Dieciséis
-¿Qué quieres?
-Y ahora te dignas a responderme -dijo.
-Oye, déjala tranquila -intervino mi amigo.
-¡Tú! ¡Todo esto es por tú culpa! así que cierra el pico -bufó molesto señalando a Lox de forma amenazante.
-Oye, deja a Lox. Fuiste tú quien se metió en ese lío solo. No lo culpes a él por tus errores -alegué.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro