El silencio los consume poco a poco, de la misma forma que la oscuridad aparece en cuanto el sol se esconde por el horizonte, ninguno de los dos dice una sola palabra.

Uno de ellos no sabe que decir y el otro esta tan aterrado de su propia vida que ni siquiera tiene tiempo para hablar, sus propios pensamientos lo destruyen, lo encierran y lo vencen en una batalla cuyo final es demasiado predecible...

¿Por qué será que al fin del día, cuando estamos solos en medio de la oscuridad a punto de caer dormidos, nos llegan todos esos recuerdos tristes o todas esas millones de posibilidades? Nuestra cabeza se llena de escenarios que nunca pasaron y sabemos perfectamente que jamás van a suceder pero muy dentro de nosotros, nuestro lado más soñador desea que ocurran, porque sentimos que tal vez de esa forma nuestra vida sería mucho más interesante para ser vivida. Nos llenamos de eso "y si hubiera" que no hicimos y sabemos perfectamente que no contamos con la valentía suficiente como para hacerlos.

Yo creo que la respuesta es muy simple, porque al fin del día es cuando tenemos ese momento donde solo somos nosotros y nadie más, donde nos permitimos ser vulnerables porque sabemos muy bien que nadie más esta mirando esa parte vergonzosa que luchamos por ocultar día a día con una sonrisa cada vez que salimos al mundo, tal vez porque nos avergüenza o tal vez porque nos aterra, porque el hecho de que alguien conozca tu vulnerabilidad significa que sabe exactamente donde golpear para derrumbarnos con facilidad. Porque al final del día es donde nos permitimos encerrarnos en nuestra propia mente tormentosa llena de ideas sin explorar, llena de escenarios impensables, porque en nuestra mente existe nuestra utopía y nuestro terror, casi como una luz y una sombra que batallan constantemente en busca de un vencedor.

Para que la luz exista, se necesita oscuridad, y esta última existe porque lo hace la luz ¿No es eso demasiado irónico? ¿No es demasiado raro eso de la existencia compartida?

Jungkook siempre supo que la forma en la que se sentía bajo la dura mirada de su padre no era normal, y lo sabe porque conoce lo que es sentirse protegido bajo la cálida mirada de alguien, pero cuando es su padre el que tiene los ojos clavados en el él, vuelve a sentirse una vez más como un pequeño niño indefenso que solo es capaz de asentir y decir "si, señor" a cualquier cosa que diga.

Cada vez que toma un poco de valentía y observa esos ojos fijamente por un segundo se desarma de una forma aterradora, siente que su padre sabe donde golpearlo para derrumbarlo y que no dudaría ni dos segundos en hacerlo.

Siente que de ahoga en un vaso de agua que solo existe en su mente pero se siente tan real que es capaz de asfixiarlo, como ahora que siente que le falta el aire y su respiración se vuelve tan irregular que comienza a emitir un sonido de agitación, e intenta acallarse con todas sus fuerzas pero le es hes imposible, siempre le fue imposible.

—Frena el auto.

Le pide la dulce voz a su lado con autoridad obligándolo a encender las balizas y quedarse a la derecha de la calle apagando el motor del vehículo.

—Jiminnie yo-

Las miles excusas que iba a decir son interrumpidas por unos cálidos brazos que se envuelven con fuerza en su cuello, y como si se tratara de alguna especie de magia su garganta se abre, sus pulmones se llenan de oxigeno, su respiración se vuelve regular y esa calidez, con la que fantaseo cada noche antes de irse a dormir, lo consume por completo causando que las lagrimas empiecen a brotar de sus ojos con una facilidad increíble. Casi como si finalmente algo hubiese sido destapado, como si una compuerta hubiese sido abierta y finalmente todo fuese capaz de salir.

"Así que...así es como se siente"

Esa fue la única frase que invadió la cabeza de Jungkook al descubrir lo que es ser consolado en los brazos correctos, al sentir por primera vez en su vida lo que es desahogarse y mostrarse vulnerable frente a alguien sin ningún tipo de temor, en ese momento, justo en ese instante, le dio a Jimin una pistola cargada apuntando directamente a su pecho, confiando ciegamente en que el chico jamás va a presionar ese gatillo.

—Esta bien llorar, Jungkookie, en los lugares correctos siempre esta bien llorar.

Esas dulces palabras lo obligan a asentir en el hombro empapado de lágrimas de esa persona que lo consolo hace tantos años y justo ahora lo vuelve a hacer.

—Gracias por ser mi lugar correcto.

Es lo único que es capaz de susurrar mientras se aferra con desesperación a esa calidez que invade su pecho, y por un instante desea quedarse así para siempre, que el tiempo se congele justo ahora, que no pase ni un segundo más, porque en este momento absolutamente todo es perfecto.

—Perdon, yo, ya es tarde, ya estoy bien, gracias, Jiminnie.

—No me agradezcas por darte un abrazo, eso es raro, Jungkookie.

Una vez más obtiene esa sonrisa y vuelve a enamorarse, ya perdió la cuenta de la cantidad de veces que se enamoro de esa sonrisa, de esos ojos que lo miran tan directamente y sin una pizca de duda en ello, de esa calidez que solo él posee, ya perdió la cuenta de la cantidad de veces que se enamoro de Park Jimin.

El viaje continua su rumbo, el auto vuelve a pararse frente al edificio donde vive el menor, quien se baja del vehículo luego de dejar un beso en la mejilla del conductor y dedicarle una sonrisa tan hermosa que deja al contrario con el corazón en la mano y en los sentimientos en la boca listos para ser liberados en cualquier momento, pero ese es un tapón que Jungkook se niega a sacar, porque lo acaba de descubrir, encontró algo mucho más aterrador que su padre, encontró el terror a perder esa cálida sonrisa que es capaz de sanar hasta sus heridas más profundas e invisibles, y no esta dispuesto a perder eso por nada en el mundo.

(...)

Con cada piso que sube el ascensor siente como su corazón se oprime más y más en su pecho, pero aún así una pequeña sonrisa se asoma por sus labios, aún es capaz de sentir esa calidez en él, ese consuelo de saber exactamente cuál es su lugar correcto en este mundo, para cuando el elevador se detiene toma una profunda bocanada de aire, las puertas se abre y frente a él aparece esa figura que lo aterra con solo ver su silueta.

Conoce muy bien esa espalda, ese aura gélido que lo rodea, toda su infancia trato de acercarse pero cuando se dio cuenta de que nada de lo que hiciera serviría, empezó a tenerle miedo y anhelo, porque a decir verdad siempre que ve esa espalda tan solitaria se da cuenta de que solo quiere una cosa de esa persona que se hace llamar padre, un abrazo honesto que diga te quiero si necesidad de pronunciar una sílaba.

—Creí que no ibas a venir, Jungkook.

Esa voz suave pero dura al mismo tiempo llega a sus oídos logrando que un escalofrío lo recorra de pies a cabeza, siempre fue lo igual, siempre se dirigió a él de la misma forma, como si solo hubiese nacido con el fin de heredar una empresa, y no como fruto del amor o para ser querido.

—¿No me vas a saludar?

Pregunta en el mismo tono causando que sus ojos se eleven y de inmediato haga una gran reverencia hacía la persona frente a él.

—Buenas noches, Hyunbin.

—Jungkook...

Los pasos del hombre retumban en toda la sala de estar a medida que se acerca más y más hasta que finalmente se detiene justo frente a él.

—...es hora de que superes esa noche, de lo contrario hoy mismo te vas a terminar tus estudios al extranjero.

Ahí esta de nuevo, la sensación de ser a penas un niño que no puede oponerse, se siente débil, no puede defenderse esta desprotegido listo para ser atacado desde todos lados, esta listo para sacrificarse a sí mismo si eso significa que puede seguir viviendo en el mismo lugar que Park Jimin, y no le importa lo que sus siguientes palabras van a significar, no le importa el hecho de saber perfectamente que él no sabe como mentirle a su padre, nada de eso le importa porque justo no ahora no quiere alejarse de lo único que es capaz de hacerlo sentir plenamente feliz.

—Me encontré con él, no era una alucinación como creyeron todos...pero...

Se prepara mentalmente para decir la mentira más grande de su vida, sabe que las siguientes palabras van a marcar su futuro para siempre, sabe perfectamente lo que significa decirlas, pero si es lo que tiene que sacrificar para poder seguir viviendo junto a él, entonces esta dispuesto a sacrificarlo todo.

—...es cierto que lo idealice demasiado, no estoy enamorado de él, solo estaba muy agradecido por la ayuda que me ofreció esa noche, yo estoy enamorado de alguien más.

En cuanto observa los ojos de su padre sabe perfectamente que el hombre no le cree ni un poco, como también se da cuenta de que no le importa, siempre y cuando diga lo que él quiere escuchar, no le importa ni un poco la cantidad de mentiras que le diga, siempre y cuando el resultado sea el que él desea.

—¿De quién?

—Kim Yongsun.

A pesar de que mentía, a pesar de que ambos sabían perfectamente que esas palabras estaban vacías, que no iban acompañadas de ningún sentimiento, a pesar de todo eso esa noche por primera vez Jungkook recibió una sonrisa de parte de su padre, y lo miserable que se sintió al sentirse feliz por eso hizo que cualquier rastro de calidez en él desapareciera por completo.

(...)

Ahí esta él, sonriendo como lo hacía solo en su presencia, ahí se encuentra Jung Hoseok riendo escandalosamente a su lado mientras aplaude con movimientos llamativos y produce esos soniditos graciosos que tanto lo caracterizan.

Se siente extraño, como si estuviese viendo una película que trata de su pasado, de la época más feliz de su vida, y no puede evitar sonreír al verse tan joven, ingenuo, inexperto pero tan feliz, enamorado y honesto.

—Y cuando tengamos nuestra propia casa podríamos adoptar muchos animales, yo voy a ser veterinario y...¿Me estas escuchando?

—Por supuesto que te escucho, solo estaba disfrutando de tu risa.

Ese rojo en esos pómulos que tanto amaba besar, esa sonrisa tímida en esos labios que tanto le gustaba tocar, ese pequeño remolino en su cabello que tanto le gustaba peinar, ese momento que tanto adoraba vivir y si de él hubiese dependido abrían durado para siempre.

—¿Entonces que dije?

—Te prometo que vamos a tener nuestra casa, la vas a llenar de la cantidad de animales que quieras y vamos a vivir juntos.

—¿Lo prometes?

—Es una promesa a mi rayito de sol personal.

—Te amo, Monnie.

Se despierta con la cara empapada de lagrimas, ese sobrenombre que tanto amaba escuchar siempre y cuando saliera de esos labios, se encuentra llorando pero la sonrisa en sus labios al al escuchar resonar ese "Te amo" en su cabeza no desaparece.

Mira el reloj a su derecha, las tres de la madrugada le hacen saber que no va a volver a dormir y que lo que resta del día se va a dedicar a pensarlo a él todo el tiempo y actuar como el robot que es a diario.

Rompió cada una de sus promesas, todas las que les juro que iba a cumplir las rompió por completo, y la que más le duele es la última que le hizo...

"Nunca te ame, Hoseok, te lo prometo"

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Buenoo intensa la cosa jsjsjjs mañana seguro actualizo Closer 👀

PD: EN LA SIGUIENTE ACTUALIZACIÓN REENCUENTRO DEL TAEGI Y JIN Y SUN SE CONOCEN JIJI

TKM VERY MUCHOU💛