
Capítulo ❷❺ (FINAL)
Capítulo ❷❺: 𝙹𝚎𝚘𝚗...
Kim hyuna fue el factor clave para todo lo realizado, sin ella, mucha cosas no hubiera sido descubiertas.
Ella quería lo mejor para su pequeño osito, quería lo mejor para aquel humano, un chico de hermosos ojos, linda sonrisa y apariencia Angelical que robaba suspiros a muchos, él era su adoración, por el mataría, sin dudarlo, lo amaba tanto, tanto, que estaba dispuesta a revivir sus traumas para ayudarlo en busca de esa felicidad que merecía.
Primero, se arriesgó a entrar y usurpar la Oficina de su padre-en una de sus visitas a casa de sus padres-en busca de aquello que era un misterio, cuando era pequeña, conoció a una dulce joven, de mirada dulce, sonrisa encantadora y apariencia divina, era amable y siempre la trató bien, ella la consideraba su mejor amiga, porque apesar de ser trabajadora en su casa, siempre tenía tiempo de jugar un poco con ella y hacer esos días tan pesados de clases de elegancia y modales más llevadera y fáciles.
Lee Minha, fue como un Ángel en la vida de Hyuna, una persona que apreciaba demasiado, su sorprenda fue, cuando al paso de los años, Minha enfermó, por varios meses y con el paso del tiempo, su esto am hora crecía y crecia, Hyuna pensaba que Minha se había comido una sandía entera y por eso se sentía mal y tenía una gran barriga, esto le dió risa a Minha y le explicó que no era así, sino que la cigüeña la vió y supo je era la indicada para traer un bebé al mundo para darle amor y cariño, Minha se sorprendió y con emoción la abrazó, minha lloró, no por lo emotivo del abrazo, sino porque ella conocía a la perfección la situación en la que su bebé fue engendrado, amaba al ser que se estaba firmando dentro de ella, pero odiaba al padre de este, no pido escapar de las garras de aquel feroz hombre que la tomó en un situación donde se encontraba débil y inconciente, todo para su beneficio y morbo.
Minha sufrió un abuso, y Taeyeon fue el idiota que la abusó.
Esto hyuna nunca lo supo, hasta que atando cabos en una de tantas noches de insomnio, al pensar en la muerte tan rara de su amiga de infancia, y el nacimiento milagroso de Taehyung, supuestamente hijo de
Eun-hye, quien nisiquiera presentó signos o síntomas de embarazo, y mucho menos una gran barriga, así que todo resto era sumamente sospechoso.
Entonces, al ser ya una adulta, ya no era tonta, ingenua o ilusa, sabía que algo malo había en su casa. Pues bien, en aquella revisión exhaustiva, encontró papeles que dejaban a la luz todas las porquerías que había hecho aquel hombre que se hacía llamar padre, pero no era más que un asesino y manipulador asqueroso, en sus manos estaban aquellos documentación sobre la investigación de la muerte de Lee Minha, mismos que tenían el sello de "CERRADO" en grandes letras Rojas, dando a entender que aquel caso se había cerrado por diversas situaciones, junto con esta, venía la prueba de que Lee Minha era la verdadera madre de Kim Taehyung- su hermano menor-. No fue tonta, y en vez de llevárselo, tomó foto a todo y prosiguió a salir de aquel lugar con el corazón en la mano, asustada y impactada por esos papeles.
Sabía que Kim Taeyeon era un monstruo, pero no sabía la gravedad de la magnitud. Por ello, al tener aquella información en su poder, no la utilizó a su favor, sino al de Taehyung, su niño querido que merecía justicia por la muerte de su madre.
Y ahora bien, estando en aquella gran sala, donde esposado se encontraba Kim Taeyeon, con la mirada llena de odio hacia Taehyung, mientras este solo lo miraba sin expresión alguna mientras declaraba en su contra. Para Hyuna fue total satisfacción cuando escuchó la condena de su padre.
-Dado a todo lo señalado, con el poder que se otorga ante la ley, declaró a Kim Taeyeon culpable de asesinato, soborno e intento falsificación de pistas. Por lo cuál, el señor Kim se enfrenta a cadena perpetúa sin posibilidades de anulación o de levantar alguna acta.- dictaminó el juez con convicción y seguridad, dando dos golpes con aquel martillo de madera característico de los jueces, y ante esto, todos los que estaban allí para ver y escuchar la condena de aquel maldito hombre, se levantaron y gritaron, junto con un fuerte aplauso.
Kim Hyuna miraba a lo lejos. Rió, carcajeó y casi se atraganta por aquella risa escandalosa que resonó por el lugar, Taeyeon nisiquiera prestó atención a esto por estar mirando a Taehyung, al cual le murmuró una absurda amenaza "morirás". Claro, como si pudiera hacer algo en su estado, todo su poder cayó inmediatamente cuando su pie derecho tocó el suelo de aquella patrulla que lo llevó hasta la estación de policías para encarcelarlo por precaución antes de su juicio, el cual fue rápido gracias a la magnitud del caso y a los increíbles contactos de Jungkook en ese sector- todo se hizo con legalidad, ningún juego o truco sucio- y esto fue una victoria para los Kim.
Porque finalmente, el poder de la palabra había tomado un sentido beneficioso para aquella fiel parejita.
Kim Taehyung y Jeon Jungkook, habían derrotado al enemigo.
La familia entera celebró, celebró esa victoria y la completa libertad del peligris, al cuál, su incitación poco a poco se haci notar, algo así como: "Hola, aquí estoy, estoy creciendo grande y fuerte". Esto llevaba de felicidad al azabache, quien no podía estar más feliz al experimentar aquella etapa con su doncelito.
D
espués de la victoria, muchas más felicidad llegó a sus vidas. Disfrutaban de su relación de pareja con plenitud, rodeados de familiares y amigos que en verdad valían la pena. La pareja Jeon-Kim se caracterizaba por ser bastante selectivos en sus amistades, pero es
to les había ayudado a tener a las mejores personas a su lado.
Ya no había más Kim Eun-hye- quien desapareció mágicamente del mapa- y mucho menos Kim Taeyeon.
Los meses pasaron con tranquilidad, nada podía alterar la paz en aquella gran casa donde residían Taehyung y Jungkook, Taehyung mientras Jungkook trabajaba pintaba, y ayudaba a Jimin en las tareas del hogar- este se negaba y siempre le recordaban a Taehyung que estaba en estado, pero Taehyung era tan persistente que siempre se salía con la suya- tomaba el té de en vez en cuando con su hermana, otras con sus sueños y las restantes con Jimin, mientras platucanan sobre sus metas en un futuro, su embarazo y su relación con Jungkook, la cual florecía más y más con cada día que pasaba.
Jungkook era el tipo perfecto, amoroso, atento, cursi a las no poder, el instigó protector hacia Taehyung incrementó desde la noticia de su embarazo, pero lejos de abrumar a Taehyung l molestarlo por el nivel exagerado en que Jungkook lo hacía, Taehyung se sentía seguro y querido a su alrededor, Jungkook era su zona de confort, aquellos grandes y fuertes brazos lo reconfortaban todas noche a mientras rodeaba su esbelto cuerpo, amable con locura a Jungkook y este amaba a Taehyung con la misma o hasta con más intensidad, porque sin duda, Taehyung se enamoró primero, pero Jungkook se enamoró más fuerte, no quiero decir que uno ame más a otro, sino que Jungkook suele ser más intenso con aquellas demostraciones, Taehyung era su debilidad.
-Me encantaría que se parecía a ti, mi dulce doncelito.- Confiesa Jungkook mientras va dejando pequeños besos en la barriga pronunciada de Taehyung.
Este ríe por las cosquillas que los labios de Jungkook provocan.
-Y yo quiero que sea como tú, amor. Eres tremendamente guapo, sería todo un honor que nuestro hijo tuviera más tus genes que los míos.- Responde Taehyung mientras sus dedos se enredan en el cabello sedoso de Jungkook.
-Sin duda quiero que tenga tus dulces ojos y tu preciosa sonrisa. Te aseguró que enamorará a todos. Estoy ansioso por conocer a nuestra retoña.
-Sería todo un Galán. Un niño grande y fuerte.
-No, yo creo que será una preciosa princesa que robará suspiros a más de uno, pero será solo mía, ningún maldigo hombre pondrá sus manos en ella, yo la cuidaré a capa y espada.
-¿Porqué mejor no un niño?
