Capitulo 1
Narrador omnisciente:
Jasper se encontraba en una habitación de la casa Spellman junto a Leila, la cual aun no despertaba, llevaba mas de cinco horas inconsciente. Todos en la casa estaban preocupados por ella, aunque el que mas ansioso por su despertar era Jasper el cual velaba por ella.
Mientras que Leila se encontraba inconsciente, Jasper no dejaba su lada en ningún momento, habían planeado que cuando Leila se recuperara si ella aun así lo deseaba se irían de Greendale, para poder ir a Forks.
Por la puerta Elizabeth estaba entrando, esperando que el vampiro le pudiera dar alguna noticia buena acerca de como se encontraba su hija, pero con tan solo entrar y mirar como se encontraba el sosteniendo su mano y con la mirada clavada en su rostro. Supo que su pequeña aun no mostraba signos de querer despertar lo cual tenia a todos ansiosos ya que Nicholas había despertado apenas poco tiempo después de que ya no tuviera al señor oscuro dentro de él.
-¿Como se encuentra? -hablo Elizabeth junto a Jasper.
-No sabría responder, su corazón late con normalidad, pero su temperatura es menor a la habitual. Su color de piel es el mismo no se ve que este vaya a cambiar, su tono de cabello tampoco creo que cambie, ella ahora tendrá este tono de color para siempre, solo es cuestión de esperar.
-¿Crees que se recupere?
-Lo creo, ella es muy fuerte. Solo necesita tiempo para poder recuperarse de las heridas sufridas en su mente, lo que me da miedo es que pueda sufrir alguna consecuencia como Nicholas.
-Ella no sufrirá ninguna mal formación como el joven Scratch, acabamos de llegar de una visita al señor oscuro y el nos confirmo que ella no lo hará ya que ella acepto sus términos y el la recompenso por ello.
-¿Porque han ido a verlo?
-Queríamos algunas respuestas, estar seguros si va a despertar o si tenemos que hacer algo para ayudarla a que se levante.
-¿Qué les dijo?
-Que solo era cuestión de tiempo que ella misma abriría los ojos, pero que no intentáramos apresurarla porque fue demasiado lo que resistió al contenerlo aunque no quisiera hacerle daño.
-Entonces lo mas seguro es que no despierte ahora o ¿si?
-No lo sabes, puede que despierte esta noche o mañana en la mañana. Pero lo que me preocupa es que no se quiera ir con nosotros a Greendale.
-¿Porque no se iría con nosotros? Ella misma a dicho que regresáramos a Forks.
-Hoy Sabrina a ido al infierno y no hay buenas noticias, al parecer Calibán acaba de retarlas por las reliquias infernales.
-¿Que pasa si ellas no ganan?
-El se vuelve Rey del infierno y tratara hacer a la tierra el decimo circulo.
Jasper no sabía que pensar, cuando supo que en lo que Leila creía estaba ligado a lo que Carlisle les conto en su tiempo sobre su vida, el le pidió que le enseñara lo que supiera acerca del infierno. Carlisle no sabia mucho acerca de él, solo sabia lo que decía en la biblia y lo que su padre le había enseñado. Luego también empezó a investigar por su cuenta pero no sabia que era verdad o mentira por lo que la mayoría de sus dudas se las preguntaba a Leila que con gusto le respondía y platicaba de su vida.
Elizabeth salió de la habitación de su hija para poder ir a dormir, Jasper al no tener la necesidad de dormir se quedo con ella, se quedo sentado en el sillón a esperar a que despertara aunque tuviera muchas ganas de estar recostado junto a ella para poder abrazarla y tenerla mas cerca de él, no podía hacerlo, menos ahora que no sabía si ella lo perdonaría.
Narra Leila:
Me encontraba con los ojos cerrados no los podía abrir, no sentía nada. Sabia que me encontraba en un estado de inconciencia, también tenia claro que ya no compartía cuerpo con Lucifer. Pero aun así había un pensamiento que rondaba en mi mente no sabia que hacer, ahora que el señor oscuro no se encontraba disponible para ser el regente y rey del infierno Sabrina lo sería pero si ella no lo deseaba eso me dejaba a mi como la siguiente en la línea.
Empecé a sentir como alguien sostenía mi mano derecha, era una mano que reconocería en cualquier lugar, era grande y fría pero al mismo me daba una calidez enorme. Quería abrir los ojos pero aun no podía me sentía muy cansada, por lo que intente decir algo, mi voz no salía.
Solo podía sentir las caricias que Jasper daba a mi mano y no quería que se fuera de mi lado, sabia que me había lastimado y que tardaría en volver a confiar en él, pero lo quería a mi lado, no dejaría que se fuera. Quería darle una señal para que supiera que me encontraba bien, así que intente apretar la mano que sostenía la mía, lo intente hasta que lo logre.
-¿Leila? -escuche como me llamaba Jasper-¿Leila puedes escucharme?
Aun no podía hablar aunque lo intentara, tampoco lograba abrir los ojos por lo que solo apreté de nuevo su mano.
-Descansa pequeña, recupera todas tus fuerzas para que puedas abrir tus hermosos ojos yo me quedare a tu lado, no me iré de aquí aunque me pidas que me aleje.
Deje que la obscuridad volviera a llevarme, quería confiar en lo que Jasper me decía pero no podía confiar en el por completo, aun.
Narra Jasper:
Leila había apretado mi mano dos veces, ella ya se estaba recuperando era cuestión de tiempo para que ella despertara, solo esperaba que regresara conmigo a Forks, no quería que nada le pasara.
Mientras que ella seguía durmiendo no me despegue de su lado en ningún momento, sentía sus emociones, ella estaba asustada no sabia el porque.
Era de madrugada eran pasadas las tres, cuando Leila comenzó a moverse en su cama eso llamo mi atención además de ponerme contento ya que eso decía que ya estaba recuperada, de repente dejo de moverse y empezó a hablar entre sueños.
-No me dejes... Jasper-mientras que hablaba sus emociones era un completo caos, sentía miedo, tristeza.
Todas las emociones que estaba experimentando eran por mi culpa, yo hice que sintiera miedo, tristeza, hice que se sintiera indefensa cuando ella es demasiado poderosa y fuerte.
No sabía que haría pero la recompensaría, todo el mal que la hice pasar haría que lo olvidara. Si ella no me perdonaba por el peor error que e cometido no sabia como podría seguir adelante, Leila es todo lo que quiero para poder vivir, no solo porque es mi alma gemela, si no porque es una chica espectacular y se que cualquier hombre seria muy afortunado de conseguir su amor.
Eran las cinco de la mañana cuando sentí como Leila empezaba a moverse, de un movimiento rápido sentí como me jalaba de la mano con la cual tenia sostenida la suya y termine recostado a un lado de ella, no se como paso pero ella me tenia ahora rodeado con sus brazos, no me molestaba tenerla así, pero no quería que ella pensara que me estaba aprovechando de que estuviera inconsciente.
Intente levantarme sin que ella se diera cuenta pero antes de poder levantarme, ella hablo.
-No te muevas Jasper-mire su rostro y seguía con los ojos cerrados-hace mucho que no duermo a tu lado.
No sabia si ella había despertado o seguía dormida, su respiración era tranquila. Nos encontrábamos cara a cara, deje que me abrazara en lo que despertaba yo admire de cerca todo su rostro, pero me detuve en sus labios.
Tenia tantas ganas por besarla, pero sabia que no debía por lo que desvié mi mirada hacia sus ojos, los cuales para mi sorpresa ya estaban abiertos y me miraban con un brillo especial en ellos.
-Buenos días pequeña-no pude evitar llamarla así.
-Buenos días Jasper, no sabes lo que extrañaba despertar a tu lado-me regalo una sonrisa de lado.
-Me alegra que ya estés aquí sana y salva-mencione mientras que acariciaba su mejilla.
Narra Leila:
Cuando desperté sentí la mano de Jasper aun sosteniendo la mía, por lo que decidí hacer uso de mi fuerza y acostarlo a mi lado, cuando lo logre lo abrace, el intento separarse pero no quería que se fuera de mi lado por lo que hable.
-No te muevas Jasper-hable con los ojos cerrados y acercándome más a él-hace mucho que no duermo a tu lado.
Sabia que ya no me podría dormir, pero poderlo tener abrazado me hacia feliz, no quería abrir mis ojos y darme cuenta que todo era un sueño. El señor oscuro aunque no estaba alegre que mi compañero fuera un vampiro, me había pedido que arreglara las cosas con él, no quería que me pusiera mal, además de advertirme de que si me hacia algo el mismo se encargaría de hacerlo torturar, aunque estuviera en el cuerpo de Faustos.
No podía tener mis ojos cerrados para siempre por lo que los tendría que abrir en algún momento. Decidí abrirlos, para darme cuenta que Jasper miraba mis labios fijamente, lo mire y después de darme cuenta que tenia una ojeras mas marcadas que antes me preocupe, pero rápidamente olvide ese pensamiento.
