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Una vez que terminaron de evaluar los daños del ataque y de atender a los heridos, Stark y Hill comenzaron a planear una estrategia para capturar a Ultron antes de que ocurriera alguna tragedia. Sabían que no podían llevar a los "tres chiflados" a la batalla debido al alto riesgo de que intentaran escapar. Así que con ese argumento, decidieron resguardar a uno de ellos para asegurar su regreso.

Después de analizar sus opciones, concluyeron que Eddie y su 'alienígena' sería la elección más adecuada, gracias a su disposición para seguir el camino correcto. Por eso, tanto él como Loki y Bucky permanecerían en una nave con camuflaje activo, lista para actuar en caso de que la situación se complicara rápidamente.

—¡SINCERAMENTE NO ME GUSTA ESTE PLAN!—la peliverde elevo su tono para que sus amigos la escucharan y no fuera ignorada por el zumbido de los motores.

—¿CUAL PAN?—grito Wade sin lograr entender lo que decía, pero unos segundos después logro 'descifrar' el mensaje.—¡AHHHH!, EL PLAN . . . A MI TAMPOCO ME GUSTA, PERO EL TRASERO DE HIERRO LO DICTO ASÍ.

—NI SIQUIERA EN UN LUGAR TAN RUIDOSO COMO ESTE SE PUEDEN CALLAR.—Venom comento en la mente de Eddie, provocando que rodara los ojos en blanco.—TE APUESTO QUE UNO DE ELLOS REGRESA EN UNA BOLSA DE CADAVER.

—¿POR QUE TAN CALLADO?—cuestiono Deadpool al notar que su amigo regañón se había quedado sin argumentos para hablar sobre las cosas buenas que hacían.

—VENOM ESTA PREOCUPADO PORQUE VAN SOLOS A ESA . . . MISIÓN.—mintió el mayor de los tres chiflados de manera de encubrir los verdaderos pensamientos del simbionte.

—MENTIROSO.—gruño la masa negra intentando tomar el control, pero cuando noto todas las miradas de los Vengadores decidió quedarse en su lugar.

La platica cesó cuando Stark dio ordenes de saltar del avión, su objetivo era buscar cualquier rastro de Ultron en un buque de carga donde existía el trafico de armas. Según los informes de Jarvis podría estar en ese lugar para poder robar el poco vibranium que se encontraba ahí.

Wade salto antes de escuchar las indicaciones sobre como ponerse el paracaídas a lo que Shenzi tuvo que ir tras de él, esperando poder atraparlo con su energía antes de que se fracturara algo. Era la primera vez que podían sentirse libres, el aire golpeando sus rostros como si fuera lo único que importara en ese momento y antes de que se estrellaran contra el suelo. La peliverde logro envolverlos con un humo verde, deteniéndolos por completo.

—¡Esto es mejor que cualquier montaña rusa!—grito Wilson dando vueltas mientras levitaba, casi como si estuviera nadando en el aire.—¡Mira esto! ¡Soy un maldito pez volador!

La peliverde rodó los ojos ante sus comentario, pero antes de que pudiera responder, un gran estruendo sonó detrás de ella, desviando su atención. Thor aterrizo de un movimiento brusco e inesperado para los nuevos integrantes, posiblemente había saltado desde el avión.

—Mierda.—murmuro entre dientes cayendo al suelo de un golpe seco, impactando entre rocas y ramas.

—¡Ouch!—Deadpool se quejó, acostado boca abajo. Intentaba enfocar su entorno de un vistazo rápido—¿Eso fue un aterrizaje forzoso o solo eres terrible usando tus poderes de bruja?

—Mis disculpas, lady Shenzi.—Thor corrió hacía ella, pisando la mano de Wade en el proceso.— No fue mi intención interrumpir tu . . . ¿Cómo lo llama? ¿Magia de humo?

—Bueno, en realidad no tiene nombre. Simplemente es algo que hago.—la peliverde se levanto con ayuda del rubio, quitándose las ramas que se enredaron en su cabello.

Antes de que Odinson pudiera responder, un silbido agudo resonó en el aire. No era necesario que voltearan a ver pasa saber quien era, Iron Man descendía con sus propulsores, aterrizando con elegancia junto a él. Unos segundos después Natasha, Clint y Steve bajaron con paracaídas perfectamente ejecutados.

—¿Creíste que te daríamos incapacidad por fractura?—preguntó Tony, su visor levantándose para revelar una expresión de incredulidad—¿Por qué saltaste sin paracaídas?

—Soy un alma libre, hojalata.—respondió el encapuchado fingiendo que no le dolió el ultimo golpe que se dio.—No necesito alas . . . tengo estilo.

—Lo que tienes es suerte de que ella no te haya dejado morir —murmuró Natasha, cruzándose de brazos mientras lanzaba una mirada a Shenzi.—Aunque tal vez debería de entrenar más, si las distracciones la desconcentran la vida de todos podrían estar en riesgo.

—Estoy trabajando en ello.—Shenzi comento con sarcasmo, siendo consiente de las exigencias de sus compañeros.

—Me parece que no es el momento adecuado para discutir eso ahora.—indico Steve antes de abrirse paso entre ellos, caminando hacia la entrada del buque.

Un pequeño momento de silencio se instalo entre ellos antes de caminar tras Rogers, la mayoría del equipo iba con pasos acelerados, intentando alcanzarlo mientras un dúo de lunáticos iba lo más lento posible. Parecía que sus pisadas pesaban demasiado o solamente querían salir de ese lugar tan lúgubre. 

—¿Te has dado cuenta de que cada vez que seguimos algo con lo que Eddie esta de acuerdo, terminamos metidos en un desastre?—comentó Wade, rompiendo el silencio entre ellos.

—Bueno, tal vez Venom esta intentando convencerlo para deshacerse de nosotros.—secundo la peliverde pasando su dedo uno de las paredes, reuniendo todo el polvo posible antes de hacer una carita enojada en ella.

—Si . . . tienes un punto.—respondió el encapuchado, soltando un bostezo como si estuviera pasando lo más aburrido de su vida.

Sin embargo, antes de otro comentario, un rugido metálico resonó en el lugar cuando Iron Man fue derribado en contra de una pared metálica cerca de ellos, sus propulsores iluminaban la zona mientras se volvía a elevar.

—¡AUCH!, eso tuvo que doler.—dijo Lehnsherr soltando una risa de hiena evitando una transformación animal.

—¿Esa será una señal para atacar?—preguntó Deadpool, riéndose ante las acciones de su amiga.

—No lo creo . . . No, nos pagan lo suficiente.—comenzó Cherry, pero la frase quedó interrumpida cuando una ráfaga de velocidad impactó contra su amigo, lanzándolo lejos de ella.

—¡MALDITO ERISO AZUL!—gritó Wilson mientras rodaba por el suelo, levantando una capa de polvo en el transcurso.

Un hombre de cabello platinado apareció como un borrón a unos metros, deteniéndose justo frente de ella con una sonrisa arrogante. Lo que provoco su enojo, levantó una mano y una bola de energía verde chispeante comenzó a formarse rápidamente. 

Con un movimiento ágil, lanzó la esfera directamente hacia ese hombre, quien no tuvo tiempo de esquivarla por completo. El impacto lo lanzó al otro lado del buque, atravesando un par de barriles que estallaron en pedazos.

—¡Shenzi! —Wade hablo desde su posición, levantando un brazo para llamar su atención mientras intentaba levantarse.—¿Crees que esto amerita una indemnización?

—Idiota.—murmuro la peliverde con una sonrisa al ver que estaba bien . . . en lo que cabe.—Espera ahí, bajo en un segundo.

Sin embargo, antes de que pudiera acercarse a su amigo, una castaño emergió de las sombras, sus manos se movían igual que las de ellas. Podía ver la diferencia en el color de la energía, como si hubieran sido experimento de la misma gema.

Sus miradas cruzaron en un breve momento y como si fuera algún tipo de sentido arácnido. Ambas hicieron pequeñas bolas de energía, viendo una amenaza frente a ellas.

—Me parece que escogiste el lado equivocado.—la otra chica logro decir con un acento totalmente extraño.

—Estas personas no me importan.—confeso Cherry haciendo contacto visual, intentando no distraerse.—Pero lastimaron a quien me importa.

—Lo mismo digo.—la sokoviana dijo antes de arrojar unas cajas metálicas que estaban cerca.

Lehnsherr reaccionó rápidamente, levantando sus manos para desviar los objetos con su propia energía. Las cajas explotaron al impactar contra su barrera, pero la fuerza de cada golpe la hacía retroceder un paso.

Sin embargo, ninguna de las dos se dio por vencida, arrojaban todo lo que tenían a su al rededor e incluso llego un momento donde solo eran golpes de energía. Cualquiera que fuera ajeno de la misión de los Vengadores podría jurar que eran fuegos artificiales.

—¿Necesitan un código verde?—pregunto Bruce a través del comunicador, viendo que habían tardado más de lo habitual.

—¿Qué es un código verde?—cuestiono Shen, volteando su mirada por un segundo. Aún no estaba acostumbrada a usar esos aparatos.

Ese pequeño instante de distracción fue suficiente para que la alterara desapareciera de su campo de visión. Sus ojos comenzaron a buscarla con desesperación, no podía creer que se hubiera escapado. Sin embargo, antes de que pudiera reaccionar sintió una presión en su cabeza.

Dejó escapar un jadeo, llevando una mano a su rostro mientras apretaba los ojos con fuerza. Su mente comenzó a llenarse de imágenes confusas, notando como la castaña se reía a su lado.

—¡No puedes huir!—gritó Shenzi, apretando los dientes mientras corría tras ella, decidida a detenerla.

No quería fallar en su primera misión, fracasar en su nueva 'vida' y no por los Vengadores, si no por Eddie. Había puesto todas sus esperanzas en ellos, creía que podían ser más que simples experimentos, así que sin pensarlo dos veces cruzó la misma puerta que utilizo la otra mujer para escapar.

Sin embargo, sintió que algo dentro de ella se desgarraba. El aire cambió de manera drástica y cuando bajó la vista, se dio cuenta de que ya no era una adulta. Sus manos pequeñas y temblorosas la delataban: era solo una niña otra vez.

—Shenzi, ¿Qué te he dicho sobre no recoger tus juguetes?—pregunto una mujer que estaba arrodillada debajo del sofá.—Juró que la próxima vez que pase . . . los donare a la caridad.

La pequeña levantó su cabeza, encontrándose a una mujer de piel azul, su figura o presencia era algo confusa para ella, debido a que después de tantos experimentos alguno de sus recuerdos habían desaparecido de su mente.

—Debes abrigarte bien antes de salir.—informo Mystique  acomodando mejor el abrigo de la niña.—Aunque no creo que sea seguro salir.

—Pero prometiste que esta vez iríamos a ver a santa.—la versión pequeña de Shenzi se quejo haciendo un pequeño puchero.

—Tiene razón . . . lo prometimos.—replico Erik entrando a la sala, agachándose a la altura de su hija.—Además, se portó muy bien este año.

—Solo un par de horas.—la piel azul de Darkholme, comenzó a cambiar, transformándose en un rostro humano.

—¡Eres la mejor!—exclamó la niña con emoción, aferrándose con fuerza a su madre.

—Bueno, entonces corramos antes de que se arrepienta.—el hombre intento bromear, recibiendo una mirada seria de parte de la mujer.

La escena parecía un sueño, un recuerdo lejano y olvidado que cobraba vida con cada detalle. Como si fuera algún tipo de magia, la escena cambió de golpe. 

Ahora estaban en medio de una ciudad caótica, con gritos y explosiones por todo lado. Shenzi no entendía del todo qué estaba pasando, pero el miedo en su rostro lo decía todo.

—¡Mamá! —gritó la peliverde cuando vio a Mystique ser empujada por un ser extraño, su cuerpo atravesado por varillas metálicas.

La figura de Raven, inmóvil y pálida, parecía desvanecerse ante los ojos de todos. Su piel regreso a su color original, provocando el pánico entre los demás. Las lágrimas comenzaban a correr por sus mejillas mientras su pecho se llenaba de un dolor desgarrador.

—Corre . . . —susurró Darkholme con su último aliento mientras sus ojos estaban clavados en los de su hija.

—¡No!—Shen intentó avanzar, pero su padre la tomó de la mano con fuerza.

—Tenemos que irnos, ahora.—ordenó Lehnsherr, arrastrándola prácticamente entre la multitud. Intentaba no mirar a su hija, necesitaba verse fuerte ante la situación.

La peliverde no tuvo tiempo de protestar, solo comenzó a correr esquivando a las personas que caían entre los empujones, todos intentaban huir de algo que apenas podía distinguir entre las sombras.

El ruido era ensordecedor, gritos, explosiones, el rugido de alguna criatura enorme que estaba arrasando la ciudad. 

—¡Papá! —gritó, cuando una de esas criaturas lo atrapo, separándolos en medio del caos.

Desesperada, corrió lo más rápido que pudo, su visión borrosa por las lágrimas y el miedo oprimiendo su pecho. Los pasos a su alrededor resonaban como tambores, pero ella seguía adelante, tratando de encontrar un lugar seguro.

Finalmente, se detuvo en un callejón oscuro, su pequeño cuerpo temblando mientras las lágrimas caían incesantes. Se deslizó detrás de un bote de basura, abrazándose a sí misma mientras se hacía una bolita, buscando consuelo en la soledad.

Su mente no podía procesar todo lo que había ocurrido, pero una cosa era clara: sus padres se habían ido y ahora estaba sola. La desesperación de ser encontraba por esos cosas creció hasta que sintió un peso en sus hombros, seguido de un movimiento brusco.

—¡Bruja, despierta!—exclamó Wade, su tono era una mezcla extraña entre la preocupación y su habitual burla.

—Si alguien sigue de pie tenemos que irnos.—Clint dijo a través del comunicador, sin conocer la gravedad de lo que había pasado.

—¿Qué demonios te hicieron?—preguntó Deadpool con un rostro lleno de miedo genuino. No entendía nada de lo que provoco la otra mujer.

Cherry intentó abrir la boca para poderle contar que fue lo que vio, pero no logro pronunciar ni una sola palabra, en cambio un sollozo salió de sus labios, algo que la hizo temblar aún más. 

—Ok . . . ok . . . Está bien, está bien, no hables.—murmuró Wilson mientras la levantaba en brazos, sosteniéndola con cuidado pero firmeza.

No hubo alguna protesta de su parte, no dijo nada. Simplemente se dejó llevar, sus brazos colgando a los lados como si todo el peso del mundo la hubiera aplastado. Mientras bajaban las escaleras del lugar lograron a ver a Natasha en el mismo estado que Shenzi.

—¿También ella?—cuestiono Barton intentando que Romanoff saliera de su propio trance.

—Jamás la había visto así, ni siquiera cuando la sedaron.—confeso el encapuchado, sorprendido que su amiga se dejara cargar sin soltarle un golpe.—Estará bien, ¿Verdad?

—Eso espero.—contesto el castaño antes de intentar levantarla para que pudieran ponerse a salvo.

—Natasha . . . me encantaría un arrullo.—la voz de Stark resonó en todos los comunicadores del equipo.

—No creo que se pueda.—respondió Clint antes de imitar las acciones del otro hombre para cargarla.—No por un rato . . . Todo el equipo sufrió daño, nadie puede ayudarte.

—Estamos bien, no recibimos ninguna señal para intervenir.—hablo Eddie desde la otra nave camuflajeada, viendo como Loki dirigía el vehículo.

Los heridos psicológicamente fueron acomodados en la nave en la que habían llegado. Nadie hablaba; solo tenían la mirada perdida, como si aún no pudieran procesar lo que habían presenciado.

Todo era un completo silencio, hasta que el resto del equipo apareció. Al parecer, Hulk logró destrozar la segunda nave , por lo que tuvieron que regresar caminando.

—¿Qué pasó? —preguntó Eddie abriéndose paso entre los presentes, empujando sutilmente a Bucky quien veía el estado de todos.

—No lo sabemos, ninguno de ellos a hablado.—respondió Wade intentando moverse del lugar, pero ella se acurrucó contra él, como una niña asustada buscando refugio en medio de una tormenta.

—Cherry . . . mírame.—ordeno Venom con un gruñido tomando su mandíbula con fuerza. Dándole algunas sacudidas para que reaccionara antes de ver fijamente al Dios de las mentiras.—Tu . . . eres una especie de brujo . . . ¿Puedes ayudarla?

—Bueno, puedo intentarlo.—murmuro Loki sintiendo una extraña sensación al ver el estado vulnerable de la chica, puso una mano en su mejilla intentando sentir algo.—Necesita tiempo, algo en su mente está roto ahora mismo.

Wade asintió lentamente antes de apretarla más hacia su pecho como si quisiera protegerla de cualquier cosa que la rodeara. Estaban tan metidos en su sentir que ni siquiera prestara atención a lo que dijo Barton o a las miradas que le dedicaban James y Loki.

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Después de un viaje que para la mayoría pareció eterno, finalmente llegaron a lo que Clint llamaba "el Refugio". Afortunadamente, la peliverde estaba de mejor ánimo; tanto así, que decidió bajarse de la nave por su cuenta, esperando que nadie le preguntara sobre lo ocurrido, ya que era un tema del que no quería hablar.

Todo el equipo comenzó a caminar hacía una casa rustica que estaba en medio del bosque, dejando claro que habían llegado a su destino. 

Shen rechazó cualquier ofrecimiento de ayuda, decidida a mantener su postura intimidante, mientras escuchaba los quejidos de Venom, quien lamentaba que ella no aceptara su "caballerosidad".

—¿Dónde estamos?—preguntó Thor mirando el ambiente tan hogareño, sin perder la vista de su hermano, quien iba totalmente callado.

—Un refugio.—menciono Tony tratando de recordar lo que dijo Barton con exactitud.—Eso espero.

Apenas cruzaron el umbral, los tres chiflado lograron ver una pila de juguetes en un rincón. Viendo como los demás pasaban esas señales por alto.

—CIELO.—Hawkeye anuncio dejando al resto del equipo en total confusión ante sus palabras.—¡YA LLEGUE!

—Mierda . . . ¿Por que todos los hombres sexys deben de tener pareja?—murmuro Wade provocando que la atención se desviara hacía él.

—No vengo solo.—la voz de Clint hizo que regresaran la mirada, acercándose a una mujer embarazada.—Lo siento, no pude avisarte.

—Es otra agente, obviamente.—dijo Stark, esperando que en cualquier minuto se revelara una especie de broma o simulación.

—Caballeros . . . ella es Laura.—informo el castaño presentando a su esposa, dejando sorprendidos a los Vengadores originales.

En un momento Shenzi se desconecto de la conversación que ocurría en ese momento, porque escucho la voz de su madre en su cabeza. Al parecer aún no pasaba del todo el efecto de lo que fuera que le paso y cuando por fin salió de su disociación logro notar a dos niños en la escena.

—Necesito un poco de aire fresco.—susurro Lehnsherr, abriéndose paso entre los demás.

—¿Estará bien?—cuestiono Bucky haciendo contacto visual con los otros dos mutantes, quienes la siguieron con la mirada.

—A ti que te importa.—gruño Loki volteando los ojos en blanco antes de alejarse un par de pasos de ellos.

—Bueno, creo que si . . . ella siempre esta bien.—aseguro Eddie con una sonrisa ladilla en su rostro, creyendo que después de todo lo que vivió eso no cambiaría nada.

—¿No es malo que siempre este bien?—James era consiente de todo lo que podría hacer HYDRA para romper a una persona.

Sin embargo, la conversación se interrumpió de manera abrupta cuando varios miembros salieron de la casa para darle tiempo a la pareja de que platicara de los asuntos pendientes.

Algunos se dedicaron a perder el tiempo paseando por ahí y otros buscaban como podían ayudar con cosas del hogar. Mientras que Shenzi estaba sentada en el pasto tenía las piernas cruzadas y la mirada fija en un punto perdido en el horizonte. Cerraba los ojos de vez en cuando, intentando visualizar a esa criatura que había visto en sus recuerdos. Pero, por más que lo intentaba, no lograba concentrarse.

—¿Quieres agua?—preguntó una voz masculina desde su espalda, haciendo presencia.

Al abrir los ojos, giró ligeramente para encontrarse con Bucky, quien le ofrecía una botella de agua. Su expresión era neutral, pero había algo en su postura que transmitía cautela.

—Gracias.—respondió Cherry de manera cortante y fría. Sabía que necesitaba ser precavida con su cercanía, debido a que anteriormente lo había lanzado de un edificio.

James frunció el ceño por la actitud de la mutante, pero no dijo nada. Al contrario se sentó junto a ella, dejando un espacio para que no se sintiera invadida. Dejando que un silencio incomodo se instalara entre ellos, cada uno inmerso en sus propios pensamientos. 

Sin embargo, un fuerte ruido los hizo sobre saltar en su lugar, haciendo que giraran la cabeza al mismo tiempo y vieron como Steve y Tony estaban discutiendo mientras cortaban troncos.

—¿Qué demonios están haciendo? —murmuró Barnes negando con la cabeza, creyendo que era un intento de demostrar su fuerza.

—¡SERIA MÁS FACIL SI TE QUITAS LA CAMISETA!—grito la peliverde atrayendo la atención del otro soldado, provocando un leve sonrojo de él.

—Supongo . . . que si estas haciendo bromas, ya no te afecta lo que paso.—comento el castaño algo molesto ante la interacción que presencio, no sabía porque, pero algo lo hizo incomodar.—¿Quieres hablar de lo que viste?

—No.—ella respondió rápidamente, su tono seco como el clima del desierto.

—Escucha . . . solo dame una opor . . .—Barnes intento expresar su genuina preocupación. Sin embargo, fue interrumpido.

—No necesitas ser amable conmigo porque crees que es una obligación para coexistir.—Shen corto la conversación de manera abrupta.—Somos compañeros en este circo de monos y eso no significa que seamos amigos.

—Estas equivocada.—confirmo Bucky intentando encontrar el origen de su hostilidad, sabía que tenían roces después de lo que paso en Sokovia, pero esperaba que ya fuera superado.—Solo creo que necesitas amigos aquí.

—Ya tengo dos, y créeme, con eso es suficiente.—informo la peliverde desviando su mirada hacía Wade y Eddie. 

Notando como el menor estaba molestando a Brock, lanzándole comentarios ridículos hasta que Venom tomó control, empujándolo lejos como si fuera un muñeco de trapo.

—Sé lo que dicen de nosotros.—Cherry añadió, su tono más bajo pero lleno de sarcasmo.—"Los tres chiflados", "El trio de lunáticos" y mi favorito "la chica zombi". Así que no finjas simpatía, no te queda bien.

James abrió la boca para contestar, pero antes de que pudiera decir algo, la joven se levantó de golpe. Sus ojos brillaron con un verde intenso antes de que su cuerpo comenzará a cambiar. En cuestión de segundos, en lugar de la mutante, había un perro de tamaño considerable, con unas pequeñas manchas del mismo tono verdoso en el pelaje.

—Muy madura niña.—el castaño negó con la censa 

El canino ladró una vez a manera de reproche antes de salir disparada hacia Wade, que estaba ocupado levantándose del suelo después del empujón de Venom. Sin previo aviso, saltó sobre él y con una mordida logro quitarle la máscara.

—¡OYE! ¡Eso no se hace!—protestó el hombre del traje rojo, comenzando a correr detrás de ella tratando de recuperar su máscara.—¡Regresa aquí, perro malo!

—Deberíamos detenerla, no se si este lista para correr.—el simbionte hablo en el interior de Eddie recordando su estado hace unas horas.

—¿Desde cuando te volviste tan sentimental?—se quejo Brock soltando una risa ante el lado protector del simbionte.

—Cállate.—ordeno la masa negra antes de comenzar a ignorarlo.

—¡Cuando te atrape, te convertiré en una alfombra verde! ¡Y la pondré frente a mi chimenea!—advirtió Wilson viendo lo ágil que era su amiga en una forma tan diminuta.

Lehnsherr corría despreocupada en su forma canina, zigzagueando por el patio mientras que su amigo la seguía mientras lanzaba maldiciones entre risas. Sin embargo, en uno de sus giros bruscos, chocó de lleno contra alguien. Cuando levantó la vista, su hocico casi tocaba las botas negras de Loki.

—¿Es que siempre debes comportarte como una tonta?—espetó Laufeyson con un tono gélido y despectivo.—En lugar de jugar como un cachorro sin propósito, deberías estar entrenando. Tal vez así aprenderías a no distraerte en las misiones.

—¡Oye, cuernos de oro! Bájale dos rayitas, ¿Quieres?—Deadpool intervino claramente enojado de que interrumpiera el juego.—No es nuestra culpa que tú nunca te diviertas.

—Es inútil desperdicies tu . . . tiempo en defender a alguien que no puede controlar sus poderes y cuya utilidad en los Vengadores es tan insignificante como la de un simple midgardiano.—El Dios de las mentiras se burlo de su intento fallido, perder ante un igual era un golpe bajo.

El canino gruño un par de veces, no quería perder el tiempo en regresar a su forma original, así que en lugar de responder verbalmente, así que corrió hacia el Asgardiano y comenzó a morder su capa con entusiasmo y rabia.

—¡Suelta eso de inmediato!—exclamó Loki, con un tono lleno de enojo mientras trataba de apartarla.—¿Tienes idea de lo que estás destrozando? ¡Es cuero asgardiano, imbécil!

Pero Shenzi no cedió, con un último tirón, logró rasgar un trozo pequeño de la capa, lo que hizo que el Dios perdiera la paciencia. En un movimiento rápido, la agarró por el lomo y la lanzó con fuerza lejos de él. El impacto fue más fuerte de lo que esperaba. 

Al golpear el suelo, soltó un chillido canino que hizo que todos en el patio se volvieran hacia ellos. Eddie, quien estaba observando desde la distancia, dejó que su amigo tomara el control y en cuestión de segundos, el simbionte emergió abalanzándose sobre Loki.

—Otra vez tu . . . Te dije que no la tocaras.—rugió el simbionte, empujando a Laufeyson con tal fuerza que el dios impacto con un árbol.—¿Estas bien?

La peliverde regreso a su forma humana de un movimiento rápido como si esperará que el dolor desapareciera al instante y al terminar logro ver la desviación de su muñeca. Negó varias veces con la cabeza, intentando no gritar de dolor, dejando que estaba más que claro que necesitaba aprender a manejar sus acciones cuando estaba enojada.

—Déjame verla.—pidió Bucky corriendo hacía ella, tenía el conocimiento táctico sobre ese tipo de lesiones.

—Estoy bien . . . sanara en un par de horas.—informo la chica recordando la curación acelerada que poseía.

—Está chueca.—murmuro el soldado viendo que posiblemente sanaría de manera inadecuada.—Voy a acomodarla.

—¿Qué? ¡No, no, no!—negó Cherry, intentando retirar su mano del agarre del hombre. Pero él no lo permitió. 

—Shenzi, mira.—Barnes intento distraerla de la pelea de los dos 'chiflados' restantes con Loki.—Si no la arreglo ahora, te va a doler más después.

—Está bien, pero hazlo rápido.—concordó la mujer mordiendo el cuello de su playera para no gritar en el proceso.

—Cuenta hasta tres.—James indicó mientras posicionaba sus manos y le hacía una señal a Steve para que se acercara a sostenerla.

—Uno . . . dos . . .—Lehnsherr estaba contando hasta que sintió un tirón fuerte, escuchando un crujido de sus huesos.—¡Maldito idiota!—gritó, golpeando su pecho con su mano libre, aunque el impacto fue débil.

—Lo siento, si llegabas al tres, había una posibilidad de que corrieras.—confeso Bucky en voz baja, dejando que ella se apoyara en él mientras el dolor disminuía lentamente.

—Tengo que dejarlos.—Steve soltó la espalda de la chica antes de darle una media sonrisa a su amigo.—Necesito separarlos antes de que destruyan todo el patio.

—Si puedes hacer algo por mi.—murmuro Shenzi entre jadeos, intentando ya mover su mano.—Rómpele la nariz o simplemente desaparécelo . . . Thor no esta para impedirlo.

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