POV Magnus

– ¡¿Tiene que estar bromeando?! – casi grité cuando estaba sentado en la oficina del director

– No estoy bromeando señor Bane. Va a venir cada sábado por el siguiente mes a detención y va a trabajar como tutor, haciendo lo que ellos le digan. Quizá esto le enseñe algo. Ya se puede retirar–.

Me pare y agarre mis cosas y con ligera dificultad fui hacia la puerta. Cuando estaba afuera mi según llamado "mejor amigo" estaba esperando por mi.

– ¿Cómo te fue? –.

–¿Porqué te importa? – le solté– Tu me abandonaste el salón de teatro. Así que vete a la mierda–.

– Vamos Mags. No queríamos dejarte– comencé a caminar lentamente lejos de el, pero con mi pierna rota y las heridas, era algo difícil.

– No querías pero aun así lo hiciste. Así que hazlo de nuevo y déjame solo! –.

–¡Hey! – el gritó y agarró mi brazo. – No es mi culpa que tu fueras tan torpe como para caerte y romperte la pierna! Así que no es mi culpa–-.

– ¡Púdrete! – Me fui hacia la cafetería donde vi a Tessa y Camille.

– Hey baby, ¿Cómo te fue? – pregunto Camille, mi... ni siquiera se si estamos juntos o no. Quiero decir, solíamos ser una pareja, pero luego ella se acostó con Ralph, el hermano menor de Woolsley, y con Dimitry, un estudiante de intercambio. Así que digamos que no, ella ya no es mi novia.

Nos sentamos en las sillas y Tessa me sonrió. Ella es una de mis mejores amigas, incluso aunque no sea tan extrovertida como yo.

– Nada bien, tengo detención el por todo el mes. Cada sábado. Por horas haciendo dios sabe que. Por favor Tessa ¡mátame ya! –. La mire suplicándole.

– Vivirás Maggie–. Gruñí. Odio que la gente me llame así. – ¿Dijiste sábado?

–Si, la bruja me dijo que viniera a las once–. Dije mientras tomaba de su jugo de naranja.

– ¡Hey! Eso es mío–.

– Te quiero Tess–. Ella me enseñó la lengua. – Cam ¿Dónde están Cate and Woolsey?

– Woolsey esta escondiéndose de ti– dijo calmadamente.

– ¡Tiene muchas razones para eso! – solté enojado – ¡Esos imbéciles me dejaron atrás! Y ahora estoy jodido por culpa de ellos.

– No debieron haber ido en primer lugar–. Dijo Tessa, mirándome con su significativa mirada.

– Tess... se supone que es nuestra ultima broma de último curso. Algo por lo que la gente nos recordará–.

– Si... pero no terminó muy bien para ti ¿o si? Tienes una pierna rota y detención mientras que Ragnor y Woolsey están limpios–. Dijo mientras se acercaba y me susurraba. – Debiste haberle dicho a la Srta. Herondale de ellos–.

– No soy una rata. Ellos son mis amigos. Incluso si me pusieron en esa situación–. La campana sonó y lentamente me levanté con la ayuda de Tessa y Camille. Estábamos apunto de salir cuando escuché una voz burlona que odio profundamente.

– Así que es verdad, nuestro pequeño Magnus es el torpe que se rompió una pierna, mientras destruía el salón de teatro–.

– ¡Jódete Jace! – me volteé para mirar al chico dorado y su pandilla. Todos ellos me miraban con burla. Jace, Sebastian, Jonathan y Jordan. Las chicas era cool. Me agradaban Clary e Isabelle.

– Ya quisieras Bane–.

Todos se movieron excepto por Jace, quien fue detenido por alguien. Mire y vi a un chico de mi edad, cabello negro, gorro negro y pantalones negros. Simple y aburrido. No podía ver su cara pero estaba casi seguro que era el hermano de Jace, Alec. Lo veo luego en clases. Nunca hablamos porque siempre está con los perdedores o nerds como Smeedley, Sheldon... como sea su nombre. Pero a veces me gusta mirarlo. El es uno de los chicos más lindos de la escuela. Tiene los más increíbles y electrizantes ojos que haya visto nunca. Pero siempre los esconde debajo de ese peinado medio emo.

– No te burles de el Jace–. Escuche a Alec susurrarle a Jace y el rubio cruzó sus brazos en su pecho. Jace se veía claramente molesto pero escucho a su hermano. – No está bien–.

– Como sea Alec–.

– Lo digo enserio Jace–. El rubio agito su mano hacia él, pero asintió, y me pasó sin dirigirme una palabra. Solo mirándome.

Alec rodó los ojos y me miro. Pero creo que no estaba esperando que yo lo mirara al mismo tiempo porque cuando nuestras miradas se unieron, le sonreí ligeramente, y tuve la más adorable vista. Alec Lightwood se sonrojó. Después corrió detrás de su hermano, antes de que pudiera siquiera pensar que decirle.

Las clases del viernes casi terminaban. Vi a Alec sentado con una chica rubia. Estaban riendo y escribiendo notas o cartas uno al otro. Adorable, un poco infantil, pero adorable. No podía parar de mirarlo. Algo me estaba atrayendo hacia él, pero lo admito, estaba asustado de hablarle. Quiero decir, el era tan cerrado, nunca hablaba con nadie fuera de su grupo.

– Señor Bane, ¿Cuál es la respuesta? – Salí de mis pensamientos y miré al profesor que estaba mirándome enojado. Todos me estaban mirando, algunos intentando contener la risa. Intente concentrarme en la fórmula del pizarrón, pero no podía entender nada. Mierda. El profesor Starkweather estaba mirándome aun más molesto. Trague duro y trate de hacerlo lo mejor que pude, improvisando.

– La respuesta es...eh...– De repente Catarina me paso un papelito y volví a hablar. – x es igual a 5.6 –.

– Bien– Respire aliviado y volteé hacia Cate.

– Gracias Catie– Susurré.

– De nada. ¿Porqué estas viendo a Alec?

– Por nada– dije mientras la campana sonaba. Quería decirle gracias a Alec por lo de su hermano, pero cuando ya había agarrado todos mis libros, él ya no estaba ahí. – Maldición–.

– ¿Qué te pasó? ¿Es tu pierna? – me pregunto Catarina preocupada.

– No, es que ya no está aquí–.

– ¿Quién? – la mire significativamente. – ¿Te refieres a Alec? ¿Qué quieres de el? Si solo quieres pasar el rato mejor no. Jace patearía tu trasero, como lo hizo con Ragnor el mes pasado–.

– No. No quiero pasar el rato con el. ¿Y Ragnor? ¿Cuándo fue eso?.

– No estuviste en la escuela por dos días, así que ellos se la agarraron contra Alec y Simon otra vez–. Bien. Porque cuando estoy en la escuela, siempre les digo que dejen a los chicos en paz.

– ¿Quién es Simon? –.

– El amigo de Alec. El nerd con lentes. Tessa está en su clase– Oh, ya se quien – Así que ¿Qué quieres de Alec? –.

– Agradecerle – me miro interrogante – Le dijo a Jace que no se burlara de mi por mis heridas y le hizo caso–.

– Jace se preocupa mucho por su hermano. Siempre hace lo que Alec quiera. Igual que Isabelle, Simon y Clary. No se de que van, pero son muy serios acerca de el y siempre hacen lo que él quiere. – Explicó mientras salían del escuela. Hoy tenían que hacer un proyecto de historia en su casa. Lo que encontraba muy bueno, ya que Cate estaba en buenos términos con Clary no eran las mejores amigas, pero tomaban juntas clase de artes, por lo que a veces platicaban. Eso le ayudaría averiguar más sobre Alec.

– Así que, ¿qué mas sabes sobre Alec? – le pregunté mientras llegábamos a mi casa y subíamos a mi habitación, saludando a mamá en el camino.

– Alec es muy buena persona, lindo. No te metas con el–.

– Se que es bueno, dime algo que no sepa –. Me senté en mi cama mientras ella hacia lo mismo.

– Alec es muy inteligente y le gusta ayudar. He escuchado que es el líder del grupo de tutorías de nuestra escuela–.

– ¿Del que?

– Grupo de tutorías. Ya sabes, los que se juntan los sábados y enseñan a los chicos–. Sacudí la cabeza. De repente ella tenia una sonrisa en los labios. – ¿Dijiste que tu detención era los sábados? – Asentí – Oh, cariño, prepárate, estudia esta noche. Porque tengo el presentimiento de que vas a ser el próximo tutor de nuestra escuela–.

– ¡¿Qué?! no puedo, no pertenezco ahí. No soy tan inteligente. –

– Magnus...– ella levanto la ceja – A quien quieres engañar, se que eres inteligente. Quizá no un estudiante de A- como Alec, pero si tienes buenas notas y eres inteligente–.

– Cate...–

– Deja de quejarte, puede que este equivocada. Vamos a hacer el trabajo, si? –.

Pues resulto que Catarina no estaba equivocada. Al minuto que entre al escuela el sábado en la mañana, cuando normalmente hubiera estado dormido, fui literalmente jalado por la profesora Branwell y forzado a it al salón 209, donde nunca había estado antes

No había gente conocida ahí. Vi alrededor pero no veía ningún familiar cabello negro. Maldecí internamente y seguí a la Srta. Branwell.

– Así que Magnus, este es el cuarto de tutorías–.

– Es grande, hay tanta gente – simplemente dije.

– Si. muchos niños en la escuela necesitan ayuda para aprender. Y estamos aquí para enseñarles lo que necesiten. Así que, ¿cuáles son tus materias fuertes? –.

– Am...– la mire – la verdad no se, o es como si yo quisiera estar aquí Srta. Branwell. Fui forzado–.

– Hiciste algo malo, y fuiste castigado por ello – Gire los ojos y algo negro captó mi atención. Miré sobre Charlotte y vi a Alec hablando con Aline y otra chica. – Se que no quieres estar aquí, pero puede que aquí seas de ayuda para otras personas. Muchos aquí, los tutores, vinieron justo como tu, por problemas, y se quedaron aun después del castigo. Como Alec. El ha estado aquí ya por dos años. Cada sábado viene por su propia voluntad. Y antes de que preguntes, no, no tiene calificaciones especiales por esto. Lo hace porque quiere, por bondad de su corazón. Quizá tu seas como él–. Simplemente asentí, mirando hacia Alec. – Bueno, ve con él. Te dirá con que chicos estarás trabajando. El es el líder del grupo –.

Asentí y fui hacia Alec. Entre más me acercaba más podía ver. Tiene un gran cuerpo, no muy flaco, pero tampoco muy trabajado, pero con algunos músculos. Hoy traía una chamarra negra y unos pantalones azules. Al menos no iba tan lamentable como otros días. Cuando llegue a el, escuche una pequeña platica con las chicas. Cruce mi mirada con Aline.

– ¿Él? ¿Quién es ...? – Alec volteo y me vio en shock. Apuesto a que no esperaba verme ahí. Le sonreí, causando un pequeño pero adorable sonrojo en sus mejillas.

–Me dijeron que me presentara contigo–.