Otto: ¡Qué tal chicos!, me llamo Otto seré su cochero en este viaje.

Tn: Un placer Otto, espero nos seas de mucha ayuda.

Otto: Lo seré mis amigos.

Tn: *Tomando asiento y viendo a Emilia* ¿Vas cómoda?

Emilia: Si Tn, te agradezco que me hayas dado lugar al lado de Rem.

Tn: *Burlándote* Tenía que ser así, porque ocupaba todo un espacio para mí sólo para poder acostarme y echarme un rico sueñito.

Emilia/Rem: *Se ríen* Jajajajajajaja.

Tn: *Poniéndote serio* Y bueno, ya hablando en serio, dime que es lo que sabes sobre Regulus.

Emilia: Es poco, pero creo que te servirá de mucho...

-En eso Regulus aparece al lado de la ventana de la carroza-

Regulus: *Apareciendo al instante* ¿Me llamaban?

Tn/Rem/Emilia: *Sorprendidos* Ahhhh...

Tn: *Hablándole a Otto* ¡Detente!...

-Otto detiene la carroza-

Otto: *Asustado* ¿Qué fue eso?

Tn: *Bajas con las demás y desenfundas tu espada* ¿Qué es lo que quieres Regulus?

Regulus: *Deshabilitando sus poderes* Enfunda eso Tn, no te servirá de nada.

Tn: ¿Cómo estás tan seguro?

Regulus: Ningún arma ha sido capaz de atravesarme durante más de 100 años, ¿en verdad esperas tú ser la excepción?

Tn: Luego de oprimir los planes de dos de tus compañeros arzobispos, tengo mayor seguridad.

Emilia: *Preparándose para pelear* También tiene de mi lado mi magia de hielo.

Rem: *Sacando su arma* Y mis poderes demoniacos.

Regulus: No traten de iniciar la guerra antes de tiempo, Tn en compañía, solo venía a responder tu carta.

Tn: ¿Mi carta?, es inesperado que la respuesta tenga que venir en persona y en un momento tan inaudito como en nuestro viaje.

Regulus: Lamento que mi mensaje haya sido de esta manera, esperaba dártelo en la mansión Roswaal, pero al ver que dejaste la propiedad y tuvieras que irte a la mansión de la candidata Crusch, tenía que dártelo aquí mismo y a esta hora.

Tn: ¿Por qué?, y ¿Cómo es que lo sabes todo?

Regulus: Respondiendo a tu primera pregunta, el culto de la bruja es muy exigente en los asuntos de puntualidad y horarios en todo tipo de aspectos, incluyendo la entrega de mensajes y cartas, y por eso mismo tuve que hacerlo así; y respondiendo a tu segunda pregunta, estaba a punto de darte el mensaje en el momento que partiste y escuché algunos detalles sobre tu destino, fue algo imprevisto.

Tn: Ya veo, ¿eso incluye que también supieras mi nombre cuando nos conocimos?

Regulus: Conocía tu nombre debido a que empezabas a ganar fama entre los aldeanos del pueblo, decían que eras quien iba a traerles de vuelta a sus hijos, y al parecer lo hiciste, interferiste con los planes de pereza y glotonería, y ahora están ansiosos por destruirte.

Tn: Ya veo, ¿tú no lo estás?

Regulus: Claro que no mi amigo, soy desinteresado en cuestiones que correspondan a otros arzobispos ajenos a mí, yo represento a la avaricia y soy desinteresado en cosas que estén fuera de mi persona.

Tn: Y veo que la representas muy bien, pero si es así, ¿por qué quieres pelear contra mí?

Regulus: Eres un mar de preguntas mi estimado Tn, pero te lo diré; rechazar un combate propuesto por un posible adversario sería deshonroso para tu servidor, y terminaría hablando muy mal de mí, no soy quien para declararle la guerra y la muerte a alguien que apenas acabo de conocer, pero si este interfiere en los asuntos del clan de la bruja y encima se atreve a retarme a un duelo a muerte, yo con gusto lo aceptaré y daré lo mejor de mi parte para ese enfrentamiento.

Tn: Eres interesante mi amigo, pero hablas un poco más de lo que haces, espero no destruir la mucha confianza que tienes sobre ti, y te termine venciendo.

