battle royal
Ese era el momento.
Akira finalmente iba a enfrentarse a la única persona que alguna vez fue un peligro para ella y su mente. Sabia que Mira estaría esperándola en lo mas alto de ese maldito edificio con algún reto, probablemente terrible, y lista para ganar. Pero para su mala suerte, ella también tenia ganas de terminar con toda esa locura.
Al principio se rehusó a entrar a una arena de corazones a un lado de Chishiya cuando siempre lo evitaron a toda cosa. Pero tener su apoyo a un lado no le venia nada mal. Por esa única cosa dejo que subiera con ella a ese ascensor y se adentraran a la ultima partida. Ambos parecieron concordar que si debían morir ahi, al menos estarían juntos.
A ese punto habían llegado.
-Bienvenidos a la arena del juego final-
Mira Kano se encontraba en el centro de esa terraza hermosamente acomodada. El césped se encontraba perfectamente cortado además de estar rodeado por un cantero repleto de flores blancas. Un par de columnas en las esquinas le daban un toque mas elegante haciendo juego con los arcos en la entrada. Y justo al final de todo, una mesa con tres sillas esperaba por ellos.
Ese era el momento donde todo acabaría al fin.
La Reina Roja enfrentaría a la Reina de Corazones.
-Permítanme explicarle las reglas- Mira les sonrió como si nada pasara -El juego que vamos a empezar es de dificultad, Reina de Corazones: croquet-
-¿Croquet?- Chishiya elevo una ceja -¿Billar de césped?-
-Exacto- la mujer lo señalo emocionada -Es un juego que se popularizo en la Inglaterra del siglo xix. Pero me temo que en Japón no es muy conocido- eso realmente no era lo que esperaban de esa arena -No es indispensable saber jugar al croquet aun así-
-¿Como esperas que te venzamos entonces?- Akira pregunto.
-Porque da igual si ganan o pierden- Mira junto sus manos sonriendo -Para ganar este juego, solo deben jugar tres rondas sin retirarse. Si se retiran antes de que termine, perderán-
La pareja se miro con confusión, sabiendo que eso no era un digno juego de corazones. De hecho pensaron que lo único que Kano intentaba hacer, era darles falsas esperanzar sobre tener la victoria. Pero solo era cuestión de tiempo antes de que saliera con algo sumamente loco, solo con idea de quitarles esa emoción que esperaba acumularan.
-Incluso pueden usar armas- eso era aun peor -La única regla es completar tres rondas de croquet-
-De acuerdo-
Akira curvo sus labios aceptando el reto, recibiendo otra sonrisa en respuesta. Mira sabia en donde se metía al desafiar a esa muchacha. Y eso solo hacia que se emocionara aun mas que antes. Por eso espero pacientemente a que su contrincante ayudara a su novio a sentarse en una de las sillas blancas, ignorando completamente su propio dolor.
Chishiya era el que peor estaba de los dos, así que a ella lo sostuvo por la cintura para que se moviera por el espacio. Y solo cuando él estuvo acomodado en su puesto, ella tomo el palo de croquet para escuchar las instrucciones de Mira. La mujer parecia estar ansiosa de que jueguen finalmente. Solo que no sabia si era sobre esa partida o sobre lo que estaba por venir.
-El croquet se juego con un mazo de madera y dos bolas- ella le señalo uno de los palos -Debes meter seis en los aros y luego golpear la ultima vara para ganar - hizo un golpe de demostración -Super fácil, ¿No lo crees?-
Akira asintio sin preocupaciones, quitando la mano de su propio estomago para dar el primero de los golpes. La bola no atravesó por el aro, logrando que Mira soltara una pequeña risa. Pero eso no la irrito ni nada por el estilo como uno pensaría. Solo hizo que continuara dando todo de si para ganar la primera ronda.
Chishiya no podía negar que verlas desde afuera era terrorífico. Su novia parecia tener una paz inquebrantable, ojos brillando en malicia y postura relajada. A pesar de todavía tener la herida en su estomago, nada de eso pareció romper su tranquilidad. Mientras que Mira, por otro lado, sonreía emocionada al caminar por el lugar sin preocupación alguna. Se veia como si pensara que tenia todo ganado.
Pero la realidad era otra.
Nakamoto Akira no fue ahi a perder.
-Supongo que la primera partida es tuya- Nakamoto dijo con amabilidad -Empecemos el otro set entonces... me tengo mas fe en ese-
Shuntaro apretó una de sus heridas con molestia, intentando concentrarse en lo que sucedía en frente de sus ojos. No sabia cuanto mas iba a poder aguantar ahi y comenzaba a pensar que ese era el propósito del juego. Volverlos locos al punto de querer desistir de una buena vez. El tema, por mas que quisiera evitarlo, era que todavía no la habían escuchado hablar. Y si Mira era igual que su novia, entonces debían esperar por lo peor.
-Te dije que me tenia mas fe-
Akira señalo a su contrincante con emoción cuando logro meter en el arco, sacando un aplauso de la mujer. Mira estaba alargando la partida a propósito pero aun así se divertía en el proceso. La chica con la que jugaba era una digna oponente. No porque fuera una experta en el croquet. Mas bien era el hecho de que ella estaba llevando adelante esas rondas con felicidad y no llena de desesperación como otro jugadores que pasaron por su arena.
Ella no tenia miedo.
Y se notaba.
-Otro punto para mi-
Nakamoto le sonrió a su novio como dedicándole el punto. Y a pesar de que él no lo noto, ella cambio su expresión levemente al ver como estaba manchando el piso con sangre. El liquido color rojo que cubría el blanco como si fuera una pintura la altero un poco. Porque no podía negar que, aun cuando los dos se aguantaron como reyes, estaban cansados de todas esas heridas de batalla que recibieron.
-Mira...- la chica se giro a hablar -Estoy manchando tu lindo piso. ¿Eso no te importa?-
-Oh querida, no te preocupes por eso- la mujer movió su mano como si no fuera nada -Me estoy divirtiendo mucho como para notarlo-
Shuntaro tuvo un escalofrió cuando noto el parecido entre ambas en cuanto a los gestos. Pero decidió no decir nada al respecto, esperando que la segunda ronda finalizara. Nakamoto venia ganando en esa oportunidad, y aun así se veia un poco preocupada. De vez en cuando, incluso observaba en su dirección para comprobar que estaba bien. Eso le dio a entender que el estado en el que se encontraba la estaba desconcentrando.
Esa era la razon por la que no entraban
juntos a los juegos de corazones.
-Ki...-él le dijo con suavidad -Solo estas a uno de ganar... Así que tomate tu tiempo para embocar-
Su novia asintio levemente leyendo entre líneas. Chishiya no queria que se preocupara por el tiempo que le quedaba a él. Solo deseaba que se concentrara en ella misma y en cierta forma pasara un buen rato también. Si iba a ser el ultimo juego que atravesarían que al menos fuera memorable.
Él no tenia ni idea que esperaba por ellos.
-¡Gane!-
-Parece que perdí el segundo set- Mira aun así choco los cinco con Akira -Pero no importa, tal vez el otro será-
-Que puedo decir...- la chica sonrió ampliamente -Tengo talento para golpear cosas-
-Eso veo- la mujer asintio de igual manera -Pero yo estoy algo cansada, así que... ¿Por que no tomamos un te para relajarnos?-
Al fin iban a usar ese bonito set sobre la mesa. La pareja pensó que ya se estaba tardando para llevarlos a conversar un poco. Por esa razon se acomodaron frente a ella expectantes mientras esperaban que les sirviera una taza de te. Ambos se miraron por unos segundos sabiendo muy bien que beber eso seria el peor de sus errores. Pero perder la confianza de Mira seria aun mas peligroso.
-Me sorprende que no se opongan a tomar el te-
-La gente de bien bebe te cuando juega al croquet- Nakamoto le dijo con obviedad -Mi madre se la pasaba llevándome a este tipo de cosas-
-¿No es la primera vez que juegas entonces?-
-¿Tu que crees?- Akira pregunto retóricamente -¿No crees que lo hice muy bien?
Chishiya presentía que esa era una gran mentira. Pero su novia la habia dicho con tanta facilidad que hasta él se la creyó. Luego recordó que ella y su madre tenían una relacion que se basaba en la mujer encerrándola en el hospital para saber si era igual a su marido o no. Así entendía como, hasta el mas mínimo detalle que decía, no cierto.
No por el momento.
-Lo hiciste excelente linda- Mira la alabo con tranquilidad -Por eso te mereces descansar y tomar una taza de te conmigo- les paso una a cada uno-Tu igual Chishiya, no queremos que te debilites con esa herida-
La Reina dio justo en lo que le molestaba.
-Entonces...- Akira cambio de tema -¿Que es exactamente lo que haces aquí?-
-Jugar... ¿Qué no es obvio?- la mujer dio un sorbo a su bebida -¿Por que el interés? ¿Tanto quieres saber la verdad?-
-Creo que una mejor pregunta seria... ¿Hay alguna verdad?-
-Oh querida, eres tan retorcida como te recuerdo- la anfitriona del juego rio -Pero si existe una gran verdad-
-¿Y tu la sabes?- Nakamoto se apoyo contra la mesa -Porque pareces igual de perdida que todos aquí dentro-
Eso pareció molestar mucho a Mira.
-Si lo se- les dijo con seriedad antes de sonreír -Supongo que ya no tengo opción. Tendré que decirles la verdad sobre este lugar- la pareja no estaba segura de querer saberla-Sin embargo deberán aceptar que, sin importar lo que diga, fueron ustedes quienes insistieron en saber-
-Dejame ponerme cómoda entonces-
Akira solo queria hacerla enojar con esas palabras. Pero la realidad era que necesitaba un par de minutos para acomodarse. Tanto ella como Chishiya sentían las heridas en sus cuerpos cada vez mas pesadas. Él no habia dejado de sangrar y ella -por primera vez- sentía algo parecido al dolor físico en el orificio de bala que tenia.
-¿Alguna vez imaginaron como seria el mundo en el futuro?- ambos lo hacían todo el maldito día -Nanotecnología, energías renovables, realidad virtual, criogenia.. la tecnología de su época aun esta llena de esperanzas y fantasías-
-Lo dices como si no fuera tu época también- Akira comento.
-Deberían alegrarse porque todo eso se hizo realidad- Mira la ignoro mientras les contaba -Esa tecnología logro desarrollos y avances radicales-
La mujer comenzó a explicarle como en 30 años las economías subdesarrolladas crecieron y las barreras para mejorar los estándares de vida desaparecieron. Fue diciendo como a medida que el tiempo pasaba, las cosas mejoraban al punto de que los humanos en el futuro tenia una vida impecable. También hablo sobre la implementación de avatares y realidades virtuales. Y agrego como las enfermedades pudieron curarse. Básicamente decía que los humanos controlaban la vida natural a su gusto.
-Eso no es nada nuevo- Nakamoto susurro -Los humanos siempre intentaron controlar lo que no pueden controlar-
Por eso estaban ahi, ¿No?
-La humanidad se volvió casi inmortal- Mira paso su mirada por ambos sonriendo -Lo único que nos mantiene con vida, es generar dopamina mediante juego de realidad virtual-
-Entonces...- Chishiya dijo con tranquilidad -¿En eso estamos? ¿En un videojuego de realidad virtual?-
-Están en un estado de internación así que olvidaron todo- eso habría sido muy asombroso si fuera real-Este recorrido por todos esos mil años es nuestro juego mas popular- Mira les decía que solo eran peones en un juego -Por cierto, yo soy la administradora de este sistema-
La pareja simplemente se quedo en un silencio rotundo.
-¡Solo estaba jugando!- Kano comenzó a reír -Todo lo que dije era mentira-
Esa mujer era aun peor que ellos dos juntos.
-La verdad es que por la manipulación genética, empezó a surgir vegetación mutante en enormes cantidades- les explico la nueva verdad a la que se enfrentaban -Todo eso fue un producto de los alienígenas-
-¿Ellos están aquí, controlándonos?- Akira dijo con susto mientras soltaba un grito ahogado -¿Están experimentando con nosotros para ver nuestras conductas? ¿Nos lastiman solo para ver como reaccionamos? ¡Te lo dije Shuntaro!-
Tanto Mira como Chishiya la miraron con sorpresa ante su tono de terror, manteniendo sus miradas en ella sin saber que responder por primera vez en sus vidas. Nakamoto sonaba tan convencida de que los alienígenas fueron los culpables de todo, que por un segundo la reina pensó que ese juego terminaría en ese instante. Que la sangre que habia perdido la debilito de tal manera, que termino por creer sus palabras.
Eso fue hasta que su contrincante comenzó a reír.
-¡Solo estaba jugando!- Akira repitió sus palabras alegremente -Todo lo que dije era mentira. Por supuesto que no creo en los alienígenas-
Nakamoto apoyo ambos codos contra la mesa mientras sostenía su rostro entre sus manos. Su estado era alegre y relajado, riendo de vez en cuando pero sin sacar sus ojos de Kano. La misma que la maldijo internamente. No solo porque la enojo que intentara copiarla en forma burlona. Sino también porque entendió que eso iba a ser mas difícil de lo que parecia. Porque esa chica no estaba cayendo en ninguno de sus trucos.
No porque supiera la verdad, mas bien porque no se estaba dejando llevar por los sentimientos de la misma manera que el resto. Los pocos jugadores que pasaron por su arena estuvieron un par de horas escuchándola hablar hasta que perdieron la cordura. Mira los llevo a su muerte al decir solo un par de palabras impactantes. Pero Akira era conocida por eso de igual manera. Y destrozar su mente, aun mas que antes, iba a ser difícil.
Incluso imposible, se atrevía a decir.
-Esta bien, esta bien- la mujer a cargo movió su mano para desestimar la situación -La verdad no es esa.
Chishiya siempre creyó que era una persona sumamente inteligente. De esas que jamás fallaban y que incluso serian capaces de burlar a la muerte. Pero en ese preciso momento, supo que ellas eran aun peor. No solo tenían una mente brillante, también podían moverse por el mundo como si fueran las reinas. Porque sabían que no importaba lo que hicieran, de igual forma tendrían un escape victorioso de sus problemas.
Mira y Akira eran mas que peligrosas.
-Se nota que no te interesa saber la verdad detrás de todo esto- Kano dijo con mucha emoción en sus palabras -Y creo que por eso mereces saber la historia real. Porque a medida que pasaba el juego, el mundo anterior dejo de importarte-
-Es que nunca me importo-
Akira parecia hablar con una total sinceridad.
El problema es que ninguno sabia si era real o no.
-Entonces creo que estas lista para aceptar lo que diré -Mira miro a ambos una vez mas -El mundo que ven ahora no es real, es solo una ilusión- como todo lo que decía -Todo lo que sucede aquí proviene solo de tu propia imaginación-
Nakamoto ya no queria escucharla mas.
-Esto no tiene sentido-
Chishiya rompió las ideas de su mente, logrando que su novia lo mirara y se concentrara en él. Sabia que las palabras de Mira no iban a hacer efecto alguno en ella. Pero ya no tenia ganas de seguir dando vueltas en un circulo vicioso. Y él pareció traerla a la realidad por millonésima vez dentro -y fuera de ese mundo- logrando que se focalizara en lo importante.
Hacer la tercera ronda de croquet.
-Cada uno tiene su realidad, y en este caso, yo soy la nueva psiquiatra de Akira- Kano dijo con voz suave y llamativa algo que no sonaba como una mentira -Es solo que no recuerdas como terminaste junto a mi luego de perder la cordura-
Shuntaro supo que toco un punto débil cuando la vio tensarse. Si habia algo que encendía a la chica a su lado era que nombraran la inestabilidad de su mente. Tal y como sucedía antes en el consultorio del doctor Asahi, Akira reaccionaba ante la mención de sus posibles tendencias de padecer esa enfermedad.
Su padre era un sociópata que no sentía cariño por nada mas que él. Y no importaban todos sus intentos de crear un vinculo con su hija. Al final, algo siempre salía mal. Ella jamás se atrevió de ninguna manera a juzgarlo. Pero no podía negar que le preocupaba padecer algo parecido si no lo trataba.
Por esa razon aceptaba que su madre la encerrara en ese hospital cada tarde. Por esa razon no se iba de los controles semanales. Por esa razon asistía a las consultas terapéuticas. Porque no queria ni pensar en ser como ese hombre que la abandono cuando tenia diez años, justo luego de saludarla por su cumpleaños.
-Ki... escúchame- Shuntaro poso una mano en su muslo para llamarla -Estuve todo tu proceso a tu lado, y ahora no va a ser diferente.
-De verdad son muy unidos- Mira les dijo en medio -Se nota lo mucho que te preocupas por ella-
-Estoy aquí contigo porque no me importa lo que tengas- el muchacho no le hizo caso y siguió con sus sinceras palabras-Eres normal para mi y eso debería ser suficiente para que lo creas tu también-
No porque fuera egocéntrico ni nada por el estilo. Mas bien se trataba del hecho que Chishiya ha seguido cada paso de sus sesiones. No solo las que tenia con el doctor Asahi, sino también esas donde la sentaban en una camilla de hospital para hacer estudios casi interminables. Esos que debían determinar si poseía o no esos trastornos. Lo que significaba que él sabia exactamente que padecía y que no.
Y ella no era como su padre.
¿Verdad?
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