⚠️️️ (Kuroo x Kenma x Hinata) ⚠️

Lo prometido es deuda, a una seguidora le prometí que en cuanto pasáramos los 10k en vistas, subiría un especial... Un trio y todo esto salió por el anterior especial donde se menciona.

Pero antes de empezar, estoy en contra de las infidelidades y esas cosas por lo que esté especial no estará ligado a la historia original... Será como un One-Shot, donde Hinata NO es pareja de Kageyama para evitar cualquier infidelidad jajajaja.

También quería agradecerles por tanto jajaja, estoy casi llorando por todo lo que me han brindado, les amo. 🥺

Helado napolitano

En ningún punto de sus vidas se les ocurrió que existieran las parejas Omega-Omega o Alfa-Alfa...
Las más raras que escucharon era Beta-omega u Alfa-beta.

Y ese nuevo descubrimiento fue encontrado en una página de internet ilegal donde dos omegas uno de 18 años y el otro de 19 años, se encontraban buscando alguna película para distraerse.

Eligieron cualquiera y así pasaron la tarde, Hinata recostado en las piernas de Kenma mientras comía un gran bote de helado napolitano...

Al siguiente día, Kenma tuvo que dejar el departamento de Shoyou ya que tendría una tipo fiesta por la graduación de los chicos de una generación más abajo que la de él.

Al Omega no le gustaban las fiestas... Pero tanto insistió Kuroo que termino por aceptar prometiendo que no se alejaría de él en la fiesta... No era muy creíble pero al ser su crush de la vida, decidió hacer un esfuerzo e ir a la fiesta.

Kuroo llegó por él a las 8:30 PM tal y como lo había acordado, y así fue como se fueron a la fiesta en casa de Nobuyuki Kai quien acepto amablemente a que fuera en su hogar al contar con un gran terreno, piscina, sala de cine... Prácticamente era el riquillo del equipo.

La fiesta fue "normal" al principio, todos comenzaban a tomar pero no sé sentían mareados o algo por el estilo... Solamente comenzaban a tener calor.
Los menores de edad no pudieron beber por obvias razones.

Kenma era un chico reservado en su normalidad, pero cuando llegaba a consumir alcohol... Era un caso totalmente diferente.

Kuroo decidió dejar de tomar en cuanto vio que Kenma comenzaba a ponerse borracho y no se veía con ganas de parar de beber, así que decidió que lo cuidaría.
No iba a dejar que un Alfa de la nueva generación se aprovechará de Kenma cuando sabía que a ese tipo, le gustaba nuestro antiguo armador del Nekoma.

Las horas pasaron y algunos ya se encontraban durmiendo, otros simplemente platicaban mientras que una parejita se habían subido a las habitaciones a pasar un buen rato y ya habían pasado las horas y se seguían escuchando los choques de la cama contra la pared... "Yaku tiene buen aguante" pensó Kuroo.

Kenma se encontraba recostado en el hombro de Kuroo mientras esté jugaba con los dedos del menor...

Hasta que, bueno... Ocurrió algo que el Alfa no se lo espero

— Kuroo... Me gustas.

... ¿Qué?... ¿Kuroo había escuchado bien? ¿Gustaba de Kenma? ¿¡LE GUSTABA A SU AMOR IMPOSIBLE!?

— Kuroo... ¿Me escuchaste? — dijo Kenma al no resubir respuesta levantándose para ver a los ojos al Alfa al que le había confesado sus sentimientos — Kuroo, Me-gus-tas.... Aunque sabes, también me gusta Shoyou.

Aquello tomó por sorpresa al Alfa, ya que en sus adentros había descubierto que Kenma le gustaba pero también sentía algún tipo de tensión cuando veía al pequeño sol del Karasuno.

Pero por el momento decidió llevarse a Kenma a casa y tal vez... Solo tal vez... Pasar una Noche Buena, apesar de no ser épocas navideñas.

Y ahí fue cuando se le ocurrió una idea al Alfa, ambos estuvieron de acuerdo pero faltaba uno... Y ese uno acababa de terminar con el rey de la cancha... Kageyama Tobio, un Alfa egocéntrico.

A la mañana siguiente Kenma, como todos los fines de semana se fue a quedar con Shoyou... Pero esta vez se les añadiría Kuroo con la excusa de que se habían encontrado en el camino y Kuroo se había autoinvitado.

Aquello no le molestó a Shoyou, pensó que sería divertido y así pasarían una tarde viendo películas o tal vez le pediría consejo a un Alfa para poder superar al idiota que lo había dejado hace tres meses atrás... Tal vez ya había pasado tiempo, pero vaya que le dolía.

Tobio fue su primera vez en casi todo, a excepción de ser la primer persona en escucharlo hablar cuando solo era un bebé, a excepción de los primeros 15 años se su vida, Tobio lo fue todo para él:

Su primer beso, su primer novio, su primera vez... Le había entregado su florecita recién retoñando para que al siguiente día dijera que ya no podían estar juntos.

Eso no era una buena "primera vez"...

Pero regresando a la pequeña reunión, al Kuroo había salido a comprar un helado para el Omega pelinaranja.

Y así dieron inicio a su pequeño plan...

Paso 1: Kenma se insinuaria debido a la confianza que tenían.

Kenma se encontraba a un lado de Shoyou y la verdad sentía que su corazón podría salirse de su pecho pero no era momento de arrepentirse.

Ambos jugaban Mario Card al ser el único video juego que Shoyou podía ganar una vez cada diez oportunidades...

— ¡Eso no se vale Kenma! — gritó el pelinaranja al percatarse de la pequeña trampa que había hecho su amigo.

Y eso fue por qué el peliteñido no encontraba la oportunidad para acercarse...

Hinata hizo un puchero haciéndolo ver adorable, tanto así que Kenma sintió como cupido lo flechaba nuevamente.

"¡Aprovecha Kenma!... Eso diría Kuroo" pensó el Omega mayor.

Kenma se recargo del sillón volteando a ver Hinata recargando su brazo en el asiento y su mano en su mandíbula mientras sonreía enternecido.

Shoyou volteó a ver a su amigo gatuno y se sonrojó al ver qué Kenma le había guiñando un ojo...

Ni siquiera el peliteñido sabía de dónde sacaba el valor para hacerlo.

— ¿Q-que?... ¿T-tengo algo en la c-ca-cara? — titubeó Shoyou desviando su mirada.

En la mente del pelinaranja había una pequeña guerra entre sus emociones, maldecía la belleza de su amigo y se maldecía a él mismo al tener que titubear tanto al ver qué alguien lo miraba tan fijamente.

Kenma soltó un suspiro y posó su mano libre sobre los cabellos alborotados ganando una chispa de confianza al ver qué Shoyou disfrutaba aquel tacto vareando sus ojos y ronroneando...

¿Que pasará si lo besa?
¿Sería correspondido?

Decidió arriesgarse un poco y solamente se acercó lo suficiente como para que sintiera su respiración sobre sus labios...

Shoyou abrió sus ojos encontrándose con los ojos color miel del Omega quien estaba a centímetros de su rostro.

— Eres hermoso... Shoyou... — dijo Kenma en susurro mientras bajaba su mano hasta la mandíbula de Shoyou para delinear la con sus delgados dedos...

Aquello tomó por sorpresa a Shoyou regalando una sonrisa tímida y un color carmín en sus mejillas.

— Kenma... ¿Que-

El habla del Omega pelinaranja fue interrumpido por un el otro chico en cuanto posó con temor sus labios sobre los contrarios.
Kenma pensó que tal vez al besar a otro Omega, sentiría náuseas o su animal interior comenzaría a atacar al otro pero fue todo lo contrario... El peliteñido se sintió en el cielo al tocar los acolchonados labios del bebé cuervo del Karasuno...

Shoyou en su lugar quedó petrificado, aquello era una sensación totalmente diferente a lo que había imaginado... Los labios de Kenma comenzaron a moverse comenzando a succionar un poco el labio inferior del pelinaranja.

Como un instinto... Hinata cerró los ojos y comenzó a disfrutar del beso al cuál estaba siendo participe.

Kenma al sentir que su beso era correspondido, sonrió para después morder con un poco de fuerza el labio inferior de Hinata ganando un pequeño suspiro de parte del pelinaranja.

Aquello termino por encender a Kenma... Realmente no le importaba haberse omitido tres pasos según su plan con Kuroo, lo que quería ahorita era disfrutar al manjar que tenía frente a él.

Hinata se apartó un poco de Kenma al sentir como las manos del peliteñido comenzaban a tomarlo por la cintura para sentarlo en las piernas del Omega más grande.

— K-ken... Kuroo puede... venir en cualquier momento... — habló en pausas el pelinaranja gracias a la falta de aire que tenía.

— Ya estoy aquí...

Habló un tercero ganándose la mirada de los dos Omegas... Uno sonreía con picaría mientras que el otro quería que se lo tragara la tierra.

— ¡Kuroo-san! ¡No es... — Hinata fue interrumpido nuevamente al sentir los labios del teñido nuevamente aprisionando los suyos en un beso más profundo que el anterior

Hinata quería mantener la compostura pero vaya que Kenma besaba bien tanto así que comenzó a mojarse su parte trasera.
El pelinaranja cerró sus ojos disfrutando del beso sin importarle que alguien más los veía... O eso creyó asta que sintió como alguien besaba su cuello.

Se sobresalto y giro un poco su rostro para encontrarse con el Alfa gatuno quien lo miraba con deseo.

Kuroo paso sus manos por la cintura del pelinaranja abrazándolo para después atacar su cuello nuevamente dejando besos húmedos en el mismo.

A este punto la cordura de Shoyou iba descendiendo así que queriendo y la vez no, ladeó la cabeza para darle más espacio a Kuroo de besarlo y echo su cabeza hacia atrás recargandose en el hombro del Alfa.

Kenma se convirtió en un espectante pero aquello no tardó demasiado al comenzar a encorvarse un poco y así tener justo frente a él, el pecho del Omega pelinaranja.

Sin esperar mucho tiempo paso sus manos bajo las prendas de Hinata para pasear sus dedos por el torso del mismo ganándose unos espasmos y algunos jadeos que eran callados por la mano del pelinaranja.

Kuroo quitó las manos de Hinata de su boca para después levantarlas y con una mirada decirle a Kenma que lo hiciera.

Ese solo asintió y levanto las prendas de Hinata para dejar su torso desnudo.
El pelinaranja se avergonzó y quiso esconder su cuerpo entre sus brazos.

— N-no creo que sea correcto... — murmuro el pelinaranja bajando su cabeza y apretando las piernas para evitar que vieran su erección que iba creciendo.

— Esto de aquí dice lo contrario... — dijo Kuroo pasando un dedo por encima de la tela que cubría la entrepierna de Hinata. — ¿Que dices Chibi-chan?... ¿Jugamos?

Las feromonas olor a chocolate de Kuroo se esparcieron por el apartamento ganándose a dos omegas observándolo con detenimiento y mostrando un lado sumiso y por el otro dominante

Era como ver: Oro y un cuarzo citrino.

"Esto no estaba en el plan" pensó el Alfa al ver cómo ambos omegas se acercaban a él ágatas, moviendo sus caderas a medida que avanzaban...

Hinata se sentó en la pierna izquierda de Kuroo mientras que Kenma en la derecha... Se miraron cómplices y ambos comenzaron a besar a Kuroo repartiendo caricias al torso del Alfa.

¿Eso era el cielo?, ¿Estaba soñando? Y si fuera un sueño, quisiera no despertar jamás.

Kuroo acariciaba la estrecha cintura de ambos chicos en sus piernas provocando que ambos omegas comenzarán a mover sus caderas sintiendo la fricción entre las telas de sus ropas.

Kuroo tomo el rostro de Kenma y comenzó a besarlo con desesperación mientras que con la mano que acariciaba a Kenma, comenzaba a quitarle la ropa para dejarlo del mismo modo que el pelinaranja o tal vez desnudarlo por completo.

Hinata dejo de besar el cuello de Kuroo para observar aquella escena tan excitante que presenciaban sus ojos.

Los pequeños pero sonoros gemidos de Kenma se esparcieron en la sala de estar y apesar de la naturaleza de que un Omega se siente amenazado al momento de estar con un Alfa... Esta vez se sentía distinto.

Shoyou tenía la necesidad de tocar a Kenma...

El Omega pelinaranja decidió acariciar el cuerpo desnudo de Kenma y este se sentía cada vez más extasiado.

Rápidamente los dos omegas optaron por deshacerse de las ropas del Alfa y Shoyou termino por quitar las propias para así comenzar con lo que habían estado esperando...

Y así fue como Kenma libero feromonas más fuertes con olor a fresa y Shoyou con olor a Vainilla...

Los aromas se mezclaron dando así el delicioso olor a un...

Helado Napolitano...

A partir de ese momento ninguno de los tres sabía que hacer ya que nunca pensaron llegar tan lejos, ¿Pero ya para que se arrepentian?... Ya habría tiempo para reflexionar al día siguiente.

Kuroo acercó los dos pares de labios de los omegas para comenzar a besarlos uno por uno... Pero con la misma pasión qué cada vez iba en aumento

Sin querer... O tal vez sí queriendo, Shoyou comenzó a tomar en sus manos el gran miembro de Kuroo para masturbarlo a su ritmo...

Kuroo posó su vista sobre el pelinaranja mientras disfrutaba del tacto del mismo...

A este punto estaban más sumergidos en su mundo que ni uno de los tres se percataba que tocaban la puerta del pelinaranja... Lo único que querían era disfrutar... Disfrutar al máximo.

Y decidieron que era hora de la acción...

Gracias al pedido de Kuroo, Kenma se posicionó en cuatro dándole al Alfa toda la vista gloriosa en frente de sus ojos.

El Alfa metió un dedo al interior de Kenma y este no tardó en soltar gemidos más sonoros que los anteriores pero inconscientemente movía sus caderas con tal de simular estocadas...

Kuroo entendió lo que pedía e introdujo un dedo más para abrirse paso y que de algún modo su largo y grueso miembro entrará en el delgado Omega...

Por otro lado, Hinata se sentó en el suelo con las piernas abiertas y al parecer el otro Omega entendió y bajo su torso de modo que quedara apoyado en sus antebrazos para comenzar a jugar con el miembro de Hinata...

Primero con sus manos...

Y después con la boca.

Una vez el pelinaranja sintió la cavidad bucal envolviendo su pene, soltó un gritó de placer al sentir como era totalmente envuelto con la lengua de Kenma...
La lengua del peliteñido viajaba de arriba hacia abajo, jugando con la punta, hasta llegar a la base...

Pero gracias a que el Alfa saco de golpe sus dedos para después introducir aquello que los omegas esperaban con ansias...

Kenma tuvo que sacar el miembro de Hinata de su boca para gemir y venirse casi al instante, manchando la alfombra a su paso.

Los ojos de Kenma se cerraron y con más que intento no gemir, fue casi imposible dejando salir un gritó agudo pero un tanto rasposo gracias a la resequedad de su garganta.

Aquello realmente no impidió que siguieran con lo suyo...

Los gemidos del peliteñido eran callados por el miembro en su boca pero debido a que cada vez iba más y más profundo... Kenma apretaba al Alfa a tal punto que sentía que sería imposible no resistirse y venirse dentro...

Ya al día siguiente comprarían pastillas...

Kenma no resistió más y tuvo su segundo orgasmo al sentir como Hinata llenaba su boca con su jugo que gracias a ser Omega, era más dulce que el de un Alfa o beta.

Kuroo no tardó en venirse dentro de Kenma y gracias a que ninguno de los dos estaba en celo, la probabilidad de concebir era casi nula pero todavía existía una pequeña probabilidad.

Ahora era momento de Hinata, de extasiarse con el aquel jugoso miembro de Kuroo...

El menor de los tres, se recostó en la alfombra abriendo sus piernas para que él Alfa pudiera saciar sus deseos más oscuros.

Kuroo se posicionó en medio de las piernas de Hinata y tras ver qué el anillo rosado del Omega estaba lo suficiente dilatado, introdujo lentamente su miembro.

El rostro de Hinata se deformo por el placer, poniendo sus ojos en blanco y abriendo su boca de modo que dejara al aire sus gemidos y gritos.

Kuroo jamás había visto ni escuchado algo parecido que ni siquiera termino por entrar completamente cuando ya había terminado dentro de Shoyou llenándolo por dentro.

Kuroo trato de retirarse pero las piernas de Hinata se lo impidieron gracias a que lo tenía abrazado por sus caderas.

Sin esperar mucho tiempo, agarro las piernas de Shoyou para ponerlas en sus hombros y así poder llegar más profundo...

Mientras tanto, Kenma tomo asiento encima de la cara de Hinata quien no tardó en meter su lengua en el dilatado anillo de Kenma.

El peliteñido se sentía en el cielo al sentir la hábil lengua de Hinata moviéndose de arriba abajo, en círculos y cualquier movimiento que pudiera hacer con su lengua.

Kenma se acercó a Kuroo para comenzar a besarlo y este no tardó en corresponder el beso tomando dominio en el mismo ósculo, introduciendo su lengua para enredarla en la contraria y gracias a la velocidad e intensidad, saliva se coló de sus bocas para recorrer hasta sus cuellos...

Una vez más, los tres chicos se vinieron manchando a su paso...

Decidieron separarse para recuperar el aliento... Y tal vez recuperar un poco la conciencia de lo que acababan de hacer.

El Alfa se recostó en el suelo y los omegas a sus lados acomodándose de tal modo que se apoyaron en el cuerpo del Alfa y después de taparse con sus chamarras o sudaderas.

Se quedaron totalmente dormidos...

°°°

A la mañana siguiente el sonido de un teléfono sonando despertó a los tres presentes y quejándose, se levantó el dueño del celular.

En la llamada:

— ¿Diga? — contestó sin ver el nombre.

— ¿¡Que hacía Kuroo-san en tu departamento!? — preguntó Tobio gritando y Hinata tuvo que alejar su celular ya que le dolía terriblemente la cabeza.

— Kageyama ¿Podrías callarte? Me duele la cabeza ¿Que quieres?

— ¿Que quiero? ¿¡Quiero que me digas que hacía Kuroo-san entrando a tu departamento como si fuera su casa!?

— No debería... — Shoyou trato de hablar pero le arrebataron el celular

— ¿Puedes callarte? Shoyou es nuestro ahora así que no tienes derecho a reclamarle nada — habló Kenma, para después poner el alta voz.

— ¿Kenma? ¿A qué te refieres con "nuestro"?

— Nuestro... Querido Tobio... ¿No crees que Chibi-chan gime genial cuando dice tu nombre?... Debiste haberlo escuchado gemir "Tetsuro y Kenma" ... Fue lo mejor.

— ¿¡Que!?

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¿Opinioness?