Regulus: Eso no es asunto tuyo, y podría matarte solo por contradecirme; pero no vine a eso, y encima me hiciste desviarme del tema por el cual venía.

Tn: Entonces no te quito más tiempo y dime lo que tenías que decirme.

Regulus: De acuerdo, ya era el tiempo; como te decía, el culto de la bruja ha aceptado tus términos de pelear en compañía de Reinhard Van Astrea y Whilhelm del mismo apellido, yo en compañía de Pereza y Gula los enfrentaremos dentro de tres días en las montañas de Lugunica a medio día, esperemos que no falten al enfrentamiento y respeten las reglas establecidas por el clan de la bruja.

Tn: Lo haremos no tendremos ningún problema con ello, ya les envié una carta a los dos el día de ayer para informarles sobre el combate y las reglas establecidas, creo que todo está claro para ambas partes.

Regulus: Espera, aún hay más.

Tn: ¿Qué más hace falta?

Regulus: El clan de la bruja quiere ser preciso en cuestión a como se van a dar los combates entre los miembros, quieren saber a quién enfrentarás tú, a quienes enfrentaran tus compañeros de equipo y necesitaremos la aprobación de los arzobispos en cuestión a tus propuestas, te pido que hagas tres propuestas y me las digas, estaré aquí hasta que lo decidas.

Tn: ¿Tienen que ser ahora?

Regulus: Así es mi estimado, te pido que lo hagas en este momento, porque este no es el único asunto que tengo por atender.

Tn: De acuerdo, estaré detrás de la carroza con las chicas para debatirlo y luego entregarte una hoja con mis respuestas.

Regulus: Entendido.

-Vas con Rem y Emilia a la parte de atrás de la carroza y empiezan a debatir-

Tn: ¿Cómo organizaremos esto?, es obvio que piden tres para ellos decidir la que más les convenga y tener una ventaja sobre nosotros.

Emilia: Debemos ser inteligentes en tomar esta decisión.

Rem: Yo creo que debemos organizar los combates según la fuerza y la experiencia de cada uno de los contrincantes, ¿ya tenías alguna idea en mente Tn?

Tn: Tenía una, tal vez sea prudente o tal vez no, pero para decidir estas tres propuestas debemos ser sabios y encontrar la manera de que estas nos beneficien a nosotros.

Emilia: Es imposible dar tres propuestas que nos puedan beneficiar.

Tn: *Volteándola a ver* ¿Por qué lo dices?

Emilia: Tenemos un combate de tres y tres miembros por cada equipo, las propuestas tendrán que ser las tres posibilidades de combate que se puedan dar entre ti, el señor Reinhard y el señor Whilhelm, tendrán que combatir a uno de los tres de todas formas, es algo estadístico.

Tn: Soy un idiota, porque no se me pasó por la cabeza.

Emilia: No era fácil de deducir a simple vista, pero así es.

Tn: Pero según la estadística, el número de intervalos puede repetirse sin afectar el número de probabilidad.

Emilia: ¿Sabes sobre estadística?

Tn: La llevaba cuando estudiaba en Cambridge.

Emilia: ¿En dónde?

Tn: Una universidad de dónde vengo, pero este es el punto *sacando una pluma (literalmente una pluma) y escribiendo en una hoja* la probabilidad de intervalos que tenemos para repartirse entre el número de factores es 3 y 3, tenemos tres intervalos a nuestra disposición que seriamos yo, Reinhard y Whilhelm, y por el otro tendríamos a tres factores en cuestión que serían Regulus, Ley el arzobispo de la gula, y Petelgeuse el arzobispo de la pereza, que podemos repartir entre nuestros tres intervalos que representan a nuestros tres contendientes a nuestro favor, hasta aquí entiendes lo que digo.

Rem: Si.

Tn: *Viendo A Rem* Le estaba preguntando a Emilia.

Rem: Lo siento.

Emilia: Yo eh... un poco.

Tn: Bueno, este es el punto; según la estadística, el número de intervalos que tenemos a nuestra disposición se pueden juntar y repartirse entre los otros tres factores en cuestión, de tal manera en la que podemos repetir continuamente el uso de un factor sobre un intervalo siempre y cuando uno de los factores e intervalos sea opuesto al orden, o a uno de los órdenes previos.

Rem: Entonces de esta manera, podremos organizar estas tres propuestas, encontrando las probabilidades que nos beneficien a nosotros, y así ellos tengan que elegir entre alguna de ellas.

Tn: Exactamente, tal vez el culto de la bruja buscaba que eligiéramos un orden completamente distinto al anterior, pero Regulus no mencionó en ningún momento que el orden tenía que ser completamente diferente al anterior, así que podremos repetir uno o dos órdenes similares en cada una de las propuestas y llegar a una conclusión que nos beneficie en cualquiera de los tres órdenes que tengan que elegir.

Emilia: Eres muy inteligente Tn, me sorprende que tu intelecto este mucho más allá del mío a pesar de que soy candidata para la gubernatura de Lugunica *poniéndose triste*.

Tn: Ni siquiera es mucho Emilia, estoy seguro de tú eres mucho más inteligente, este conocimiento lo logré solo en 20 años de vida, no me imagino el que tú puedes tener *te levantas y empiezas a escribir las propuestas*.

Emilia: *Se queda pensando en lo que le dijiste*.

Tn: *Vas con Regulus y le entregas tus propuestas* Será de esta manera Regulus, mi primera propuesta es: Yo contra Petelgeuse, Reinhard contra Regulus y Whilhelm contra Ley; la segunda es: Yo contra Petelgeuse, Reinhard contra Ley y Whilhelm contra Regulus; y la tercera es: Yo contra Ley, Reinhard contra Regulus y Whilhelm contra Petelgeuse, ¿estamos de acuerdo?

Regulus: Aceptamos las propuestas, decidiremos cuál de ellas será usada en el combate, así que preséntense en tres días en las montañas para llevar a cabo el combate.

Tn: Hecho.

Regulus: *Desaparece en una honda de oscuridad*.

Tn: Ese tipo me perturba *vuelves a subir a la carroza*.

-Las chicas suben contigo y vuelven a partir-

Rem: Eso fue peligroso.

Emilia: *Volteándote a ver* Tn, hay algo que debo decirte sobre Regulus.

Tn: En eso estábamos, dímelo todo.

Emilia: Cuando era niña perdí a mis padres y viví toda mi vida con mi tía Fortuna y con su esposo Geuse.

Tn: Se llamaba Geuse eh.

Emilia: *Bajando la cabeza* Es quien crees.

Tn: ¿Por qué eso no viene en los libros de los arzobispos de los 7 pecados capitales?

Emilia: Lo he escondido durante mucho tiempo, no se lo revelo más que a las personas más cercanas.

Tn: ¿Cuántas personas lo saben hasta ahora?

Emilia: *Se avergüenza* Hasta ahora, sólo tú.

Tn: *Te asombras por un momento* Bueno, cuéntame más.

Emilia: Mi tía Fortuna, mi tío Geuse y yo vivíamos muy felices como una familia, hasta que un día la bruja Pandora atacó nuestras tierras juntos con el arzobispo que nos acaba de visitar, Regulus Corneas.

Tn: ¿Ese tipo te atacó en el pasado?

Emilia: Así es.

Tn: *Enfureciéndote* ¡Maldito!, no pelearé con él, pero espero que Reinhard o Whilhelm lo hagan pedazos a ese hijo de la...

Emilia: Tn tranquilízate.

Tn: Perdón, continua.

Emilia: Regulus y Pandora hechizaron a mi tío Geuse haciendo que accidentalmente matara a mi tía Fortuna, yo escapé hacia el bosque y lo congelé para que no pudieran encontrarme; luego de eso, todo lo que sé es que mi tío Geuse perdió la cordura después de asesinarla, abandonó el bosque en donde me crie, cambió su nombre a Petelgeuse y desde entonces ha estado buscando métodos para regresar a la vida a Satella.

Tn: Y puedo entender que lo de ofrecer a los niños usando a las mabestias fue uno de sus tantos métodos, es intolerable.

Emilia: Tenemos que detenerlos antes de que ocurra algo peor.

Rem: Yo solo intervendré en caso de emergencia.

Tn: Reinhard, Whilhelm y yo nos encargaremos de eso, si hay problemas tendrán que entrar; se lo informé a Roswaal y a Ram, también necesitaré de ustedes si sucede lo peor.

