Después de aquellos macabros hechos en los que nunca se pudo vincular a Hobi, Sowung fue condenado a permanecer dentro de una institución mental como uno de los más peligrosos, donde no podía ni recibir visitas, estaría aislado por el resto de su vida y ese sería su castigo, del rector nadie nunca supo nada, desapareció sin dejar huella y todos sabían que estaba huyendo porque era parte de todo, pero nadie tenía idea de dónde buscar a excepción del señor Kim y Hobi, ellos ahora sonreían con tranquilidad nuevamente y sabían que la universidad ahora tendría nueva administración. Por su parte y más importante, Emma y Hobi habían comprendido que la unión entre ellos era algo inevitable, se habían enamorado gracias al recuerdo de Taehyung y este no se oponía porque los entendía muy bien, por eso aceptaron la propuesta del señor Kim, de irse al extranjero a estudiar.

─Debería acompañarnos, no creo que Taehyung quiera que se quede solo o la señora Kim, mi madre y usted deberían venir con nosotros ─decía Hobi mientras tomaban el desayuno donde hablaban sobre la futura partida de ambos al extranjero a París donde siempre hacía que las cosas mejoren.

─Yo debo quedarme con mi hijo y mi esposa, debo llevarles flores cada vez que haya un evento especial o cuando yo necesite ver su tumba, porque es mi hijo y siempre lo voy a amar al igual que mi esposa ─agregó aquel hombre que parecía volver a sonreír viendo a Hobi realizarse. Los Kim siempre estarían juntos, el señor Kim sabía que su amada familia lo esperaba para cuando ese día llegara y como si lo presintiera, mientras buscaba la ropa que iba a usar esa mañana luego del desayuno, hablaba con Taehyung quién lo veía con una sonrisa de amor de hijo, sabía que su padre no podía verlo ni escucharlo pero le gustaba escuchar que le hablara.

Era así, Taehyung que había completado la misión que se le había permitido llevar a cabo, pero Hobi tenía que preparar todo para su próximo viaje, por eso lo acompañaba y muchas veces los observaba de lejos cuando Emma y Hobi se reunían, se sentía muy bien sabiendo que aquellos a los que tanto amaba ahora estaban buscando y encontrando su camino, justamente era una tarde en la que ahora enamorados habían salido a caminar cerca del río Han, Taehyung los veía en la distancia y sentía que su alma estaba bien ahora.

─Tienes que finalizar tu viaje, joven alma llena de bondad ─dijo una melodiosa voz, un joven de cabello gris, alas blancas y túnica del mismo color le hablaba llenándolo de una paz indescriptible.

─ ¿Acaso eres un ángel? ─preguntó Taehyung sorprendido por la apariencia de aquel ángel que perfectamente podía pasar como un joven de su edad ─ ¿Eres quién me permitió quedarme para ayudar a mi amigo? ─cuestionó nuevamente el joven Kim, cuyo rostro mostraba una dulzura con gratitud.

─Soy tu ángel de la guarda, aquel al que solías recurrir cuando querías ganar algo en la vida, las deidades te permitieron quedarte porque sabían que las leyes y justicia de los humanos iban a ser pocos para castigar aquellos que tanto mal hacían, mi nombre es Jimin y debo guiarte a tu última morada en la que por fin tendrás la paz que mereces y estarás con tu amada madre protegiendo a tus seres queridos ─agregó aquel ángel que era simplemente hermoso, con una belleza masculina tan celestial, Taehyung no se atrevió a contradecir nada de lo que ahora le decía pero tenía una última petición para antes de irse por completo de aquel extraño limbo en el que estaba.

─Por favor permite que me despida de mi amigo, deja que le hable por última vez y que sepa que estaré bien, no quiero que se preocupe por mí y quiero que sepa que siempre estaré con él, aunque no me pueda ver, es algo que creo que tanto él, como yo nos merecemos, por favor, dame esa oportunidad ─pidió humildemente aquella noble alma que siempre hizo el bien mientras vivía.

─Tienes mi autorización, tienes hasta la medianoche para hacerlo, entonces yo vendré por ti y te llevare a la eternidad donde esperaras a volver en la siguiente vida, ahora disfruta de tu último día en la tierra ─dijo para luego desaparecer así como había llegado. De ese modo Taehyung se preparó para decirle adiós definitivamente a su mejor amigo, sabía que iba doler pero era momento, espero a que llegara la noche y sin que el señor Kim supiera, estuvo con él en el despacho, amaba tanto a su padre que deseaba abrazarlo por última vez, pero le quedaba el consuelo de saber que el último abrazo que recibió antes de morir era el suyo, le sonrió como despedida y salió del despacho.

─Hobi... me tengo que ir amigo... ─dijo Taehyung ahora visiblemente afectado, con su mirada al suelo.

─ ¿De qué hablas amigo?, sabes que no puedes irte porque te necesito ─respondió Hobi con una sonrisa que solo trataba de ahogar el sentimiento que aquella alma le transmitía.

─Mi ángel viene por mí a medianoche, quiero despedirme de ti pero no olvides que aunque no me veas, tanto tu padre como yo vamos a estar ahí para ti, siempre voy a escucharte, amigo, sigue adelante y disfruta de cada día como si fuera el último, sabes que te amo, hermano ─expresó Taehyung sin levantar la mirada porque no quería ver a su amigo mal.

Ante aquellas palabras Hobi no pudo más que dejar que sus lágrimas corrieran libremente, su amigo se iba para siempre, no volvería a verlo como ahora, pero merecía descansar y disfrutar de la gloria que se había ganado, se dejó caer sobre la cama de una manera muy lenta y con una expresión analítica ─dile a papá que lo amo, por favor si vuelves pronto en otro ser humano, búscame y dime que eres tú, porque yo seré tu amigo siempre, seré tu hermano, también te amo ─dijo Hoseok entre lágrimas, eran las 11:58 y el ángel llegaría pronto, ellos tenían un par de minutos para despedirse. Y pese a la pena ambos se sonrieron de una manera nostálgica.

Cuando la hora llegó, Hobi vio cómo su amigo se llenaba de luz, su atuendo negro que había usado todo este tiempo se volvía blanco, entonces vio la silueta del ángel que lo escoltaría al cielo y no pudo más que llorar, se despidieron por última vez, luego los seres empezaron a caminar subiendo unas escaleras que parecían no tener fin y vio como poco a poco la luz se fue extinguiendo, Taehyung se había ido pero le había dejado todo para que siguiera con sus sueños, para que fuera feliz y se lo había suplicando siempre, su alma ahora descansaba y aunque doliera Hobi lo entendía, porque la amistad entre ellos sobrepasa las barreras de la vida y la muerte.

La justicia por fin había llegado aunque no de la manera más ortodoxa, la paz ahora reinaba aunque les había cobrado precios muy caros.

Hobi consiguió viajar a París, terminó su carrera y se convirtió en un prestigioso arquitecto, vivió una vida llena de amor y dio lo mismo a quienes lo rodearon, hizo una vida de familia y dio paz y felicidad a los últimos días del señor Kim, fue igual con él, sus hijos les dieron unos últimos días de paz y felicidad cuando su tiempo llegó, Emma se fue primero pero Hobi cuidó de sus nietos unos días más, cuando el día de partir de este mundo llegó, pudo ver de nuevo a su amigo, volvieron a tener aquellas conversaciones que tanta tranquilidad les daba y eran felices, porque eran inseparables, ese es el valor de la verdadera amistad.

FIN