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10

Chanyeol estaciona el auto frente a la enorme casa color blanco de Kim Raven TaeHyung, mira a su hermano por unos segundos y luego a Hope.

—Dime algo —le pide JungKook a su hermano, mientras acaricia el cabello rubio de la pequeña.

—Sabes lo que pienso respecto a esto, Kook. Odio que tú y Sana tengan que hacer esto.

El menor asiente.

—Debes conseguir más casos, necesitamos completar el dinero. Si es necesario llama nuevamente a la señora que complacías —le pide el castaño.

—Ella no me gusta —reprocha Chanyeol.

—¿Y tú piensas que a Sana le gustan sus compradores? —lo cuestiona JungKook, molesto por la actitud de su hermano. —Piensas que en serio siento algo por el odioso y altanero de Raven —el menor se retira el cinturón—. Dejemos algo en claro Chanyeol, esto es mi trabajo, haré lo que sea necesario para ganar dinero. Tú haz tu parte y deja de pensar que un millonario puede fijarse en alguien como yo de manera romántica y sería.

—Entonces sientes algo por él —lo señala el mayor.

El menor lo mira con su entrecejo relativamente fruncido, casi provocando que sus dos cejas se han una sola.

—Lo único que siento por TaeHyung es indiferencia. ¿Acaso no entiendes? —JungKook abre la puerta del auto. —No salgas —le ordena el menor.

—Pero...

—Si sales, tendré quedar más excusas y mentiras, así que quédate ahí —le pide molesto junto, tomando la maleta de Hope, luego de haberla dejado de pie sobre el asfalto.

—Dile la verdad, estoy seguro que tendrá...

—Lastima —lo interrumpe JungKook. —Lastima y desinterés, es lo único que puede sentir un millonario por mí y el resto de mi familia en problemas. No aceptaré caridad de nadie, mucho menos de ese engreído —el menor se coloca la maleta, y toma la mano de Hope. —Haz lo que te dije Chanyeol —le recuerda, para luego cerrar la puerta del auto.

—Bye —dice Hope, agitando su manita derecha.

El castaño camina hacia la puerta principal de la casa, observa en un costado de afuera de la casa la limosina que Mark conduce, eso solo significa dos cosas, Raven le había pedido que regresará a casa o él ya estaba en casa.

Luego de subir los dos escalones junto a Hope, alza su vista y mira a Camile en la puerta.

—Joven —lo saluda entre dientes, retirándole la maleta de la pequeña.

—Si esto se sale de control, toma a Hope y distráela —le ordena JungKook.

Caminan por el pasillo hasta llegar a la sala de estar, TaeHyung se encuentra al centro, de pie, con su saco abierto y algunos botones de su camisa desabotonados.

—Tú, eres como un niño caprichoso, que desobedece todas las órdenes que recibe —es lo primero que dice Kim, al verlo entrar a la sala de estar.

—Y tú, eres como el padre que se enoja por no lograr controlar a su hijo —replica Jeon. —Nos vamos —dice Raven, confundiendo a JungKook.

—No entiendo —habla el menor.

—¿Qué? Acaso debo decirlo al revés para que lo entiendas —lo mira desafiante el pelinegro. —Nos vamos, tú y yo, date prisa —lo presiona el millonario.

—¿Y con quién se supone que dejaremos a Hope? —pregunta furioso el castaño.

—Joy.

Una sonrisa sarcástica sale de los labios de Jeon.

—No pienso dejar a Hope con esa estúpida —suelta el menor.

—JungKook —lo llama TaeHyung.

—Dije que no —alza su voz el castaño.

—Ok. ¿Entonces con quién quieres dejarla?

JungKook niega, Raven es un grandísimo idiota, pero no se irá de esa casa sin hacer que ese engreído se preocupe y le brinde la atención debida a la pequeña rubia.

—Camile —pronuncia el castaño.

La mujer alza su rostro.

—Confío en ti desde que llegué a este lugar. ¿Puedes cuidar de Hope? —le pregunta el menor.

—No le preguntes solo...

—Cállate TaeHyung —lo interrumpe JungKook.

—Yo..., si es lo que usted desea joven —dice nerviosa la sirvienta.

—Puedes utilizar mi habitación mientras no estoy, cuida bien de ella, aliméntala y juega junto a ella —el menor sonríe nervioso. —Perdón, eso tú ya lo sabes —niega con su cabeza—. Hope, regresaré pronto debo acompañar a tú tío a algo importante, cuando regrese jugaremos mucho y tomaremos un baño en la piscina.

La pequeña asiente emocionada.

—Date prisa —le ordena TaeHyung, mientras pasa de largo frente a ellos.

—Gracias Camile —susurra JungKook.

El castaño sale de la casa, trota hasta alcanzar al pelinegro, que camina en dirección a la limosina.

—Eres un idiota, ¿te lo han dicho? —lo cuestiona el menor.

—Sube al auto y cállate —le ordena con semblante serio el mayor.

Los dos entran a la limosina en la parte trasera, Mark lo mira ambos a través del espejo del retrovisor.

—¿Hacía dónde, señor? —pregunta Mark.

—Hacía el hotel Raven In —le indica Kim.

—Espera, espera, iré a cambiarme —suelta exasperado Jeon.

—No, es tarde —dice TaeHyung, presionando el botón de seguro para bloquear la puerta.

—No puedo ir a tú estúpido hotel, vistiendo de esta manera —habla en desacuerdo el menor.

—Arranca —le ordena Raven al chófer.

—¿Me escuchaste? —lo interroga JungKook, acercando su rostro al de Kim.

—Por supuesto, como no podría escucharte con tu voz chillona y molesta, corderito —contesta el pelinegro, colocando su mano derecha en el rostro de JungKook.

—Sube la ventanilla —le pide TaeHyung a Mark, en tono tosco, luego de ver la forma en la que su chófer no quita sus ojos entrometidos de su esposo.

—Te di una tarjeta con dinero, hay pequeñas tiendas de ropa en mi hotel, compra algo presentable y listo —dice Kim, guiñándole su ojo derecho, para luego ver cómo la ventanilla se cierra por completo.

Llegan al hotel, Mark estaciona la limosina frente al hotel, Raven da unos cuantos golpes a la ventanilla, segundos después está desciende.

—Te llamaré para que vengas a recogernos —le indica Kim.

—Espera, quiero que me acompañe a la tienda de ropa.

La mirada furiosa de TaeHyung viaja hasta el castaño, que está sentado a su lado.

—Vete Mark, y tú sal del auto —le pide el pelinegro, abriendo la puerta trasera de la limosina.

—Te dije que quiero que me acompañe —protesta JungKook, cuando han salido de la limosina.

—Y yo decidí ignorarte.

El mayor, toma la mano de Jeon sorprendiéndolo.

TaeHyung, camina sobre la pequeña alfombra sosteniendo la mano de JungKook, mientras algunos curiosos y personal del hotel los observan.

—Señor Raven, bienvenido —lo recibe el portero.

Entran al primer hotel de lujo que inauguró el joven millonario. Una mujer con uniforme se acerca a ambos.

—Señor, bienvenido, la mesa está lista —le indica la mujer.

—Alista mi pent-house —le ordena a la mujer.

—Sí, señor —dice la mujer, alejándose de ambos.

JungKook continúa caminando junto a TaeHyung, no tiene idea hacia donde se dirigen, pero disfruta del hermoso lugar.

—Apresúrate —habla Kim.

Jeon, mira hacia el frente encontrándose con una tienda de ropa frente a él.

—¿Qué esperas?

El menor entra a la tienda de ropa, mientras Kim espera por él, bufa al darse cuenta que las trabajadoras lo miran, y que algunos huéspedes se detienen para echarle un vistazo.

—Me encanta, me lo llevo puesto, gracias.

JungKook saca su cartera del bolsillo de su pantalón, la abre, pero antes de que puede sacar la tarjeta del separador de tarjetas, ve un brazo extendido hacia la cajera.

—Dese prisa —le pide Kim.

—Podría darme una bolsa —se dirige Jeon, a la otra cajera.

Recibe la bolsa e introduce su ropa dentro.

—Vamos, es tarde.

JungKook asiente, siguiendo los pasos de TaeHyung.

—Sus invitados esperan, señor —le indica el mesero, cuando han llegado al restaurante del hotel.

—Escucha, ese señor es el ejecutivo principal de la agencia de seguridad.

—Todo saldrá bien, lo prometo —le asegura el castaño, entrelazando su mano con la de Kim.

JungKook, está decidido a hacer las cosas bien, su hermanita merece crecer junto a ellos, no junto a una tutora.

La cena transcurre lo más normal y cómodo posible, el castaño sonríe de forma hermosa convenciendo a los esposos Choi de que tienen un buen matrimonio entre ambos.

—Ha sido un gusto cenar junto a tu esposo, Kim —dice Choi, poniéndose de pie, para luego ayudar a su esposa.

—Opino lo mismo, Choi —se limita a decir TaeHyung, mientras observa como JungKook se abraza con la esposa del ejecutivo.

—Cuídate JungKook, espero verte en mi cena de aniversario de bodas, quiero mostrarte mi casa —el menor sonríe y asiente haciendo contacto visual con Raven.

—Estaremos ahí —se une el pelinegro a la conversación.

—Adiós Jiwo, cuídate —se despide JungKook.

Después que el ejecutivo y su esposa han abandonado el hotel, Jeon y kim suben al elevador directo al pent-house del millonario.

—Eso fue —dice JungKook, saliendo del elevador.

—Bueno —culmina TaeHyung, riendo un poco.

Llegan a la sala de la habitación, encontrándose con dos copas y una botella de champan.

El menor se retira los zapatos que Kim le ha comprado, y toma asiento en una cómoda silla, mientras TaeHyung, llena las copas.

—Ten —le entrega la copa con champan.

—Brindemos porque somos buenos mintiendo, y porque el señor Choi se lo está creyendo —habla el castaño alzando su copa.

—Brindis —dice Kim, chocando su copa contra la de JungKook.

Beben un largo sorbo de champan y luego se quedan en silencio.

—¿Quién es la niña? —pregunta repentinamente, Raven.

—Disculpa —dice Jeon, luego de beber un sorbo más de champan.

—Escuchaste bien, ahora responde —le pide TaeHyung.

—¿Acaso me espías? —cuestiona con incredulidad, el menor.

—Eres mi esposo, que esperabas —habla Kim, con superioridad, bebiendo de un solo trago el champan de su copa.

—Eres increíble —suelta, molesto el castaño.

—Lo sé, ahora responde —exige el pelinegro.

—Es mi hermana menor —contesta con desagrado.

—¿Qué hacía tu abogado en ese lugar? —continua con el interrogatorio.

—¿Qué? —articula, confuso JungKook, pero luego recuerda la presencia de su hermano y que, ante Raven, es su abogado.

—No puedo acercarme a mi hermana sin la presencia de mi abogado —responde Jeon.

—¿Por qué?

Al escuchar esa pregunta, JungKook niega, toma la botella de champan y llena su copa de nuevo.

—Mi vida privada no tiene por qué importarte —dice el menor, para luego beber de un solo sorbo el champan.

—Bien, pero dejemos algo claro, JungKook —Kim se pone de pie, y camina hasta quedar frente a Jeon. —Si tu vida privada llega afectar siquiera un poco mi vida o mi imagen, hare que te arrepientas —lo amenaza el pelinegro, acercando su rostro al del castaño.

TaeHyung intenta besar a JungKook, pero este lleva su mano izquierda al rostro del mayor y lo detiene.

—¿La besaste? —lo interroga el castaño.

—¿A quién? —pregunta Kim, mirando con deseo los labios de Jeon.

—Tú sabes a quien, ¿la besaste? —repite la pregunta el menor.

El pelinegro se limita a negar.

—Estas mintiéndome, no te creo —dice JungKook.

—No la bese, no lo hice, ¿es lo que quieres escuchar? —pregunta exaltado, TaeHyung.

—Sí —responde el castaño, dejando de evitar que Kim acerque su rostro al suyo.

—No pude besarla, porque solo quería poder besarte a ti —susurra el millonario sobre los belfos de JungKook, haciéndolo reír.

—Sino te conociera, creería lo que me estás diciendo —habla en voz baja y seductora el menor, mientras TaeHyung le ayuda a ponerse de pie.

—Bueno, no puedo obligarte a que me creas, corderito —las manos de Kim, rodean la cintura de JungKook, lentamente las desciende hasta dejarlas sobre los glúteos del menor, el cual, se estremece al sentir las caricias de TaeHyung en su trasero.

—Ahora vamos a celebrar nuestra noche de bodas —dice Raven, para luego estampar sus labios contra los del castaño.

Entre cada beso y caricia, JungKook se mentaliza para lo que se avecina, no era la primera vez, lo había hecho unas cuantas veces, una más y las que se vendrían no serían la excepción.

Llegan a la cama, TaeHyung se encarga de desnudar a Jeon, mientras sus dedos y manos tocan todo a su paso.

—Así que sería el último al que escogerías. Empezaremos a hacer que cambies de opinión, corderito —Kim se retira la camisa y la lanza al suelo de la habitación.                   

Lleva sus manos a su cintura, retira la hebilla de su cinturón, luego desabrocha su pantalón y baja su cremallera, se retira su ropa interior junto con su pantalón, toma los tobillos de JungKook, y tira con fuerza sacando las piernas del menor de la cama.

—Ábrelas para mí —le ordena el pelinegro.

Jeon, traga grueso, y luego hace lo que su comprador le ha pedido.

—Desde ahora voy a encargarme de que olvides a cada maldito idiota que a tocado y profanado tu lindo y pecaminoso cuerpo —el mayor lleva su boca los muslos de JungKook, luego sube a su pelvis, y se detiene en su abdomen. —Desde hoy, seré el único que podrá disfrutarte —habla el pelinegro, mientras toca el tórax de JungKook a su antojo.

Kim junta sus labios con los de Jeon, con su mano izquierda estimula una de los pezones del menor, baja su boca al cuello blanquecino del chico y empieza a besarlo de forma brusca.

TaeHyung, está por introducir tres de sus dedos a su boca, pero JungKook se lo impide, toma la muñeca de Raven y lleva su mano hacia sus labios regordetes.

El castaño introduce los largos dedos de TaeHyung a su boca, los chupa y los llena con su saliva, cuando el mayor considera que es suficiente retira los dedos de la boca de JungKook, escuchando un obsceno ¨poff¨ que hace que su mente perversa, lujuriosa y deseosa se imagine a Jeon, sacando su polla de su boca.

—Voy a sacarte provecho, corderito —dice sonriendo TaeHyung, mientras empieza a introducir el primer dedo en la entrada del castaño.

El ruido que la mente de Jeon realiza, ahora no la escucha más, esta concentrado en una sola cosa, hacer sentir bien a su comprador. Pero también hacerse sentir bien así mismo, era la única manera en la que podía sentirse menos sucio y utilizado.

Los dedos del pelinegro entran y salen, preparando la entrada de JungKook, mientras el menor estimula su miembro.

TaeHyung retira sus dedos, toma los muslos del castaño con fuerza sacando el culo del menor fuera de la cama.

Alinea su miembro en la entrada del menor, antes de penetrarlo esparce un poco de líquido pre seminal en la entrada de JungKook, y luego lo penetra de lleno.

—Aaah —gime TaeHyung, sintiendo como los músculos anales se acoplan y presionan su pene.

—Maldito —se queja JungKook, en un quejido, tirando de algunos mechones de TaeHyung.

Kim se espera por unos segundos, introduce la última porción de su miembro en la entrada del menor, logrando sacar un sonoro y desgarrador gemido.

El pelinegro empieza a mover su cintura, con grandes manos toma los muslos de JungKook, y en cada embestida que propina presiona con fuerza la piel blanca de Jeon.

—Debimos haberlo hecho antes —dice con voz agitada TaeHyung, embistiendo la entrada del castaño.

—Espera, espera —dice entre jadeos, JungKook.

—No me pidas eso, porque no lo hare —reprocha, Raven.

—Déjame ir arriba, prometo que no vas a arrepentirte —le propone el castaño.

TaeHyung saca su miembro de la entrada de JungKook, lo penetra lentamente al mismo tiempo que lo mira a los ojos, mientras sonríe socarronamente.

Apega su pecho al de Jeon, y de esa forma gira en la enorme cama del hotel, cambiando de posición.

—Aprende —murmura el castaño, alzando su ceja izquierda, mientras relame su labio inferior, y empieza a mover su cadera de arriba abajo, presionando el pene de TaeHyung, provocando que cierre sus ojos, al sentir como poco a poco siente recorrer la lujuria en todo su cuerpo.

JungKook acerca su boca a la de TaeHyung, pero no lo besa, simplemente lo provoca, ganándose una nalgada por parte del mayor.

El menor toma su miembro y comienza a tocarse, acelera el movimiento de su mano, mientras no deja de auto penetrarse, sintiendo el tacto de Kim tocar todo su cuerpo sudado.

El castaño llega a su clímax, recuesta su frete sobre el pecho de TaeHyung, sin dejar de mover su cintura, las manos de Raven presionan la piel de los muslos de JungKook, el momento que se corre dentro del menor.

—Umm —gruñe Kim, esparciendo el resto de semen en el interior de JungKook.

—Desde ahora, no vas a desear a nadie más que a mí, cariño —habla con voz cansina el castaño.

Alza su cabeza, toma el rostro de TaeHyung con su mano izquierda y le da un beso, se miran mutuamente y ambos sonríen ladinamente, como si de esa manera llegasen a un acuerdo sin siquiera cruzar una palabra.

Empecemos este hermoso año con una historia Taekook por qué no? Jajajaja
Muchas gracias por tener tanta paciencia con esta historia en fin, la actualizaré cada cinco días así que atentos/as/es(⁠灬⁠º⁠‿⁠º⁠灬⁠)⁠♡

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