10
Durante todo el camino Jungkook no había dejado de pensar en Taehyung. Se preguntaba si realmente estaba haciendo lo correcto. Durante mucho tiempo, luchó por mantenerle lejos de su realidad y lo había logrado, pero ahora, estaba a punto de volver a enlazar sus vidas. ¿Realmente era lo mejor?
Estaba a punto de tirar a la borda todos los límites que se había marcado, estaba a punto de cruzar la línea que había trazado entre ambos; pero… mentiría si dijera que no quería conocer a Taehyung. Desde el primer día quiso hacerlo... Él poseía algo que le intrigaba.
Era extraño, él no lo conocía, no sabía nada de él; pero al mismo tiempo sentía que llevaba una vida conociéndole.
Tenía tantas preguntas; pero todas se resumían en una sola. ¿Quién es Kim Taehyung?
¿Quién es Kim Taehyung? y ¿Por qué su tiempo parece correr incluso más lento que el suyo? De alguna manera Jungkook pudo sentirlo desde la primera vez que lo vio y el tiempo se lo confirmó…
A veces le miraba en secreto… Taehyung parecía descubrir un mundo cada día.
En ocasiones, le miraba tocar las flores con mucha suavidad y delicadeza; era como si tuviera miedo de que su toque pudiera dañarlas. En otras parecía un pequeño que descubría por primera vez la inmensidad del cielo; su mirada se perdía fascinada en él… En otras, cuando sentía la brisa tocar su piel, simplemente se detenía, elevaba su mentón y cerraba sus ojos; era como si estuviera recibiendo una pequeña caricia. Era tan peculiar...
Cada recuerdo que llegaba a Jungkook, sólo le hacía confirmar lo mucho que extrañaba a Taehyung. Extrañaba el poder perderse en los pequeños detalles que le conformaban…
Jungkook sabía que Hoseok tenía razón, ante sus ojos Taehyung era arte. Ese tipo de arte que pasaría viendo por horas por sus sutiles matices o ese tipo de arte que cuando vuelve a verle le dice algo diferente a lo que le dijo la primera vez. Tan complejo, tan diferente…
Kim Taehyung era todo un enigma…
—Hermoso. —dijo en un hilo de voz; su respiración era entrecortada, le había llevado un poco de tiempo llegar hasta ahí.
Jungkook detuvo su andar, su mirada estaba sobre Taehyung. Como la primera vez que lo vio, parecía que el tiempo se había detenido sólo para él.
Taehyung estaba bajo un árbol, sus hermosos ojos estaban fijos en la caída de los pétalos de cerezo, tenía sus manos extendidas para tomar algunos de ellos, era hermoso de ver. Jungkook quería grabar en su memoria aquella bella imagen... Es que Taehyung era ese tipo de arte que no quería dejar de ver…
Ahí estaba una vez más, cómo la primera vez, queriendo acercarse a él. Tal vez aquel día había dejado que sus inseguridades le ganarán; pero esta vez no iba a retroceder, no podía hacerlo… No quería hacerlo.
Continuó caminando, sus pisadas estaban llenas de seguridad. Con cada paso que daba, su corazón latía con más fuerza. “Quiero conocerte Jeon Jungkook”. Se detuvo frente a Taehyung y lo miró fijamente.
—Yo también quiero conocerte Taehyung.
Taehyung se estremeció al escuchar la voz de Jungkook. No quería bajar su mirada. ¿Acaso estaba soñando otra vez? ¿O esa voz había sido producto de su imaginación? Claro seguro era eso, ¿por qué Jungkook diría algo así? Quizás era algo que su corazón quería escuchar; pero, ¿Por qué?... Con un poco de temor dirigió sus luceros hacia el lugar de donde provino la voz, se sorprendió al ver a Jungkook frente a él. Rio bajito y tocó sus castaños cabellos.
Titubeó antes de dejar salir su voz.
—¿Es así? ¿Qué deseas saber sobre mí Jungkook-ssi? —Jungkook sentía su rostro arder, ¿él había dicho aquello en voz alta?
—Y-yo… —Puso el dorso de su mano sobre sus labios, quería ocultar su rostro, sabía que estaba completamente sonrojado.
"Adorable" pensó Taehyung.
—No pensé encontrarme contigo —Quizás sí lo había imaginado. rio para si mismo, claro que Jungkook no estaba ahí por él—; pero es agradable haberlo hecho —Ladeo un poco su cabeza y le brindó una pequeña sonrisa al menor—. ¿Qué te trae por aquí?
Jungkook sentía las palabras desvanecerse; Taehyung provocaba cosas en él que no lograba entender. Respiró con suavidad y dejó que hablara su alma.
—Yo, vine por tí… Y-yo estaba buscándote. El señor Park dijo que estarías aquí.
Taehyung sintió un pequeño nudo formarse en su estómago, ¿entonces Jungkook realmente estaba ahí por él?
—¿Por mí? —Jungkook asintió con suavidad. Una felicidad le rodeó, no podía creerlo.
—¿Qui-quisieras ir por un café?
Jungkook podía sentir la adrenalina recorrer su cuerpo, estaba tomando mucha de su energía.
—Eso sería… —Un rugido hizo detener sus palabras. Taehyung miró a Jungkook, quiso reír al ver su expresión, tenía su ceño fruncido y sus ojos cerrados en completa vergüenza— ¿Qué te parece mejor algo de comer?, creo que deberíamos cambiar nuestros planes a una cena. ¿Qué dices?
Jungkook le miró un poco avergonzado. Moría de hambre, su cuerpo le estaba exigiendo recuperar un poco de la energía perdida, no podía negarse a aquella propuesta.
—Eso sería excelente. —Taehyung dejó ver su hermosa sonrisa cuadrada.
—Entonces, vamos.
[…]
Jungkook tomó un trozo de carne y lo llevó a sus labios, un pequeño gemido de placer salió de ellos; estaba verdaderamente delicioso. Comenzó a bailar en pequeñito y a tararear una canción mientras sus papilas gustativas disfrutaban de la rica comida.
—Veo que lo estás disfrutando —Jungkook tenía las mejillas hinchadas por toda la comida que tenía en su boca, miró a Taehyung con sus enormes ojos. El castaño lo estaba viendo con una gran sonrisa, Jungkook asintió—. Me alegro.
Taehyung llevó un bocado de comida a sus belfos, no podía creer que estaba teniendo aquel momento con Jungkook, tal vez no habían cruzado muchas palabras; pero el estar ahí era un gran avance.
Quería conversar con él, ¿cuál podría ser la mejor manera de hacerlo? Claro... Tomó su celular y comenzó buscar algo en él.
—Jungkook-ssi —Jungkook fijó sus ojos en Taehyung—, ¿qué piensas de esta pintura? —extendió el teléfono hacia él.
Jungkook paseó con cuidado su mirada en la fotografía que Taehyung estaba mostrándole, era una pieza muy interesante. No contenía mucho, pero era muy expresiva. Algo en ella se sentía familiar.
—Es muy profunda. Sería hermoso poder verla en persona. ¿Quién es el artista? —Taehyung sonrió pequeñito.
—Park Youngsook —Jungkook se sorprendió un poco; Sook nunca le había mostrado aquella pintura—. Ella pensó que era una pintura que no transmitía nada; pero yo pensé todo lo contrario y que tú lo confirmes es maravilloso.
Pará Jungkook no era una sorpresa lo cercanos que eran Youngsook y Taehyung, era como si algo les uniera, pero no sabía exactamente qué. Lo único que sabía era que aquel peculiar lazo había nacido tiempo después de presentar a Taehyung con su clase. Aquel día había sido un poco caótico; sus estudiantes se sorprendieron mucho al verlo llegar con un completo desconocido. Youngsook incluso, preguntó descaradamente si se trataba de su pareja… “Profesor Jeon, ¿él es su novio? Es muy guapo”. Recordaba perfectamente como se había puesto rojo hasta las orejas y como Taehyung sólo se había limitado a sonreír.
Comenzó a sentir el calor correr por sus mejillas. Colocó su mano sobre sus labios, no era momento de pensar en aquello.
—Sook en ocasiones no logra ver lo talentosa que es —Sonrió con los labios sellados—. Su técnica va mejorando cada vez más. La manera en que expresa es asombrosa; es cómo si ella viera la realidad desde otra perspectiva.
»El arte que presenta es único. Sus cuadros son hermosos, lo tienen todo: concepto, balance, técnica… Las piezas están llenas de detalles y eso las hace simplemente extraordinarias —En los ojos de Jungkook se podía ver un brillo especial; cuando hablaba de arte su rostro se iluminaba. Taehyung rio con dulzura, Jungkook lo miró y sonrió tiernamente—... ¿Qué?
—Jungkook-ssi definitivamente fuiste hecho para el arte.
La manera en que había dicho aquello hizo que algo se removiera dentro de Jungkook.
Taehyung era agradable y sincero, siempre lo creyó así; pero confirmarlo era muy lindo. Tal vez no lo conocía a profundidad; pero sabía que él era una buena persona. En todo ese tiempo él nunca le había dirigido una mirada que le hiciera sentir como si estuviera incompleto o roto, le miraba con bondad y calidez. Taehyung tenía algo que le hacía sentir en paz, era como flotar sobre el agua, mientras el sol besaba su rostro… ¿Sería demasiado loco, imaginarse siendo suyo?
—Y para ti… —dijo con suavidad, casi como un susurro.
—¿Eh? —Rayos. ¿Por qué seguía diciendo las cosas en voz alta?
—La-la música. Y para ti fue hecha la música —Taehyung tocó su cabello.
—No soy tan bueno. —Sonrió pequeñito.
—Lo eres. Tu música está hecha para expresar lo que las personas no pueden decir. Presentas la esencia de su ser…; es como si pudieras ver a través de sus ojos, como si sintieras el mundo a través de su piel y eso es increíblemente bello. No podría pedir a alguien mejor que tú; para plasmar lo que soy.
¿A qué se refería Jungkook? Él ya no era el encargado de sus composiciones.
—¿Yo?
—Taehyung-ssi, sé que no lo merezco; pero, quisiera que fueras tú. Quiero que seas tú la persona que lleve a cabo mi trabajo… S-si no quieres hacerlo, lo entenderé. No hice más que ocasionar problemas. Realmente lo lamento, fui muy ton…
Taehyung no podía creer lo que estaba escuchando. ¿Por qué sentía en su interior como si algo volvía a encajar? Estaba demasiado feliz.
—Daré lo mejor de mí. Prometo que no fallare.
Jungkook asintió suavemente y dirigió su mirada hacia otro punto, si continuaba viendo a Taehyung su corazón no podría soportarlo más; tenía una expresión muy bonita y él había sido el causante.
Taehyung sentía aquel momento tan irreal. Durante todo ese tiempo, había sido tan complicado acercarse a Jungkook. Era cómo si un gran muro les separara; pero ahora, en ese pequeño momento, sentía como si pudiera rozar su piel debido a la cercanía…
No estaba seguro de que había cambiado; pero, esperaba que le diera tiempo para ayudar a Jungkook. Quería tomarlo y sacarlo de la oscuridad que lo rodeaba, alejarlo de todo aquello que hacía su alma doler…
—Jungkook-ssi —Los opacos fanales le miraron con suavidad—, gracias.
—¿Por qué? —En su rostro se reflejaba curiosidad y confusión.
—Por estar aquí. —Taehyung sonrió.
—Nadie puede negarse cuando se trata de comida. —En sus labios se dibujó una bonita sonrisa.
—Es verdad —rio pequeñito—, tienes razón.
Ambos se miraron y sonrieron, aquel momento era acogedor.
Jungkook estaba disfrutando el tiempo con Taehyung, quizás está era la verdadera razón por la que había evitado el contacto con él.
Tenía miedo, miedo de acostumbrarse a él y tener que verlo partir. Sabía que este era sólo el inicio. En algún momento Taehyung se encontraría con todas sus heridas. Se daría cuenta de lo roto que estaba y terminaría yéndose y no podría culparlo… ¿Quién querría algo que no puede ser reparado?
Pero nada importaba ya, si Taehyung representaba un corto capítulo en su historia, iba a aprovechar ese efímero momento para convertirlo en eterno.
Miró la hora, su corazón comenzó a bailar en un ritmo irregular.
Fijó su mirada sobre su reflejo, paseó sus ojos por cada una de sus facciones. Odiaba su aspecto opaco. Quería ver sus mejillas tintadas, sus luceros llenos de brillo y sin esas bolsitas oscuras bajo ellos… Acomodó su cabello. Suspiró sonoramente. ¿Por qué no podía verse más bonito?
El día anterior había invitado a Taehyung a su estudio. Tal vez para que le viera trabajar o quizás sólo para hablar… o probablemente para perderse en él… No lo sabía bien.
Volvió a su estudio. Estaba un poco nervioso, no podía quedarse en un solo lugar. Caminaba de una esquina a otra, si continuaba así haría un agujero en el piso. Se obligó a sentarse. Tomó una gran bocanada de aire y acarició sus muslos… Todo iba a estar bien... Un par de golpes se escucharon en la madera, la calma qué había logrado ganar se desvaneció, Jungkook podía sentir su corazón en la garganta; Taehyung había llegado.
Volvió a respirar con profundidad, contó hasta tres y caminó hasta la puerta. Su corazón estaba latiendo en su mano, giró la perilla… Sus fanales se encontraron con la sonrisa de Taehyung. Comenzaba a creer que podría volverse su cosa favorita en el mundo.
—Buenos días Jungkook-ssi. —dijo en un tono animado.
—Bue-buenos días.
—Traje café —Extendió un vaso hacia Jungkook—, por favor, dime que te gusta el café. — Jungkook tomó entre sus manos el vaso y le dedicó una pequeña sonrisa con los labios sellados.
—Me gusta mucho el café. —Taehyung suspiró.
—Qué alivio —rio—, no quería equivocarme. —Taehyung fijó su mirada en el interior de la habitación, ¿ese era el lugar donde Jungkook le daba vida a sus obras? Electricidad recorrió su cuerpo. Quería sumergirse en todo lo que componía a aquel chico—. ¿Pue-puedo pasar?
—Oh, sí. —Jungkook apartó su cuerpo para darle paso.
La verde mirada recorrió el lugar, era un espacio grande y ordenado. Su decoración era minimalista y tenía una gran vista hacia la ciudad. Las mesas del lugar estaban cubiertas de pintura, los pinceles eran imposibles de contar, los caballetes descansaban con bastidores en blanco y el olor a pintura inundaba el espacio. Era maravilloso.
Jungkook seguía de cerca cada paso que Taehyung daba. ¿Por qué parecía tan fascinado? Su estudio no era la gran cosa. ¿Qué era lo que hacía que él viera todo con esa pureza? Tomó asiento mientras disfrutaba de ese silencio.
Le dio un pequeño sorbo a su café, no pudo evitar sonreír. Ese era el primer regalo que recibía de Taehyung.
—¿Te gustó? Parece que sí, estas sonriendo.
Jungkook miró a Taehyung, ¿cuánto llevaba mirándole?
—Es-esta delicioso.
—Me alegra escucharlo —Taehyung caminó hasta él—. ¿Puedo sentarme? — señaló el asiento que estaba a su lado.
—Claro.
—Gracias —Sonrió—. Bien, sé que ya fue explicada mi manera de trabajar; pero, creo que debo explicarlo yo mismo…
Taehyung comenzó a describir cómo nacían sus composiciones. La mayoría afloraban de pequeños momentos en los cuales lograba capturar una parte importante de cada persona, algo que demostraba la belleza de su alma, algo que mostraba su fuerza, algo que mostraba su fragilidad…
Mientras Taehyung dejaba escuchar su hermosa voz, Jungkook trataba de prestarle toda su atención; pero, por Dios como se suponía que iba a concentrarse teniéndolo enfrente. Él estaba demasiado cerca, ahora podía verlo más detalladamente. Tenía varios lunares en su rostro, eran preciosos. Tragó con fuerza. Parecía que con cada día que pasaba la belleza de Taehyung incrementaba, ¿era acaso eso posible?
—¿Me lo permites Jungkook-ssi? —Jungkook lo miró fijamente. ¡Demonios! ¿A qué se refería?
—Y-yo…
—Sé que no es fácil confiar en un completo desconocido —Sonrió inseguro—. Sé que no me conoces… y probablemente lleve un tiempo; pero, ¿me permites conocer qué es lo que compone a Jeon Jungkook?
Jungkook sintió las palabras atascarse en su garganta. Sus ojos se cristalizaron levemente. El que Taehyung estuviera sentado junto a él significaba qué estaba dispuesto a mostrarle su historia y sabía que ambos lo tenían claro… Aun así, ahí estaba... Llegando como la brisa, tocando la puerta de su ser con total delicadeza, esperando pacientemente a que esta sea abierta…
—¿Y si lo que compone a Jeon Jungkook no es de tu agrado? —No quería escuchar la respuesta.
—¿Jungkook-ssi, alguna vez te has visto a través de los ojos de alguien más? —Frunció levemente el ceño, ¿qué clase de respuesta era esa? Negó con suavidad. Taehyung sonrió— En ocasiones, encontramos en nosotros mismos una y mil cosas que están mal; pero en realidad, ¿quién no las tiene?, no hay nadie verdaderamente perfecto. Dime ¿por qué deberíamos dejar que eso opaque todo lo bello que nos conforma? ¿Qué habrán cosas que no me agradaran de ti? Es probable; pero, puedo asegurarte qué encontrarás en mí cosas que tampoco te agradaran —rio—. ¿No es eso perfecto?
—¿Lo es?
—Yo creo que sí. Jungkook-ssi, no tenemos que encajar en las expectativas de otras personas. Es por eso que quiero conocerte Jeon Jungkook, para conocerte a través de ti y no de mí.
Jungkook se quedó en completo silencio, pensando en las palabras de Taehyung. Se levantó de su asiento y caminó hacia el ventanal, vio su reflejo borroso. ¿Cómo sería verse a través de los ojos de Taehyung?
Hola personitas
Espero que hayan amado este capítulo tanto como yo lo hice 🥺.
Les dejo un gran abrazo 💙.
Pequeño espacio para colocar dudas 🤭
Besos,
🌌 Vera
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