Todos en la sala se encontraban sorprendidos por la repentina revelación de Irish, incluido Daemon que no sabía aquel secreto de su padre.

Tanto Cayden como Esmeray se colocaron tras de Razvan y de mi para protegerme al igual que Dameon se colocó frente a mi mientras que Tristán protegía a irish al igual que sus subordinados que la mantenían oculta.

El vampiro se acercó a la hielera donde estaban los restos de las bolsas que sobraron y la arrastró hasta un sillón donde se sentó.

Comenzó a beber las bolsas sin ninguna mueca de disgusto en su rostro, al contrario, saboreaba cada gota de sangre.

Terminó de beberse la última para luego pasar su lengua por su colmillos afilados y sus labios.

—gracias por el bocadillo, estaba exhausto luego de acabar con esos vampiros salvajes—menciona

Todos nos encontrábamos en alerta esperando que atacara.

Se levantó y se acercó a nosotros.

A pesar de que no podía verlo con claridad ya que Cayden y Daemon eran altos por lo cual me tapaban la vista aun así, mi instinto me decía que la persona delante de mí era peligrosa.

De un solo golpe lanzó a su hijo al otro lado de la habitación.

Por un momento pensamos lo peor, sin embargo, me ignoró y caminó hacia donde se encontraba su hijo.

Daemon no le dio tiempo de reaccionar cuando su padre le propinó un golpe en la cara.

Si fuera un humano aquel golpe hubiera sido mortal para él.

Aún así provocó que su rostro quedara irreconocible además de que el olor a sangre se percibía en el ambiente.

Miro a los demás esperando que alguien lo ayude, sin embargo, nadie se atreve a moverse.

A pesar del miedo que sentía caminé hasta allá.

Estaba por recibir un nuevo golpe cuando lo detengo.

Abrazo su brazo intentando de esa forma impedir que continúe golpeando.

No podía permitir que lo lastimara, verlo golpeado a su hijo me recordó las veces que Nahiara llegaba llena de moretones a causa de su madre.

Por mi culpa ella estaba sufriendo.

Miro a Razvan el cual mostraba preocupación ante mi acto.

—apártate—ordenó

A pesar de que su voz me causó escalofríos lo ignoré.

—no pienso soltarlo. No puedo permitir ver a un amigo siendo agredido por su propio padre, en el pasado no pude hacer nada por mi amiga a pesar de que yo era la causa de sus problemas, no quiero que por mi culpa alguien sufra.

Razvan no tardó en deducir que a la amiga que me refería era su hermana, después de todo en varias ocasiones le había dicho que mis únicas amigas mujeres eran Nahiara e Irish.

—Raven, hazle caso, no quiero que te pase nada, además ya estoy acostumbrado a su muestras de afecto, verdad padre.

—por supuesto que sí hijo—responde

En tan pocos segundos se libra de mi agarre al empujarme, Cayden que aparece atrás de mi para evitar que caiga al piso.

Usher está por golpearlo una vez más, sin embargo, la situación cambia cuando Damon le suelta una patada la cual lo lanza hacía nosotros.

Cayden logra quitarse del camino a tiempo.

Uno de los sillones queda destruido luego de que el vampiro cae en él.

Daemon se levanta y comienza a sacudir su ropa para luego limpiar los restos de sangre.

—genial, ahora debo alimentarme de más sangre por tu culpa—menciona

Me separo de Cayden para ir con Daemon.

No sabía qué decirle, estaba claro que no podía preguntarle si estaba bien si acababa de recibir la paliza de su inmortal vida a manos de su padre.

—no me mires así, ya te lo he dicho estoy acostumbrado a sus muestras de amor, pero eso está preocupada por mi dame de tu sangre.

Usher al escuchar eso se levantó.

—ni lo pienses Demon, es peligroso.

—ahora si es peligroso, pero si tu la estabas buscando para volverte humano.

—Pero es diferente, yo quiero volver a ser un humano para poder encontrarme con mi amada.

—patético, perder tu inmortalidad por un amor de hace milenios, debes de dejar esa estupidez y concentrarte en mamá qué renunció a todo por ti y tu solo la ignoras.

—Yo no la obligue a venir conmigo a este continente , ella fue la que tomó la decisión.

—te elijo por que te amaba—grita

—es una estúpida por enamorarse de mi por que yo le advertí que no podía amarla.

A pesar de que nunca me había enamorado siempre consideraba que el amor era una maldición.

Lo había visto con la madre de mi amiga, ella amo a mi padre biológico sin embargo al final la abandonó.

Por lo que note en el baile entre Esmeray y entre aquel dhampiro fue que alguna vez se enamoraron, en especial ella, pero al final él terminó rompiendo el corazón.

Incluso entre mis padres, la diferencia es que ambos se amaban pero sabía que si uno se iba el otro lo iba a extrañar. Si su amado fallece perdería su brillo.

Y ahora el vampiro frente a mi lo demostraba.

En algún punto, ya sea de su vida mortal o inmortal perdió a su amada, pero él no podía morir. Su condena era vagar por la eternidad en soledad.

Salgo de mis pensamientos al escuchar una cachetada.

No supe en qué momento llegué hasta él cuando reaccioné, mi mano estaba alzada hacia su rostro.

De manera instintiva retrocedo unos pasos.

—n-o-no

Por unos segundos titubeo de decirle un par de palabras, pero al final tomó valor para enfrentarlo.

—no debe hablar de esa forma de la madre de su hijo frente a Daemon. No comprendo las circunstancias en que la perdió, sin embargo, ella no fue total al enamorarse.

Siento las manos de Daemon en mis hombros.

—es suficiente, Raven, él nunca entenderá solo cumple su estúpido deseo para que acabe con él.

Lo miro por unos segundos.

—hazlo.

Me entrega una daga lo cual inmediatamente entiendo que es lo que quiere.

Llevo mi daga a mi antebrazo para sacarme sangre y dársela, sin embargo, una flecha nos interrumpe.

La flecha queda atorada en la pared, es un claro signo de advertencia por lo cual me aparto.

Miro hacía la puerta donde provino la flecha.

Abro mis ojos debido a una de las personas que se encontraba en la entrada.

Él tiene la misma expresión en su rostro al darse cuenta de mi presencia.

Era nada menos que mi amigo Iván el cual vestía con el uniforme de los asesinos de leyendas.

A su lado dos adultos, uno de complexión robusta y alta que tenía un par de cadenas en su brazos y el otro era un hombre de aproximadamente treinta años de, su cabello castaño estaba atado en una coleta, tenía un parche en su ojo izquierdo y barba corta la cual estaba desarreglada.

De los tres era el único que llamaba su atención debido a que tenía una capa roja cubriendo su uniforme de asesino de leyendas.

—Perdonen por interrumpir la charla entre padre, hijo y nuera.

—¿nuera?

Acaba de decir que soy pareja de Daemon, miró al vampiro puro el cual me lanza una mirada coqueta.

Lo miro con asco para luego mostrarle el dedo de en medio.

—yo también te quiero hija de la luna azul.

—idiota—respondí

Un carraspeo me sacó de mi burbuja en la que me sumergí con Daemon.

—como decía debemos interrumpir esta charla familiar, veníamos a reunirnos con usted señora Edevane, lo que no esperábamos era encontrar a dos de mis queridos juguetes con ustedes.

Usher se coloca la máscara para luego intentar atacar al humano, sin embargo el que tenía las cadenas lo detiene.

El hombre lanza las cadenas hacía el vampiro la cual con algún tipo de magia, porque honestamente no encuentro otra explicación de que las cadenas se amoldaron a su cuerpo.

El vampiro cae al piso para luego ser arrastrado hasta ellos.

Se supone que ellos son humanos cómo es que lograron aprisionarlo mientras que nosotros nos manteníamos en alerta.

—oh, veo que tienes dudas sobre lo que acaba de suceder, su alteza, verá, estás cadenas están hechas con Titanio, un metal que es dañino para los vampiros.

—como la plata para los lobos.

—algo así, estás cadenas están hechas de ese material el cual debilita a los vampiros, incluso el más poderoso.

La imagen de Asher encadenado aparece en mi mente.

Seguro esas cadenas son las que lo aprisionan junto a las cadenas que se encuentran en aquella enorme puerta.

—ningún vampiro puede romperlas, por que no se lo muestras Damon.

El mencionado no estaba entusiasmado por acercar su mano a eso por lo cual yo lo hice.

Antes de que lo tocara le aparto su mano.

Al instante de que tocó la cadena mi mano se quema, suelto un grito

debido al dolor.

—ve su alteza es imposible que ellos puedan librarse de eso.

—princesa, ¿se encuentra bien?

Cayden toma mi mano para revisar.

—tranquilo en un rato sanara, le deja cicatrices si está bastante tiempo en contacto con ellas. Casi no las usamos pero este de aquí las necesita. No es así Usher.

El que lo tiene sujetado lo jala para que responda.

—claro—responde

—a parte de recoger al traidor que te trae por mi hogar el cual fue destruido que te trae por aquí Samuel.

—que ironía que lo digas tú, eras la hija del séptimo líder de la organización y terminas convirtiéndote en uno de ellos.

Como que ella fue una asesina de leyendas y no una cualquiera sino hija del líder de los asesinos de leyendas.

—al parecer no prestaste atención a tus clases de historia en la academia Alejandro, deje la organización porque ustedes, no mi padre me obligó, estaba condenada a morir porque creían que estaba maldita.

El mencionado estaba por responder pero es interrumpido por que el del parche aplaudió.

—cierto, no nos hemos presentado ante la realeza vampírica, mil disculpas príncipes, esté de aquí es mi primer oficial, se llama Alejandro Lacón.

El hombre da un asentamiento con la cabeza.

—Yo soy el capitán de la división ocho, Samuel Kaiser, y este jovencito es Iván Meraz que se convirtió en mi teniente recientemente, aunque por la reacción del principio de ella deduzco que ya se conocían.

Genial, no solo Irish me había escondido el hecho de que era una vampiro sino que también mi amigo me ocultó el hecho de que formaba parte de los asesinos de leyendas, que sigue que Nahiara sepa que es una dhampira.

Al parecer mi vida estaba hecha a base de mentiras.

—y estos dos vampiros, aunque estos ya los conocen, tengo otro par de vampiros que es la madre de Damon y otra vampira.

Miro a mi amigo por unos segundos para luego mirar a Irish.

—no me mires así Raven yo acabo de conocerlo en persona, se que me hablabas de él pero es la primera vez que lo veo por lo cual estoy sorprendida y más que tenga un cargo importante a corta edad.

—¿por qué lo dices?

—Normalmente se gradúan a los dieciocho de la academia y tardan en subir de rango. O una de dos o es un genio o fue entrenado desde niño, me voy más por que fue entrenado de niño, a estos locos les encanta entrenar a los niños desde niños.

—confirmo lo de ella, somos entrenados desde una edad temprana, pero lamento decirles que él es de la primera opción, es un genio, entró con catorce y se graduó en un año y ahora tomó el rango de teniente a los dieciocho.

Quedó impresionada por lo que acaba de revelar Demon.

En tan pocos años mi amigo se graduó de la academia de asesinos de leyendas y además se convirtió en teniente.

Aunque desde que lo conozco él ha sido alguien inteligente, pero no esperaba a este nivel.

—Ahora que ya se presentaron nos dirán que es lo que buscan en mi propiedad.

—como ya mencionamos venimos por él, además de pedirle que nos entreguen a la hija de la luna azul.