Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

❰16❱─•❥

┌───── ∘°◈°∘ ─────┐

MI NUEVO PROBLEMA

└───── °∘◈∘° ─────┘

Elsa Menzel Pov

«Me duele la cabeza», dije en mi mente. «Y repetirme eso no me ayudara», me cuestioné. «Necesito una pastilla», me recordé. «¿Entonces que estoy haciendo en mi hora receso?», me pregunté. «Trabajando», me contesté.

—¡Argh! —solté con frustración sin despegar mi mirada del papel que me encontraba realizando.

Me tomé alrededor de unos diez minutos para acabar con esa tarea pendiente, pero en el instante que acabé y acaricié mis cienes descolocando un poco mis lentes, una hoja más fue depositada con agresividad en mi escritorio provocando que me sobresaltara en mi asiento.

Levanté la mirada con una expresión confusa y de inmediato me topé con la de mi jefa, Edna. Arqueé una ceja y me incliné hacia delante leyendo el título del papel donde aún tenía su pequeña mano.

"¿El futuro más cerca de lo que creíamos?". «Esto tiene que ser una broma.»

—¿Sabes lo que es esto?

La miré nuevamente esperando a que siguiera.

—¡Dinero! —exclamó causándome otro sobresalto—. ¡Las noticias son dinero y tu no la estas recopilando!

—Sra. Edna le recuerdo que soy una administradora más en su empresa. No me corresponde...

—¡Cachis! —dijo con su rostro muy cerca del mío. Lentamente sin quitarme la mirada retrocedió—. Nadie puede hacer este trabajo mejor que tú. ¡Hay que llegar al fondo de esto! —gritó y nuevamente golpeó el escritorio.

La observé con una expresión descolocada y con lentitud tomé la hoja en mis manos.

—¿Qué desea que haga con esto? —le consulté.

—¡Investígalo! Los nuevos productos de Agnarr Arendelle no deben pasarse por alto. ¡Hazlo o consigue un redactor que este a tu nivel!

—¿Si lo hago me reducirá el trabajo que tengo pendiente?

Ella me miró con seriedad. Esas palabras parecieron no gustarle. Sonreí nerviosa esperando otro grito de su parte.

—Sí —contestó con seguridad sorprendiéndome—, pero si consigues a alguien házmelo saber antes —dijo con más tranquilidad, para después darse la vuelta y dirigirse a los demás empleados—. ¡A trabajar! —ordenó.

Bajé la mirada y leí nuevamente el título. "¿El futuro más cerca de lo que creíamos?". Descendí un poco más encontrando un subtitulo pequeño en la parte derecha que me creó disgusto. "¿Esposa e hija desaparecidas?".

«Es momento de conseguir un redactor.» Ni en sueños me encargaría de ese trabajo.

.

.

Agarré un jugo de naranja y leí la parte de atrás. Me encontraba en el supermercado haciendo unas pequeñas compras para la cena del día de hoy; no me hallaba con ánimos de adquirir los alimentos que necesitaba para el mes: estaba demasiado cansada con el trabajo y con el tema que había tocado la Sra. Edna.

Mi cabeza era un enrollo y deseaba llegar a mi hogar lo más rápido posible para descansar. Faltaba poco para el fin de semana y ese trabajo me hacían anhelar que esos días libres llegaran; vivía esperando el fin de semana y eso, era bastante mal considerado por mi padre.

Me reí ante ese pensamiento. «Que ironía.»

Acabé de escoger lo que utilizaría para hacer en esa noche y me dirigí a la caja. A continuación, hice la fila y pagué lo correspondiente. Después llevé las cosas a mi auto y antes de empezar a conducir revisé si no había recibido ningún mensaje de mis amigos o alguien más; y para mi sorpresa no los tenía.

En el camino me puse a escuchar canciones activas para evitar dormirme en el trayecto. Y al llegar a mi hogar no había notado que las luces se encontraban encendidas, hasta que levanté la mirada topándome con una emocionada Rapunzel esperando a que bajara.

Arqueé una ceja y pocos segundos después apareció Mérida.

—¡Elsa!

Suspiré y dejé caer mi cabeza en el manubrio. «Oh no...» Mis planes de descansar se habían arruinado, pero pasar tiempo con mis amigas para dispersar mis pensamientos con respecto a ese tema no sonaba tan mal.

.

.

Rapunzel: ¡Celebremos!

Jazmín, Mulán y Moana sonrieron alegremente y levantaron sus copas.

Tiana: ¿Por qué celebramos esta vez? —preguntó con una sonrisa confusa.

Ariel: ¡El plan funciono!

Mérida: Anna terminó oficialmente con Kristoff.

Jazmín: Y me ha contacto el día de ayer para pedirme alojamiento en mi casa. Y obvio, acepté.

«Así que esa fue tu decisión, ¿no?». Me reí ligeramente recordando la conversación que habíamos tenido y que ninguna de las presentes conocía. «Si que eres orgullosa», afirmé con una sonrisa a medias y con mi copa cerca de mis labios inhalando el aroma sutil que desprendía.

Bella: Honestamente no tenía esperanzas que funcionara, pero admito que me han sorprendido.

Mulán: Mi querida amiga sólo necesitaba un pequeño empujón.

«No es cierto», pensé. "Ella se encontraba planeando su vida a escondidas", deseaba decirles, pero me mantuve con mi boca cerrada. No tenía intenciones de decir alguna de la información que, Anna, me había otorgado. Pero... «¿Por qué?» ¿Por qué aun no quería decirles? El "plan bien planificado" había funcionado. No tenía nada que esconder en ese momento; sin embargo... algo dentro de mí me decía que no lo hiciera.

El sonido del timbre aviso la llegada de alguien más. Me ofrecí para abrir la puerta y me levanté de mi asiento dejando antes mi copa en la mesa. Seguidamente me aproximé a la entrada principal de mi hogar y abrí encontrándome con un nervioso Aladdín.

—Hola, Elsa.

—Buenas tardes, casi noches, Aladdín. Llegas tarde.

Él rio.

—Digamos que traigo buenas y malas noticias.

Eso... no era buena señal. Noté lo que no había visto al verlo. Aladdín cargaba una bandita que rodeaba su cabeza.

—¿Estás bien?

—Eso viene en las noticias malas.

Asentí y lo dejé pasar. Juntos caminamos hacia el salón y las demás lo saludaron con ánimos. Tomé asiento a un lado de Tiana, como de costumbre, y Aladdín se sentó en el sofá que poseía de una sola persona.

Ariel: ¿Qué te paso? ¿Estás bien?

Aladdín se rio ligeramente colocando una mano en su cabeza.

Aladdín: Me han dado una paliza. Kristoff está muy enojado.

Las chicas lo miraron con preocupación.

Bella: ¿Y por qué te lastimaron?

Aladdín: Hans habló con quienes estaba "involucrado" —contó—, y Kristoff reaccionó mal cuando las mencionó —dijo observando a Moana, Mulán y Jazmín—. Tuve suerte de que uno del grupo me ayudara a escapar. Demoré en llegar porque pasé a la enfermería primero —acotó soltando otra leve risa.

Moana: No es sorpresa de que nos odie.

Jazmín: Lamento que te pasara eso.

Aladdín la miró y sonrió nuevamente.

Aladdín: No te preocupes, yo mismo me metí en esto.

Mérida: Y valoramos tu sacrificio —dijo juntando sus manos y agachando la cabeza.

Rapunzel: ¿Hay algo más?

Aladdín: Bueno... Kristoff dijo algo sobre buscar a Elson.

Me reí e internamente me sentí orgullosa.

—Ahora seré la buscada —expliqué con diversión.

Tiana pareció no encontrarle gracia.

Tiana: Específicamente, ¿Qué dijo? —le preguntó.

Aladdín: Menciono algunas palabras que dijo Anna. Supuestamente, Anna había dicho que le terminaba por razones que el mismo conocía, aparte de incluir que era un abusador en varios sentidos que también él conocía. Kristoff le preguntó si tenía algún interés por alguien, y ella lo afirmo. —Hizo una pequeña pausa observándonos a todas— No hace falta mencionar quien es.

Nuevamente me reí y mi corazón revoloteo ante esa declaración. Anna no me había dicho directamente que le gustaba, pero no era necesario por las acciones que cometía con mi persona. Las miradas, roces y besos, eran claros indicios de eso.

Tiana: Bien, es mejor que frenemos esto ahora que estamos a tiempo —dijo ganándose mi completa atención.

Moana: Es verdad. Aunque me guste la idea de que Anna tenga la posibilidad de conseguir a alguien mejor, no quiere decir que continuemos con esta farsa.

«Farsa...», se repitió en mi mente y, nuevamente mi corazón se sintió afligido. Había pasado... una semana desde que, Anna, visitó mi hogar donde mis palabras... no fueron las mejores.

Mérida asintió y giró a verme.

Mérida: Has cumplido con el trato. Quedas libre de mis cuerdas, Elsa —me dijo con una sonrisa.

Rapunzel: Lo hiciste muy bien. Has conseguido lo que Bella no creía posible.

Ariel se rio y me miró también con agradecimiento.

Ariel: Lo has hecho bien. Agradecemos de que hayas soportado estos tres meses haciéndote pasar por un hombre.

Moana: Sé que no era la mejor idea, pero no teníamos más alternativas.

Mulán: Lastimosamente tampoco tenemos tantos amigos hombres, y los pocos Anna los conoce a simple vista.

Jazmín: Necesitábamos a alguien hermoso y encantador, como tú. El cambio no fue fácil, pero tampoco difícil. Hasta empezaste a sobrellevarlo por tu cuenta después de recibir nuestra ayuda dos veces.

Aladdín: A mí me sorprendiste —habló—. Nunca imaginé que llegaras en algún punto de tu vida a pasarte por un hombre. ¿Cómo fue la experiencia? —preguntó curioso.

—Ah... Bueno... —balbuceé—. ¿Temeroso? A cada momento tenía miedo de ser descubierta. Por otro lado, recibir miradas de mujeres heterosexuales no estuvo... nada mal. Honestamente ser alagada por mujeres, es muy diferente a ser alagada por hombres. Se sintió bien, pero...

«No digas pero», me regañé.

Rapunzel: ¿Pero...? —inquirió.

«Me he interesado en Anna.»

—Pero... espero no vuelvan a pedirme otro favor de ese tipo —acoté con una sonrisa falsa, pero creíble.

Ellas sonrieron y negaron con la cabeza.

Tiana: No creo que vuelvas a pasarte por un hombre. Eso se acabó.

Moana: Sí, ya no es necesario.

—Ja, ja... Claro.

Aladdín: ¿Y qué le dirán a Anna?

Jazmín: Ella no nos ha comentado de Elson. Parece querer mantenerlo oculto, pero si lo llega a hacer la escucharemos y apoyaremos en lo que necesite.

Mulán: Ella estará bien —aseguró.

Tragué pesado no confiándome de sus palabras. «¿Seguras estará bien?», me repetí con timidez.

Mérida: Bueno, ¡Sigamos celebrando!

Aladdín: Me parece buena idea. Yo pago el domicilio esta vez.

Bajé mi cabeza no sintiéndome para nada contenta de la decisión final. No quería alejarme de Anna, y se lo había demostrado aquel día. Ella me hizo esa pregunta y yo... respondí con sinceridad.

Exhalé y apoyé mi mano derecha en mi cabeza. «¿Por qué dije esas palabras?», me dije arrepentida. Me había dejado llevar por mis emociones y eso... era malo. Lo que le había dicho era simple, pero honesto.

Mis palabras fueron: "Quiero estar a tu lado y conocer más de ti." Mentiría si dijera que no me gustaba su compañía; que no me gustaba su sonrisa o sus pecas o sus hermosos ojos; mentiría si dijera que no me gustó las caricias y los besos que había recibido de su parte. Se había sentido bien. Demasiado bien.

Mi cuerpo la correspondía y ese era un logro gigantesco para mí, ya que antes me menospreciaba por ser una de las causas menos preocupantes de mi padre; lo que quería decir que no era relevante, puesto que a esos problemas mínimos no los tomaba en cuenta.

Recibí unas leves caricias en mi hombro que aprecié situando mi mano encima de la persona que intentaba relajarme con esa acción. Volteé a verla y le sonreí ligeramente dándole a entender que estaba bien, y que a la vez agradecía su acto de amabilidad.

Tenía a personas que se preocupaban por mí y eso era suficiente. Debía ser suficiente. «Entonces... ¿Por qué siento que algo me falta?». Era extraño esa sensación de vacío, pero era aún más extraño como Anna llenaba esa sensación con una sola sonrisa.

Era extraño, sin embargo, también impresionante.

El repartidor llegó unos treinta minutos después de que todas pidieran sus órdenes, y justo en ese momento mi celular vibro en señal de un mensaje. Aproveché y lo despojé de mi bolsillo. Al leer quien era la persona que me había comunicado me tensé y mi corazón volvió a latir con prisa, e inconscientemente llevé una de mis manos a mi pecho y arrugué levemente mi camiseta.

"¿Estás libre este sábado?"

--------------

Fin del Cap. 16 (Mi nuevo problema

.

.

.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro