❝ELLA BUSCA VENGANZA. MI BEBÉ, ELLA ESTÁ BUSCANDO VENGANZA.❞

DREW FOSTER es una talentosa mecánica, que le gusta vivir una vida tranquila, pero todo cambia cuando su mejor amiga muere en circunstancias sospechosas tras un accidente. Desesperada por encontrar respuestas, se convence de que KIAN GRAYSON, conocido en las carreras ilegales como RAZOR, y JUNGKOOK JEON, conocido como VIPER, están involucrados en la tragedia.

Decidida a desvelar la verdad y a hacer que paguen por lo que le arrebataron, DREW se adentra en el peligroso y salvaje mundo de las carreras ilegales, donde la velocidad y la adrenalina son tan intensas como los secretos que ocultan RAZOR y VIPER. Lo que comienza como una fría misión de venganza se convierte rápidamente en un juego mortal de emociones y tentaciones. Mientras se acerca cada vez más a los dos hombres, DREW se ve atrapada en una maraña de deseo y peligro, sintiendo cómo su cuerpo responde a la atracción arrolladora que despierta VIPER. Un hombre que no solo desafía sus principios, sino también todas las reglas que había creído seguir.

A medida que las carreras se vuelven más intensas y los sentimientos más peligrosos,
DREW deberá decidir si sigue adelante con su plan con carreras de venganza, enfrentando a los dos hombres que alguna vez fueron aliados o sucumbe al poder de la velocidad, la pasión y los oscuros secretos que rodean a JUNGKOOK.

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❝SUS MANOS ALREDEDOR DE MI CUELLO. JÓDELO TODO Y SERÁS EL PRÓXIMO.❞

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❝VOY A ENCENDERLA HASTA QUE ELLA ESTÉ EMPAPADA.
EL DIABLO LLAMÓ Y ELLA BUSCÓ VENGANZA.❞

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RACES OF REVENGE

INTRODUCCIÓN

La luz dorada de la tarde se colaba a través de las cortinas, bañando la habitación en un resplandor suave pero ardiente, como si el mismo sol fuera testigo de lo que ocurría entre ellos. Drew y Jimin yacían sobre la cama, ella sobre él, sus cuerpos desnudos pegados en una entrega total. Cada movimiento de ella era lento, pero cargado de una fuerza sutil que lo hacía imposible de ignorar, buscando la cercanía, buscando algo más allá de lo físico. Sus respiraciones se entrelazaban, se volvían un eco que llenaba la habitación, el aire denso con el ritmo de sus cuerpos. Los dedos de Drew se hundían en la piel de su espalda, dejando marcas invisibles que hablaban de una posesión silenciosa. Cada gemido que escapaba de sus labios, tembloroso y sofocado, se sumaba al susurro de la pasión que parecía envolverlos por completo. Los movimientos de él eran igualmente demandantes, pero de una forma más contenida, como si estuviera luchando por no perderse en la intensidad de lo que estaba sucediendo.

El sol, al caer, lanzaba sombras suaves sobre sus cuerpos, pero no podían ignorar la intensidad que crecía entre ellos, como una marea que, a pesar de lo que la tarde parecía sugerir, no se detenía. En ese espacio, en ese momento suspendido, sus cuerpos se movían al unísono, una danza silenciosa que los absorbía por completo. No eran conscientes de nada más, solo de la urgencia de la conexión que se fortalecía con cada segundo, con cada roce de piel. Los gemidos de Drew se intensificaron, su respiración irregular al compás de las embestidas de Jimin, que cada vez se volvían más frenéticas.

—Jimin —Su voz salió quebrada, llena de deseo y necesidad. Sus ojos se encontraron con los almendrados de él, pero no pudo mantenerlos allí. Necesitaba más, algo que no lograba describir—, más...

La observó, sus ojos oscilando entre el deseo y una desesperación silenciosa. La forma en que su cuerpo respondía a cada uno de sus movimientos era un reflejo de su propia ansiedad. Se inclinó hacia ella, su respiración caliente acariciaba su piel mientras sus caderas aceleraban el ritmo, apretando sus movimientos, haciendo que ella jadease sin control, su cuerpo apretándose contra el suyo en un impulso instintivo y sus dedos se aferraban a su piel como si fuera la última vez que lo tuviera, como si necesitaran ese contacto para existir.

Drew se arqueó hacia él, su cuerpo contrayéndose en un esfuerzo por acercarse aún más, por perderse por completo en la sensación. La calma de la tarde ya no existía, reemplazada por una energía cruda y salvaje que solo los dos entendían. La urgencia en sus gestos reflejaba lo que ambos sentían, un deseo imparable que los arrastraba hacia el mismo punto de no retorno.

Cada palabra se escapaba como un suspiro, mientras su cuerpo se tensaba, a punto de ceder a la intensidad de lo que estaba por venir. En ese instante, sus cuerpos se movieron como uno solo, un frenesí de deseo y necesidad. Drew cerró los ojos, su cuerpo ardiendo, mientras la explosión de sensaciones la arrastraba, dejándola completamente pérdida en el clímax. Un grito ahogado se escapó de sus labios, su cuerpo temblando encima de Jimin. La presión de la explosión se desbordó en un estallido de sensaciones. El calor recorrió cada rincón de su ser, deshaciendo todas las barreras, mientras él siguió moviéndose con un ritmo frenético, buscando su propio punto de quiebre. Y con un último suspiro, se unió a ella, su cuerpo convulsionando en un clímax compartido, sus respiraciones entrelazadas, colapsando uno sobre el otro, exhaustos pero satisfechos.

El aire, cargado de sudor y deseo, comenzó a calmarse lentamente. La habitación, que fue testigo de su entrega, volvía a adquirir la tranquilidad de antes, aunque ahora todo se sentía diferente. Aún temblorosa, descansaba sobre él, su respiración todavía irregular, mientras sus manos buscaban aferrarse a su piel, como si temiera que todo eso pudiera desvanecerse. Jimin, agotado pero sereno, acarició su espalda con suavidad, en un intento de devolverle algo de calma. Sin palabras, solo el sonido de su respiración compartida llenaba el espacio entre ellos, mientras el tiempo parecía detenerse por un breve momento. Su mente, sin embargo, no estaba completamente en el presente; pensaba en la venganza que estuvieron planeando durante tanto tiempo.

—Espera un momento —dijo, levantándose de la cama con un suspiro, sin apartar los ojos de ella.

Caminó hacia el baño para deshacerse del condón usado y mientras el sonido del agua llenaba el espacio, Drew permaneció quieta, respirando profundo, sintiendo una mezcla de confusión y ansiedad. La cercanía con él fue un alivio momentáneo, pero ahora las sombras de la venganza se cernían sobre ella, y no sabía si estaba lista para todo lo que eso implicaba.

Al cabo de unos minutos, Jimin salió del baño, su cuerpo delgado pero musculoso moviéndose con gracia mientras buscaba el bóxer que dejó tirado en el suelo. Al colocárselo y sentarse en la cama junto a la morena, la cercanía permitió que ella observara su rostro con mayor detalle. Su piel clara parecía casi luminosa bajo la suave luz de la mañana, y sus ojos almendrados, oscuros y cautivadores, la miraban con una mezcla de curiosidad y tranquilidad. Las pestañas que enmarcaban su mirada parecían suavizar su expresión, mientras que los pómulos altos y la delicada curva de su nariz añadían un toque refinado a sus facciones. Sus labios, ligeramente entreabiertos, eran carnosos y rosados, como si guardaran palabras que aún no se pronunciaron. Con su cabello castaño húmedo cayendo en mechones desordenados sobre la frente, emanaba una calma que contrastaba con la agitación interna de Drew.

—Tenemos que hablar de lo que viene —mencionó, su tono más serio que antes—. Lo que estamos haciendo no es solo por la amiga que perdimos, es por justicia. Razor y Viper tienen que pagar —ella asintió con incertidumbre, todavía no comprendiendo bien en qué se estaba metiendo, mientras que él conectó sus miradas, su expresión dura y decidida—. Ya te has metido en el taller, y has logrado acercarte a Ansel, el mejor amigo de Viper. Eso te da acceso, te da la oportunidad de descubrir todo lo que necesitamos saber.

Se sintió incómoda. Estaba allí para vengar la muerte de su amiga, Zara, sí, pero también sentía el peso de la manipulación. Se sentía atrapada entre la lealtad a Jimin, su amigo de toda la vida, y el peligroso juego al que se estaba viendo arrastrada. Aún no estaba segura de si podía manejarlo. Viper, el hombre que, en su mente, representaba todo lo que salió mal con el mundo.

—No es solo cuestión de acercarse, es cuestión de sobrevivir —recalcó tomándole la mano, la mirada firme—. Vas a ser clave en esto. Ansel confía en ti, y eso te da la ventaja.

Drew suspiró, su estómago retorcido por la tensión. Aunque sabía qué era lo que tenía que hacer, no podía evitar preguntarse si esto la cambiaría para siempre. El plan de venganza estaba en marcha, y no había vuelta atrás.

—No sé si soy lo suficientemente fuerte —murmuró, más para sí misma que para él.

—Eres más fuerte de lo que crees. Esto es solo el principio. Vas a enfrentarte a ellos, pero no estarás sola —la miró con seriedad, como si pudiera ver a través de sus inseguridades, pero su voz se suavizó un poco—. Vamos a acabar con ellos, no solo por Zara... sino también por nosotros mismos.

Cerró los ojos, tomando una respiración profunda. Ya no había marcha atrás. La venganza comenzaba a tomar forma, y la atracción por la justicia, por la necesidad de ver a Razor y Viper pagar por lo que hicieron, llenaba cada fibra de su ser. Jimin la miró con firmeza, una determinación visible en sus ojos. Aunque fue el primero en sugerir la venganza, sabía que el plan no dependía solo de él, sino también de sus propios pasos.

—Yo me voy a encargar de algo importante mientras tú estás en el taller...

—¿De qué hablas? —preguntó, sin poder disimular la ansiedad en su voz. Sabía que Jimin no sería tan tranquilo si no estuviera planeando algo arriesgado.

Se reclinó hacia atrás en la cama, sus manos entrelazadas detrás de su cabeza mientras observaba el techo. Parecía absorto en sus pensamientos, pero ella sabía que su mente trabajaba a mil por hora.

—He estado siguiendo de cerca a Razor. Ya sabes que no es solo Viper el que está involucrado en todo esto —explicó, su tono grave y calculador. Drew lo miró, expectante, sintiendo un nudo en el estómago. Sabía que todo esto era más grande de lo que imaginó—. Razor tiene conexiones que van más allá de lo que cualquiera podría imaginar, y si quiero derribar todo su imperio, voy a necesitar algo más que solo tus esfuerzos en el taller y las carreras.

Asintió lentamente, dándose cuenta de la magnitud de lo que él estaba diciendo. Razor no era solo un corredor, era un jugador clave en este juego peligroso, y para enfrentarlo, necesitarían más que simples estrategias.

—Entonces, ¿qué vas a hacer?

—Me voy a mover bajo el radar. Mientras tú te adentras más en ese mundo, yo estaré investigando a fondo las conexiones de Razor —sonrió con malicia, una sonrisa que no transmitía ningún tipo de dulzura, solo pura determinación—. Tienes que mantenerte cerca de Ansel y Viper, pero yo voy a hacer lo mío. Ya estoy en contacto con algunas personas... Información clave sobre los negocios de Razor.

Frunció el ceño, no del todo segura de en qué consistía el plan de Jimin, pero sabía que, de alguna forma, debía confiar en él. Después de todo, siempre estuvo a su lado.

—¿No es demasiado peligroso?

