— ¿Qué dijiste? —El hermano de JiMin pregunto, sosteniendo fuertemente sus manos.

JiMin le dio una mirada cansada. —Que accidentalmente le volví responder a mi alma gemela.

El joven omega de cabello castaño tenia una mirada de envidia en su rostro, la sonrisa se hizo evidente cuando se trataba del tema sobre las almas gemelas. TaeHyung contuvo su grito ya que estaban en una biblioteca y no podían hacer ruido, aun asi su mirada delataba su estado de ánimo.

— ¿y él que dijo? Dime, dime, dime.!

JiMin bufo, y saco de las garras de su hermano, sus manos. —Nada, solo me pregunto si estaba bien y esas cosas.

— Hermano, eres realmente un frígido, no pudo creer que seas asi con tu alma gemela, lleva dos años hablando solo y tu ni le respondes, como si fuera lo más horrible del mundo hablar con él. No te arrepientas si un dia el dice ya no quiere hablar contigo y se queda con otra persona.

— No es como si me importara ese hecho, su vida y la mía no tienen nada que ver lo que el haga o no es de mi importancia, conoces mi situación muy bien... sabes lo que soy.

TaeHyung negó y suspiro. —Lo dices de dientes para afuera, se muy bien que te sientes solo, pero eres alguien orgulloso y no cederás, pero, un dia y espero que no llegue a pasar, tu alma gemela se cansara de esperar y buscara a alguien más, cuando eso pase, hermano. Lo lamentaras. Deja de justificarlo todo por tu condición. Eso no es excusa.

JiMin lo observo en silencio. Luego se puso de pie y tomo el bolso para colgarlo de su hombro. —Tengo trabajo que hacer, no te acompaño más.

TaeHyung negó. —Sigues huyendo, siempre estas huyendo.

JiMin, quien ya había avanzado un poco detuvo sus pasos y apretó su mandibula. —TaeHyung. Cállate.

Su hermano menor le dio una mirada de desaprobación, aunque JiMin no podía verla, pudo sentir los ojos penetrantes golpeando su espalda.

— Nos vemos.

— Cuídate, salúdame a SooJin.

— En, lo hare.

Cuando salió de la biblioteca, fue recibido por el penetrante brillo del sol, el dia parecía agradable, sin ninguna nube que denotara lluvia. Últimamente en Seoul había estado lloviendo muy seguido, y a él le incomoda, su trabajo se volvió aburrido si no podía escuchar el ruido a su alrededor.

Se paro a esperar el bus, aunque tenia auto, no manejaba. Sus manos comenzaban a sudar instantáneamente.

Después de esperar unos cinco minutos, el bus se detuvo frente él, la gente que bajaba lo hizo y él junto a los demás que esperaban, subieron al bus. El conjunto de feromonas y sudor lo mareo un poco.

En su trabajo él no era importante, solo escribía columnas de novedades, cosas que a los jóvenes hoy en dia les gustaba leer, moda, literatura, música. Últimamente había estado escribiendo mucho acerca de una banda super famosa de toda Corea y el mundo. BTS.

Y desde que comenzó a escribir acerca de ellos, su columna se volvió la mas mejor calificada. E incluso hubo incremento de ventas de la revista. Al ver esto, su jefe puso más presión sobre sus hombros.

Hoy no iba a la oficina, se dirigía el lugar de siempre, la cafetería que lo inspiro a escribir acerca de Bangtan Soyeondan. Aparte de ello, en esa cafetería servían un delicioso americano. Y eso lo que necesitaba justo ahora.

Después de bajarse del bus, camino unas cuadras y por fin vio la fachada de la cafetería, nada mas entrar el delicioso aroma a café lleno sus fosas nasales, busco su asiento predilecto y se sentó esperando que vinieran a pedir su orden.

— Hola de nuevo. —La joven saludo felizmente.

— Hola.

— Lo mismo de siempre? —ella pregunto.

JiMin asintió. —Esta vez añade un pudin de vainilla.

— Esta bien, en cinco minutos.

— Gracias.

JiMin saco su Mac y se dispuso a seguir escribiendo un artículo, su jefe le pidió que hablara de la nueva canción que el grupo de BTS saco, y que los alabara. JiMin sintió que no era necesario embellecer con palabras, había escuchado la nueva canción y su alma sintió una gran paz, asi que diría solamente palabras sinceras, no adornos falsos.

— Un americano por favor.

Los dedos veloces de JiMin se detuvieron cuando sus oídos captaron aquella voz, su cuerpo se congelo en la silla.

— Gracias. Pediré lo mismo de siempre para llevar. —JiMin giro mecánicamente su cuerpo y vio la espalda de un hombre, vestía una camisa negra, pantalones del mismo color y había una bata en su mano izquierda.

El hombre se giro en aquel instante, buscando un asiento libre, pero el local estaba extrañamente lleno, JiMin se alteró.

No, había una silla libre en su mesa. Trago saliva dolorosamente.

Si su audición no estaba equivocada, y estaba seguro de que tenía razón porque había estado escuchando la misma vos durante dos años, su corazón parecía sufrir de taquicardia. Latiendo tan rápido que temía fuera escuchado si se acercaban a él.

Nunca pensó encontrar a su alma gemela en este lugar, fue una gran coincidencia. Dándole miradas de reojo lo dedujo.

Es un Alfa.

JiMin lo vio avanzar a su mesa y sus manos sudaron. —¿Hola, puedo sentarme?

Su corazón bombeo rápidamente, intento fingir estar calmado y respondió. —Claro, adelante.

— Gracias. —YoonGi respondió, colocando su americano sobre la mesa.

JiMin aparto la mirada de sus manos, sintiéndose de la nada algo sediento. Para evitar que le hablara, se colocó los audífonos y se centro en seguir escribiendo su artículo.

YoonGi por otro lado lo observaba de vez en cuando, mientras bebía de su americano y volteaba a ver a su alrededor, le daba leves miradas de reojo, lo observó colocarse los audífonos y luego de verlo escribir arduamente en la Mac, se retiró los audífonos y estiro sus brazos entumecidos por mantenerse en una misma posición por un buen rato.

— ¿Eres escritor? —La lengua de Min fue más rápida que su pensamiento.

JiMin se congelo y alzo la mirada. —Si, escribo para una revista.

— Wow, que genial. —sinceramente elogio.

— No es nada interesante.

— Como es tu nombre, tal vez he leído alguno de tus artículos.

JiMin negó. —Son escritos ambientados a jóvenes.

— Somos jóvenes, no viejos. —Dijo él alfa.

JiMin se rio bajito. —Moonlight.

YoonGi parpadeo sin entender. —Mi seudónimo en la revista es Moonlight.

El peli negro pensó por un momento y luego sonrio misteriosamente. —Creo que sí, definitivamente te he leído.

Las mejillas de JiMin se calentaron de vergüenza. Solo murmuró un - oh- quería cavar un agujero y esconderse en el.

"Controlate Corazón."

Justo cuando YoonGi iba a hablar con él, su celular sonó. Él respondió rápidamente. —¿Sí? Un, si voy para allá. Okay.

Se puso de pie guardo su celular, le dio una mirada de disculpa a JiMin se dirigió a la caja a pagar y recoger su pedido. JiMin lo observo y antes de hablarle. Su mundo se volvió silencioso. Joder, estaba lloviendo.

YoonGi salió corriendo de la cafetería, la llamada era urgente y debía correr al hospital. Se cubrió con su gabacha para no mojarse la cara.

— ¿Cómo te llamas? —aquella pregunta lo congelo a medio camino.

Estaba lloviendo, y la única vos que podía escuchar era la de alma gemela. Después de dos años, por fin fue la otra persona la que hablo por voluntad propia.

— ¿ah?, YoonGi. Me llamo YoonGi. —respondió—, oh, espera...

Corrió a su auto y se metió rápidamente, sacudió sus manos mojadas y luego estornudo. —¿aun estas ahí?

— si.

— ¿tu, porque me hablas?

JiMin no respondió. YoonGi gruño cuando no respondió su pregunta. —hablemos luego, tengo trabajo.

— okay, cuídate.

— Si.

Esta fue la primera vez, y YoonGi tenía la ilusión de no sería la última. Quizás, el dia para conocer a su alma gemela estaba muy cerca. El sonrio por inercia. Encendió el auto y se puso en marcha, había trabajo que hacer, no podía perder el tiempo, aunque quisiera.

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Le hice cambios, no extensos pero si hay cambios significativos!!

Gracias a quienes leyeron esta historia cuando estaba recién publicada!!

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TAM.

MinMin❤️