-Sinceramente no me importa mucho si es niño o niña, pero algo en mi interior, me dice que es una bebé. Pero mientras nazca bien y te tengas a ti y a ella o él a mi lado, seré feliz.
-Entonces...¿porqué no dejamos que sea una sorpresa? Ya sabes, la próxima semana es la cita con el doctor, podríamos decirle a tu madre o a mi hermana que vayan y que alguna de ellas sean la S únicas que sepan o algo así.
-Me encantas tu idea mi dulce doncelito.
-Tienes a un doncel bastante gordo.
-Gorda me la pones, príncipe.- Respondió con sorna.
-¡Jungkook~, el bebé está presente, no seas guarro!-. Exclama Taehyung con diversión cubriéndose su barriga.
-Una disculpa bebé, pero tu papi es precioso y provoca que grandes cosas despierten en mi. Tú no escuches, ¿okey? Es un momento de adultos, tapa tus orejitas- habló a la barriga de Taehyung con voz vasbtabge aguda y una sonrisa divertida en su rostro.
Taehyung amaba los espontáneo que Jungkook llegaba a ser, a pesar de que en es la momento de exponteneadad dijera sus cosas sucias, lo amaba y le divertía. Porque a pesar de que Taehyung en momentos se sentía inseguro con los cambios que su cuerpo estaba presentando, Jungkook siempre estaba allí para levantarle el autoestima, lo besaba, acariciaba y le hacía el amor con suavidad, como si se tratará de una frágil flor.
El día del parto llegó, Taehyung gritaba todas aquellas maldiciones que nunca había dicho en su vida, maldecia a todo aquel que se le cruzara mientras iba cargado en los fuertes brazos de Jungkook rumbo al auto, y que decir de Jungkook, el pobre iba con los nervios a punta, pero sabia cual era su rol en esta situación, tenía que estar allí para el nacimiento de su bendición, así que aguantando todos aquellos reclamos por parte de un moribundo Taehyung, no sabe cómo le hizo, pero llegaron sanos y a salvó al hospital.
-¡Jamas en tu perra vida me vas a encajar tu enorme polla en el culo, Jeon Jungkook! ¿¡Me escuchas mal nacido!?- gritaba Taehyung al sentir cada pulsada en aquella zona tan dolorosa, nunca se imaginó que dar a luz sería tan doloroso.
Juraba por Dios que jamás se volvería a embarazar.
Jungkook no dijo nada, su cara parecía preocupada por la situación que aquellas palabras sinceramente no movieron nada en él, sabia que lo decía por el dolor, no podía comprender el dolor porque él jamás pasaría por aquello, pero trataba de imaginar todo lo que sufría y no podía decir nada más.
Los doctores y enfermeros llegaron a su salvación, llevándose a Taehyung para prepararlo mientras jungkook llenaba los formularios sobre Taehyung, después de eso lo Cuarón a la sala de preparación, pues Jungkook estaría presente en el nacimiento de su primogénit@.
Se lavó y atendió a todas las indicaciones por parte del personal médico, y con la emoción y euforia a flote, sosteniendo la mano de su doncelito mientras este pugaba y exclamaba maldiciones aquel lla to que escuchó fué como música para sus oídos.
El lugar pareció iluminarse con una potente luz cuando el doctor después de varias maniobras pudo sostener al bebé sobre sus manos y alzar lo para enseñarlo a sus padres.
Jungkook, nuevamente no aguantó la emoción y al levantarse, sus piernas no resistieron y cayó desmayado al suelo.
-Disculpelo, su cuerpo no resiste mucho la emoción.- alegó Taehyung cansado.
La Sala se inundó por un momento de silencio y mientras ayudaban a un Jungkook desmayado a sentirse, no evitaron soltar una que otra risa.
La enfermera pasó un algodón por las fosas nasales de jungkook y este reaccionó.
-¡Mi bebé!- exclamó Jungkook, fue lo primero que dijo para después levantarse y acercarse para ver a la magnífica criatura que sería un motivo más de su felicidad.
Al tomarla en brazos-lo cual practicó múltiple veces con muñecos hasta perfeccionar su técnica-, su rostro fue un total poema de amor, admiración y devoción al ver a la pequeña bolita de carne en sus brazos.
-Es preciosa.- Dijo con total devoción mientras acariciaba la piel tersa de su hija.-Es una preciosa niña, amor-. Le hizo saber a Taehyung con sus ojos grandes, brillantes y lágrimosos por todos esos hermosos sentimientos que se atravesaron en su interior.
