«Nunca te transformes
en una brisa suave
cuando naciste para ser
tormenta»

Ron Israel

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Antoine.

Aún estoy un poco sorprendido y aturdido por lo que acaba de suceder; pero ya no siento miedo, mi cuerpo ya no tiembla como loco.

Me siento de una manera bastante extraña al saber la verdad de ellos.

Me quedo mirando a Deux algunos segundos y me pregunto en cómo es posible que un cuerpo tenga tres almas.

Como estudiante de ciencia tengo muchas dudas.

Es casi... imposible.

Deux se aleja de Tyler cuando termina de inyectarle un extraño líquido y se acerca a una pared bastante amplia presionando algunos botones que hay en una pequeña pantalla a un lado.

Se abre una gigante puerta que no se alcanzaba a ver muy bien y una entrada demasiado grande se visualiza. Deux cojea un poco mientras entra al oscuro lugar.

Me levanto del suelo y ayudo a Cely a pararse con delicadeza, su cuerpo sigue temblando así que trato de ayudarla a caminar hacia la entrada, los tres seguimos al chico al lugar y mis ojos se abren con sorpresa cuando Deux enciende las luces del lugar.

Es un garaje con varios autos. Hay una patrulla, un carro de bomberos, una ambulancia y...

No puede ser.

—¡Es un Darknight-100! —grito acercándome al auto tratando de contener la emoción.

Es uno de los primeros autos voladores que ha creado la humanidad, existen solo cien de ellos en todo el mundo. Dejaron de crearlos porque el gobierno prohibió su creación.

Nunca se supo la razón de ello, pero siempre quise ver uno con mis propios ojos.

Su nombre se debe a qué es completamente negro. No tiene nada de otro color y es muy llamativo por su color mate.

—¿Cómo lo obtuvieron? —pregunto mirando a Deux.

—Trois se lo robó a un político —dice relajado mientras mira el auto—. Podemos irnos en el, llegaremos más rápido...

«¡Sí!»

—¿A dónde iremos?

Deux se dirige a una pequeña mesa con varios cajones que hay cerca de él. Saca las llaves del auto y al presionar un pequeño botón del llavero, las puertas de este se abren hacia arriba.

—Iremos a la calle Nightmare —dice entrando al asiento de copiloto.

La sonrisa que tenía en mi rostro se esfuma con rapidez y siento un cosquilleo en toda mi espalda.

—¿Q-qué? —Cely pregunta entrando al auto con desconfianza en la parte de atrás, yo entro con ella y me siento mirando todo con curiosidad.

Cierro la puerta y observo como Tyler entra al asiento delantero, mira a Deux por un momento y se pone el cinturón suspirando.

—Tenemos un amigo que puede ayudarnos, se encuentra en ese lugar —Deux enciende el auto y el motor de este suena con bastante potencia.

En otra situación estaría emocionado, pero solo con saber que vamos a ese lugar me tiembla todo el cuerpo.

La calle Nightmare es una de las más peligrosas de Londres, en ese lugar no se atreve ni a entrar la policía. En esa calle hay negocios muy importantes, claramente estos son ilegales; pero este lugar está bastante protegido por gente muy poderosa.

En ese lugar puedes encontrar de todo, puedes hasta contratar a alguien si quieres matar a una persona importante. Hay laboratorios de drogas demasiado fuertes y muy peligrosas.

El que valore su vida no se le pasaría por la cabeza ir a ese lugar.

Hay rumores de que la entrada a este lugar está protegida por robots y máquinas poderosas. Pero creo que puede ser un mito en realidad.

Aunque con todo lo que ha pasado... creería lo que sea en este momento.

El auto se pone en marcha y Deux gira a la izquierda dirigiéndose hacia una pared gigante que hay al fondo del lugar, la pared se mueve mostrando un espacio donde se puede pasar.

Deux acelera el auto y se mete al misterioso lugar que nos lleva a la superficie, salimos por una gran rampa hacia una carretera que queda cerca del pueblo. Él chico detiene el auto y voltea a mirarnos a todos.

Deux presiona unos botones que hay en el volante y el auto empieza a flotar más o menos a un metro de altura, pego mi rostro a la ventana y siento un poco de emoción.

Jamás creí que estaría en un auto de estos.

—¿Tienes algún otro plan? —Tyler pregunta mirando al chico que tiene al lado.

—No.

—Mode furtif activé —se escucha una voz robótica en el auto y Cely me agarra el brazo con fuerza asustada.

—¿Qué fue eso? —pregunta la chica.

—Es para que el auto sea invisible, así no nos podrán ver —Tyler le responde mirándola y dirige su mirada de nuevo a Deux—. El vehículo tiene una computadora.

Él chico tiene sus ojos cerrados y arruga un poco su cara negando, se agarra el cabello con una de sus manos y suspira relajándose en el asiento.

—No sé ni para que les pregunto... —susurra y pone en marcha el auto.

Él es muy extraño...

El auto va a una velocidad normal y me quedo mirando afuera todo a mi alrededor, estamos en medio de un bosque donde los árboles son bastantes altos, la carretera es muy amplia y no se ve ningún auto, y eso me parece bastante extraño.

—Cállate —Deux habla de nuevo con un tono de fastidio.

Siento una extraña confusión y observo a Tyler que se ríe por la expresión de mi rostro.

—Deux puede hablar con Axel y Trois en su cabeza, pueden comunicarse de otras formas... Pero es mejor que él te lo explique —dice riéndose.

Vaya... Debe ser un poco fastidioso tener a dos voces en tu cabeza hablándote.

—Tyler —Deux musita mirándolo y este asiente lentamente, el moreno se quita el cinturón y saca un arma de su bolsillo.

Me tenso cuando me apunta a la cabeza con el arma.

—Lo siento, esto es necesario...

Cely trata de defenderse, pero Tyler le dispara y ella cae a un lado, no veo nada de sangre en su cuerpo y miro con rabia al chico tratando de defenderme.

Tyler apunta de nuevo hacia a mí y escucho el sonido del disparo, tapo mi rostro con mis manos y empiezo a sentirme mareado. Trato de resistir, pero pierdo el conocimiento.

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Tyler.

Antoine cae a un lado inconsciente estrellándose contra la puerta del auto, arrugo mi cara un poco y me acomodo en el asiento poniéndome el cinturón de nuevo.

Observo a Deux un poco incómodo y me pregunto si Axel me estará viendo en estos momentos. Tengo entendido que pueden salir de su cuerpo como especie de espectros y hablar entre ellos, pero obviamente ninguno de nosotros puede verlos.

Espero que Ava llegue rápido, no soportaría estar tanto tiempo con Deux, es un poco... extraño.

El auto acelera un poco más y me asusto al ver los ojos cerrados de Deux, el chico aprieta el volante con fuerza y me agarro del asiento con miedo.

—¿Deux estas bien? —pregunto tratando de captar su atención, pero el chico solo cierra los ojos con más fuerza.

Observo una curva frente a nosotros y muevo al chico con fuerza para que reaccione.

—¡Vas a matarnos idiota! —lo golpeo en la cabeza y el auto frena de golpe.

Mi cuerpo se impulsa hacia adelante y me agarro con fuerza del asiento.

Deux respira con bastante dificultad y suelta el volante agarrándose el cabello con nerviosismo.

Ninguno de estos chicos es estable maldita sea.

—Sal del auto —ordeno mirando a el chico.

El voltea a mirarme con confusión y cuando trata de decir algo lo interrumpo.

—¡Sal del maldito auto! —Deux brinca en el asiento y abre la puerta lentamente—. Yo manejare.

El presiona un botón y el auto cae lentamente al suelo, abre la puerta y sale un poco pálido con un rostro bastante serio.

Salgo del auto con rabia y me dirijo al asiento de copiloto, entro cerrando con fuerza y espero a que entre el niño. El se pone el cinturón de seguridad y pongo en marcha el vehículo pensando en cómo me metí en todo este lío.

«Ya recuerdo... Hice una promesa»

Pongo de nuevo el auto en modo invisible ya que se desactivo cuando abrimos las puertas de éste.

Decido acelerar y mis manos aprietan el volante con bastante fuerza.

No tengo poderes o soy especial como ellos, soy una persona común que solo trata de hacer lo correcto.

Pero estando con Ava...

Es un poco complicado pensar en eso, quiero ayudarla; pero su forma de hacer las cosas me estresa un poco.

Es desesperante tratar de ayudarla...

Pero, todo esto es mi culpa, cuando fui a buscar las jeringas para los chicos me encontré con June a mitad de camino, un poco lejos de la cabaña. Me pareció bastante extraño verla por ahí, pero me entrego una pequeña caja donde había varias jeringas, después solo se fue sin decir una sola palabra.

Decidí volver a la cabaña y me di cuenta que era una trampa después de que llegaron a matarnos. Pensé que podía confiar en ella... pero estaba bastante equivocado.

Suspiro y me concentro en la ruta que puso Deux en el GPS; espero que ese amigo del que ellos hablan sea confiable...

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Glosario:

Mode furtif activé : Modo invisible activado en francés.

_Nath_