntos, diles que cualquier cosa que necesiten podrán hablar conmigo mañana.

Lilith me miro más sería, me miraba como cuando me regañaba de pequeña por cualquier cosa que hiciera y no le pareciera bien.

-Leila Luzbel Morningstar, te levantaras de esa cama en este instante y así como estas te presentaras al infierno en este preciso momento-la mire enojada y sentí como Jasper trataba de tranquilizarme sin su don, ella lo noto por lo que suspiro-el joven Hale si así lo desea nos podrá acompañar, pero no podrá hablar ni dar su opinión antes los tres reyes y la corte infernal.

-Bien, solo deja nos ponemos algo más presentable-mencione poniéndome de pie.

-Pequeña cuando dije que ahora no era broma.

Sin dejarme protestar aparecimos de un momento a otro en medio de un salón donde se encontraban los reyes del infierno Sabrina y Calibán.

-¿Qué rayos?-hable seria.

-Princesa que bueno es verla sin Lucifer dentro suyo-menciono uno de los reyes.

-Es hora que se ponga al corriente con sus tareas... princesa-hablo Belcebú.

-Creí que mientras que Sabrina fuera la reina yo no tendría que trabajar...

-Se equivoca, ahora que no esta Lucifer presente usted debe de hacer sus trabajos.

De un momento a otro, aparecieron varios demonios, los tres Reyes se pusieron frente a nosotros, Sabrina a mi lado y Calibán se encontraba junto a Lilith.

-Leila Luzbel Morningstar, princesa del infierno y sucesora del señor oscuro. A partir de este momento eres la soberana del infierno junto a Sabrina Morningstar, como sucesora de Lucifer y soberana del infierno es tu obligación participar en la búsqueda de las reliquias Impías.

Los tres reyes me hablaron, al finalizar Lilith me coloco la corona que me habían puesto el día que encerré al señor oscuro en mi. Los mire sorprendida, se suponía que yo no participaría directamente, solo ayudaría a Sabrina. Cuando me iba a negar Lilith me interrumpió.

-Ella acepta competir contra Calibán y Sabrina por las dos reliquias Impías sobrantes-miro a todos los presentes-. Como saben Leila se crio con el señor oscuro aprendió de él y ahora ella tiene el mismo poder que el, además de contar con el poder del fuego infernal y la vida eterna. Es la bruja más poderosa, hábil e inteligente de su aquelarre.

Di un paso al frente y los mire a los tres reyes y luego a Calibán.

-Una vez te advertí que no te metieras con mi familia, has decidido no hacer caso a las advertencias, quiero que te quede en claro algo chico de arcilla, esas reliquias son mías-lo mire tan seria y sentí como mis ojos cambiaban de color a negro completamente-. Dentro de mis venas corre la sangre de Lucifer y corre el fuego infernal.

Note como me miraban con temor los tres reyes y Calibán, note como paso saliva-No me hagan volver a recordarles porque soy la protegida de Lucifer.

Sabrina se puso junto a mi y tomo mi mano, alzándolas.

-Somos Sabrina y Leila Morningstar, además de llevar el mismo apellido ambas llevamos la sangre del señor oscuro corriendo por nuestras venas, somos las mas poderosas brujas y ese de ahí solo es algo barato que se puede ir al mismísimo cielo.

-Bueno si ya terminamos con esto, me gustaría volver a mi habitación, tengo un viaje que planear.

Tome la mano de Jasper y nos desaparecí de ahí, apareciendo en mi habitación nuevamente. Al llegar no quería decir nada pero al parecer Jasper tenia otros planes por lo que al estar recostados en mi cama, ambos nos quedamos frente a frente, hasta que el decidió hablar.

-Así que... ahora eres la soberana del infierno.

-Eso parece-lo mire a los ojos-pero lo importante ahora es que mañana nos iremos a Forks, quiero estar aunque sea un día alejada de todo esto. 

-Antes que regresemos a Forks quiero preguntarte algo-lo mire sin comprender por lo que asentí-Leila Ritz o Leila Morningstar ¿te gustaría ser mi novia?

Mi corazón comenzó a latir con mucha fuerza, me acerque a él y lo bese con fuerza, cuando nos separamos el me miraba con una ceja levantada.

-Es un si Jasper, es un claro que si. Te amo Jasper y no se que haría sin ti.

Nos acostamos en mi cama, no supe en que momento termine dormida en el pecho de Jasper mientras que este me daba carisias en la espalda.

Cuando desperté Jasper ya tenía las maletas preparadas para irnos, eras las cuatro de la madrugada, el me abrazo por la espalda y bajamos juntos, ya nos habíamos despedido de mi familia un día antes, así que sin mas salimos de la casa.

-¿Crees que halla alguien en tu casa?-le pregunte a Jasper, ya que a mi hogar no lograría pasar por los hechizos que tenia.

-No lo se, tal vez mis hermanos vayan a ir a la escuela, Esme este en casa y Carlisle en el hospital-luego miro la hora en su celular y me miro-lo más seguro es que nos encontremos con todos menos con Edward y Carlisle.

-Entonces vamos-le tendí mi mano, para que nos pudiera transportar, pero el me miro dudoso.

-¿No iremos primero a tu casa?

-No podría aparecer ahí, recuerda que esta Isabella, además de que hay unos hechizos que no te dejarían pasar.

Antes de que pudiera contestar algo el me abrazo y tomo las maletas con uno de sus brazos.

-Ahora si nos podemos ir.

Nos desaparecí y aparecí al frente de su casa en Forks, no me soltó al llegar. Nos acercamos más a su casa, pero antes de que pudiéramos llegar a las escaleras, nos encontramos con una Alice emocionada, dando saltitos frente de nosotros, junto a ella se encontraba Damon, quien nos veía con una sonrisa y detrás de ellos se encontraban los demás Cullen, el único que no estaba era Edward.

-¡Están aquí, están juntos!-hablo Alice con voz muy aguda.

-Lo sabemos Alice.

-¿Como has estado Leila?-hablo Damon.

-Para haber tenido a Lucifer en mi interior me siento bien-le reste importancia.

-Tenemos mucho de que hablar Lu-hablo Rosalie-para empezar amo tu nuevo estilo.

-Hay tanto que hablar Ro y tan poco tiempo-mencione con una mueca-¿pero como han estado ustedes? me entere de la tontería que fue a hacer Edward en Volterra.

-Regresamos todos con vida, solo que ahora Bella tiene que transformarse en vampiro y otra situación que te contaremos mas adelante.

Dijo mirando por un segundo a Jasper el cual negó. Esme no se resistió mas y los fue a abrazar a ambos, todos los demás también los abrazaron, entraron a la casa y fueron a la sala.

-Leila ¿Por qué hueles tanto a azufre?-me pregunto Emmet.

-Les contestare todo lo que quieran saber, pero quiero que estén todos presentes para no tener que repetirlo mas veces.

-Le hablare a Elizabeth, para que venga y Carlisle no debe de tardar en venir. Edward esta con Bella por lo que dudo que venga-hablo Esme a lo que asentí.

Mientras esperábamos a que llegaran los demás, pude notar como Emmet era el más impaciente lo que me daba gracia, Jasper no se había querido despegar de mi lado por lo que no me soltaba y me tenia sentada en su regazo, Rosalie, Alice y Esme habían ido a preparar algo de comer aunque les haya dicho que me encontraba bien.

Damon se encontraba leyendo un libro y yo solo podía concentrarme mientras que jugaba con el cabello de Jasper, hasta que dejaron frente a mi un plato de comida. Intente separarme de Jasper, pero este no me dejo moverme, tomo el plato que habían dejado frente a nosotros en la mesita de centro y me acomodó mejor en su regazo.

-¿Qué tienes Jasper?

-Nada, solo quiero estar con mi novia y consentirla lo más que pueda.

-Me alegra verlos juntos de nuevo, ambos son muy tiernos-hablo Esme, yo solo agache la cabeza avergonzada.

Jasper no pudo decir nada, ya que abrieron la puerta como si fueran un torbellino y de ahí entraron mi madre y detrás de ella venia Charlie, que al verme no dudaron en acercarse.

Jasper por fin me dejo libre, pero aun así no soltó mi mano, nos acercamos a mi madre y Charlie.

-Pensé que tardarías más en venir pequeña, estoy tan feliz de tenerte nuevamente aquí-menciono mi madre mientras que me abrazaba.

-Me alegro de verte Leila, tu madre me a contado todo lo que te a pasado y tengo que decir que me e sentido muy preocupado, me alegro de verte bien.

-Yo también te extrañe Charlie, estoy feliz de verte de nuevo.