Se acercó a Taehyung, para primero besarle la cara cuidando de no hacerle daño a su bebé- Muchas gracias por darme una hermosa hija.- agradece con una hermosa sonrisa a Taehyung y este le sonríes tan bonito y solo asiente, ver a Jungkook en ese Estado hace que un nudo se le firme en la garganta a Taehyung.- Que se repita.
C
on el nacimiento de Jeon Soo-jin (nombre el cual significa pureza en honor al pasado puro de Taehyung), todos los planes que se habían pausado por su nacimiento, al fin se pusieron en marcha. Ambas familias se alegraron con el nacimiento de la princesa de la familia, la adoraban y mirabas mucho, Taehyung y Jungkook siempre querían ponerles un alto, pero es que Soo-jin tenía una mirada tan linda como la de Taehyung y unos grandes ojos como los de Jungkook que nadie podía resistirse a ella, ni sus padres.
Taehyung se encontraba frente el altar, vestido con un hermoso traje de tres piezas color Perla, con un suave maquillaje que resaltaba su belleza, con su cabello peligris - el cual se retocó hace algunos días debido a que la raíz ya era muy notable- y en sus brazos estaba la pequeña de un año de edad que les había traído pura felicidad. A su lado estaba Jungkook, con un sexy traje negro y camisa blanca, su cara adornada solamente con sus piercings, los cuales sólo se los puso para la ocasión, ya que se los quitó por la seguridad de su hija al momento en que la cargaba, en fin.
Los tres estaban allí, frente al padre que dictaba la frase de la Unión ante Dios. Al fin serían esposos.
-Por el poder que me concede el magnífico creador de los cielos, del mar y de la tierra, creador de todo en este universo, los declaro esposos. Pueden besarse.- declaró aquel señor mayor de edad, y Jungkook se acercó para besar suavemente la mejilla de su hija para después guiar sus labios a los de Taehyung, entregándose en un suave balanceo de labios tierno pero con tantos sentimientos de por medio.
Su sueño se había cumplido.
Taehyung fin oído quitarse ese pesado apellido Kim para pasar a ser Jeon Taehyung, esposo de Jeon Jungkook.
Los ascos y los vómitos no paraban desde hace algunas semanas.
Habían pasado exactamente tres a los desde su boda, Soo-jin ya tenía 4 años y asistía al kínder.
Pero desde hace algunas noches, el cuerpo de Taehyung se sentía débil como para hacer todo a lo que estaba acostumbrado.
Pero tenía muy claro que podía ser.
Así que mientras Jungkook ayudaba a la pequeña Jeon este se encerró en el baño para al fin salir de dudas.
En sus manos se encontraba una prueba de embarazo, la cual tenía dos rayas, y esto sólo significaba una sola cosa.
-¡JEON JESÚS JUNGKOOK DE LA SANTA TRINIDAD Y LOS TRES REYES MAGOS!- exclamó Taehyung desde el baño.
Jungkook rió por el nombre, y murmuró.
-Al fin se dió cuenta, me voy a quedar sin pene.- su tono era para sí mismo, pero era algo nervioso.
¡Por Dios! Un cuarto integrante se uniría a la familia Jeon.
-Vas a tener un hermanito o hermanita, mi amor.
-¿Cumpliste tu promesa?- pregunta Soo-jin con los ojos iluminados.
-Un Jeon siempre cumple lo que promete.
Taehyung mentiría si dijera que la felicidad aumentó en su vida cuando se enteró de este segundo embarazo, pero un poco de maldiciones para Jungkook no le caería mal.
𝐅𝐈𝐍
¡Hola, aquí Kim J. Al fin dándole conclusión a esta historia!☛☚
Muchas gracias a esas personas que leyeron esta historia desde que empecé a publicarla.
Y a las que la convkyefon conmigo.
Les agradezco su apoyo, sus votos y comentarios que me animaron a seguir.
Ésta historia es mi pequeño tesoro, que amo y adoro.
¡Espero que les haya gustado!
Déjenme sus comentarios al respecto.
Nos vemos mañana con un pequeño apartado.
。・:*:・(✿◕3◕)❤
-Kim J.
2024©
Taekook_Versatil
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro