Continuamos con la historia de Re: Zero x Tu, dejen sus ideas y comentarios sobre que les gustaría tener en un próximo capitulo, comencemos...

-En tu nueva habitación-

Ram: Siéntase cómodo señor Tn, no estoy segura de cómo le ayudaremos en sus estudios mi hermana Rem y yo, pero esperaremos a las órdenes de la señorita Emilia.

Tn: Te lo agradezco Ram, tal vez llegué de sorpresa, pero espero que poco a poco podamos irnos entendiendo.

Ram: Eso dependerá de usted señor, me retiro *se va*

Tn: Vaya, y yo que trataba de ser amable *te sientas en la cama*, no está nada mal, para no tener nada en este mundo no me pudo haber ido mejor, todo gracias a él.

Reinhard: *Te toca la puerta aun y estando abierta* Perdón, pero no fue nada Tn, ha sido todo un placer ayudarte.

Tn: Espero no causarte problemas a largo plazo.

Reinhard: Espero que no, pero en caso de que los haya, los resolveremos juntos.

Tn: Me sorprende tu positivismo, ojalá pudiera ser más parecido a ti.

Reinhard: No deberías menospreciarte por cosas como esas, todo viene a su tiempo, de seguro hasta hay cosas de ti que me gustaría tener y aun no las he encontrado.

Tn: *Sonríe por el halago* Eres muy amable Reinhard, pero lo dudo demasiado; y por cierto, me gustaría saber más sobre el entrenamiento de la guardia real, si voy a empezar mañana me gustaría ir preparado mentalmente.

Reinhard: Tal vez sea duro al principio, pero aprenderás varias cosas necesarias para la labor; como correr, trotar, nadar, levantar peso, aprender a manejar armas, resistir el ambiente en el campo de batalla, entre muchas otras cosas; pero no te preocupes por nada, si tienes algún problema siempre podrás confiar en mí.

Tn: *Mirando hacia abajo* Reinhard, te juro que algún día te pagaré por todo lo que has hecho por mí, me has ayudado mucho más que cualquier otra persona en un solo día.

Reinhard: Eso no será necesario, con ayudarte me basta; procura dormir mucho que mañana empezaremos a las 7:00 de la mañana.

Tn: Creí que los entrenamientos militares comenzaban a las 5:00 o 4:30 de la madrugada.

Reinhard: Como vas a ser un nuevo integrante empezarás más tarde, pero trata de no confiarte mucho y se puntual mañana en el palacio, el cochero del señor Roswaal te llevará.

Tn: No podría estar mejor, gracias de nuevo Reinhard.

Reinhard: Deberías dejar de estarme agradeciendo a cada momento, la próxima vez contéstame con algo viniendo de ti.

Tn: *Pensándolo por un momento* De acuerdo, cuenta conmigo mañana Reinhard, que ahí estaré.

Reinhard: Eso suena mejor amigo, sé que serás un gran caballero.

-Se hace de noche-

Tn: Mañana empezaré mi entrenamiento, solo Dios sabe lo que me espera.

Rem: *Tocando tu puerta y abriendo* Hola señor Tn.

Tn: Rem, ya te dije que dejes atrás la formalidad.

Rem: Lo siento, trataré de hacerlo; por cierto, venía a tomarle las medidas para sus nuevos uniformes y trajes que usará en la mansión.

Tn: Rem, te estoy diciendo que dejes la formalidad.

Rem: Perdóname, lo seguiré intentando, ¿podría tomarte las medidas?

Tn: Está bien, perdóname por presionarte, no era mi intención.

Rem: No hay problema *te empieza a tomar las medidas hasta terminar*

Tn: ¿Ya está?

Rem: *Sonríe* ¡Ya!, ahora las llevaré para confeccionar tu nueva ropa *se va de tu habitación*

Tn: *Acostándote en tu cama* Rem es muy tierna, ojalá su hermana fuera tan dulce como ella.

-Al día siguiente-

Tn: *Te levantas temprano y te preparas rápidamente para tu primer día de entrenamiento, te encuentras con Rem*

Rem: Buenos días señor Tn *sonríe*

Tn: *También le sonríes* Hola, buenos días Rem.

Rem: Le preparé su desayuno, le servirá de mucho para su primer día.

Tn: Me gustaría Rem, pero me temo que ya me tengo que ir y no puedo.

Rem: *Tomándote del brazo* Espere, el desayuno es la comida más importante del día, no puedes ir en ayunas a tu primer día de entrenamiento, yo sé muy bien como es el ambiente y no resistirás si no comes, puedes llevártelo si quieres *te pone la comida en unos moldes y te la da*

Tn: *Tomando la comida* Gracias Rem, me alegra mucho contar contigo.

Rem: *Sonríe*

Tn: Me tengo que ir *subes a la carroza del señor Roswaal y te vas rumbo al palacio a recibir tu entrenamiento*

-Volviendo a la mansión pasando el entrenamiento-

Tn: Guau, que día tan más agotador, antes todo mi trabajo era cerebral pero ahora va a ser físico, aunque también tengo estudio con las gemelas así que ni del estudio me salvo.

Emilia: *Recibiéndote en la puerta* Buenas tardes señor Tn, me alegra que haya vuelto sano y salvo.

Tn: Ya puedes ir dejando la formalidad Emilia, también se lo dije a Rem, aunque le cuesta un poco hacerlo.

Emilia: De acuerdo, después de todo tu eres la razón de que ahora el santo de la espada, el señor Reinhard me apoye en mi campaña.

Tn: ¿En verdad lo ves así?, llegaba a temer que me vieras como una molestia *apoyándote con la puerta de la mansión*

Emilia: No eres para nada una molestia, yo sé bien lo que son las molestias y tú no eres una de ellas.

Tn: *Quitándote de la puerta* Eres la primera que lo dice aparte de Reinhard, pero una mujer nunca me había dicho tal cosa.

Emilia: Bueno, no has causado ningún problema desde que llegaste, aunque apenas fue ayer, pero ningún residente de la mansión se ha quejado de ti.

Tn: Hablando de eso, creo que aún no conozco a todos los miembros de la mansión, para ser una casa tan grande debo tener entendido que hay más gente viviendo aquí a parte de las sirvientas, tú y el señor Roswaal, de hecho, en la mañana escuche la voz de una niña cantando en uno de los cuartos.

Emilia: En realidad si, la voz que escuchaste es de Beatrice, es la bibliotecaria de la mansión y se encarga de proteger la biblioteca.

Tn: ¿Literalmente la protege?

Emilia: Si, hay muchos libros poderosos pertenecientes al señor Roswaal que deben ser protegidos, y Beatrice se encarga de eso.

Tn: Ya veo *En su mente* -creo que sería ridículo preguntar como una niña puede proteger toda una biblioteca, porque a estas alturas ya no hay nada que pueda sorprenderme-, y hablando de libros, hoy empezaré mis estudios con Rem y Ram, ¿no es así?

Emilia: Creo que necesitas descansar, ve a los baños y toma una siesta para que mañana amanezcas con más energía, dejemos los estudios para mañana.

Tn: Si tú lo dices *a punto de irte y te detienes* solo que no se en dónde están los baños, ¿podrías guiarme?

Emilia: Claro Tn, bueno, le diré a Ram que te dé un recorrido por toda la mansión para que te puedas mover en esta que es tu casa.

Tn: Gracias Emilia, pero...*pensando* -de las dos me tuvo que escoger a la más antipática, pero ya que, el huésped soy yo-.

Emilia: *Algo confusa* Pero... ¿Qué?

Tn: Nada Emilia, está bien.

-Emilia llama a Ram y te lleva a hacer un recorrido por toda la mansión hasta terminar-

Tn: *En los baños tomando una ducha* Al fin, a esa Ram parece que la criaron en un establo de chiquita, no tiene respeto, habla sin pensar dos veces lo que piensa y es indiferente hasta cuando quiero ser amable con ella, no sé qué es lo que le pasa.

Señor Roswaal: *Entrando al baño desnudo* ¿Qué pasa?, ¿acaso te escuche hablar mal sobre una de tus compañeras?

Tn: *Asustado* Lo siento señor, no quise ser grosero, solo decía que... *pensándolo mejor* espere, ¿le puedo hacer una pregunta?

Señor Roswaal: *Metiéndose a bañar poniéndose al lado de ti* Claro, puedes preguntarme lo que sea.

Tn: ¿En este reino está permitida la libertad de expresión?

Señor Roswaal: Aun no tenemos una autoridad oficial a quién rendirle cuentas, así que por el momento dar tu opinión de forma abierta no tiene ningún delito, pero como esta es mi casa y soy el que pone las reglas aquí, no estoy de acuerdo en que ofendas de manera abierta a mis empleados.

Tn: De acuerdo señor, le ruego me disculpe.

Señor Roswaal: No hay ningún problema señor Tn, la próxima vez piense mejor lo que va a decir.

Tn: Lo tendré en cuenta, debo salir señor, lo veré más tarde *levantándote para irte*

Señor Roswaal: Espera un momento mi joven huésped, antes de que te retires tengo unas cuantas preguntas que hacerte.

Tn: *Te vuelves a sentar* Bueno, usted es mi señor de todos modos, lo escucho.

Señor Roswaal: Desde que llegaste he notado mucha indiferencia de tu parte hacia mis demás empleados, descubrí que te abrazaste con Rem ayer cuando llegaste...

Tn: *Interrumpiendo* Señor Roswaal en verdad no fue mi intención, vi que ella tenía un problema, la quise ayudar y ella se sintió tan aliviada que no pudo evitar abrazarme.

Señor Roswaal: Hijo, cuando tu señor te habla debes permanecer callado y no interrumpirlo.

Tn: Perdóneme de nuevo.

Señor Roswaal: Como te decía, ese tipo de acercamiento me hizo sospechar que probablemente podías pertenecer al clan de la bruja de los celos, así que te lo preguntaré de frente a frente, ¿estas relacionado con el clan de la bruja?

Tn: *Algo nervioso* Me encantaría poder darle una respuesta apropiada, pero no la tengo, en primera porque no conozco lo que es el clan de la bruja y no tengo ninguna referencia sobre él, y en segunda porque yo no me dedico a la brujería ni a ese tipo de cosas, son una verdadera abominación desde mi punto de vista.

Señor Roswaal: Lo creeré porque tú me lo dices, pero te tendré bajo mi observación.

Tn: Creo que es lógico, asumiendo que soy un completo desconocido viviendo con usted.

Señor Roswaal: Será por un tiempo, cuando vea que eres completamente inofensivo podré confiar más en ti.

Tn: Espero no podamos entender señor, ahora si me disculpa *te levantas para salir* ya me tengo que ir *te pones la toalla, abres la puerta y te encuentras con Rem* ah... Rem.

Rem: *Apenada* Lo siento señor Tn, no era mi intención encontrarlo en prendas menores, solo quería traerle una toalla para que pudiera secarse.

Tn: Ya tomé una antes de entrar Rem, pero gracias, agradezco tu preocupación.

Rem: *Voltea la mirada triste* No fue nada, lo siento *se va*.

Tn: Espera Rem.

Rem: *Te voltea a ver haciendo un sonido*

Tn: Cuando termine de cambiarme te puedo invitar a salir si quieres.

Rem:*Poniéndose roja* ¿Salir a dónde?

Tn: Me gustaría poder sugerirte un lugar, pero no conozco mucho este sitio, así que por el momento que tal si... *pensándolo* vamos a ver las estrellas en el jardín.

Rem: *Sonriendo súper roja* Si... quiero hacerlo.

Tn: Te veo afuera de la entrada en... 15 minutos.

Rem: Esta bien.

-Vas a tu cuarto a cambiarte-

Tn: *Viendo un traje de vestir en tu cama con una nota* Nota: "Tn, confeccioné este traje para ti mientras estabas en tu entrenamiento para la guardia real, tal vez no es mucho, pero hice lo mejor que pude, espero que te guste, atentamente Rem". *Terminando la nota* Gracias Rem, me lo pondré con mucho gusto *te secas y te pones el traje que te hizo Rem*.

-Afuera de la mansión-

Rem: *Esperándote en la baranda de la escalinata*

Tn: Ya llegué Rem.

Rem: *Volteándote a ver con una sonrisa* Tn... ¡si te quedó el traje que te hice!

Tn: Me quedó súper bien, sacaste muy bien mis medidas, a ti te lo debo Rem.

Rem: No fue nada Tn *avergonzada*

Tn: Bueno, te invité para que viéramos las estrellas *alzándole tu mano* ¿vamos?

Rem: *Sonrojándose y tomándote de la mano* Si...

Tn: *La llevas al jardín para ver las estrellas y el cielo despejado* Aquí estamos.

Rem: *Viendo hacia el cielo*

Tn: ¿Te gustan?

Rem: *Aun viendo el cielo* Me encantan.

Tn: A propósito...

Rem: *Te voltea a ver*

Tn: ¿Te has sentido mejor?

Rem: Desde ayer nunca en mi vida me había sentido tan feliz, nunca nadie me había dicho que valía algo, ni que era importante o que era buena en algo, ni siquiera yo misma *poniéndose triste*.

Tn: Eso no puede ser más incierto, tu vales mucho Rem, eres una de las mujeres más maravillosas que he conocido en mi vida, me recibiste con los brazos abiertos, me hiciste este traje, me preparaste el desayuno y aparte desempeñas sigues desempeñando todas tus actividades en la mansión, eso probablemente ni yo lo hubiera logrado.

Rem: Lo tenía que hacer por ti Tn, no podía estar más agradecida como para no hacerlo.

Tn: No era necesario Rem, en verdad te lo agradezco mucho, pero no lo veas como si tuvieras que pagármelo.

Rem: No importa si tengo que pagártelo o no, lo hice porque quiero y no me molesta hacerlo.

Tn: *Viéndola fijamente* Rem...

Rem: *Brillándole los ojos* Tn...

Tn: *Tomándola de las manos* Gracias.

Rem: *Sonriendo* De nada.

Tn: *Acostándote en el pasto* Ay... el cielo se ve mucho mejor cuando lo ves acostado, incluso hasta puedes hallar mejor los dibujos que forman las estrellas.

Rem: ¿Te refieres a las constelaciones?

Tn: No sabía si las llamaban igual acá, pero si, a eso me refiero.

Rem: Cuando Ram y yo éramos niñas nos encantaba salir de casa a ver las estrellas y encontrar constelaciones, así lo hicimos muchas noches hasta que nuestra aldea dejo de existir.

Tn: *Volteándola a ver* Mencionaste algo sobre eso cuando estábamos ayer en la sala, pero no me mencionaste bien que fue lo que pasó.

Rem: *Triste* Fue una tragedia terrible.

Tn: Tranquila, si te duele tanto recordarlo entonces no lo digas.

Rem: No Tn, si lo sigo guardando de esta manera creo que me hará mucho más daño.

Tn: Ahí si tienes mucha razón, dímelo entonces, yo te escucho.

Rem: Cuando Ram y yo nacimos, el gobernante de nuestra aldea quiso asesinarnos, en la tribu de los demonios los gemelos estaban prohibidos y debían sacrificar a una o ambas de nosotras, cuando el gobernante demonio vio el poder que habitaba dentro de mi hermana, nos perdonó la vida y nos permitió tener una vida normal en la aldea; Ram y yo crecimos aprendiendo, jugando y trabajando juntas, pero mis padres constantemente me comparaban con mi hermana, me decían que tenía seguir su ejemplo, que debí llegar a ser tan fuerte como ella y ser cada vez mejor; traté de hacerlo, el poder de mi cuerno no era tan poderoso como el suyo, pero traté de llevar las tareas domésticas y ser mejor en las habilidades que no necesitaban del poder; pero un día el culto de la bruja arrasó nuestra aldea y destruyo la vida que teníamos ahí, Ram trato de defender el lugar utilizando todo su poder, pero fue ineficiente contra ellos, terminó perdiendo su cuerno y yo me tuve que convertir en el remplazo; poco tiempo después el señor Roswaal nos contrató y nos dio una nueva oportunidad de llevar una mejor vida.

Tn: *Tratando de procesarlo* Hay Dios mío...

Rem: Tn... ¿estás bien?

Tn: Si Rem, lo siento, es que me cuesta tanto trabajo entender porque tuviste que pasar por todo eso; tus padres no debieron haberte comparado con tu hermana y tú no debiste haberte quedado con la idea de que tenías que remplazar a Ram.

Rem: *Viendo hacia abajo* Tal vez no era lo que yo más quería, pero eran cosas que en su momento parecían ser lo correcto.

Tn: Pero ya no lo pienses más, porque tu o eres Ram, eres Rem, y eres y te lo puedo jurar, la mujer más maravillosa que he conocido en este mundo.

Rem: Tn... ¿tú no crees que Ram sea mejor que yo?

Tn: Para nada, de hecho, me gustaría que Ram fuera más parecida a ti; tú eres cariñosa, amable, buena, amorosa, no insultas a otros, eres dulce, y hasta incluso tienes mucho más busto que tu hermana.

Rem: *Se pone roja* Tn... ¿recuerdas que me dijiste que te gustaban los demonios?, ¿era cierto? *volteándote a ver*

Tn: *Ahora entendiendo lo que dice* -Cuando dijo demonios se refería a su especie, ahora lo entiendo mejor-, cuando dije eso, si es verdad, y no lo dudo ni por un poco.

Rem: *Sonriendo medio queriendo llorar*

Tn: *Volteándola a ver girándote para con ella* Estoy seguro de que soy todo un fanático demoníaco, pero de uno muy en especial *tocando sus mejillas* el mejor de todos, y el que estoy de que se convertirá un ejemplo de bien para este mundo.

Rem: *Soltando las lágrimas* Tn... *tomándote de las manos*.

Tn: Rem... *acariciando su cabeza* eres mi número uno.

Rem: *Sonriendo con lágrimas* Y Tn también es mi número uno *te da un fuerte abrazo y ambos se quedan abrazándose sobre el pasto hasta el amanecer*

Hasta aquí chicos, espero les haya gustado, próximamente les traeré el siguiente capitulo...