Mi mamá me abrazo a su cuerpo y después de un momento jalo a Charlie, para que se nos uniera en el abrazo, pude notar que Charlie se relajaba, ya que desde que había llegado lo note un poco tenso.

-Bueno, creo que ya es momento de que les cuente todo lo que a pasado, desde que fui a Greendale.

Todos tomaron asiento en la sala, el único que no sabía todo lo que me había pasado era Charlie y no sabia muy bien como reaccionaria esperaba que no se asustara o entrara en pánico.

-En resumen como creo que ya saben para que mi madre se pudiera casar con Charlie, tuve que hacer un trato con Lucifer por lo que le debía un favor-todos asintieron-bien pues el día de mi cumpleaños vino y solicito que fuera a Greendale, para acortar la historia Lucifer es el verdadero padre de Sabrina mi prima y ella al cumplir una profecía se convirtió en el heraldo del infierno. 

>>Lucifer quería que Sabrina fuera su concubina y reina del infierno...

Charlie me interrumpió y no me queje ya que sabia que era demasiada información para el.

-¿Por eso es que te tenias que ir tan de repente?-solo asentí y continúe.

-Cuando yo era pequeña conviví demasiado con él y con Lilith, Lucifer después de la muerte de mi padre, fue como otro padre para mi, gracias a el yo pude vivir, ya que medio de su sangre y un hechizo del fuego infernal. Antes de que mi prima fuera a nacer Lucifer creyó que yo seria la mejor para el puesto, pero al verme lo que lo llevo a que cambiara de opinión fue que me veía mas como una hija.

>>El no solo quería coronar a Sabrina como reina del infierno y su esposa, si no que también a mi me quería coronar pero como princesa del infierno y sucesora del señor oscuro. Como su sucesora, por si algo le pasaba o simplemente ya no quería el puesto y Sabrina lo dejaba después de un tiempo.

>>Yo no podía negarme ya que le debía un favor y negarte a una orden del señor oscuro siempre trae problemas. La noche de la coronación Sabrina junto a nuestras tías, primo y los que quedaban vivos de nuestro aquelarre hicieron un plan, el cual salió mal-suspire-sabía que no lo lograrían mi tío Edward era el brujo mas poderoso de todos pero aun así no era capaz de crear una prisión tan fuerte, yo tenía mi propio plan había logrado conseguir que el señor oscuro me diera la misma cantidad de su poder.

>>Al fallar su plan, la única prisión tan fuerte como para poder contener a Lucifer es la creada por el falso dios...

-El cuerpo humano-menciono Carlisle a lo que asentí.

-Así es, pero antes de que completara el hechizo, Nick se interpuso y entre los dos encerramos al señor oscuro, yo termine con su alma y la mayor parte de él, mientras que Nick solo lo tenia en su mente en determinados tiempo.

>>Durante todo el tiempo que estuvo dentro de mi, intento corromperme, el era dueño de mi cuerpo, todos los días teníamos batallas por el control de mi cuerpo y mente, la mayoría de ellas yo las ganaba, pero aun así él era el que controlaba lo que hacía, cuando no estaba bajo su control la mayoría del tiempo me la pasaba sentada o tratando de que nadie se me acercara por miedo a dañar a alguien.

>>El tiempo paso y Lilith decidió que era mejor cortarle la lengua Nick, la forma para darte cuenta de que el señor oscuro tiene poder sobre de ti es por la legua cortada en dos, conmigo no hubo tanto ese problema, ya que el intentaba dejarme lo mas humana posible, por eso es que mi cuerpo se empezó a cambiar conforme el tiempo pasaba, por eso mi nueva apariencia.

>>Al pasar el tiempo Sabrina junto con Jasper y sus amigos, fueron al infierno y nos trajeron de vuelta, o bueno ahora nos tenían en una de las aulas de castigo de la academia en Greendale-note como mi madre con cada cosa que decía se asustaba y junto a Esme eran las mas preocupadas y Charlie se le notaba también afectado-Sabrina nos iba a ver cada tarde después de ir a su escuela, intentaba hablar con Nick o conmigo, siempre le fue mas fácil hablar con Nick, ya que yo al oírla venir trataba que Lucifer se concentrara solo en mi, para que ellos pudieran hablar aunque fueran unos minutos.

>>Después un día Sabrina junto con Zelda llegaron con el cuerpo de Faustos Blackwood, el fue el nuevo Aqueronte de Lucifer, pero no se iba a rendir tan fácil-suspire cansada-antes de que lograran separarlo de mi, él se aferro y me obligo a quedarme junto a él en mi mente, me ofreció un trato a cambio de mi libertad, al no aceptarlo, empezó con la tortura. Fue cuando ustedes llegaron-señale a mi madre y Jasper.

-¿Qué era lo que quería a cambio de tu libertad?-pregunto Carlisle.

-Quería que tomara el poder del infierno, cuando Sabrina ya no lo quisiera, quería que yo fuera la gobernante de él y además que portara su apellido. Al oír a mi madre y a Jasper, sabía que tenía que aguantar no tenía que aceptar si lo hacia no los volvería a ver-mire a Jasper con una sonrisa-. Pero Lucifer cambio el trato un poco después de escuchar un hermoso discurso , acepto que pudiera estar junto a Jasper, lo dejo que el fuera al infierno conmigo si es que yo llegaba a vivir ahí o pasar tiempo juntos, yo podría venir a el en determinado tiempo. Solo por pocos días.

-¿Que pasaría con tu madre?-pregunto Charlie.

-Ella ahora es prácticamente una humana como cualquiera, no podría pisar el infierno aunque quisiera, la podrían matar o quedarse atrapada ahí, para toda la eternidad. Yo vendría a verla cada que pudiera-mire a todos-. Al final acepte el trato y el me dejo libre, con un regalo-todos me miraron con duda y mi madre continuo.

-El de no tener ninguna marca-yo asentí.

-Gracias a ese regalo yo no presentare lo que son "secuelas" como la pesuña. Solo Nick será el que pase por eso.

-Entonces ¿ahora que pasara?-pegunto Damon.

-Pues están viendo a una de las dos soberanas del infierno, princesa y sucesora de Lucifer-mencione como si nada-. Bueno eso si Calibán no consigue otra de las reliquias impías.

-¿Qué son las reliquias impías?-quiso saber Rosalie.

-Las tres reliquias impías o reliquias profanas son objetos muy poderosos, el primero es la corona del rey Herodes, la segunda es el cuenco de Poncio Pilato y las monedas de plata de Judas. Estas tres se encuentran custodiadas por Herodes, Poncio Pilato y Judas. Calibán el príncipe del infierno nos esta retando a Sabrina y a mi, por el trono quien consiga dos de las tres reliquias ganara y se quedara con el...

-¿Porque no lo dejan ganar?-quiso saber Emmet-al final, tu no tendrías que ser soberana del infierno y tampoco tu prima-antes de que yo pudiera contestar Jasper hablo sorprendiéndome.

-¡No!-todos lo miraron sorprendidos-el no debe de ganar, el no solo quiere el trono infernal, si gana obligara a Leila a quedarse con él y convertirá a la tierra hacer el decimo circulo.

-Espera hija, no Calibán es el chico rubio que siempre te traía a casa después de que fueras al infierno-Jasper estaba molesto y sus hermanos se estaban divirtiendo.

-Calibán príncipe infernal hecho de arcilla y mi acosador desde que tenia doce años.

-Recuerdo que Lucifer me comento que sería bueno que te casaras con el cuando cumplieras los dieciocho-menciono mi madre, como si nada-. Pero le dije que la única que decidiría con quien casarse serias tu, lo bueno es que no te enamoraste de ese chico es demasiado pretencioso.

-Así que nuestra pequeña Lu, tiene un acosador hecho de arcilla-dijo divertido Damon y se escucho el gruñido de Jasper.

-Yo solo tengo una pregunta, o bueno en verdad tengo muchas pero la que mas ronda en mi mente es ¿Por qué ellos saben lo que eres Leila?-hablo Charlie, ahí caí en cuenta que el no sabia nada sobre los vampiros y hombres lobo que existían en Forks, por lo que decidí contestar con lo primero que me vino a la mente.

-Jasper es mi alma gemela Charlie, para nosotras las brujas existen los compañeros o almas gemelas, al Jasper ser mi pareja decidimos contarle a su familia después de un tiempo en el que tuvimos que hablar que era lo mejor.

-Además yo la amo señor, no creo ser capaz de poder vivir sin su presencia-Charlie asintió sin más.

VOTAR - COMENTAR - SEGUIR

-ortiz6acosta