—¿Peligroso? Es lo único que se necesita para desmantelar lo que ellos han construido. Si todo sale bien, podré acercarme a los lugares correctos sin levantar sospechas —la miró con una leve sonrisa, casi como si fuera obvio lo que tenía que hacer—. Necesito saber quién está detrás de todo esto, y con un poco de suerte, tal vez incluso podamos usar esa información contra ellos. Pero va a tomar tiempo.

Lo observó en silencio, sus pensamientos un torbellino de dudas y emociones. Sabía que no podía hacer eso sola. A pesar de que ella iba a infiltrarse en el taller y acercarse más a Ansel, el trabajo sucio recaía sobre Jimin, quien siempre tuvo una habilidad única para moverse entre las sombras. Se quedó pensativa, mirando al vacío por un momento. La idea de acercarse a Viper la aterraba, especialmente porque él no era solo un hombre peligroso, sino también un enigma: frío, calculador, y, según lo que todos decían, imparable.

—No sé cómo acercarme a él —murmuró, una sombra de incertidumbre cruzando su rostro—. Viper no es como los demás allí. Es... diferente. Lo he visto con Ansel. Tiene una especie de aura que hace que todos lo respeten. Y además... parece ver a las mujeres como una distracción, no sé si eso va a jugar a mi favor.

Se reclinó ligeramente en la cama con una sonrisa cómplice que ya era familiar para ella. No era un hombre fácil de leer, pero su mirada siempre llevaba consigo una seguridad inquebrantable, algo que Drew a veces deseaba poder alcanzar.

—Usar eso a tu favor es justamente lo que tienes que hacer. Eres mujer, y eso tiene su poder, Dree —respondió con calma, como si fuera lo más obvio del mundo—. La mayoría de los hombres como Viper no pueden resistirse a eso. Si lo que quieres es acercarte a él y sacarle información, no dudes en usarlo. Sé que no es fácil, pero a veces, la venganza requiere sacrificios.

Lo miró con una mezcla de incredulidad y confusión. La idea de usar su feminidad de esa manera la hacía sentirse incómoda, aunque sabía que, en el fondo, era lo que tenía que hacer para conseguir lo que quería. Pero entonces, una inquietud más personal la asaltó, algo que estuvo guardando dentro de sí misma desde hacía tiempo.

—¿No te pondría celoso eso? —preguntó, con un tono inseguro que no podía ocultar.

La miró durante unos segundos, dejando que la pregunta flotara en el aire entre ellos.

—¿Celoso? —repitió, sonriendo de una manera que no parecía tener ningún tipo de malicia—. No, Drew. Si seducir a Viper es lo que te lleva más cerca de lo que queremos... Entonces, no tengo problema con eso. Después de todo, lo que está en juego es mucho más grande que nosotros.

Drew sintió una extraña punzada en su pecho, una mezcla de alivio y algo más... Algo que no podía identificar. La reacción la sorprendió, aunque en el fondo sabía que, para él, todo esto era parte de un juego mucho más grande. Pero había algo más que la inquietaba. La forma en que él hablaba, como si no hubiera ninguna intimidad entre ellos. Como si no fueran más que aliados en esta guerra silenciosa. Y en ese momento, se dio cuenta de lo que siempre sintió, algo que permaneció oculto por tanto tiempo.

Jimin nunca la vio de la forma en que ella lo veía a él. Siempre su atención estuvo más en Zara, con una conexión que Drew sintió, incluso sin quererlo. La tristeza la envolvió un instante, pero rápidamente la apartó. No podía dejar que esas emociones la distrajeran ahora.

—Está bien, lo haré —asintió, su voz más firme, pero con un tono de decepción que ni ella misma pudo ocultar.

El aire en la habitación se sintió denso por un momento, lleno de la tensión de lo que vendría. Drew respiró hondo, preparándose para lo que se avecinaba. Sabía que, de alguna manera, todo lo que hizo hasta ese momento la llevó a este punto, a este inevitable enfrentamiento. Y no habría vuelta atrás.

—Entonces, vamos a hacer esto —dijo con una determinación renovada en su voz.

—Vamos a acabar con ellos, Drew —asintió, satisfecho al escucharla—. Por todo lo que hicieron.

Y mientras los dos se sumergían en sus respectivos planes, el destino de todos parecía estar sellado, con cada movimiento más arriesgado y peligroso que el anterior.

Horas después, permanecía en su pequeño apartamento, sentada frente a la pantalla de su computadora mientras la luz de la calle se filtraba a través de las persianas. El ambiente estaba cargado con el zumbido bajo de la ciudad a lo lejos, pero todo eso quedaba silenciado por la tensión que llevaba acumulándose dentro de ella. Las páginas abiertas en su navegador eran un rastro digital de su obsesión: artículos de periódicos sobre el accidente que se llevó la vida de su mejor amiga, Zara Thorne, fotografías antiguas de la escena. Sin embargo, Drew tenía algo claro: tanto Razor como Viper estaban implicados. Ellos sabían más de lo que demostraban, y la verdad estaba enterrada bajo su círculo de carreras ilegales, donde las reglas se escribían con velocidad y adrenalina.

Con cada clic, cada imagen que aparecía en la pantalla, su estómago se revolvía de frustración y dolor. Volver a revivir los días previos al accidente, las conversaciones con su amiga, las advertencias que nunca escuchó, sus llamadas perdidas antes del accidente, era como tirar sal en una herida que nunca sanó. Pero entre todo ese caos emocional, mantenía su mente fría. Sabía que no podía dejarse arrastrar solo por el dolor; necesitaba una estrategia. Venganza. Esa palabra era su mantra. No se trataba solo de devolver el golpe, sino de hacerlo de una forma que doliera tanto como lo que ella perdió.

Algunos contactos del viejo círculo de su amiga seguían en las carreras, otros, sin saberlo, proporcionaron información útil en conversaciones casuales. A través de ellos, rastreó ciertos movimientos de Razor y Viper. Recordaba la primera vez que escuchó sobre Viper, y no por Zara, en esas noches de carreras: el tipo era temido, siempre frío, implacable, un espíritu desafiante y mordaz, y cada uno de esos relatos encajaba perfecto con el tipo de persona que habría causado la muerte de alguien sin pestañear. Sabía que se estaba metiendo en terreno peligroso, pero el dolor de la pérdida la empujaba a seguir adelante. Cada paso, cada detalle de su plan, le recordaba por qué estaba allí. Y mientras sus dedos seguían moviéndose sobre el teclado, buscando respuestas y trazando caminos, su mente visualizaba el día en que su venganza se completaría, el día en que todo ese sufrimiento finalmente tendría un cierre.

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TAYLOR SWIFT - I DID SOMETHING BAD

❝NUNCA CONFÍO EN UN NARCISISTA, PERO ELLOS ME AMAN
ASÍ QUE LOS TOCO COMO SI FUERAN UN VIOLÍN
Y HAGO QUE PAREZCA TAN SENCILLO
PORQUE POR CADA MENTIRA QUE LES DIGO, ELLOS ME DICEN TRES
ASÍ ES COMO FUNCIONA EL MUNDO
AHORA ÉL SOLO PIENSA EN MÍ
PUEDO SENTIR LAS LLAMAS EN MI PIEL
HAY PINTURA ROJA CARMESÍ EN MIS LABIOS
SI UN HOMBRE HABLA MIERDA, ENTONCES NO LE DEBO NADA
NO ME ARREPIENTO NI UN POCO PORQUE SE LO MERECÍA
DICEN QUE HICE ALGO MALO
ENTONCES, ¿POR QUÉ SE SINTIÓ TAN BIEN?❞

ARIANA GRANDE FT THE WEEKND - OFF THE TABLE

❝¿ESTARÁS AHÍ?
¿TODAVÍA PUEDO AMARTE?
TODAVÍA NO ESTOY SANADA NI LISTA
¿DEBERÍA MANTENERME ESTABLE?
SOLO QUIERO SABER
¿EL AMOR QUEDA COMPLETAMENTE FUERA DE LA MESA?
ASÍ QUE, ¿PUEDES ABRAZARME?
SI TE DEJO, ¿PUEDES DEMOSTRARLO?
PORQUE NECESITO QUE ME TRANQUILICES, CARIÑO
TENGO QUE DEJAR DE ENCERRARME EN MI MENTE
TRATO DE SANAR ESTE DOLOR
SOLO QUIERO SABER,
¿PUEDES HACERLO, CARIÑO?
¿PUEDES TOCARME COMO SI LO CREYERAS, CARIÑO?
¿CREES QUE NUNCA ME DEJARÁS, CARIÑO?❞

MERHO - HIDEOUS

❝NO FUE HACE MUCHO
CUANDO TE TENÍA EN MIS MANOS
NO FUE HACE MUCHO
PUDE VER POR TUS OJOS QUE TE IMPORTABA
ASÍ QUE PENSÉ...
¿NO PUEDES MIRARME?
¿SOY TAN HORRIBLE PARA TI?
¿NO PUEDES HABLAR CONMIGO?
¿REALMENTE NO SIGNIFICO NADA
PARA TI?
¿FUE TODO UNA MENTIRA?
ESOS SENTIMIENTOS QUE DIJISTE QUE TENÍAS POR MÍ
¿FUE TODO UNA MENTIRA?
¿O REALMENTE NO TIENES SENTIMIENTOS?
ALÉJATE
OLVÍDALO TODO
ESTÁ BIEN
NO ME ARREPIENTO DE NADA.❞

CHRIS GREY - GEMINI

❝PEQUEÑA MENTIROSA
ME TIENES HUNDIDO
ARDIENDO BAJO LA LLUVIA SIN UNA FORMA DE CUBRIRME
PARECE UNA TENTACIÓN
ES JUSTO LO QUE ANHELO
ESTÁ POR TODO MI CUERPO HASTA QUE MI CONCIENCIA SE DESVANEZCA
ESTOY ATRAPADO EN UN TORNADO
SU AMOR ES LETAL
NO LA ENVÍAN DEL CIELO
TIENE CUERNOS EN SU HALO
DICE QUE ME AMA MIENTRAS
HUNDE EL CUCHILLO
PARECE UN ÁNGEL
CON EL DIABLO EN SU MIRADA
SU AMOR TIENE DOS CARAS
Y LAS ENFRENTO TODAS LAS NOCHES
GÉMINIS
ESTÁ DE PIE, SONRIÉNDOME MIENTRAS CAVA MI TUMBA
SABE QUE NO LO QUERRÍA DE OTRA MANERA
SU AMOR TIENE DOS CARAS Y LAS ENFRENTO TODAS LAS NOCHES
GÉMINIS
HARÍA LO QUE FUESE
LO PERDERÍA TODO POR ELLA
MOVERÍA CIELO, MAR Y TIERRA
SOLO POR ELLA
PECARÍA POR ELLA
VIVIRÍA POR ELLA
NO HAY NADA QUE NO HARÍA
MATARÍA POR ELLA.❞

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❝JENNY ESTÁ EN LA CUADRA, QUE SE JODA LA POLICÍA, NO VA A DESACELERAR.
TOMARÉ MI ÚLTIMO ALIENTO COMO UN ROCKSTAR. SI ELLA VIENE... ME LA FOLLARÉ O MORIRÉ EN EL INTENTO.❞

ADVERTENCIA: Esta historia contiene lenguaje explícito, contenido sexual, violencia física, manipulación emocional, relaciones tóxicas, conductas de riesgo y conflictos emocionales intensos.

LOS PERSONAJES PUEDEN PROVOCAR EMOCIONES INTENSAS

NO BUSCO ROMANTIZAR NI IDEALIZAR ESTE TIPO DE COMPORTAMIENTOS
TODO ESTO ES FICCIÓN

Historia dedicada a LoriB16, gracias por darme la idea del JK guardaespaldas y esta sobre carreras. Espero que disfrutes de la lectura tanto como disfruté de escribirla. Gracias por siempre motivarme tanto con ideas como con tus lindos comentarios, cielo ♡