A veces no tomamos la mejor decisión para nosotros, si no que optamos por la que creemos que nos merecemos.

A veces ese maldito pensamiento nos traiciona y nos creemos indignos de tomar esa decisión que sabemos perfectamente que nos va a hacer felices, pero ahí estamos, optando por otra cosa porque de una forma extraña cualquier cosa es mejor que la felicidad.

Porque si no somos felices entonces no tenemos de que preocuparnos, no tenemos que estar pendientes de si perdemos o mantemos esa felicidad, no vamos a sufrir cuando se acabe, no vamos a sentirnos culpables por sonreír cuando alguien cercano es incapaz de hacerlo.

Tal vez ese sea el motivo por el cual la mayoría de nosotros optamos por ser un puñado de infelices, porque de esa forma la vida es mucho más sencilla.

Pero ese no es el caso de Park Jimin, él no toma sus decisiones para vivir de una forma sencilla él solo quiere mantener a las personas que le importan cerca, se rehusa a perderlas.

Ni siquiera quiere ponerlas en riesgo, y por ese motivo es capaz de arriesgarse a si mismo si eso significa mantener a Jeon Jungkook a su lado.

-¿Jimin?

Pregunta Jungkook confundido al despertarse, ahora con la fiebre mucho más baja siendo capaz de recordar pequeños detalles que no sabe distinguir sin son reales o solo uno de sus tantos sueños.

-Gukie...¿Cómo te sentís?

-Bien me siento mucho mejor yo-

En ese momento las palabras del chico son interrumpidas por esas imágenes que atacan su cabeza ¿Había besado a Jimin? Sus ojos se encuentran con los del hermoso chico que lo mira con una amable sonrisa en el rostro, siente su mano en la frente y como esta acaricia su rostro sin pudor alguno, sin ser consciente de los latidos erráticos que le roba a su corazón.

-La fiebre bajo al fin, realmente me asuste cuando llegue y parecía muerto en el sofá.

Pronuncia el rubio tratando de evitar pensamientos sobre lo que siente cada vez que observa esos grandes y brillantes ojos marrones, procura ignorar los alocados latidos de su corazón enamorado por primera vez.

-Jiminnie...yo...¿Dije o hice algo raro?

Pregunta Jungkook con miedo mientras observa la espalda de Jimin que parece estar humedeciendo el trapo de su frente otra vez.

-Balbuceaste un poco mientras dormías ¿Por qué lo decís, Gukkie?

Jimin no siente culpable al mentir de esa forma tan descarada, lo que paso hace unas horas va a ser un secreto que va a guardar consigo mismo, porque él lo sabe, podrá estar enamorado de Jeon Jungkook pero eso no significa que sus sentimientos sean correspondidos.

"Te amo, todos estos años, durante cada día te ame y lo sigo haciendo" esas palabras...Jimin sabe perfectamente que no fueron dirigidas a él, y por más que le duela realmente espera que algún día esas hermosas palabras alcancen a su verdadero dueño, porque el las recibió pero no le pertenecen.

O eso cree, porque la realidad es que el corazón de Jungkook intenta latir la misma sincronía que él suyo, porque la verdad es que sus destinos se sellaron aquella hermosa noche.

Una noche en la que el cielo parecía llorar su primer reencuentro y despedida, casi como si se tratase de un preámbulo de lo que vendría.

Entonces ambos se miran, sus ojos parecen preguntar miles de cosas que el contrario se limita a responder en secreto, ambos con sus sentimientos en la punta de sus lenguas y aún así incapaces de admitirlos en voz alta, ambos por culpa de la cobardía.

¿Qué habría pasado si ambos hubiesen dicho sus sentimientos en ese instante? Tal vez todo el dolor se habría ahorrado, tal vez sus destinos no se habrían enrredado de la forma en la que lo hicieron, pero ahí están, decidiendo callar, y por primera vez el hilo de sus destinos no sigue recto de forma paralela, se empiezan a cruzar con otros destinos y un nudo se empieza a formar.

Sin saberlo, a cada segundo que pasan en silencio ese nudo se aprieta más y más hasta que finalmente es imposible deshacerlo, tal vez aún es demasiado pronto.

-Ya que estas mejor...debería irme, aún tengo que pasar a visitar a Yoon y Tae.

-Ah claro, perdón por los problemas, en serio no creí que estaba tan enfermo.

Ambos se despiden, Jimin le pide a Jungkook que no se levante de la cama para despedirlo, y finalmente se para frente a la puerta de la habitación para decir una oración de la cual no estaba seguro.

-Cuando sea que te sientas mal...llamame y podemos sentirnos mal juntos.

Es lo último que dice el rubio para huir con las mejillas rojas del lugar mientras Jungkook es dejado sobre su cama con los latidos de su corazón completamente alocados.

Jimin finalmente sale del departamento y entra en el ascensor suspirando mientras se apoya en una de las paredes.

Jungkook suspira sobre su cama y deja caer su cabeza en sus almohadas.

Y como el destino es tan caprichoso...ambos dicen una pequeña oración muy parecida pero extremadamente diferente al mismo tiempo.

Jimin susurra un delicado "No quiero perderte" y Jungkook murmura un desesperado "No puedo perderte"

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YA SE RE POQUITO PERO A PARTIR DE MAÑANA VUELVEN LAS ACTS DIARIAS PERDÓN POR TARDAR TKM VERY MUCHOU NOS LEEMOS MAÑANA EN MI NUEVA HISTORIA QUE ELIMINE PERO VOY A VOLVER A SUBIR 💛