-¿Donde estamos?- pregunto mientras Minho quita una olla con agua hirviendo de la estufa.
-¿Qué haces aquí?- me pregunta evitando responder mi pregunta.
-No puedo saber que hago aquí si no sé donde estoy.- respondo indiferente.
-No.- dice -¿Qué haces aquí...viva?-
-¿Acaso me quieres muerta?-
-No sabes lo que pasó, ¿verdad?- sirve el agua hirviendo en dos tazas y le agrega hierbas.
-Sí, si sé.- respondo a la defensiva. -Estábamos escapando de CRUEL cuando...-
-Shhhh!- pone su mano sobre mi boca rápidamente. -No digas nada NADA del lugar de donde venimos.- retira su mano lentamente -así perdimos a Sonya.-
-¿Por qué?-
-A ellos no les gusta que hablemos de cosas de las afueras de aquí. No sé porque, pero Sonya fue asesinada por hablar de la...infección que pasamos.-
-Dios..-
-De por si fue difícil llevarte de mi lancha a mi casa sin que fueras notada por nadie.- me pasa una taza de té.
Sostengo la taza caliente entre mis manos mientras me quedo sentada con mi ropa empapada. -¿Qué es este lugar?-
-Realmente no tiene nombre, pero la gente aquí lo llama Distrito Cuatro.-
-Antes de llegar aquí, la canciller Paige...me menciono de un "Capitolio".- digo pensando bien en mis palabras.
-Si, Piedra. Esto ya no son los Estados Unidos. Esto es Panem.-
-¿Piedra?- lo interrumpo.
-Ah si, lo siento.- dice Minho dejando salir una risa -Es un chiste que invente cuando pensamos que habías muerto al ser aplastada por la piedra esa.-
Yo lo veo con mirada de "Enserio?", y le digo -Idiota.-
-Haha tranquila.-
-Nunca te caeré bien. ¿Que hice para que me despreciaras?-
-¿Qué hiciste? Destrozaste a Thomas.-
Thomas... Por poco lo olvidaba. ¿Donde está? Quiero preguntarle a Minho sobre donde esta Thomas....y el resto de los larchos y astillas. Pero es cierto, destrocé a Tom. Quiero decir como fui controlada por CRUEL, como fui engañada por ellos. Pero dentro de mi creo que hay algo que realmente le quiso hacer daño a el. Simplemente me quedo callada.
-Como te decía.- dice Minho rompiendo el incómodo silencio. -Panem está dividido en catorce....trece partes. Esta el Capitolio, el mas rico de los trece. Técnicamente el Capitolio controla al resto. Y están los distritos del uno al doce. Antes solía haber un Distrito 13, pero al parecer hace poco hubo una guerra, cuando la guerra terminó, el Capitolio destruyó ese distrito en forma de demostración de su poder. Desde entonces vivimos bajo merced del Capitolio.-
Es mucho para lo que podía procesar. ¿Por qué CRUEL nos trajo aquí? Es un lugar no muy seguro donde según me describe Minho vivimos como esclavos.
-¿Donde esta Thomas?- dejo salir eso que trataba de mantenerlo en mí.
-Thomas... El murió.-
Siento como se forma un agujero en mi pecho. -¿¡Qué!?-
-Hahaha, tranquila. Solo era broma.-
-No jueges así conmigo!- le digo y le pego en el brazo.
-Perdón, piedra, perdón.- me dice viéndome con aspecto burlón. -Cuando cruzamos la transplana aparecimos en un lugar a las afueras. Thomas pensó que estabas muerta. Pasamos tres días sobreviviendo en la naturaleza, lo cual es fácil una vez que pasamos lo del laberinto. Buscamos la civilización, hasta que un día la encontramos. O mejor dicho, la civilización no encontró a nosotros.- toma té de su taza, y continua -Unos hombres vestidos de blanco, llamados agentes de la paz, nos encontraron. Pensamos que estábamos salvados, hasta que comenzaron a inyectarnos sedantes. Luego unos intentaron escapar...ellos ya no siguen vivos. Thomas fue el primero en ser sedado, yo fui de los últimos. Así que estoy seguro de que Thomas sigue vivo.-
Siento como se me quita un peso de encima.
-Los que fuimos sedados nos trasladaron a diferentes distritos. Sonya y yo fuimos trasladados aquí. Pero hace cuatro días, un agente de la paz la asesinó por hablar de nuestro otro mundo.-
Un silbido que me aturdió se escuchó por todo el distrito.
-Mi descanso acabó.- se levanta y pone la taza en una mesa de madera. -En mi cuarto hay dos camas. La tuya es la de la derecha, es...era la de Sonya.- toma su caña de pescar que estaba recargada contra la pared, y salé de la casa.

Me quedo alrededor de una hora sentada ahí mirando al infinito. Ni siquiera estoy pensando en nada. No en Thomas, no en las variables. En nada. Estoy aterrada.

Creí que todo había terminado, creí que los retos habían acabado.
Mierda.
¿Por qué no morí cuándo debí hacerlo? ¿Por qué no acabó mi sufrimiento ahí? Es mucho que debo procesar...ugh. A veces realmente me siento estúpida.

No sentí las lágrimas en mis mejillas hasta que comencé a escuchar disparos no muy lejos de la choza de Minho. Me asomo por la ventaba y veo como la multitud corre al centro del distrito.
Algo horrible paso. Mi mente dice.
Inmediatamente salgo corriendo y no me detengo. Corro mas rápido que el resto. Si hubiera estado mas tiempo en el laberinto tal vez hubiera sido una buena corredora.
Comienzo a ver a lo lejos a varios hombres vestidos de blanco con armas apuntando al cielo.
Un hombre choca conmigo y me tira a la arena hirviendo. Es entonces que comienzo a escuchar como bocinas que parecen estar en ningún lado se encienden, y luego una voz masculina, hipócrita y con acento raro comienza a hablar.
"Bienvenidos, bienvenidos" dice un hombre, y todos se detienen en seco "Distrito Cuatro. Nuestro proveedor de productos marinos. ¡Como saben la guerra acaba de terminar desde hace casi un año!" se escuchan sus aplausos, pero nadie mas aplaude "Por desgracia, no todos los Distritos sobrevivieron la guerra, como lo vemos con los pobres del Trece. Pero el Capitolio ha preparado una sorpresa. Es la mejor forma de celebrar el aniversario del fin de la guerra. Faltan 3 días para que se cumplan exactamente un año, así que preparamos una festividad. ¿Listos para oírla?" otra vez nadie hace nada "¡Es un nuevo show de televisión! Con duración de varias semanas, y a las 24 horas del día!!" una vez mas, nadie hace ni un ruido. "Se llamará: ¡Los Juegos Del Hambre!"
Ninguno sabe de que estaba hablando aquel hombre. ¿Por qué emocionarse tanto por un programa de televisión?
Siento como algo se retuerce en mi estómago. A pesar de no entender bien lo que pasa, mi mente solo repite las mismas palabras.
Muerte; muerte; muerte...