Naruto se encuentra paseando en la aldea han pasado 16 años desde que llegó a esta dimensión, su Ita ya se jubiló siendo aún joven, ahora su cuñado Izuna está al mando.

Este cuando cumpla 15 años en el poder se le entregará a Minato solo espera que él quiera hacerlo.

Al salir de sus pensamiento llega hacia la playa se sienta en la arena y nota que alguien está corriendo en el agua  rápido de levanta y se da cuenta que es su esposo Madara.

Se sorprende al ver cómo está todo sucio —¿Qué te pasó? — preguntó Naruto cuando el más alto se puso delante de él.

Madara sonríe con cariño —Nada, solo tuve una pequeña batalla con Hashirama.

—No me digas que es...

—Lo sé, quiero estar contigo estoy cansado de estar lejos de ti, te extraño anhelo dormir contigo, sentirte tu cuerpo junto al mío y... no le digas pero al tonto de Itachi también lo extraño, especialmente molestarlo.

Naruto se ríe, sin importarle cómo está su marido lo abraza —Pero sabes que Zetsu tiene que ir por ti, me imagino que ya ha ido a verte.

Madara hace una mueca —Sí pero... no haré el plan.

Naruto se separa un poco, su cara refleja un poco de sorpresa —¿Qué?

—Lo escuchaste Naru —dijo Madara asustando sus manos en la cintura de su esposo —, no quiero hacerlo.

—Pero... Las cosas deben de seg...

—No me importa, gracias a ti no seguiré en la oscuridad, gracias a ti no tuve pensamientos locos... yo leí el libro que trata sobre mi y comprende por qué hizo todo eso sin embargo está vez te tengo a ti, a mi hermano para mi con eso basta, quiero hijos para mimar y cuidar, no me pidas que siga con el plan por que mi corazón no puede aceptarlo.

Naruto mira eso ojos negros tan profundo como el abismo al final solo abraza a su esposo entendiendo el corazón de el —Está bien, aún queda alguien que puede hacerlo.

—Está bien, solo espero que sea alguien respetable.

Al final Naruto dio la noticia que Madara no será participe en el plan como era en un principio nadie cuestionó la decisión del Uchiha ya que entiende la vida solitaria que el tubo antes.

Los del clan Uchiha revivieron a Madara con cariño y respeto.

A los pocos meses Hashirama supuestamente había fallecido ya que la supuesta batalla le dejó heridas graves.

Acontecimientos mínimos que tenían que pasar pasaron así como los años por igual pasaron, el nacimiento de Minato Namikaze por fin se hizo.

En los brazos de un Naruto muy embarazado está el que supuestamente es su padre, mira al hombre en la cama este sería su abuelo doncel quien tiene una gran relación especial con él.

—Es hermoso —sonríe en grande Naruto.

El Doncel sonríe —Me gustaría que fuera su padrino.

Naruto se sorprende —Pero, pero.

—No hay peros Naruto-sama —dijo un hombre entrando a la habitación, este sería su otro abuelo —, tenemos lazo aunque vengas de otro lugar eres familia.

Naruto sonríe con emoción —Gracias, y si quiero ser el padrino de este hermoso bebe.

—Por cierto ¿cómo vas con el embarazo? —preguntó su doncel abuelo.

—En dos meses doy a luz, los chicos prácticamente no me dejan hacer nada, venir aquí fue por que me escape... ya deberían de estar buscándome.

La pareja Namikaze se ríe —Ya sabes que sexo es?

Naruto confirma —Si es una niña y un niño.

—Aún no puedo creer que tu y tus amigos están embarazado al mismo tiempo y lo más increíble es que estén esperando mellizo y cada bebe es de un padre diferente.

—Es gracias a los Bijūs, por ellos pudimos hacerlo, los dos amigos donceles y yo teníamos miedo que los chicos sintieran celos por quien sería el padre del primer bebé, pero gracias a los Bijūs ese problema se soluciono.

De repente la puerta fue abierta con fuerza, dos azabaches con una muy cara estoica entran a la habitación —Naruto Uzumaki Uchiha —gruñeron ambos al mismo tiempo.

Naruto ríe nervioso —Hola chicos.

—Debiste de avisarnos, así podíamos traerte —expresó Madara poniéndose al lado de su rubio, percatándose del bebé en los brazos de su esposo —. Y este bebé.

— Minato...

Itachi se coloca al otro lado de su esposo y mira al bebé, con su dedo sobre la mejilla de este, sonríe con orgullo y respeto —Será un buen Shinobi.

Los padres Namikaze infla su pecho con orgullo, ellos están atentos a todos los logros que su hijo hizo solo, lo único que quiere en esta oportunidad que él sea feliz.