Emilia: Siempre contaras conmigo Tn.

Rem: Y conmigo.

Tn: Gracias chicas.

-Llegas a la mansión de Crusch-

Whilhelm: Sean bienvenidos, la señorita Crusch viene en camino para recibirlos formalmente.

Tn: Gracias por la bienvenida Whilhelm *acercándote a él* ¿recibiste mi carta verdad?

Whilhelm: *Acercándose a ti* Lo hice señor Tn, ya lo discutí con Reinhard y llegamos a un buen acuerdo.

Tn: Lo oiré más tarde.

Crusch: *Acercándose a sus nuevos huéspedes* Sean bienvenidos chicos, yo soy la señorita Crusch, un placer recibirlos en mi hogar.

Tn: Gracias señorita, esperamos no ser una molestia para usted y su campaña.

Crusch: Eso sería imposible, Whilhelm me habló mucho sobre ustedes, un militar de la guardia real que inició sus servicios con el título de cabo y con una hazaña heroica al salvar a unos niños del clan de la bruja, he de decir que eres un hombre importante señor Tn.

Tn: Lo mismo podría decir por Rem.

Crusch: También me contaron mucho sobre ti Rem, eres la mejor ama de casa y costurera de todas en la ciudad, tienes muchas habilidades como demonio de un cuerno y ayudaste a salvar a esos niños junto con Tn.

Rem: Gracias señorita Crusch.

Tn: Bueno, también venimos en compañía de Emilia, no para abrir disputa sino porque había un asunto importante que debíamos discutir en el camino.

Crusch: Ya veo, lo entiendo muy bien.

Emilia: Creo que no me necesitarán más aquí, así que debo irme.

Tn: *Volteando con Emilia* Emilia.

Emilia: *Te voltea a ver*

Tn: Reúne a toda la gente que puedas para el combate en las montañas.

Emilia: Eso haré *sube a la carroza y regresa a la mansión*.

Crusch: Pasen por favor, están en su casa.

-Entras a la casa de Crusch y entras a tu nueva habitación-

Tn: *En tu cuarto* Es increíble, es hasta más grande que el que tenía con Roswaal.

Rem: *Entrando* Este será nuestro cuarto.

Tn: *Confundido* ¿Nuestro?

Rem: Si *Acomoda sus maletas* la señorita Crusch me preguntó en una carta si quería que tuviéramos cuartos separados o juntos al suponer que estábamos saliendo.

Tn: ¿Y le dijiste que juntos?

Rem: ¿Estuvo mal?

Tn: Para nada, de que me sirve un cuarto tan grande como este sino tengo a nadie con quien compartirlo.

Rem: *Se sonroja*.

Tn: Tengo que ir a hablar con Reinhard y con Whilhelm, me están esperando afuera.

Rem: Te espero.

-Vas con Reinhard y con Whilhelm-

Tn: Qué tal amigos, Reinhard, Whilhelm y... *viendo a otro sujeto* ¿Quién eres tú?

Reinhard: Tn, te quiero presentar a Julius Juukulius.

Tn: *Le extiendes tu mano a Julius* Un placer conocerte amigo.

Julius: Hasta donde yo tengo entendido, usted y yo no somos amigos.

Tn: *Bajas la mano* Solo trataba de ser respetuoso.

Julius: Prefiero que me llamen caballero espiritual, ya que me desempeño en las artes espirituales.

Tn: *Viendo a Reinhard* Reinhard es ¿en serio?, para que lo invitaste, nada más está de amargado.

Reinhard: Nos servirá de mucho en nuestra lucha.

Whilhelm: Tal vez no tenga la mejor educación, pero en cuanto a artes espirituales es el mejor entre los caballeros.

Tn: *Viendo a Julius* Sí es así, entonces te doy la bienvenida.

Julius: Esas son palabras preferibles mi señor.

Tn: De acuerdo, ¿qué es lo que discutieron?

Whilhelm: Por lo visto en tu carta, el culto de la bruja no son enemigos fáciles de vencer, son mentes maestras, son muy peligrosos y sobre todo mentirosos, siempre trataran de hacer trampa en el momento en el que menos lo podamos tener en cuenta, así que debemos ir preparados.

Reinhard: Si las instrucciones dicen que solo podemos presentarnos nosotros en la batalla, debemos ser cautelosos y presentarnos los tres, pero buscar un punto clave en el que podamos resguardar a nuestros refuerzos.

Tn: Por lo visto serán muchos, pero tengo otro tipo de plan para lidiar con eso.

Julius: ¿Cuál es?

Tn: Tengo un contacto con Emilia y le dije que nos enviará todos los refuerzos posibles en compañía del señor Roswaal, por lo visto el señor Roswaal al poder volar podría informarnos de extremo a extremo la situación y hasta percatarse si la situación nos favorece o no. Mi plan es que mantengamos a nuestras tropas en posiciones diferentes bajo la montaña, es posible que el culto revise la montaña, así que tendrán que estar a una distancia considerable de la montaña, Roswaal será nuestros ojos para monitorear la situación, los demás ya sean caballeros, magos, gente del pueblo o demás, deberíamos separarlos en diferentes secciones para que ataquen y entren a través de diferentes puntos, pero tenemos que discutir eso.

Whilhelm: Apoyo la idea, pero sería riesgoso, presentarnos solos en la montaña con tres arzobispos sería muy peligroso, tenemos que aceptar que ellos siempre irán un paso por delante de nosotros, así que hay que tener los ojos muy abiertos y prevenir cualquiera de sus trampas.

Reinhard: Si escondemos a las tropas en diferentes puntos eso nos ayudaría para atacarlos en caso de que lleven más ejército o utilicen algún hechizo extremadamente poderoso, es buena apuesta, pero como dice mi abuelo, tenemos que planificarlo todo.

Julius: En cuestión a las artes espirituales podría decir que podría llevar un control en ello si tan solo encontrara una posición en la cual no sean capaces de interceptarme, si la encuentro podría darles una ventaja sobre sus hechizos y contra los hechizos del enemigo.

Tn: Yo no uso hechizos, solo puedo usar la espada y el combate cuerpo a cuerpo, me darías un gran apoyo.

Julius: Podría dártelo, pero debemos encontrar el lugar apropiado.

Tn: Entonces, preparémonos para lo que está por venir.

-Terminas de discutir con tus compañeros de batalla y luego regresas adentro-

Tn: *Ves una reunión frente a ti* ¿Qué es lo que pasa? ¿hay una reunión de candidatas aquí?, Emilia creí que te habías ido.

Emilia: *Te voltea a ver desde la sala* Jeje, tenía que quedarme a la negociación.

Tn: *Te acercas* ¿Negociación?

Crusch: Son cosas de política Tn, no creo que lo entiendas.

Tn: ¡No esté tan segura señorita!

Crusch: Jeje, Tn quisiera presentarte a las candidatas; ellas son Anastasia Hoshin y Priscilla Barielle.

Anastasia: Hola señor Tn.

Priscilla: Encantada.

Tn: Qué tal señoritas, ya las conozco porque la vida como caballero me ha metido mucho en el tema de sus campañas.

Priscilla: Si aún no tienes una postura firme, mi campaña te recibe con los brazos abiertos.

Anastasia: Claro que no, la mía te dará todos los beneficios que necesites con tu apoyo como militar.

Tn: Lo siento señoritas, pero yo contribuyo a la campaña de Emilia, a ella es a quién protejo.

Crusch: Así es compañeras candidatas, este caballero ya tiene a su protegida.

Anastasia: Mil disculpas señor, y señorita Emilia.

Priscilla: Es una lástima.

Tn: Bueno, las dejaré con sus negociaciones de política y yo voy a ir a ayudar a Rem.

Crusch: Adelante señor.

-Vas a tu habitación con Rem-

Tn: *Tocas los extremos de la puerta ya abierta* Llegué tesoro.

Rem: *Te voltea a ver mientras borda un traje* Hola cariño, te estaba esperando.

Tn: ¿A mí?, ni siquiera soy necesario aquí.

Rem: Sí que lo eres *te muestra el traje* ¿Qué tal me quedó?

Tn: ¿Necesitas mi opinión?

Rem: Si, necesito una opinión masculina, y cuál mejor que la tuya.

Tn: Me gusta mucho Rem, no solo porque lo hiciste tú, sino porque no me confundí cuando dije que todo lo que bordas te sale perfecto.

Rem: No entendí muy bien lo que dijiste, pero gracias Tn.

Tn:*Te sientas al lado de ella* ¿Y qué es?

Rem: Es el traje especial de la señorita Crusch para la reunión de candidatas en el palacio real.

Tn: ¿Cuándo es?

Rem: Mañana.

Tn: ¿Cómo bordaste eso en un rato?

Rem: En realidad fue en una semana, más o menos desde que te quedaste dormido luego de la lucha con las mabestias.

Tn: Ahora lo entiendo, debo admitir que te quedo de maravilla, pero... parece un traje militar más que el traje de una candidata.

Rem: Todas las candidatas tienen su propio estilo.

Tn: Y lo noto, Emilia es la chica de ropas blancas con poderes de hielo, Crusch es la mujer refinada con disciplina militar, Anastasia es la mujer rica de negocios y de buen gusto debo admitir, y Priscila es la niña fresa con estilo ostentoso.

Rem: No entiendo que significa fresa.

Tn: De dónde vengo lo usamos para referirnos a las personas presumidas, vaya que noté que lo es.

Rem: *Sonriendo* Lo bueno es que trabajamos ahora para la señorita Crusch, pero aun así apoyamos la campaña de la señorita Emilia, estoy segura de que estará muy orgullosa de nosotros.

Tn: Ya lo creo, aunque espero que esto no se descontrole en estos próximos tres días cuando tengamos nuestro combate con el culto de la bruja y el país colapse antes de pelear.

Rem: No pienses en eso, yo sé que eres un hombre inteligente y sumamente sabio Tn, siempre tienes las mejores ideas y todo saldrá bien contigo a la vanguardia, confío en ti Tn *te toma del brazo*.

Tn: *Acaricias su cabeza* Gracias Rem, aunque tu confíes mucho en mí, yo no lo hago del todo, también suelo cometer errores, espero que no sean muy graves en ese día.

Rem: *Te suelta* Deberías dejar de pensar en esa batalla y concentrarte mejor en el día de mañana.

Tn: ¿Tendré que estár presente en esa reunión?

Rem: Acudiremos como representantes de la señorita Emilia y la señorita Crusch.

Tn: ¿Eso no se supone que lo tendrían que hacer el señor Roswaal y Whilhelm Van Astrea?

Rem: Tenemos que estár presentes como representantes de apoyo, somos firmemente necesarios para la señorita Emilia y la señorita Crusch.

Tn: Mi única duda es como nos dividiremos su representación, yo representaré a Crusch y tú a Emilia, ¿o cómo será?

Rem: Podemos hacerlo al revés si lo deseas.

Tn: Para mí me da igual, lo único que tenemos que hacer es estár presentes como apoyo, ni siquiera tenemos que decir nada más que escuchar.

Rem: ¿Cómo es que lo sabes tan bien?

Tn: Cuando estaba en la preparatoria ayudé al comité de mi escuela en una campaña estudiantil, yo fui uno de los representantes de mi candidato y no tuve que hacer absolutamente nada, más que sentarme y escuchar.

Rem: Eso sonó un poco desinteresado Tn.

Tn: *Corrigiéndote* Lo siento, perdón si soné un poco altanero, era de lo peor cuando era estudiante, lo siento.

Rem: *Se acerca a ti* Porqué ya no eres así, ¿qué fue lo que te hizo cambiar?

Tn: Ya te lo había dicho Rem, este mundo me cambió de forma asombrosa, sobre todo Reinhard que se preocupó por mi sin esperar nada a cambio, eso es algo que no tiene precio.

Rem: *Se acurruca junto a ti*

Tn: Y tú también ayudaste en ello Rem, te amo.

Rem: Rem también ama a Tn *te pone sus labios para que le des un beso*.

Tn: *Correspondes el beso* Ya es hora de dormir, aprovechemos que las señoritas están hablando de negocios y durmamos a gusto.

Rem: Si Tn.

Emilia: *Toca la puerta y la abre* Hola chicos yo... ¿interrumpí algo?

Tn: *Sorprendiéndote* Para nada ¿qué pasa?

Emilia: *Avergonzándose* Bueno, Crusch dijo que todas las candidatas se quedarían a dormir hoy aquí en su mansión y que ya no había un cuarto disponible para mí, así que... me dijo que compartiría cuarto con ustedes.

Tn: *En tu mente* -¡Llévame ahora!-.

Rem: Claro que sí Emilia, no hay ningún problema para nosotros, ¿verdad Tn?

Tn: *Volteas con Rem con cara de mortificación* Claro, no hay problema -mi noche con Rem se arruinó-

Emilia: Muy bien, voy a acomodar mis cosas.

Tn: Bueno, voy al baño a cambiarme.

-En el baño-

Tn: Esta tenía que ser mi noche con Rem, no es posible que esa niña de pelo plateado me la tire con su presencia, bueno no es culpa de ella, fue Crusch quien le dijo que lo hiciera, pero es mi primera noche a solas con Rem y la pierdo así, ¿Qué hice para merecer esto?

-Vuelves a la habitación-

Emilia: *Vestida con su pijama de vestido rosa* Ya volviste Tn.

Rem: *Con su pijama verde* Hola Tn.

Tn: Hola *te acuestas en medio de la cama*

Emilia: *Se acuesta a tu izquierda* Bueno, dormiré aquí.

Tn: *La volteas a ver* Mantente a un metro de distancia conmigo y no me pongas las piernas encima.

Emilia: *Algo incomoda* Lo tendré en cuenta.

Tn: *Le quitas la mirada* Estoy siendo sarcástico.

Emilia: *Vuelve a sonreír* Menos mal, no te importa si me acerco mucho a ti ¿verdad?

Tn: *Volteas a verla* Yo que tú no lo haría, no sea que actives algún interruptor de encendido.

Emilia: A veces dices cosas que no suelo entender.

Tn: *Enfadándote* Hazlo si quieres *te das la vuelta y miras a Rem*.

Rem: *Se acuesta a tu lado izquierdo* Puedes mirarme a mí sí lo deseas.

Tn: ¿Si lo deseo?, que estúpida pregunta.

Rem: Jeje.

-Se escucha el sonido de un Búho-

Emilia: *Se asusta y te abraza* Ahhhh... Tn... ¿puedo dormir abrazada de ti?

Tn: *Volteas a verla* ¡¿Nunca en tu vida has escuchado a un Búho?!

Emilia: Tengo miedo.

Tn: *Volteas a ver a Rem y ella te asiente con la cabeza* Está bien.

Emilia: Gracias Tn.

Rem: *También te abraza*

Emilia: Rem ¿también tienes miedo?

Rem: *Fingiendo* A veces la oscuridad me da escalofríos jeje.

Tn: Ok, va voy a apagar las velas *soplas las velas y dejas el cuarto a oscuras*.

Emilia: Buenas noches.

Rem: Buenas noches.

Tn: Ya cállense, ok no, buenas noches.

Rem: Jijiji.

Emilia: *Solo sonríe*

Tn: *Abrazas también con un brazo a Emilia*

Emilia: ¿Eh? -Tn también me abrazó, tal vez no está bien que abrace a uno de mis empleados, pero... se siente bien, me gusta cómo se siente *acurruca tu cabeza contigo* se siente muy suavecito-

Tn: ¡¿Emilia qué estás haciendo?!

Emilia: Lo siento señor Tn, yo solo...

Tn: Te dije que me podías abrazar, pero trata de controlarte un poco.

Emilia: Lo siento señor, es solo que tenía mucho miedo.

Tn: Está bien, lo entiendo, pero no lo vuelvas a hacer.

Emilia: No lo haré.

Rem: *Pasa su pie entre tus piernas y le da una patada a Emilia*

Emilia: Auch, Tn ¿acabas de patearme?

Tn: No yo no fui *volteas con Rem* ¿fuiste tú?

Rem: No yo no, probablemente se te zafó el pie.

Tn: Eso es imposible, esas cosas no me suelen pasar *le das una patada a Rem*.

Rem: Auch, si me dolió.

Emilia: No hace falta golpearnos entre nosotros en la cama, ya hay que dormir.

Tn: Concuerdo con la niña de pelo plateado, ya hay que dormirnos.

Rem: La niña de pelo azul está de acuerdo.

-Se quedan dormidos hasta el amanecer-