Y... ¡Ah! ¡¿A quién chingados le importa?!

—¡Esto es inédito! ¡No puedo creer que hayan muerto 3 veces seguidas —rio alocadamente—. La puerta menos obvia era la más obvia —comentó con un claro tono de burla.

—¡¿Por qué eligieron la puerta de la brisa?! —pregunté con una clara frustración.

—Perdóname, Tauro. Me dejé llevar por la buena vibra que ne daba —Finchtever se rascó la nuca.

—Te amo, pero de verdad eres idiota —Lola rodó los ojos... Dios, que mujer.

—¡¿Y por qué confiamos en ella?! —señaló a Janice—. Ni siquiera muere con nosotros y parecía saber que está puerta era la muerte segura al aventar a esta loca dentro de ella.

—¡No seas chillón! Yo vine a divertirme, pero bueno, admito que fue un error.

—Bien, creeré en ti, pues...

La verdad no sabía si confiar o no...

Ugh... Bueno, supongo que ahora sólo queda ir por la última puerta...

[¿Qué haré ahora?]

[¿Qué haré?]