[Kageyama]

— Vayamos arriba... — me dijo Hinata mientras me jalaba para que lo siguiera

Yo no quería levantarme, estaba demasiado avergonzado por lo que acababa de ver mi suegro... O sea nos habían dado permiso pero aún así me sentía avergonzado.

— Amor... Vayamos rápido antes de que alguien más llegué — dijo Hinata regalándome unas cuantas feromonas.

Su dulce aroma me hizo reaccionar y decidí seguirlo, iba un poco lento por la incomodidad que sentía en mi pantalón, pero aún así decidí armarme de valor y cargue a Hinata haciendo que el enrrollara sus piernas en mi cadera para así poder besarlo un poco más antes de llegar a la habitación.

En cuanto llegamos Hinata vio el piso hecho trizas, estuve a punto de decirle algo pero me acorraló contra la puerta cerrando con seguro y viéndome directamente a los ojos.

— No quiero que alguien nos interrumpa, será mejor apresurarnos... — Dijo Hinata mientras pasaba una de sus manos por mi abdomen.

Poco a poco fue bajando su mano hasta llegar a la cinta, la desamarro y bajo un poco mi pans para así poder liberar un poco mi miembro... Pero aún no completamente ya que seguía con el boxer tapandolo.

Se puso de rodillas frente a mi y me vio por última vez a la cara, para regresar su vista al frente dónde podía verlo directamente.

Con delicadeza comenzó a tocarlo haciendo que reaccionará automáticamente con un casi insonoro jadeo.

— Hola... Te extrañe — dijo Hinata mientras lo acariciaba.

— N-no digas eso, hmgt... — formule con dificultad y tapando mi rostro con uno de mis brazos para ocultar mi sonrojo que seguramente tenía.

El río un poco y se acercó para regalar un beso húmedo por encima de la ropa, y yo comencé a sentirme casi en mi límite.

— Hinata... Basta, vo-voy a... — Decía mientras acariciaba los cabellos naranjas de mi pequeña mandarina.

Él volteo a verme a los ojos y comenzó a bajar mi ropa restante de la parte baja de mi cuerpo para si poder liberarlo.

Lo vio por unos momentos para después tocarme comenzando con la punta hasta el tope... Provocándome unos cuantos espasmos en mi cuerpo.

Comenzó a subir y bajar su mano por todo el largo de mi miembro provocando que saliera unos cuantos jadeos y gemidos roncos de mi boca que eran cayados casi al momento por una de mis manos.

Cerré mis ojos y cuando menos me lo espere sentí como comenzaba a hacerlo con su boca y ahí por la impresión gemí mas alto provocando que me viera y sin sacarlo de su boca, me sonriera.

De repente sentí unas inmensas ganas de orinar pero era otra cosa totalmente diferente mientras mi miembro palpitaba y se hacía más grande... Sabía lo que significaba.

Mis piernas comenzaron a fallar un poco...

Tome el cabello de Hinata y comencé a hacer embestidas más profundas para llegar más allá y poder terminar.

Escuchaba arcadas de su parte y unas lágrimas salían de sus ojos pero me asegure de no lastimarlo... Conocía la distancia con la que yo podía jugar.

Unas cuantas embestidas más eche mi cabeza para atrás y me libere en la boca de Hinata.

Me deje caer sobre mis rodillas, rápidamente reaccione y le pedí a Hinata que escupiera lo que había en su boca.

Él me sonrió, se limpio la comisura de su labio y me dijo

— Dulce...—

Ahora sí es momento de tomar el control.

[Hinata]

Kageyama me sonrió y se levantó mientras me ayuda a mí también a levantarme.

Cuando menos me lo espere me levanto en brazos estilo princesa y con delicadeza me recostó en la cama.

Se puso encima de mi impidiendo que me levantara y comenzó a besarme desesperadamente, abriéndose paso con su lengua.

Yo correspondía su beso mientras paseaba mis manos por su espalda y pasándolas hasta su pecho para si poder liberarlo de su ropa.

El se despegó del beso por la falta de aire y una delgada linea de saliva era lo que nos unía.

El volvió a acercarse y beso mis labios para bajar hasta mi cuello, repartiendo besos por el camino marcado por anterioridad con sus dedos.

Sus manos se paseaban por mi cuerpo por encima de la ropa hasta que levantó mi playera y comenzó a acariciarme con sus largos y fríos dedos.

Llegó a la zona de mi pecho y antes de tocarlo me quito mi playera, yo no puse resistencia.

Con una de sus manos agarro mis manos para ponerlas arriba de mi cabeza...

— Mantenlas arriba de tu cabeza quiero escucharte... — dijo mientras volvía a repartir besos pero ahora hasta mis clavículas.

Yo asentí con un sonido y sin aviso previo comenzó a lamer uno de mis botones mientras que con su otra mano masajeaba el otro a su gusto.

Un gemido que intente callar salió de mí provocando que el lamiera y jugará con su lengua aún más rápido, y presionando un poco más fuerte.

Intenté acariciar su cabello pero volvió a agarrar mis manos para impedir que yo hiciera algo más...

— Quédate así Omega... — una voz bastante ronca salió de su boca provocando que de un momento a otro sintiera como si estuviera a punto de venirme.

Yo trate de bajar mis manos para así poder liberar mi pequeño miembro comparado con el de Kageyama, pero nuevamente su mano volvió a impedirmelo.

— Ka-kageyama... po-por favor... Agh... Y-ya no aguanto hmgt... — trate de formular.

El comenzó a bajar sus besos hasta llegar a la altura de mi vientre y se detuvo ahí un momento a repartir más besos mientras que con sus manos bajaba mi ropa y así liberarme de esa estorbosa ropa para ese momento.

Se levantó y posicionó mis piernas a cada lado de su cadera quedando totalmente a su merced.

Con una de sus manos seguía masajeando mi pezón mientras que con la otra me masturbaba...

Mis piernas comenzaron a temblar y de un momento a otro... Me vine manchando mi pecho.

Mi respiración era agitada mientras trataba de regularla.

Con uno de mis brazos lo puse sobre mis ojos mientras sonreía... Trate de levantarme pero el me agarró de la cintura y dijo.

— Aún no terminamos... — dijo mientras liberaba feromonas con el fantástico olor a Moras...

Se estiró para llegar a su pans y de su cartera saco dos condones... Típico de Kageyama.

Abrió uno y lo puso en sus dedos para así fuera un poco más fácil entrar por qué no teníamos lubricante.

Antes de introducir uno de sus dedos se agachó a la altura de mi vientre y lo acaricio...

— ¿Te gustan las cosquillas bebé? — dijo mientras repartía un beso húmedo por la altura de mi vientre.

Su comentario me dio risa y comencé a reír un poco... Hasta que un gemido salio de mi boca por qué introdujo uno de sus dedos y comenzó a meterlo y sacarlo rápidamente.

Apreté las sábanas bajo mis manos y mordía mi labio inferir para callarme un poco.

Él lo notó y se acercó a mi boca para besarme.

— No calles la música para mis oídos —

Asentí con la cabeza mientras dejaba al aire mis gemidos.

De pronto introdujo un dedo más y comenzó a moverlos como tijeras, provocando que curveara mi espalda mientras apretaba las sábanas con más fuerza.

Sentí como nuevamente estaba en mi límite y mi parte de enfrente pedía atención.

Acerque mi mano para ayudarme un poco pero Kageyama la quito y se volvió acercar a mi oído para decirme.

— Solo tienes permitido venirte por detrás — dijo mientras mordía el lóbulo de mi oído provocando un escalofrío que recorrió todo mi cuerpo.

Después de terminar de aflojarme, tiro el condón que había usado y abrió el nuevo para así ponérselo rapidísimo...

Posicionó su miembro en mi entrada y antes de meterlo, acaricio nuevamente mi estómago y dijo.

— Cuidado con la cabeza... — dijo mientras se acomodaba mejor

— Idio... Aaahhh — no me dejó terminar cuando de una estocada lo metió completo o eso pensé yo... Hasta que sentí como poco a poco iba más y más profundo.

— Es-espera... Du-duele... — decía mientras lo empujaba un poco con mis manos.

El espero a que me acostumbrara al tamaño... Y poco a poco fue entrando más y más...

Jadeos roncos y gemidos agudos era lo único que se escuchaba en la habitación, hasta que escuchamos que tocaron el timbre de la casa.

(En mi habitación, tengo un mecanismo que me permite escuchar el timbre)

— Ya... Debemos terminar... — dije mientras seguía moviéndose

— Hasta que te vengas, no terminamos — dijo y comenzó a moverse más rápido y más profundo.

Con sus manos acariciaba mi pecho provocando que se agudizaran más mis gemidos, vi que sonrió y dijo.

— Así que es cierto — dijo sin dejar de tocarme y provocar sonidos lascivos de nuestras pieles chocando.

Mi mente quedó en blanco, no pensaba más a allá... Los ojos oscuros de Kageyama me atraparon y el era en lo único que podía concentrarme.

De pronto sentí como el miembro de Kageyama se agrandaba y comenzaba a palpitar dentro de mi... El mío no tardó en reaccionar de la misma manera y así fue como terminamos los dos al mismo tiempo con un hermoso grito de lujuria regalado por los dos.

Kageyama se dejó caer a un lado de mí y ambos respirabamos agitados.

Cerré mis ojos mientras le sonreía y tranquilizaba mi respiración.

— Amor... Hace un momento dijiste "Así que es cierto" ¿A qué te referías? — pregunté levantándome y caminando lentamente al baño para poner a llenar la tina y relajarnos un poco no sin antes darnos un baño.

— Kenma me dijo que durante el embarazo te haces más sensible y veo que es cierto — recalcó la parte "Veo que es cierto"

Yo no pude reír un poco pero no le iba a decir que yo le dije, podría causar una pelea con él y no quiero pelear... Me podría preguntar el porqué yo lo sabía o quién me lo había dicho.

— Ya veo... Y oye... Gracias por no dejarme marcas — dije mientras me veía al espejo y revisaba mi cuerpo que no hubiera marcas.

— Estamos con tus papás tuve que controlarme... Por mi, no estuvieras caminando como sin nada. — decía y así levantarse de la cama para entrar al baño.

Cuando paso por detrás de mi, me dio una nalgada que podría jurar que me palpitaba y su mano se había quedado marcada en mi trasero... Pero lo que no recordó es que tenía las manos lastimadas así que grito del dolor también.

Cuando se nos pasó el dolor un poco, reímos los dos y entramos a la ducha no sin antes meter en unas bolsas las manos vendadas de Kageyama para que no se mojaran las vendas

Terminando, decidimos entrar cinco minutos a la tina y así relajarnos

Puse una burbuja de baño con olor a coco.

Ambos suspiramos de alivio al sentir el calor del agua invadir nuestros cuerpos y así nos quedamos abrazados durante unos minutos hasta ver qué nuestros dedos se arrugaron un poco por el agua.

El tomo mis manos mientras tenía su cabeza recargada en mi hombro.

— ¿Me prometes algo? — dijo sacándome de mis pensamientos.

— ¿Qué cosa? — pregunté, ahora yo jugando con sus manos.

— Prométeme que seguiremos juntos aún si nuestras pieles dejan de estirar, cuando los años se comiencen a ver en nuestro rostro... Cuando nos cueste caminar... Prométeme que pase lo que pase seguiremos juntos... ¿Me lo prometes? — dijo mientras entrelazaba nuestros dedos.

— Tobio... ¿Te he dicho que eres demasiado romántico?... Pero sí, te prometo que seguiremos juntos pase lo que pase, debemos luchar juntos ahora que tenemos a Akihiko y a este pequeño o pequeña que cargo en mi vientre... Nuestros dos pequeños son el producto del amor que existe en nosotros... y debemos ser fuertes por ellos — recargue mi cabeza en su pecho mientras escuchaba los latidos del corazón de Kageyama.

Así nos quedamos unos segundos hasta que escuchamos que sonó mi celular así que me levanté y vi que era mi papá.

En la llamada:

— ¿Que sucede? — olvide que ya habían llegado los chicos.

— Ya solo los estamos esperando — dijo mi papá.

— Ya vamos... —

Fin de la llamada.

Corrí para afuera del baño, agarre unas toallas y le aventé dos a Kageyama en la cara para que así se apurara.

Encendí la secadora y comencé a peinar mi cabello un poco.

También seque el cabello de Kageyama y el se lo acomodo como quiso así que los dos nos comenzamos a cambiar apresurados.

Una vez terminamos bajamos como sin nada y todos nos saludaron normal.

Kenma se acerco a mi oído y dijo. 

— Que bien huelen...— 

Sonreí incrédulo, pero puedo jurar que había un sonrojo en mi rostro.

Nos sentamos a la mesa y comenzamos a comer.

De un momento a otro, Akihiko me pidió sentarse al lado de su papá así que me recorrí un poco para que se sentará y yo quedé a un lado de la hija de Tendou.

Toda la comida eran risas tras risas, los únicos "serios" eran los niños.

— ¿Que sucede Aki? — pregunté ya que vi que él no había tocado su comida.

— No tengo hambre — dijo cruzando sus brazos y con un gran sonrojo en sus mejillas

Kageyama y yo nos vimos con extrañes en muestra mirada y Kageyama se agachó para susurrar al oído de Akihiko.

— ¿Paso algo? —  pregunto Kageyama.

Cuando termino Kageyama de preguntarle, automáticamente todo el rostro, contando orejas y cuello de Akihiko se tiño de rojo.

Toque la frente de Akihiko para corroborar que no tuviera temperatura pero no era nada de eso.

Mi pequeño se levantó corriendo y corrió hacia el jardín trasero.

Me quite la servilleta que había puesto en mi pantalón y de reojo pude ver las manitas de la niña quién también estaban un tanto rojitas.

Voltee a verla y ella también tenía un sonrojo en su rostro... Sonreí tiernamente y le hice una seña a Kageyama para que fuéramos tras Akihiko.

Él me miro extrañado pero aún así me siguió.

Cuando encontramos a Akihiko el estaba abrazando sus piernitas... En cuanto nos escucho alzo su rostro y se volvió a sonrojar escondiendo su carita en sus piernas

Me senté en cuclillas frente a él... Y Kageyama imitó mi acción.

— ¿Sucedió algo con Ukara? — Pregunté levantando el rostro de mi bebé.

Él, tímidamente asintió con la cabeza.

— M-me dijo algo — dijo mientras desviaba su mirada.

En ese momento parece que Kageyama entendió la situación y agarro una de las manitas de Akihiko.

— ¿Que te dijo? — pregunto Kageyama.

— M-me dijo que y-yo... Amm... Que yo le gustaba — dijo Akihiko y se sonrojo aún más.

Podría jurar que vi humo salir por sus cachetes.

— ¿Y a ti también te gusta? — pregunté mientras le sonreía para darle más confianza a Aki.

Él volteo a vernos a los dos y dijo.

— No... No sé, es que a mí me gusta Sofi pero ya no la voy a ver... — dijo un poco triste

— Ay mi amor... — dije acariciando su cabello.

— Mejor le diré a Ukara-chan si quiere ser mi amiga... Así como mamá y papá... Ustedes son amigos ¿no?— pregunto Akihiko mientras se levantaba.

— No Aki, mamá y yo somos Novios. —  le contesto Kageyama.

— Ahh... ¡Entonces le diré si quiere ser mi novia!... Pero... Yo le dije a la señorita bonita si quería ser mi amiga... ¿Tengo que dejar de ser amigo de ella? — pregunto mientras ponía su manita en su barbilla en señal de estar pensando.

— ¿Señorita bonita?... ¿Miwa? — pregunto Kageyama.

Akihiko sonrió ampliamente y asintió con la cabeza.

— ¿A eso te referías cuando dijiste si quería ser tu amiga y le regalaste la flor? — pregunto Kageyama sonriendo

— ¡Sip! — dijo casi gritando.

Kageyama comenzó a reír...

— ¿Estás seguro que quieres a Ukara? — pregunté mientras le sonreía a Akihiko.

— Sí, también es una niña bonita — dijo mientras corría hacia adentro.

Kageyama y yo nos quedamos afuera un momento hasta que escuchamos el grito de mi pequeño.

—¡UKARAAA-CHAAAN! —

Kageyama y yo nos vimos y corrimos detrás de él...

— ¡Akihiko! Ven... — grité un poco avergonzado ya que había llamado la atención de todos.

— ¿Que sucede mami? — me preguntó inocentemente.

— Eso debes de preguntarlo cuando están solos... ¿Por qué no la invitas a la casa de papá mañana y le preguntas ahí? —  pregunté y el asintió con la cabeza.

Se acercó a Tendou y Ushijima-san, quién solo vi que asintieron con la cabeza

Ukara y Akihiko salieron de la casa corriendo agarrados de la mano.

Kageyama y yo regresamos a la mesa... Y ahora me senté a un lado de Tendou.

— Creo que a Ukara le gusta Akihiko ¿No? — me preguntó Tendou.

— Y a Akihiko le gusta Ukara... — voltee a verlo y el también volteo a verme.

Nos sonreímos y sacamos una pequeña risa para así regresar a nuestra comida.

°°°

La comida transcurrió con normalidad y nos platicando aún en la mesa... Mis padres estaban contando como había sido su boda...

También nos contaron cómo Ushijima-san y Tendou decidieron no casarse... 

La comida y con un poco de vino y otros alcoholes era lo que habia en la mesa... obviamente yo no tome nada por mi embarazo... Quien si ya estaba un poco pasado de copas era Kuroo.

Kuroo se levantó y todos volteamos a verlo.

— Kageyama, Bro... ¿Para cuando la boda?

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Amig@s Jajajajaj, me acabo de dar cuenta que la historia de "Deku", o sea está...

No es el Omegaverse Jajaja, En esa historia, nuestro protagonista es Bakugo.

La que si es Omegaverse y Bakudeku es está:

Solo que no se vio en la captura de la parte anterior JAJAJAJA, una disculpa.