Capitulo 12
Luego de que salieran del restaurante, ambas jóvenes pasearon por todo el pueblo, Mirabel llevo a Dolores a muchos lugares, y a decir verdad aquel pueblo era bastante hermoso.
Ya eran las 18:00PM y ambas jóvenes volvieron al hotel, ahí les recibió la señora que era la dueña, quien les regalo unos dulces.
Luego de esto subieron a su habitación y se echaron en la cama debido a que se encontraban cansadas.
Mirabel- fue un día lindo, pero eso de caminar agota a cualquiera
Dolores- así es, pero lo bueno es que tenemos donde estar, imagínate si no hubiéramos conseguido una habitación
Mirabel- con el cansancio que tengo, dormiría incluso en el piso de la fría calle
Dolores- hablando de dormir, ¿Cómo le haremos para dormir juntas en esta cama tan pequeña?
Mirabel- bueno, supongo que súper cerca de la otra, ¿o tienes alguna otra idea?
Dolores- no, supongo que será así
Mirabel- no te preocupes dormiremos muy bien
Dolores- si tú lo dices
Mirabel- cambiando de tema, aún es muy temprano para dormir, así que, para matar el tiempo, ¿te gustaría jugar una partida de cartas conmigo?
Dolores- dale, ¿pero pondremos dinero?
Mirabel- ¿Qué es de una buena partida de cartas sin apostar?, venga ponga dinero en la cama- exclamó mientras ella ponía unas cuantas moneras en la cama
Dolores- quiero que sepas que yo se jugar muy bien, así que no te sorprendas si pierdes todo tu dinero- respondió mientras colocaba en la cama más monedas
Mirabel- no hables antes de tiempo, pues el que ríe al último, ríe mejor
Dolores- no te creas muy buena, nunca me viste jugar- exclamó mientras se sentaba junto con Mirabel
Mirabel- ya lo veremos, te comento que una vez le saque casi todo su dinero a mi tío Bruno
Dolores- él no sabe jugar muy bien
Mirabel- ¿tu como sabes?
Dolores olvido el detalle de que Mirabel no sabía que eran primas, obviamente ella cuando era niña jugaba cartas con su tío y por eso sabía que no era muy bueno.
Dolores- porque él me lo dijo una vez- respondió mintiendo.
Mirabel- que admita algo así es raro- exclamó mientras soltaba unas risas
Dolores- ya, no cambiemos de tema, juguemos
Mirabel- ¿lista para perder?
Dolores- ya lo veremos querida Mirabel.
Ambas jóvenes comenzaron a jugar su partida de cartas.
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