Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

| 16

-¡FLUG!

Y de golpe se levantó, con la respiración pesada y agitado, mirando a todos lados.

¿dónde estaba?

¿murió?

¿el cielo era aquello?

Entoces...

¿por qué se veía como su habitación?

¿y por qué Demencia estaba allí? Juraba que la chica caería al infierno y...

Esperen.

Los recuerdos lo asotaron de golpe y abrió sus orbes como platos redondos.

-¡Black Hat! -gritó desesperado, mirando a todos lados, buscando indicio de él.

Y estaba por levantarse, pero la chica le detuvo antes de que se levantara de su cama.

-¡alto allí, nerd! -dijo con el ceño fruncido.- pareciera que olvidarás tu estado.

-¡pero-! ¡Black Hat-!

-llamó hace un rato, dijo que ya esta-

-¿¡QUÉ!?

¿¡ES EN SERIO!?

-¿¡sigue vivo!? -preguntó desesperado, tomandola de la camisa y atrayendola a sí.- ¿¡no ha muerto!?

-¿de qué hablas? Maldición, Flug, te dije que comieras y descansaras, ese golpe fue demasiado fuerte. Ya estás delirando.

-¿go-olpe? -preguntó confundido.

-oh vaya que te dejó mal. -murmuró con el ceño fruncido.- al desmayarte, te diste un golpe muy fuerte en la cabeza.

-¿me desmayé?

-¿y qué esperabas, nerd? No has dormido en dos noches, no has comido como se debe y te estabas matando limpiando la oficina... ¿lo has olvidado?

No lo olvidó.

Lo soñó.

Esa era la única explicación lógica que le encontraba a todo. Claro, aquel mareo, el fuerte dolor en su cabeza y el repentino alivio... era algo tan extraño y aterrador. Tan confuso... ahora le dolía la cabeza.

Y la chica lo notó.

Y le pasó una pastilla.

-estabas gritando cuando te desperté. -comentó Demencia.- gritabas cosas como "¡él sigue vivo!", "¡él volverá!" y mamadas así. -dijo con cierto tono irritante.- pero... ¿quieres hablar de eso?

-no-o... -respondió con cierto temor. - so-olo fue un ma-al sueño...

Fue una total pesadilla

-pero ya pasó... -agregó Flug con poca tranquilidad.

Y ya ha despertado.

Y la chica le miró extrañada por un momento, pero decidió no preguntar más. No se encontraba bien.

-muy bien, doctor. -tomó la palabra Demencia.- ahora con el oso seremos tus doctores y nos tendrás que obedercernos. -apuntó con un dedo.- y a cualquier negación, traeremos la jeringa. -amenazó.

Y eso hizo reír a Flug muy levemente.

-Demencia... ¿llamó el jefe?

-ah sí, justo cuando te desmayaste.

Ese fue el sonar del teléfono que escuchó.

-mientras hablaba con Blacky, 5.0.5. te trajo a tu cuarto. Y el jefe me dijo que ya había pateado sus asquerosos traseros y que volvería esta noche.

-¿qué hora es?

-diez de la mañana ¿por?

-necesito ordenar el despacho-

-¡ah no! ¡sigues debil!

-¡pero-!

-¡5.0.5.! ¡trae la maldita jeringa!

Obviamente que no pullaron a Flug, pero sí lo hicieron reír. Sin muchos ánimos, pero lo hizo.

~●~

-¡aquí viene el aviooon! ¡chu chu!

-¡eso es un tren!

Flug ya había descansado tres horas antes de que Demencia y 5.0.5. aparecieran.

Era ya la hora del almuerzo: recalentado de macarrones que sobraron del otro dia. Los tres habitantes se encontraban en la habitación del mayor, dándole de comer al mismo, a insistencia de la chica.

Ahora Flug tenía la bolsa un poco levantada, dejan ver solo su boca. Él recibía sin objeción la comida y riendo muy levemente por los comentarios de Demencia.

Pero algo lo inquietaba y eso lo notaron sus creaciones.

-¿sucede algo, Flug? -preguntó Demencia.

-no... -respondió a secas.

Y la chica suspira.

-relájate. Todo estará bien. -sonrió Demencia.

-eso espero...

Estaba perturbado.

Ese sueño había sido demasiado real que... dudaba de qué era producto de su imaginación más su sueño.
Fue algo del destino, o su subconciente o... no lo sabía de quien era esa señal, epifanía... pero la agradecía, ahora estaba más seguro de nunca de hablar, de abrise de:

-lamento los problemas. -habló Flug.

Ambos menores se giraron a verle un poco confundidos.

-lo hubieras evitado si me hubieras hecho caso y hubieras descansado como se debe. ¡Otra razón para dejarme a cargo!

Y volvió a soltar una leve risa.

-no me refiero precisamente a eso... pero también lamento eso. Yo... -tomó aire.- Black Hat... todo eso... la-lamento todo lo sucedido... el descuidarlo-os y-y-

-ya ya ya, callate la boca. -le interrumpió Demencia, colocándole una cucharada de macarrones en su boca, impidendole hablar pero obligandolo a masticar.- no tienes porqué disculparte, nerd, el amor nos pone estúpidos. Te consta por cada pendejada que hice por el jefe... y no me hizo caso. -dijo con cierta tristeza pero una sonrisa.

-De-emen- -no finalizó de hablar bien, pues aun tenía comida y Demencia le volvió a interrumpir.

-no no, no es para tanto, nerd. Al final, tampoco me esperaba mucho, es decir, somos muy diferentes.

-nosotros también. -dijo Flug al tragar su comida.

-sí pero... son diferentes complementarios. Por ponerlo en términos sencillos, Black Hat y yo somos como... ¡pizza y calamar!

-¿calamar? -murmuró con asco el científico.

-¡exactamente! ¡tú mismo lo expresaste con asco al imaginarte la pizza tan rico con ese asqueroso calamar! ¡no combinan! En cambio, ustedes son... ¡pizza y piña!

-¿así que Black Hat es la pizza?

-¡me interrumpes una vez más y no sigo! ¡aprovechame cuando soy seria!

-aja, prosigue. ¿por qué pizza y piña? -preguntó curioso.

-por eso mismo. Tú tono no fue de asco. Tú... sabes que la pizza y la piña pueden unirse, a pesar de que hay quienes no les guste esa unión, se complementan en ese sentido y llega a ser maravilloso.

Y la chica vio la sonrisa del doctor.

Esa tan rara comparación en verdad tenía sentido, en verdad le daba lógica al científico y su mente dejó la idea perturbadora que le dejó el sueño.

-gracias, Demencia.

-ya sabes, nerd. -sonrió y alzó la cuchara con macarrones.- ¡y aquí viene el tren volador! ¡wuuu!

Y Flug ríe.

Y 5.0.5. deseó poder decir algo, poder ayudar.

~●~

-¿seguro?

-sí.

-¿segurisimo?

-sí.

-¿seguro segurisimo de seguridad?

-¡Demencia, sí! -exclamó desesperado.

Y es que Flug había insistido la última media hora para ir a limpiar el despacho del jefe. Y Demencia y 5.0.5. se estaban oponiendo. Argumentaban que las seis horas que durmió no eran suficientes para haber recuperado sus energías.

Pero el doctor les decía que estaba bien, y que al menor mareo, se recostaría. Y sus creaciones sedieron y dejaron que se retirara al despacho para limpiarlo antes de la llegada de su jefe. Que por cierto, llegaría hasta tarde.

Flug miró el despacho, aun con necesidad de limpiar, de reparar muebles y vidrios.

Tomó aire y valor y pensamientos para analizar mientras ejercía su labor.

~●~

Sus pesados pasos se escuchaban en el silencio de la fría y oscura noche. Ya era demasiado tarde, ya todos estaban en sus respectivas camas, con sus sueños por la nubes con aquellas ovejas balando.

Y él, por fin iba a poder dormir.

Pasó por aquel jardín que no había visto desde el día anterior. Y ahora veía ese jardín, ese camino, esa mansión. Su mansión.

Estaba en casa.

Estaba cansado, no había parado de dar trabajar por aquellos asquerosos héroes que se atrevieron a meterse con él.

Y fue un error para ellos.

Black Hat no les ruvo compasión y de cada uno se deshizo, recuperando así su infraestructura. Dañada, pero la recupero.
Y por ello, se quedó más tiempo a supervisar la reconstrucción de la estructura. Tomó diez largas horas, pero quedó intacta.

Ahora estaba feliz de finalmente volver a su casa y descansar.

Abrió la puerta de su mansión y entró a la silenciosa mansión. Ya todos debían estar dormidos.
Dejó su chaqueta en el perchero de la entrada y camino lentamente por el pasillo, con la maleta en mano. Planeaba irse directo a su habitación y dormir como nunca lo había hecho.

Pero un gruñido lo detuvo.

Se giró y se encontró con un adormilado oso parado a un metro de él.

-hey. -saludó Black Hat, acercándose a él y acariciando su cabeza.- es tarde, ve a dormir. -sugirió.

Pero 5.0.5. se negó y lo tomó de la mano con ambas patas. Antes de que el jefe preguntara, el oso comenzó a arrastrarlo a por el pasillo, en dirección opuesta a la habitación del jefe. Este mismo no dijo nada, solo se dejó guiar a ese sitio donde le llevaba el animal.

Su despacho.

Miró confundido la puerta cerrada frente a él, pues de bajo de esta se podía apreciar la luz que emitía de su interior. Se giró a ver a 5.0.5. y este apuntó con su cabeza.

Solo entra.

Era una forma de interpretarlo.

Y Black Hat lo entendió y decidió obedecerle y abrió la puerta, dejando ver su perfecta oficina.

¿perfecta?

Y lo vio. En el centro del despacho, con la escoba. Estaba en las últimas de limpiar y de sus energías.

Y se escuchó un golpe en seco. Y el de bolsa se giró, y vio a su jefe, con ek maletin tirado en el suelo y el jefe con una sonrisa.

-volví, doctor.

Pero esa sonrisa desapareció al no tener respuesta ni reacción. Y su expresión se volvió de preocupación al ver como la bolsa se humedecía

Finalizará

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro