El salón estaba en silencio.

No sabían cómo reaccionar.

Ese hombre había atormentado a Izuku la mayor parte de su vida, él fue el responsable de que Katsuki perdiera su memoria, ¿Por qué ahora está aquí?

Katsuki despertó en un lugar diferente, obviamente, pero parecía ser un cuarto simple, con paredes blancas y algunos muebles vacíos a su alrededor.

Esto no era lo que estaba esperando, sinceramente.

--- Oh, ya estás despierto...--- Katsuki volvió a sentir un escalofrío pasar por toda su columna antes de ver al hombre pasar con una bandeja de comida en sus manos.
--- Te traje el desayuno.--- comentó con una sonrisa, colocando el objeto frente a él para después sentarse a un lado de su cama.

--- Parece que te diste un fuerte golpe cuando estabas huyendo de esas personas, ni siquiera te diste cuenta, ¿Verdad?--- Katsuki guardó silencio, mirando al hombre con ojos desconfiados antes de que este mismo presionara su pierna suavemente.

--- ¡Ow- ¡Para!--- exclamó tratando de separarse del agarre pero se dió cuenta de que no podía ni siquiera mover su pierna con naturalidad.

--- Lo siento, pensé que todavía estabas algo dormido, como te decía, te rompiste tu tobillo cuando te atraparon, no sabía donde vivías así que te traje a mi casa... Come algo, luego veremos si puedo llevarte a tu casa.--- mencionó con una voz suave, pero la sonrisa que se cargaba le daba un sentimiento de inseguridad al muchacho.

Miró la comía en frente suyo. No había comido nada en, bueno, quien sabe cuánto tiempo, pero debió haber sido bastante para que su estómago rugiera con insistencia, pidiendo algo de alimento.

¿Pero era confiable este hombre?

Ciertamente había algo en él que le provocaba un sentimiento de horror y angustia, pero lo había salvado, ¿No es así?

--- Bakugou no se rompió el tobillo en esa pelea.--- anuncio Shinso con un tono de voz casi imperceptible.
--- Corrió, sí, pero no se rompió nada en ese momento...--- continúo.

--- Creo que todos estamos de acuerdo que ese hombre es malo, ¿O no?--- gruñó Kirishima, rodando sus ojos con fastidio.

Estaba furioso, no, tacha eso, estaba mucho MÁS que furioso. Toda esta mierda le estaba pasando la factura de estabilidad mental y saber que solo sabían hasta ese momento era lo que le dolía aún peor.

Que héroe tan fuerte que era.

Nótese el sarcasmo.

Katsuki decidió darle una probada al arroz que el hombre había preparado, pronto iba a caer desmayado de nuevo y necesitaba energías para volver a casa y enfrentar a su madre.

Cuando comió todo lo que su estómago pudo retener sin vomitar, decidió levantarse de la cama con cuidado, colocando todo su peso en la pierna que no estaba lastimada y apoyándose en uno de los muebles más cercanos.

Con pasos torpes, se las ingenió para lograr llegar a la puerta para caminar por el solitario pasillo de aquella casa desconocida.

Una de las cosas que notó al instante era el hecho de que estaba en mal estado. Parecía que había intentado limpiar pero las paredes estaban agrietadas y la pintura ya no tenía tanto color, sin mencionar las múltiples botellas de bebidas alcohólicas en las esquinas como las bolsas de basura.

Logró llegar a una especie de sala por la forma que esta tenía, así que, tambaleándose paso a paso, logró llegar hasta el sillón, donde encontró-

¡Su teléfono!

Lo tomó y llamó al primer contacto que apareció.

Touya.

Otro escalofrío paso por su cuerpo, por lo que guardó el teléfono en su bolsillo lo más rápido que pudo para tratar de regresar a su habitación, dando un paso en falso con su pierna rota, y justo antes de que cayera al suelo, Hisashi lo atrapó.

--- Ah, es-

--- ¿Por qué estás fuera de la cama? ¿No ves que tienes una pierna rota?--- hablo con rudeza, jalando el brazo del ceniza para levantarlo por completo y, por consiguiente, arrastrarlo por el lugar.

--- ¡Ow, ow, ow- ¡Detente!--- exclamó, pero el hombre lo ignoró, llegando de nuevo hasta la recámara donde había despertado, donde fue dejado en la cama con algo de brusquedad.

--- Tu pierna no ha sanado, ¿Sabías que puedes provocarte una maldita infección?--- mencionó, tomando la extremidad afectada para revisar las vendas.

--- Si eso sucediera tendría que amputarte la pierna.--- murmuró, pasando un dedo desde la rodilla del chico hasta su pie, causando que un mal sentimiento se alojara dentro de su abdomen.

Hubo silencio después se eso, y fue peor, pues Hisashi no había dejado  de mirar su pierna en ningún momento. Mientras una de sus manos estaba en su pie, la otra yacía en su talón, creando una especie de ambiente extraño que a Katsuki no le gustaba.

--- ¿Quién eres?--- pregunto con un pequeño susurro, tratando de soltarse pero fue en vano, pues ese hombre tenía una fuerza que superaba por mucho la suya.

--- A-Agradezco lo que hiciste por mí, enserio, p-pero tengo que ir a casa ahora o mi mamá-

--- ¿Por qué te irías?--- el hombre sonrió, pero eso solo hizo que Katsuki quisiera huir una vez más.
--- No puedes caminar y estás débil... ¿Estás seguro que quieres ir a casa así?--- presionó la herida de nuevo, causando que Bakugou, asustado, soltara una explosión en la cara del mayor.

La cara del ceniza se transformó a una de pánico, paralizandose en el lugar hasta que Hisashi se levantó con la mitad de su cara humeante.

--- Son más fuertes...--- murmuró él hombre acariciando el lugar afectado, dedicándole otra sonrisa antes de caminar fuera de la habitación, dejando al menor solo.

La Clase miró con ojos sorpresivos como el rostro de Katsuki era uno de horror puro, sin mencionar la impotencia que sentían, pues no podía moverse con naturalidad gracias a la pierna rota y en conjunto con todas las cosas que le han sucedido a su compañero tan solo deseaban que descansara como era debido.

Bakugou tomo su teléfono rápidamente después de que se estuviera seguro que ese hombre no estaba cerca, pero para su mala suerte, se había acabado la batería, dejándolo solo con ese loco enfermo apenas conocía.

--- Maldición...--- murmuró abrazando (como podía) sus piernas mientras derramaba pequeñas lágrimas de pánico.
--- ¿Por qué siempre a mí?--- gruñó tratando de no sucumbir a un llanto, eso no le haría bien a nadie.

Eso fue antes de que la puerta principal fuera golpeada con algo de brusquedad innecesaria.

No podía ver nada, claro, estaba en su habitación, pero logró levantarse de nuevo para abrir la puerta y caminar una vez más por el pasillo hasta-

--- ¡Touya!--- grito con alivio, mirando al muchacho frente a frente con Hisashi.

--- Oh mierda, ¿Estás bien, Kat? No te he visto en dos días, oh mierda.--- el peliblanco pasó de largo al mayor, corriendo hacia el ceniza para abrazarlo y revisar cada parte de su rostro para ver si tenía alguna herida solo para ser interrumpido por el adulto.

--- Ah, supongo que es el adiós, ¿No?--- sonrió de una manera que le hizo tener escalofríos al ceniza, por lo que se aferró más fuerte a la camisa del pirómano.
--- Ten cuidado con su pierna, puede infectarse si no la cuidas, Katsuki.--- Touya, sintiendo el miedo del menor, solo asintió y dejo que Bakugou se apoyará en él para salir de esa casa.

Y, vaya sorpresa, esa casa era una cabaña en medio de un bosque que Katsuki no conocía.

Caminaron en silencio, pues Hisashi estaba en la puerta, mirándolos desaparecer en los árboles y algo le provocaba un sentimiento de pánico en el ceniza que solo quería irse de ahí ya.

--- ¿Conoces a ese hombre?--- pregunto Touya una vez que estuvieron lejos.

--- No... Pero no quiero verlo de nuevo...--- el mayor asintió en comprensión, podía notar que estaba realmente asustado, por lo que se detuvo de un momento a otro, pasando su brazo por debajo de las piernas del explosivo, quien no se resistió a ser cargado de esa forma, en cambio, se aferró lo más fuerte que pudo a su cuerpo, tratando desesperadamente de borrar a ese hombre de su memoria.

--- ¿Por qué siempre me suceden estás cosas, Touya? ¿Hice algo malo antes de perder mi memoria? ¿Hice sufrir a alguien?--- el mayor suspiro, no tenía las respuestas para eso.

--- Me he estado haciendo la misma pregunta desde que nací... A veces las cosas suceden, no hay una explicación lógica para esto...--- beso la cabeza del menor con cariño, sintiendo como el temblor se hacia cada vez más presente.

Estaba llorando.

--- No intentes buscarle un motivo, te conozco desde antes y créeme que jamás has hecho algo que justifique todo lo que te sucede... Y aún si hicieras algo "imperdonable" no es excusa para que tus padres te traten así, mucho menos la gente a tu alrededor...--- afianzó su agarre, abrazándolo con cariño.

--- ...estoy arruinando tu camisa...--- su voz salió algo apagada ya que no había sacado su rostro de las ropas del muchacho, pero eso no importaba, Touya entendía todo de él.

--- Eso no es relevante ahora...--- murmuró con una sonrisa, llegando hasta la orilla del bosque y, por consiguiente, a la ciudad.

--- Vamos con tus amigos, han estado realmente preocupados por ti, sirve que sanan tu pierna, ¿Qué te parece?--- Katsuki solo asintió, cerrando sus ojos para disfrutar del calor que Touya emanaba naturalmente.

La memoria cambió después de eso, todos tenían un mal sabor de boca por todo lo que había sucedido con Hisashi, en especial Izuku, pero solo duró segundos por esto.

Katsuki estaba corriendo por el patio de la mansión de Kariage con un objeto que hacía burbujas gigantes mientras Deshida lo seguía de cerca.

--- ¡No corran tanto, la pierna de Katsuki aún está débil!--- grito la hermana de Kariage, observando como el castaño aparecía de la nada y abrazaba al ceniza, levantándolo del suelo.

--- ¡Kariage, apura tu trasero! ¡Tenemos que ir a la base secreta!--- exclamó Deshida con una sonrisa de oreja a oreja, observando como Kariage salía de su hogar con una mochila.

--- Regreso luego.--- fue lo único que le dijo a la chica, corriendo hacia sus amigos con un sonrisa.

--- Tardaste, ¿Que traes en la mochila?--- pregunto Katsuki cin curiosidad, bajando de los brazos del castaño para ir con el contrario.
--- Comida, también te traje una malteada de proteínas para que no te desmayes.--- respondió, entregándole el recipiente con una sonrisa apenada.

--- Oh.--- dijo el rubio, feliz.

--- Muchas gracias Kari, eres muy amable.--- le dedico una dulce sonrisa que provocó un fuerte sonrojo en el azabache, quien lo ocultó con un risita nerviosa.

--- Obvio, soy genial, vamos a nuestra base secreta, el carbón viviente ya debe de estar esperándonos.--- y huyó de la escena, siendo seguido por Deshida y Katsuki como patitos.

--- No puede ser...--- murmuró Mina, provocando que todas las miradas fueran hacia ella.

--- ¿Que sucede, Mina?--- cuestionó Kirishima, curioso.

--- A ese chico le gusta Bakugou.---

«- tres días escribiendo esto y sigo pensando que pudo haber sido mejor unu

¿Que les pareció?

Uffas, creo que muchxs ya se esperaban lo de Kariage, ¿No? Pero de todas formas estén atentas, eso formada un gran dilema en el futuro

No sé confíen, siempre hago cosas raras XD

¿Que creen que pasará?

¿Kariage le dirá sus sentimientos a Katsuki o será primero Dabi?

¿Que más creen que suceda o haga Hisashi?

¡Lxs amo!

❤️