El volvió después de un tiempo su mirada a mis ojos encontrándose que ya estaba despierta, por lo que se sorprendió, pero fue el primero en decir algo.
-Buenos días pequeña-me gustaba que me llamara así.
-Buenos días Jasper, no sabes lo que extrañaba despertar a tu lado.
-No sabes cuanto me alegra que ya estés aquí sana y salva-tomo mi mejilla y yo le sonreí aun mas.
Nos quedamos viendo por un rato más, no era un momento incomodo. Sabía que teníamos que hablar, pero no quería confrontarlo aun. Sus palabras iban a ser difíciles de olvidar, por lo que no quería que nos moviéramos hasta que fuera necesario.
-Tenemos que hablar Leila-me dijo Jasper viéndome a los ojos con seriedad.
-No quiero hablar, no por ahora-baje la mirada-se que lo tenemos que hacer y que es muy importante que lo hagamos, pero no puedo hablarlo ahora.
-¿Por?-se veía confundido.
Solo me voltee y me pegue mas a su pecho, no podía verlo cuando quería hablar de ello, me sentía débil, vulnerable.
-Leila, por favor mírame-intento que me volteara pero no pudo.
Empezamos a forcejear, el intentaba que me volteara y yo intentaba quedarme en la posición que nos encontrábamos, hasta que el de un movimiento se puso encima de mi, obligándome a verlo a los ojos.
-Leila tenemos que hablar-me dijo mientras me obligaba a mirarlo a los ojos-. No podemos evitar el tema, quiero que sepas que todo lo que dije mientras que luchabas contra el diablo es verdad, te amo y fui un idiota al decirte todo eso.
Lo decía con tanta seguridad que sabía que era verdad, pero muy en el fondo yo tenia miedo de que solo lo dijera por el momento, que después me volviera a herir.
-No se que pensar Jasper, tengo miedo-nos mirábamos a los ojos, por lo que suspire, dejaría que el supiera de lo que tenia miedo-tengo miedo de que solo lo digas para que vuelva a caer, Jasper tengo miedo a que vuelvas a irte y me dejes destrozada no creo tener el poder ni la fuerza para soportarlo nuevamente.
Jasper se acerco a mi y dejo un beso en mi frente para después sentarse en mi cama, haciendo que me senara en su regazo.
-Pequeña, quiero que sepas que el decirte todas esas palabras fue por cobardía y miedo, tenia miedo que creyeras que soy un monstro y no me quisieras volver a ver, fui un cobarde solo tenia que decirte la verdadera razón por la que me iría por un tiempo, pero no quería que me vieras como un débil, tu eras y eres tan fuerte que tenia miedo que por ser débil tu me dejaras. Solo tenia que decirte que me iría para poder controlar mi sed de sangre, solo tenia que saber eso y podrías decidir si quedarte o irte, pero por egoísta y miedo a que tu me rompieras el alma yo rompí la de los dos.
-Debiste hablarme con la verdad Jasper, recuerdas cuando me hablaste de como te convertiste cuando me hablaste de María, yo nunca te culpe por como fuiste en tu pasado porque fuiste entrenado para matar, fuiste creado para hacer un ejercito. Cuando Damon me hablo de su pasado tampoco le di la espalda, eso es porque yo no culpo a la gente por su pasado antes de que los conociera, si no que desde el momento en que los conozco es cuando los voy juzgando.
Me levante de su regazo para quedar frente de el.
>>Tus palabras Jasper puede que nunca las olvide, pero eso tampoco quiere decir que no te quiera, que no te ame, pero me lastimaste y eso no se olvida fácilmente. No sabes todo el dolor que me hiciste pasar, tanto que hasta Lilith y Lucifer me dieron la opción de romper nuestro laso pero no lo quise hacer, sabia que podía no volver a ser la misma pero preferí eso a que lo rompieran, porque era lo único que tenia que me hacia poder recordar lo que una vez tuvimos.
Jasper dando un suspiro se levanto de la cama y me tendió la mano, yo la acepte y el hizo que me levantara, el sol ya había salido, el nos guio hasta el centro de mi habitación y se arrodillo frente de mi.
-Leila Luzbel Ritz Morning star ¿aceptarías que este vampiro tonto, egoísta y lleno de miedos vuelva a conquistarte?
VOTAR - COMENTAR - SEGUIR
Aquí llega el primer capítulo de esta tercera parte.
Ustedes que dicen le damos una oportunidad o no.
¿Qué les pareció?
¿Qué esperan para esta tercera parte?
¿Infierno, Greendale o Forks?
¿Ya vieron la última parte de CAOS?
-ortiz6acosta
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro