🔹 Capítulo 18 🔹
[Narradora]
— Déjame explicarte lo de Alisa... — dijo Kageyama sujetando a Hinata.
El mencionado volvió a sentarse enfrente de Kageyama, mientras veía sus manos y jugaba un poco con ellas.
— En resumidas cuentas... Ella es la chica con la que mi papá quiere que me case, él formó nuestra relación... Cómo era mi primera pareja, yo pensaba que ella era todo lo bueno y lo demás era lo malo... por ella fue que comencé a ver mal a los omegas... Hasta que te conocí, fue cuando termine con ella por qué me enamoré y no quería aceptarlo pero en tu necedad y perseverancia lograste ganar mi cariño... Pero ese es otro tema. No se que fue lo que te dijo en la llamada pero ella no es nadie para mí y no logrará que yo me separé, así tenga que matarme para alejarme de ti. — dijo Kageyama tomando las manos de Hinata.
— Pero ella es bonita... Reías mientras hablaban, ¿Que es lo que te falta? — dijo Hinata tratando de tranquilizarse
— No era risa de felicidad... Simplemente reía por las cosas tan tontas que me decía... Ella es bonita, sí, no te lo voy a negar... Pero lo que necesitaré siempre es a ti y no a ella, tu fuiste quien me enseñó que es la humildad, tu eres quien me hizo abrir los ojos y ver mi error, tu eres quien me dio una familia, mi felicidad es gracias a ti y a ese pequeño tormento que tenemos como hijo... Realmente eres tú quien quiero a mi lado, eres tú quien me hace sonreír y no ella... Por eso te pido que no me evites por qué cada vez que lo haces mi corazón se hace chiquito y pienso lo peor, tampoco te menosprecies, si pudiera gritar lo cada cosa hermosa que veo en ti... Me quedaría sin voz y sin años para poder decir todo lo que me gusta de ti... Eres el ser más hermoso que jamás he visto en mi vida y eres lo más importante para mí... No quiero que por errores te vayas de mi lado. Ahora somos adultos debemos comportarnos como tales, se que en el pasado terminamos por un mal entendido y éramos tontos pero ahora creo que hemos madurado y podemos ser felices sin necesidad de separarnos y volver a juntarnos... De ahora en adelante quiero estar contigo día y noche sin importar nada. — dijo Kageyama.
Hinata levantó su vista y vio a Kageyama quien tenía lágrimas en sus ojos apunto de caer.
El pequeño se levantó y abrazo a Kageyama pasando sus brazos por los hombros del mencionado...
— Lo siento por desconfiar de ti... Te amo Kageyama, quiero estar contigo todos los días de mi vida y te prometo hablar cuando algo me moleste... No quiero ser más un niño de 16 años — dijo Hinata separandose y apretando las mejillas de Kageyama mientras que con sus pulgares limpiaba las pequeñas lágrimas que resbalaban por el rostro de su Alfa.
El más alto abrazo a Hinata por la cintura y lo acerco a él para besar sus dulces labios... ambos se fundieron en un beso tan tierno y lento, que lograban saborear cada movimiento que era causado por los dos.
Separandose del beso ambos se vieron directamente a los ojos y un ligero sonrojo color rosado se formó en los rostros de ambos...
Ese sentimiento era el mismo sentimiento como cuando se vieron por primera vez en la escuela, la primera vez que cruzaron miradas, la primera vez que se fundieron en un beso... Estan tan enamorados como si fuera la primera vez.
A los pocos segundos se escuchó.
— Ay, ya terminaron... Ya me cansé de bajar y subir escaleras... No quería interrumpirlos... — dijo la abuela dejándose ver.
Ambos chicos sonrieron al ver a la abuela y ella les regreso la sonrisa acompañada de unas cuantas lágrimas de felicidad.
— Ahora deberían descansar... Los despertaré cuando esté el desayuno — esto último lo dijo empujando a ambos para que fueran a dormir.
Los chicos subieron las escaleras tomados de la mano y sonrojados como si fueran niños.
Entrando a la habitación Hinata soltó un suspiro bastante sonoro acompañado de una pequeña risa.
— Iré al baño... Tú puedes irte adelantando — dijo Kageyama con su mirada abajo pero sonriendo
El pequeño de un brinco subió a la cama y se quedó sentado esperando a que saliera su Alfa.
Poco tiempo después salio Kageyama del baño y vio a su pequeño Omega abrazando una almohada y viéndolo directamente... Prácticamente esperándolo
— Pensé que ya estabas dormido — dijo Kageyama acercándose lentamente.
— Estaba esperando mi beso de buenas noches — dijo Hinata con un ligero sonrojo en su rostro.
El más alto sonrió y se acercó a la frente del pequeño y depósito un tierno beso pero lleno de amor
— Descansa pequeño — dijo Kageyama recostandose.
Hinata se deslizó para llegar a los brazos de Kageyama y acurrucarse ahí, buscando el calor de su amor.
— Descansa... Mi rey. — dijo Hinata escondiendo su cabeza en el pecho de su Alfa.
Y así fue como ambos cayeron perdidamente dormidos.
°°°
La abuela con sumo cuidado se acercó a la cama para encontrarse con los chicos acurrucados.
Vio que Kageyama ya estaba despierto y suspiro con ternura.
—Ya está listo el desayuno— dijo la abuela viendo tranquilamente a ambos.
Kageyama asintió con la cabeza y la abuela salió de la habitación...
— Cariño... El desayuno está listo — dijo Kageyama acariciando el cabello de Hinata.
Se escuchó un quejido de Hinata y abrió sus ojos lentamente.
— Cinco minutos más... — dijo Hinata volviéndose a acurrucar.
— La abuela ya está esperando — dijo Kageyama haciéndole cosquillas a Hinata.
Hinata comenzó a reír y se levantó de golpe.
— Ya voy, ya voy... — dijo Hinata caminando hacia el baño.
Hinata fue a lavar su rostro con agua fría y vio en el espejo sus ojos totalmente hinchados... Se quedo viendo por unos segundos y puso un poco más de Agua fría directamente en sus párpados para que bajara un poco lo hinchado.
Salió de baño y agarro sus lentes para disimular un poco.
Ambos salieron de la habitación para encontrarse con Akihiko quien ya los esperaba afuera de la habitación.
El pequeño sonrió al ver a sus papas sonriendo nuevamente... y no tardó en lanzarse a abrazarlos.
Y así fue su comenzó el primer día en casa de la abuela.
ººº
[Hinata]
—Seño... Abuela ¿Quiere que le ayude con la comida? — dije entrando a la cocina y acercándome para lavarme mis manos
— No mi niño, ve a pasar tiempo con tu familia — me dijo la abuela terminando de cortar cebolla
— Vinimos a estar con usted, al menos déjeme prepararle algo y mostrarle la deliciosa comida que puedo hacer — dije sonriéndole
La abuela asintió rendida y se quito su mandil color azul y me lo entrego para que yo me pusiera en manos a la obra.
Decidí prepararle unos chiles en Nogada, un platillo tradicional en México.
Ambos platicabamos de cosas triviales... reíamos y en momentos el ambiente se tornaba triste ya que me contó sobre la muerte de su esposo... Falleció a la edad de 70 años, pero lo unico "bueno", fue que falleció tranquilo, se durmió y no volvió a despertar... me dijo que no hizo ruidos de dolor o se llegó a estirar bruscamente, todo fue tan tranquilo que hasta se podía ver la sonrisa en su rostro al momento de morir.
Evidentemente no podía dejar de llorar por el momento...
— No quiero que termine salada mi comida por tus lagrimas ¿eh? — dijo la abuela ocasionando que riera por su comentario.
— Lo siento, aun no lo asimilo — dije un poco con dificultad.
— Debemos de ser fuertes, tu abuelo se pondría triste si te viera así — dijo la abuela tranquilizandome
Asentí con la cabeza y la abuela se acercó para prender la bocina y poner música la cual no tardó en sonar.
— ¿Que musica es la que escuchas ahora? — me pregunto viendome para que yo le diera una respuesta
Yo me quede pensando en la música que he escuchado... y toda tiene que ver con Akihiko... Y TODA EN ESPAÑOL
— Tiene mucho tiempo que no escucho música de mi edad, solo escucho musica para Akihiko — dije un poco apenado
La abuela rió y dijo...
— Bueno alguna de la que te acuerdes....— dijo la abuela.
Yo hice de todo para recordar alguna canción y todo lo que se me vino a la mente fue... "La vaca lola, Baby Shark, La gallina turuleca... "
Después de pensar por unos momentos... recordé una canción que había escuchado cuando estaba en casa y estaba solo aburrido por que todos estaban ocupados incluyendo a Akihiko... ya que el estaba en la escuela.
La canción era "Orange" de 7!
— Ya se cual... — le dije la canción y la puso
https://youtu.be/0eCZujs1jdk
Mientras la canción sonaba... me recordaba a las veces que la escuchaba...
Era cuando recientemente me separe de Kageyama... En esos dias no podia hacer mas que llorar en silencio en mi habitación.
Algunas veces me ayudaba a calmarme pero en otras ocasiones lloraba tanto que quería que le llegaran mis lagrimas como disculpas, aunque no haya hecho nada malo pero sentía que todo era mi culpa.
Ahora solo agradecia que solo eran recuerdos que quedaron en el pasado y podía ser feliz a su lado... todo por mi pequeño que fue el primero en dar el primer paso.
Lo único que puedo hacer es agradecerle infinitamente y podemos estar juntos los 3 sin ningún inconveniente... vendrán pruebas y poco a poco se irán haciendo más y más difíciles de superar pero mientras estemos juntos... todo estará bien.
Gracias Kageyama por permitirme seguir a tu lado y por ayudarme a seguir adelante.
— ¿Y esa canción mi niño? — me pregunto, escuchando atentamente la canción.
— Solo es un canción que me recuerda a mis tiempos dificiles... pero ahora solo son recuerdos y gracias a ellos pude seguir adelante y hacerme mas fuerte... a lo mejor sigo siendo inmaduro pero se que Kags me ayudara con eso y seremos nosotros contra el mundo. — dije volteando a verla.
— Me alegra escuchar eso — dijo la abuela poniendo otra canción.
Termine de cocinar y salir de la cocina para salir de la casa y así llamar a los chicos quienes estaban afuera jugando un rato...
Sonreí al ver que Akihiko no había tocado su Nintendo por estar jugando con su papa...
— Amores, es hora de comer — grite un poco ya que estaban bastante lejos y necesitaba que me escucharan.
Ambos vinieron corriendo a mi y mi pequeño salto para que lo cargara.
Por el peso me cai hacia atras cayendo de sentón... Me queje bastante alto por el dolor y la abuela salió corriendo de la cocina para encontrarme tirado en el piso.
— Lo siento mami — dijo Akihiko levantándose y queriendo comenzar a llorar.
— No, no, no, no llores, estoy bien solo me dolio la caida — dije tratando de levantarme por mi cuenta.
Un fuerte dolor impidió que me levantara y me volviera a sentar en el piso.
— Llevalo a mi habitación — dijo la abuela dirigiéndose a Kageyama
Kageyama asintió y me levanto en brazos estilo princesa, mientras que Akihiko iba detrás de nosotros llorando arrepentido.
— No te preocupes mi amor, estaré bien —dije sonriéndole a mi pequeño.
El asintio con la cabeza y cerro la puerta de la entrada... se quedo en la sala jugando con sus manos y entes de entrar a la recamara de la abuela grité para que mi hijo me escuchara.
— ¡Te amooo! — dije sonriendo
y mi hijo me respondió sonriendo
— No mas que yo —fue lo ultimo que escuche de su parte antes de cerrar la puerta.
— Por favor ve con el... no quiero que este solo. — dije viendo a Kageyama quien me había puesto en una camilla que había en la recámara de la abuela.
— Acuestalo boca abajo — dijo la abuela comenzando a sacar una caja con utensilios de doctor.
Kageyama la obedeció y me ayudo a voltearme.
— me voy a subir a tu cadera y te tronare la espalda para que se acomoden tus huesitos — me dijo la abuela levantando mi playera para quitarla.
La abuela soltó una risa y dijo.
—Al menos que los mosquitos no te piquen tanto —
No pude evitar sonrojarme... esos "Mosquitos" eran las marcas de Kageyama.
Solo escuche que Kageyama salió de la habitación dejándome solo con ella.
— Tendré que bajar un poco tu pantalon ¿De acuerdo?... — dijo segura de si.
Yo voltee a verla y ella me sonrió con ternura... asentí con la cabeza y sentí que bajo mi pantalón para subirse encima de mi y antes de comenzar se puso uno guantes y comenzó a tocar mi espalda hasta llegar al final de mi columna.
— Puede que te duela — me dijo apenada
solo hice un sonido de afirmación y ella continuo.
— Contaré hasta tres — dijo poniendo sus manos en mi espalda baja.
— 1... —
[Kageyama]
Estaba jugando con Akihiko hasta que escuchamos...
— ¡AAHHHH ! — de parte del cuarto de mi abuela
Un grito desgarrador de Hinata.
Akihiko comenzó a llorar tras escuchar a su mama gritar asi.
Yo lo tranquilice recordando los "Masajes" que da mi abuela... parece que te rompe cada vez que pone sus manos encima de ti.
A los pocos segundos vimos a los dos salir del cuarto... Hinata sobandose y mi abuela dandole una pomada analgesica.
Akihiko se fue caminando para abrazar a Hinata y llorar en sus brazos.
Mi abuela entro a la cocina y saco la comida poniéndola en la mesa... los cuatro nos sentamos:
Akihiko al lado mi abuela ya que se habían llevado muy bien, y Hinata y yo enfrente de ellos.
— Buen provecho — dijimos y comenzamos a comer.
*Amigooosss estoy de regreso.. agradezco tanto su apoyo que me brindaron, me ayudaron bastante... esperen el siguiente capitulo el dia Lunes :3*
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